Conflicto fronterizo por el glifosato

Ecuador no quiere más abusos de Colombia

10/04/2007
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Para Ecuador las instancias bilaterales para resolver las diferencias en torno a incidentes fronterizos se agotaron. El presidente Rafael Correa afirmó que se terminó el tiempo de las cartas de protesta.

Los roces entre Ecuador y Colombia por las fumigaciones con glifosato, llegaron a tal punto que para Rafael Correa consideró que ya se han agotado los mecanismos para evitar roces diplomáticos con el país vecino, como el originado en marzo por una supuesta incursión militar de Colombia que dejó un saldo de dos muertos.

En medios ecuatorianos, el mandatario expresó que no estaba dispuesto a aceptar ningún otro abuso del gobierno de Álvaro Uribe, y que por ese motivo las instancias bilaterales estaban extinguidas. “Que se siga mandando cartas de protesta a Colombia no sirve para nada”, sostuvo.

El último incidente entre las naciones se produjo el 22 de marzo pasado, cuando dos personas murieron durante una presunta incursión de militares colombianos en territorio ecuatoriano. Ecuador elevó una nota de enérgica protesta al gobierno de Colombia, que negó las acusaciones.

En ese contexto, Correa expresó que las notas de protesta deben ser reemplazadas por acciones concretas. "Por eso vamos a lanzar una estrategia multilateral –agregó-llevando el caso de Ecuador a organismos internacionales, para denunciar las agresiones y los abusos del gobierno colombiano”.

En tanto, la canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa expresó que Colombia sigue manteniendo la no aceptación a la incursión de fuerzas regulares a territorio ecuatoriano. “Nosotros insistimos, porque tenemos todas las evidencias, de que efectivamente hubo una incursión de las fuerzas regulares colombianas”, remarcó.

Ambos países comparten una zona limítrofe de unos 640 kilómetros. El gobierno ecuatoriano asegura que el glifosato y otros químicos usados en la fumigación, al ser esparcidos por aviones cerca de la divisoria, son arrastrados por el viento a zonas ecuatorianas. Situación que según Ecuador, causa daños ambientales y enfermedades, entre las que el cáncer es una de las principales afecciones entre los pobladores.

En cambio, Bogotá asevera que el herbicida es inocuo y que las fumigaciones son necesarias para combatir las plantaciones ilegales de coca. En marzo, el gobierno de Álvaro Uribe anunció que pagará indemnizaciones a pobladores ecuatorianos si se comprueba que el glifosato tiene repercusiones en ese país.

Ayer, los países iniciaron en Quito un estudio científico y técnico para determinar los posibles daños de las fumigaciones aéreas antidrogas colombiana. Es la primera reunión de la comisión mixta que tiene como objetivo analizar la posición de cada una de las partes. Correa consideró que esa comisión, debería ser "tripartita". “Debería entrar un organismo internacional ahí, un tercero imparcial”, indicó.

Por su parte, el vicecanciller ecuatoriano, Rafael Paredes inauguró la reunión, y dijo que no son desconocidas las difíciles circunstancias por las que tuvo que pasar la población ecuatoriana de la frontera, debido a las fumigaciones.

Asimismo, instó a Colombia a que se someta a un "principio de precaución" del derecho internacional que obliga a que se suspendan, de modo indefinido, las aspersiones aéreas, mientras no haya un estudio científico que garantice su uso o lo vete.

Fuente: Agencia Periodística del MERCOSUR (APM), Mar del Plata / Argentina
http://www.prensamercosur.com.ar
https://www.alainet.org/pt/node/120458
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