El gobierno de los Estados Unidos, a través de su Vicepresidente Mike Pence, ha anunciado oficialmente su propósito de crear una Fuerza Espacial como sexta rama de las Fuerzas Armadas de este país.

En un discurso en el Pentágono, Pence señaló:"Ha llegado el momento de escribir el próximo gran capítulo de la historia de nuestras Fuerzas Armadas, de prepararse para el próximo campo de batalla adonde se convocará a los mejores y más valientes estadounidenses para disuadir y vencer una nueva generación de amenazas a nuestra gente, a nuestra nación”

Para no dejar ninguna duda sobre el fundamento de esta nueva política implementada por la administración Trump, el señor Pence aclaró: "Para defender a Estados Unidos, una simple presencia en el espacio no es suficiente, debemos dominar el espacio". Resulta evidente que el gobierno de Donald Trump quiere expandir el escenario de una eventual confrontación con China o Rusia. Esta nueva rama de las Fuerzas Armadas debiera estar ya operativa hacia el año 2020 con un presupuesto considerable.

La creación de esta “Space Force” se inscribe por derecho propio en la llamada “carrera armamentista” en que se encuentran enfrascadas las principales potencias de nuestro mundo. En este sentido, no es una noticia que debiera enorgullecer a nadie, se trata más bien de un acontecimiento muy inquietante y triste.

La pretensión humana de “dominar el espacio” con propósitos bélicos debe consternar a otros seres del cosmos que miran con estupor cómo en este pequeño planeta azul, en un rincón de esta galaxia, una especie se hunde en la violencia, olvidando aquel mandato universal: “No matarás”

Concebir el espacio sideral como el “próximo campo de batalla” solo delata nuestra condición de seres tan primitivos como agresivos que apenas comenzamos a rasguñar y comprender los misterios del cosmos. Todavía no somos capaces de advertir la tremenda precariedad de nuestra existencia en este universo. Al igual que niños malcriados seguimos intentando encender una fogata en la sala…

- Álvaro Cuadra es Doctor de la Sorbonne. Paris-France