Primer balance positivo de la Campaña “Derecho sin Fronteras”
Las multinacionales deben respetar los derechos humanos y ambientales
06/01/2012
- Opinión
* Suiza, mayor densidad en todo el mundo de empresas multinacionales por número de habitantes
* Legitimidad de la protesta de la sociedad civil
A dos meses de su lanzamiento, la Campaña “Derecho sin Fronteras” ha transitado un camino positivo. Tschoff Löw, coordinador de la iniciativa sostenida por más de cincuenta organizaciones suizas, evalúa los primeros resultados y los desafíos inmediatos.
La Campaña “Derecho sin Fronteras”, aboga por introducir reglas obligatorias para las multinacionales suizas presentes en el Sur.
Exige que el Gobierno y el Parlamento helvéticos definan medios jurídicos para que las trasnacionales que tengan su sede en Suiza respeten los derechos humanos y ambientales en todo el mundo de igual manera que lo deben hacer en la Confederación Helvética.
17 son los miembros activos que impulsan esta iniciativa. Entre ellos algunas de las principales Organizaciones No Gubernamentales (ONG) de cooperación, sea de proyectos como de intercambio de personas: Acción Cuaresmal; Tierra de Hombres Suiza; Pan para el Prójimo; Helvetas; Swissaid; E-CHANGER, Brücke-Le pont etc.
También organizaciones sindicales, como Solidar; de derechos humanos como Amnistía Internacional Suiza; y ecológicas como Greenpeace.
Del mundo de la solidaridad y de la información/sensibilización están presentes la Declaración de Berna; el Grupo de Trabajo Suiza-Colombia; la red Guatemala de Berna y Multiwatch. También la Comisión Internacional de Juristas y la Sociedad a favor de los pueblos amenazados.
35 otras organizaciones, asociaciones y Federaciones Cantonales de cooperación sostienen también la iniciativa. Incluidas las centrales sindicales UNIA; Trabajo. Suizo; Uniterre; y la Unión Sindical Suiza.
Eco impactante
“La repercusión mediática de la Campaña a partir de su lanzamiento el 3 de noviembre pasado ha sido significativa y sostenida”, explica Löw al iniciar el balance de los primeros sesenta días.
En la prensa escrita nacional, los organizadores contabilizan artículos publicados en más de 50 medios con una tirada total de 2 millones de ejemplares.
No menos de 70 sitios de información electrónicas han retomado la información sobre la iniciativa de las ONG helvéticas, superando la barrera de los 4 millones de consultas por mes.
Tanto la radio como la televisión han asegurado espacios de cobertura significativos. Sin menospreciar el impacto de la Campaña en una amplia prensa internacional, particularmente alternativa, de otros países europeos como España y de diferentes naciones latinoamericanas. Producto directo del trabajo de ONG que han informado en el terreno a sus cooperantes y contrapartes y han difundido entrevistas y artículos sobre la Campaña.
Al explicar esta presencia amplia, Löw reconoce el valor trascendente del trabajo realizado por las organizaciones que apoyan la iniciativa “que se han apropiado efectivamente de la misma, la promocionan, publicitan y promueven”.
Eco mediático que se puede analizar con dos claves interpretativas, anticipa el Coordinador Nacional. “La sensibilidad particular de la sociedad civil suiza que no es indiferente a grandes temas cotidianos como la crisis económico-financiera y a respuestas sociales como el movimiento de los indignados”.
Así mismo, “el sentimiento de mucha gente que ante esta situación está convencida que se debe hacer algo concreto”, y que comprende que Suiza, sus autoridades y las trasnacionales helvéticas deben asumir responsabilidades.
Petición en línea
Entre los desafíos futuros inmediatos de la Campaña, “lo más importante será promover activamente la firma de una petición la que será presentada al Parlamento durante su sesión de junio 2012”.
El texto de la misma solicita a los poderes ejecutivo y legislativo hacer lo necesario para que las empresas multinacionales que tienen su sede en Suiza “respeten los derechos humanos y el medio ambiente en todas partes del mundo”.
Los promotores de “Derecho sin Fronteras” esperan recolectar en torno a 70 mil firmas. “Asegurando así una legitimidad importante a nuestra movilización ciudadana”, enfatiza Löw.
Entre enero y junio del 2012 se anticipan seis meses muy activos para las ONG de desarrollo, religiosas, de derechos humanos, sindicales y de solidaridad que promueven la Campaña.
Con el lanzamiento en Davos mismo, en el marco del próximo Foro Económico Mundial, de un video clip ligado a la Campaña. La realización de un Seminario de reflexión y debate en la última semana de marzo, con la participación de representantes del Sur y con la presentación de recomendaciones concretas, en el terreno jurídico, que serán luego transmitidas a las autoridades.
Y con una serie de actividades públicas en diferentes ciudades y cantones, “para hacer conocer más ampliamente la Campaña y la petición”, explica el Coordinador.
Para animar la convicción de esta movilización, subraya Löw, es esencial “no olvidar la responsabilidad que tiene Suiza, el país con más densidad en todo el mundo de empresas multinacionales por número de habitantes”.
Con el agravante, enfatiza, “que el derecho suizo no está muy avanzado y no existe hoy ninguna responsabilidad de las sedes helvéticas sobre las violaciones en derechos humanos y ecológicos cometidas por sus filiales en el extranjero”.
Situación que impide, por ejemplo, “que las víctimas de dichas violaciones en otros países puedan abrir procesos contra esas empresas en Suiza mismo”.
Agenda intensa
Las decenas de acciones públicas previstas en los próximos meses, buscarán, según Löw, reforzar la información del público y el intercambio con los parlamentarios –para facilitar la actuación del legislativo- en la perspectiva de una revisión de las leyes.
Sin perder de vista el “esfuerzo esencial de recolectar firmas de la petición, fundamentalmente a nivel electrónico”.
Lo que constituye, según el Coordinador, “una novedad que puede crear un precedente en este tipo de iniciativas de la sociedad civil. La utilización de los medios y redes sociales” a favor de propuesta de esta naturaleza. “Hasta ahora siempre ha prevalecido la recolección física de firmas en las calles. Estamos innovando en cuanto a los métodos”, concluye Tschoff Löw.
Sergio Ferrari, servicio de prensa de E-CHANGER, ONG de cooperación solidaria miembro de la Campaña. En colaboración con Swissinfo.ch
https://www.alainet.org/es/articulo/155063
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