El gobierno de Guatemala recibió un préstamo de $22 millones de dólares (170 millones de quetzales) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para hacer un registro físico catastral en diferentes áreas protegidas alrededor del país.  La Biosfera Ixil de Visis Cabá en el municipio Ixil de Chajul, Quiché está incluido en esto programa.

 

El gobierno de Guatemala publicó una licitación internacional para este proyecto en la revista “Development Business” (en inglés) en mayo de 2012. El 7 de agosto de 2013 fue publicado en Prensa Libre un anuncio gubernamental de la licitación explicando que había 8 áreas protegidas alrededor del país que estarán incluidos en el programa. El 23 de septiembre el gobierno hará un acto público para abrir las ofertas recibidas de la licitación de las diferentes empresas nacionales e internacionales que presentaron una oferta. 

 

Nos parece interesante que entre las áreas protegidas incluidas en el programa se encuentra “La Laguna del Tigre” en el Petén donde existe un fuerte conflicto sobre la explotación del petróleo. Nos preguntamos: ¿Por qué el gobierno de Guatemala tiene interés en hacer un registro físico catastral de las áreas protegidas? 

 

Según fuentes oficiales, este programa ofrecerá al gobierno la capacidad de “proveer seguridad legal y geográfica a áreas bajo administración nacional que forman parte del Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas (SIGAP), creando un catastro físico de última generación.”

 

Como nunca existe una clara consulta con las comunidades afectadas por estos programas gubernamentales, nos surgen las siguientes inquietudes:

 

El proyecto del Biosfera Ixil de Visis Cabá nunca fue consultado con el pueblo Ixil de Chajul y nunca llegaron a un consenso adecuado sobre su implementación. Más bien, fue un proyecto que el gobierno abandonó. Como entonces puede el gobierno afirmar que el bosque comunal de Visis Cabá es un área “bajo administración nacional” dentro del SIGAP?

 

¿Será que este proyecto no es más que otro intento del gobierno para ganar el control territorial sobre lugares con una gran riqueza de recursos naturales a través de imponer un sistema catastral organizado desde afuera de las comunidades locales y que se adapta más al sistema de propiedad privada y no de la tierra comunitaria de los pueblos indígenas? 

 

En el caso de La Laguna del Tigre en el Petén, ¿será que el intento de hacer un registro catastral del área protegida no es más que una excusa para crear la certeza jurídica para las empresas que están sacando el petróleo de esta zona? ¿Qué otros recursos naturales ha descubierto el gobierno en las otras áreas protegidas incluidas en el programa? 

 

Fuentes oficiales explican que “la falta de un catastro y seguridad legal vinculados a la propiedad ha desembocado en disputas por el uso de tierras y una degradación ambiental en varias áreas protegidas…El préstamo le permitirá a Guatemala proveer una valoración territorial, así como una valoración en el registro de propiedad privada en áreas protegidas.”  

 

Nos parece que esta es una clara evidencia que el gobierno de Guatemala no valora ni reconoce los sistemas de propiedad comunal de los pueblos indígenas y que están tomando pasos para implantar la privatización de las áreas protegidas del país, muchas de las cuales (como es el caso de Visis Cabá), están manejadas como tierra comunal de los pueblos indígenas. 

 

En el caso de Visis Cabá, ¿por qué se necesita una “seguridad legal vinculada a la propiedad” cuando el bosque se encuentra dentro del ejido municipal de Chajul y está manejado comunalmente por varias aldeas ixiles alrededor del bosque?

 

Durante las últimas semanas, varias personas de la aldea de Juil han manifestado que han visto muchos carros polarizados circulando por su comunidad (que está pegado a la Biosfera Ixil). Temen que son empresarios que han presentado ofertas a la licitación internacional sobre el Programa de Registro Catastral. 

 

La acusación del gobierno de la “degradación ambiental en varias áreas protegidas” nos parece una recriminación sin fundamentos a los pueblos indígenas y campesinos que viven adentro o cerca de las áreas protegidas. Sabemos muy bien que los que más degradan el medio ambiente son las grandes empresas nacionales y transnacionales que explotan los recursos naturales del país. 

 

Las autoridades ancestrales maya-ixiles de las comunidades del municipio de Chajul están preocupadas por este nuevo intento del gobierno para ganar el control territorial sobre el bosque comunal que ha sido de milenaria importancia para los pueblos que viven alrededor del bosque.

 

 Repiten la misma declaración que hicieron hace más que 10 años cuando comenzó el intento de imponer la Reserva de la Biosfera Ixil Visis Cabá: El bosque de Visis Cabá lo cuidaremos nosotros según nuestros métodos ancestrales y sin la injerencia del gobierno o cualquier otro que viene de afuera. Hace 2,000 años que hemos vivido aquí y el hecho de que el bosque todavía está aquí, demuestra que sabemos cómo cuidarlo.