La levedad del opinólogo, o el flotar en el efluente
- Opinión
En el marco de la crisis sin retorno desatada adrede por el macrismo y su comparsa empresarial-mafiosa-cipaya no podían faltar los opinólogos de distinto pelaje. En los canales televisivos a los que el hombre medio accede, con o sin ansias de saber qué pasa, sobre todo a la noche, los conductores periodísticos no solo opinan- tanto oficialistas como opositores- sino que traen a opinólogos de fuste para enderezar el carro de la vergüenza por el camino ‘institucional’.
Economistas, actores, encuestadores, concejales, diputados, dirigentes de credos varios, funcionarios, abogados, ‘especialistas’, etc., etc., todos formando parte del mundo de los que flotan sobre efluentes en cualquier época, muestran con números, estadísticas, ditirambos económico-financieros, piedades varias, trapitos al sol, que incluyen el famoso riesgo país y el aumento de la divisa verde- esa que en el mundo real no tiene valor alguno pero si en el mundo virtual de los fetiches- que la crisis tiene salida ‘institucional’, o sea que los de siempre pueden jugar y/ o pelearse, pero siempre en el ring o la cancha del capital imperialista y sus sucursales de aldea.
Los laburantes clasistas, los dirigentes combativos que la tienen clara, los obreros que llevan a cabo bajo su control alguna de las más de 600 empresas recuperadas de las manos de sus patrones, los trabajadores del campo que toman tierras y las defienden a toda costa, los originarios que se niegan a cederles la historia a pajarracos montados sobre el caballo del comisario macrista, los que se asientan aún con muertos y todo en las tierras donde puedan quinchar un ranchito siquiera y otros exponentes del mundo clandestino subtelevisivo, subinformado, brillan por su ausencia en canales y medios periodísticos pro y contra.
Como se ve, la función de ‘enfriar’ la cosa, llevarla por los carriles aconsejados por entes locales, internacionales y potencias - diálogos, democracia burguesa, respeto a la ‘ley’ y las ‘instituciones’, ‘gobernabilidad’, cumplimiento de deudas, etc. – y cumplida al pie de la letra por los vendedores de denuncias, cifras, exposiciones sesudas o no, pero nada que se asemeje al tema del Poder Popular ( con su fiesta de tomas de calles, empresas, edificios públicos, campos, etc.) , está en todos los que quieren seguir como perros con otro collar o con el mismo.
Un opinólogo antimacrista llegó a decir con un pragmatismo que unifica a todos los tartufos que había que resolver el tema del hambre popular ‘antes que estallara’ la bronca. Claro, calmar a las fieras es la consigna de esos flotadores históricos de efluentes varios, sean oficialistas u opositores.
Pero no. NO y NO.
Que de una vez por todas los fabuleros que se muerden la cola una y otra vez sepan algo: Los laburantes de la ciudad y el campo, los pobres de vidas e influencias, los que con su laburo o desde la desocupación no solo crean las riquezas de las que se apropian los capitalistas y el Estado burgués, sino que las engordan, no son ni deben ser los convidados de piedras de las trapisondas de políticos, economistas, empresarios, milicos de toda clase, periodistas a la que te criaste y toda otra gente de bien, incluídos los opinólogos.
Los laburantes somos y seremos los que debemos asumir el Poder, terminar con la farsa de capitalismos buenos o malos, del ‘consumo’ como único objetivo vivencial, de las aspiraciones individuales que se llevan a cabo a costa de otros, de yo me salvo por ahora y que se arreglen. Los laburantes somos y seremos los dueños del país, simplemente porque como ahora, cuando lo hunden los basuras, no tenemos de dónde agarrarnos, no nos rajamos ni podemos hacerlo, no podemos esquivar el bulto.
Y el Poder, nuestro Poder, en transición al socialismo, es nuestra única salida.
En eso estamos y debemos construir nuestra herramienta única, organizada y blindada, que nos conduzca a la victoria de una vez por todas.
En eso estamos…
Ah…y no somos utópicos, somos realistas…intuimos o sabemos, según la concavidad de la intuición o la convexidad de nuestra conciencia, que la UNICA salida para nosotros y los demás integrantes de la nación es que tomemos el timón del barco, echemos por la borda a las ratas y chupópteros de la sangre popular y naveguemos hacia la Liberación, nuestra Liberación y la de todos los que nos siguen y seguirán.
Opinólogos y charlatanes abstenerse o venirse sin vueltas para este lado de la famosa ‘grieta’ , que no es ni más ni menos que la lucha de clases.
O los ricos y sus payasos de todo tipo, o nosotros. Esa es la cosa, ahí está la papa, esa es la única verdad.
Piénsenlo. Ya no quedarán efluentes en los cuales flotar.
Porque hasta la mierda se irá a la mierda.
1/9/2019
Del mismo autor
- La (des) confianza mata al hombre 20/08/2020
- El mundo que vivimos o el gatopardismo que viene por sus fueros 25/03/2020
- Pestilencias 11/02/2020
- ¿Hasta cuándo…o ahora es cuando? 08/11/2019
- La levedad del opinólogo, o el flotar en el efluente 02/09/2019
- Después del día 13/08/2019
- Macrismo crudo: Presos políticos 09/04/2019
- US psicopatics 01/03/2019
- El fascismo… ¿qué viene? 06/11/2018
- El uno y el otro: como dos gotas de agua…servida 18/10/2018