El G20 versus la Cumbre de los Pueblos de Ayotzinapa

14/11/2014
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El 26 y 27 de septiembre en la ciudad de Iguala; estado de Guerrero, fueron atacados estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa. El saldo: seis jóvenes asesinados, 25 heridos y 43 secuestrados. Se trata de un crimen de lesa humanidad, un crimen de Estado. La causa de fondo: oponerse a la mercantilización de la educación y a la privatización de la misma contemplada en la contra-reforma educativa.
 
Este sábado 15 de noviembre inicia una cumbre más del G20 en Australia, los “partes de guerra” estarán en primer orden, incluyendo la guerra económica emprendida con ferocidad desde 2007-2008.
 
A través de “salvatajes” financieros orquestadas desde los foros formales e informales de la elite económica y su “clase política”, como el G20, imponen policial, autoritaria y criminalmente severos programas de ajuste y contra-reformas estructurales.
 
La cumbre del G20 en Los Cabos, Baja California Sur, México, inauguró los “partes de guerra” internos: Felipe Calderón, presidente espurio (2006-2012), reportó: más de 136 mil muertes en su “guerra contra el narcotráfico”.
 
También en esa cumbre de Los Cabos (18-19 de junio de 2012) el G20, hizo notoria su voluntad de conformarse como el “Gran Elector” para la gobernabilidad global. Adelantar su séptima cumbre a escasos once días de las elecciones presidenciales en México no fue un acontecimiento casual. La presidencia pro tempore de Felipe Calderón, hizo un burdo manejo electoral de dicho evento. No precisamente a favor de su partido (Acción Nacional en franco declive) sino para confirmar el carácter neoliberal de la agenda de Enrique Peña Nieto y el respaldo del G20 al candidato de la clase dominante-dominada mexicana. Peña Nieto había ya ratificado que su prioridad era integrar un paquete de reformas estructurales, como lo había dictaminado el Gran Elector G20, en materia fiscal-hacendaria, energía, laboral, telecomunicaciones, educativa, entre otras.
 
Se trataba de asegurar una alternancia conservadora en México, con la cobertura del G20 y otras instancias internacionales (FMI, BM, OCDE, Foro Davos, etc.), siguiendo el libreto de la ocupación militar en Libia y la intervención abierta y soterrada para marchitar la primavera árabe y encauzarla por la senda de la transición dócil y gatopardista.
 
Ahora, en 2014, Enrique Peña Nieto, cabeza de un régimen victimario, y vendido por el poder mediático como el “Estadista del año” (premio otorgado por la Appeal of Conscience Foundation) o como el “Salvando México” (revista Times), es acogido en Brisbane, Australia, sede del encuentro de “lideres” del G20, con cinismo y complicidad.
 
Mientras en Brisbane, Australia, los “líderes” del G20 se reúnen (junto, pero no revueltos, con sus dóciles adláteres representados por los “líderes” empresariales, sindicales, jóvenes, intelectuales y empleados civiles (confinados en grupos –Business 20, Labor 20, Think 20, Youth 20 y Civil Society 20) se realiza una suerte de Cumbre de los Pueblos “Ayotzinapa, somos tod@s” en prácticamente todas las latitudes del orbe, dejando claro que la resistencia y solidaridad de los pueblos frente al salvajismo del capital no acepta confinamientos ni mucho menos sometimientos indignos.
México, Distrito Federal, a 14 de noviembre de 2014
 
- Mtro. Andrés Peñaloza, Bia´lii, Asesoría e Investigación, A.C.
 
 
https://www.alainet.org/pt/node/165505
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