Los presidentes Evo Morales y Lula da Silva decidieron aumentar el precio del gas que Bolivia exporta al Mato Grosso. Sin embargo, Petrobrás descartó ajustes en las partidas de Sao Paulo, las más significativas.

El acuerdo alcanzado en Brasilia entre los presidentes de Bolivia, Evo Morales y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva zanjó parte de las diferencias entre ambos países por el precio del gas natural. El presidente brasileño aceptó modificar el contrato del gasoducto de Cuiabá, para conceder un incremento similar al que paga Petrobrás por el hidrocarburo que llega a Sao Paulo, donde se registra el mayor suministro de gas boliviano.

La empresa Pantanal Energía, subsidiaria de la petrolera Shell, deberá pagar ahora 4,20 dólares por millón de unidades termales británicas (BTU), es decir 2,3 dólares más de lo que abonaba desde el 2001 por las partidas destinadas a las usinas del Mato Grosso, especialmente la termoeléctrica Gobernador Mario Covas, en la ciudad de Cuiabá.

Bolivia, que exporta alrededor de 1,2 millones de metros cúbicos de gas por día a esa región, logra con el acuerdo incrementar sus ganancias de 23 a 68 millones de dólares, aproximadamente.

El entendimiento generó, ahora, nuevas expectativas entre las autoridades bolivianas para continuar las negociaciones por los 26 millones de metros cúbicos que se envían a Sao Paulo, a un costo de 4,32 dólares el millón de BTU, un dólar por debajo de lo que pretende La Paz.

"Es la primera vez que se logra un incremento de esta dimensión en el precio de comercialización de gas natural con Brasil", dijo el ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Carlos Villegas, tras calificar de “excelente” el clima de la reunión entre Evo Morales y Lula da Silva en el Palacio de Planalto.

Por su parte, los funcionarios brasileños también destacaron los resultados positivos del encuentro en materia energética. Tanto el asesor especial de Asuntos Internacionales de la Presidencia, Marco Aurelio García, como el canciller Celso Amorim reconocieron luego del cónclave que el valor del gas en Cuiabá era “injusto” para Bolivia y destacaron que se trataba de “un problema inmediato” que debía ser corregido.

De todos modos, las negociaciones bilaterales entrarán en su etapa más difícil. El gobierno de Evo Morales intentará ahora conseguir que Petrobrás pague cinco dólares por el hidrocarburo que se exporta a Sao Paulo, cuya industria depende casi exclusivamente de esa fuente de energía.

Sin embargo, mientras se desarrollaba la reunión entre Morales y Da Silva, la petrolera brasileña ratificó su postura contraria a cualquier tipo de aumento. El director de Abastecimiento de Petrobrás, Paulo Roberto Costa, sostuvo que no hay motivos para subir el precio del fluido en los términos que exige La Paz y consideró que se debe respetar la fórmula de reajuste prevista en el contrato entre ambos países, vigente por los próximos doce años.

Ese documento firmado en 1999, establece variaciones trimestrales en base a una canasta internacional de combustibles, pero en los últimos meses las tendencias a la baja del precio del petróleo han impactado negativamente para Bolivia.

Al cierre de esta edición, trascendió que Evo Morales y el equipo de ministros y técnicos que lo acompañó en la gira, permanecerán hasta este jueves en Brasilia para cerrar acuerdos bilaterales, por lo cual se suspendió la conferencia de prensa que estaba prevista para la tarde del miércoles. Según informaron fuentes del Planalto, los anuncios oficiales se realizarán hoy a primera hora.

Durante la conferencia, Morales y Da Silva ampliarán los detalles del acuerdo por el nuevo precio del gas de Cuiabá e informarán sobre otros convenios relacionados con la cooperación en áreas rurales de Bolivia, el tráfico de drogas y posibles inversiones brasileñas para construir dos hidroeléctricas en el país andino, sobre el río Madera.

Fuente: Agencia Periodística del MERCOSUR (APM), Mar del Plata / Argentina
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