Venezuela: Trump lidera ofensiva contra la República Bolivariana
- Opinión
Cayeron las máscaras. Nadie puede engañarse, el discurso de Miami confirmó que Donald Trump lidera la ofensiva contra la República Bolivariana de Venezuela. El autoproclamado presidente encargado de Venezuela Juan Guaidó ya no objeta una intervención militar estadounidense, pretextando que salvaría vidas. Coherente con ello, crea las condiciones: Anunció que la ayuda humanitaria estadounidense entrará en Venezuela “sí o sí” el próximo 23 de febrero. El congresista Marco Rubio, Craig Faller, el jefe del Comando Sur y otros estadounidenses supervisan la ayuda humanitaria enviada por USAID. Los aliados latinoamericanos de Washington se activan en Cúcuta y otras localidades de Colombia; en Roraima (Brasil) y en la isla de Curazao para asegurar el éxito de la operación humanitaria.
El gobierno cubano afirmó en declaración que es un pretexto para una agresión militar contra Venezuela. En el New York Times los analistas Casey y Kuarmanaev afirman que la ayuda humanitaria, es una argucia para dejar mal parado al presidente Nicolás Maduro y mostrar que la oposición puede establecer un sistema de ayuda gubernamental alternativo en Venezuela mismo. El analista Marco Teruggi va más allá: Teme que la nueva fase de la agresión contra la República Bolivariana persigue implantar un espacio geográfico estratégico, una cabeza de playa, un corredor humanitario en suelo venezolano. Veamos la tragedia que acecha la tierra de Simón Bolívar.
Una aventura que puede transformarse en tragedia
El día D podría transformarse en tragedia. Nicolás Maduro ya ha denunciado la farsa de la ayuda humanitaria. Washington y Londres, que habrían robado 30 mil millones de dólares a Venezuela, ahora envían migajas en lugar de devolverlos. La ONU y LECAH, afirman que la ayuda humanitaria debe ser neutral, imparcial e independiente y que debe ser aprobada por el gobierno dirigido por Nicolás Maduro. La Cruz Roja internacional y Oxfam entre otras ONG, ya rechazaron participar en un proyecto político, sin verdaderos objetivos humanitarios.
Es una evidente búsqueda de confrontación porque la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ya rechazó los ofrecimientos de amnistía y ultimátum. Ante el discurso de Trump, respondieron ratificando su disposición de morir para impedir el establecimiento del gobierno de Juan Guaidó. La FANB y las milicias populares se despliegan en la frontera para defender la Nación y la revolución bolivariana. El presidente venezolano Nicolás Maduro promete responder a la agresión creando un nuevo Vietnam.
En el siglo XXI, la Casa Blanca no controla todos los palillos. El retorno de la multipolaridad internacional, ya dificultó los planes de Trump. No consiguió imponer su proyecto en el Consejo de seguridad de la ONU: Rusia opuso su veto. Tampoco lo consiguió en la Organización de Estados Americanos (OEA), tradicionalmente infeudada a Washington. La OEA le negó el apoyo al reconocimiento de Juan Guaidó, exigido por el Secretario de Estado Mike Pompeo. Además, ante las perspectivas de agresión militar, los gobiernos progresistas, las potencias rivales de Washington y los gobiernos respetuosos del derecho internacional, rechazan o moderan su apoyo a los designios de la Casa Blanca. ¿Triunfará el desenlace final de la larga guerra hibrida de Washington contra la República Bolivariana? Es preocupante porque en Miami, Trump afirmó que Venezuela es sólo la primera etapa de su cruzada anti-socialista.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) respondió al discurso de Donald Trump, ratificando su lealtad con el presidente venezolano Nicolás Maduro Moros. (France 24)
Washington lidera ofensiva contra Venezuela
¿Si todavía tiene dudas sobre quien dirige la ofensiva actual contra la revolución bolivariana? Escuche el discurso de Donald Trump ante la comunidad venezolana de Miami el 18 de febrero. El afirmó en Miami que “los días del socialismo en Venezuela están contados”. Trump amenazó, los miembros de la FNAB de perder todo, si no apoyan a Juan Guaidó y no dejan entrar la ayuda humanitaria a Venezuela. Una afirmación injerencista inaceptable. La retórica trumpista afirma esperar que Maduro abandone el poder, pero no descarta la intervención militar.
No es una acción pasajera. Trump amalgamó su ofensiva contra Venezuela con sus críticas contra los socialistas del Partido Demócrata estadounidense. La caída de Maduro ya es parte de su campaña presidencial de 2020. Además, ya ha usado la estrategia de diversión conocida como Wag the dog. Un artículo en Vanity Fair afirma que la aventura militar venezolana le permitirá además, ganar votos en Miami. Le permitirá unificar la derecha los adversarios de las políticas progresistas de los demócratas.