Esto también es –o no- un fakenew: la declaración del ACNUR sobre Venezuela
- Opinión
Habría que ser exageradamente ingenuos para no darnos cuenta que estamos ante una escalada de la presión internacional contra Venezuela. Actores que se habían mantenido al margen, que habían sido llamados por la oposición pero que habían evitado dar alguna respuesta, ahora aparecen activos, entre ellos, principalmente las agencias de las Naciones Unidas.
La Organización de las Naciones Unidas que es ese poder, esa estructura, universalmente constituida actúa a través de distintos personajes entre ellos sus Comisionados y sus agencias especializadas. Justo venimos de terminar una semana en la que uno de los temas fueron las declaraciones del Alto Comisionado para los Derechos Humanos y ahora abrimos otra con una declaración un tanto ambigua del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) referida a los venezolanos en condición de migrantes.
Nosotros con esto estamos viendo, por un lado al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos referirse a la situación de los venezolanos en el territorio nacional y ahora estamos viendo una declaración sobre el estado de nuestros connacionales en el extranjero.
Una vez que esto ocurrió rápidamente se divulgó una matriz de opinión según la cual se había dado un pronunciamiento del ACNUR pidiéndole a los demás países darle un tratamiento de refugio o asilo a los venezolanos.
Sabemos que los refugiados son unos migrantes particulares porque son migrantes por necesidad. Esa necesidad que tienen los migrantes genera la obligación, establecida en el Derecho Internacional y en muchas leyes nacionales, de darles una protección adicional a la que se les da a los migrantes voluntarios a los cuales se les aplican los regímenes administrativos nacionales.
Nosotros tenemos que el ACNUR publicó un documento de tres folios que rápidamente fue divulgado por el Diputado a la Asamblea Nacional por Primero Justicia, Miguel Pizarro, acompañado del siguiente comentario “por primera vez en nuestra historia migrantes venezolanos son oficialmente reconocidos por el ACNUR como refugiados. Este régimen se ha encargado de acabar con los sueños y oportunidades de miles de personas.”
Comentario que por cierto irá a sumarse a la insostenible declaración que desde el Partido Popular español hiciera Fabio Valentini según el cual “más de 4.000 millones de personas han huido ya de Venezuela. En 2018 se estima que salga el 13% de la población restante”. Lo cual aun asumiendo que eso de “4.000 millones” no sea más que un groso error de transcripción parece desprovisto de cualquier base aun si quiso decir que cuatro millones de venezolanos –que sería más del 10% de toda la población nacional según los últimos censos- es la cantidad de personas que han emigrado de Venezuela.
Volviendo a nuestro asunto pocos minutos después la periodista de la multiestatal Telesur Madelein García recogía una aclaratoria hecha por Roberto Meier en su condición de vocero oficial del ACNUR donde señalaba que nunca se había planteado que se reconociera a los venezolanos la condición de refugiados, como lo afirmó Navarro, sino que se le exigía a los demás países –y no al Estado venezolano- que respetaran los términos de los acuerdos internacionales y se abstuviesen de actos de discriminación y políticas de deportación masiva de venezolanos. Política que algunos Estados, entre ellos Panamá, han venido aplicando.
Ahora bien, haciendo un análisis de lo que ocurrió podemos ver que el ACNUR está reconociendo la existencia de un flujo de migrantes que salen desde Venezuela, así como la existencia de políticas no amigables hacia los venezolanos en el extranjero. Las cuales son afirmaciones debatidas en Venezuela por ambos sectores políticos puesto que, mientras uno niega la existencia de la emigración otro niega la existencia de la discriminación en el extranjero. Esto sería un balance a priori, intentando ser objetivos al respecto.
Sin embargo, pese a cualquier aclaratoria se observa la entrada del “tema Venezuela” formalmente a la ONU en materia migratoria. Los temas migratorios en la actualidad son considerados como parte de los puntos fundamentales de lo que es la crisis humanitaria pero no la venezolana sino la crisis humanitaria mundial puesto que en el presente tenemos más movimiento de poblaciones que los que se generaron durante y después de la Segunda Guerra Mundial.
Son estos los elementos mínimos que consideramos la clave para leer la declaración que hoy, 12 de marzo de 2018 realizó el ACNUR, por lo cual concluimos alertando la subida del tono de las agencias de la ONU sobre Venezuela y la necesidad de una respuesta coherente donde se valoren las acciones posibles para superar los elementos fácticos que se están viviendo y para denunciar las causas, puesto que no podemos contentarnos a señalar el carácter de organismos imperiales que tienen estas agencias sino que debe valorarse qué significa formar parte de la Agenda ONU y lo débil que ha sido la denuncia de la ignominiosa política de asfixia que contra Caracas se perfila, día a día, contra Caracas.
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