Entrevista con el Secretario General de la Federación de Entidades Palestinas de Argentina, Rafael Araya Masry

Un chileno que en Argentina lucha por Palestina

27/09/2011
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A
“Y juro:
Que he de hacer un pañuelo de pestañas,
donde grabar poemas a tus ojos,
y escribir una frase
más dulce que la miel y que los besos:
“¡Que Palestina era... Y sigue siendo!”
Mahmud Darwish
 
En 1983, en plena dictadura pinochetista en Chile, Rafael Araya Masry –nacido en las orillas del Lago Villarrica- realizó junto a Eduardo Peralta (“Me cae bien tu ex marido”) una visita a Argentina para escuchar en directo al entonces prohibido Joan Manuel Serrat. Rafael también era músico (Grupo Cantierra) y a la manera del relámpago se enamoró de la que es su esposa hasta hoy. Por ahí supo que no era conveniente políticamente su retorno a Chile. En los años de plomo del país andino, Rafael Araya fue parte de la resistencia cultural frente a la tiranía. De hecho, en 1978, los familiares de los Detenidos Desaparecidos protagonizaron su primera gran huelga de hambre en distintas iglesias de Santiago. Allí Rafael, junto a integrantes del denominado Canto Nuevo, alentó con su música la demanda de información sobre el paradero de los desaparecidos. Tal fue el movimiento, que el entonces ministro del Interior, Sergio Fernández, debió reconocer a regañadientes el horror de las detenciones.
 
En Argentina había terminado recientemente el régimen militar. ¿Pero cómo un músico chileno residente accidental en la cuna de Ernesto Guevara termina como Secretario General de la Federación de Entidades Palestinas de la República Argentina desde el 2005, además de asesor político no diplomático de la Embajada de Palestina en ese país?
 
 “Mi abuelo materno viajó de Palestina en 1917 para quedarse en Chile. En Argentina se establecieron algunos sirios y libaneses, mientras que los palestinos, que ya migraban desde fines del siglo antepasado, se quedaban en Chile donde en la actualidad se encuentra la comunidad palestina más grande del mundo (400 mil personas), exceptuando el Medio Oriente”, y agrega Rafael que en 1982, producto de la masacre de Sabra y Chatila en un campamento de refugiados del Líbano, “organizamos una misa en la Iglesia Ortodoxa, a un costado del Estado Nacional, y luego marchamos hacia el centro de la capital por primera vez y fuertemente escoltados por la policía del gobierno militar, para condenar ese crimen contra el pueblo palestino”.
 
 -¿La causa palestina tiene orígenes sanguíneos?
 
“No. Es un compromiso político e ideológico. Yo soy un comunista, y como tal, también soy un internacionalista. Y cada lucha que exista en el mundo que se caracteriza por reivindicar el derecho a la autodeterminación, los derechos humanos, el combate contra la explotación, es mi causa. Palestina hoy sintetiza mejor que ningún pueblo en el planeta, la resistencia ante el colonialismo, el imperialismo, la expoliación, la ocupación y la violación permanente de los más elementales derechos humanos.”
 
“LOS PALESTINOS SON LAS VÍCTIMAS DE LAS VÍCTIMAS”
 
-El 23 de septiembre recién pasado, el Presidente de la Autoridad Nacional Palestina presentó en las Naciones Unidas la solicitud de convertir por fin a su pueblo en un Estado…
 
“La presentación ante la ONU es el resultado de los incumplimientos del Estado de Israel con la Ley Internacional, y una medida para que acate los acuerdos firmados con los palestinos. Ya en 1988 el Consejo Nacional Palestino (la Organización para la Liberación de Palestina, OLP) proclamó en Argelia la independencia palestina sobre los territorios de Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén oriental. Ello significó el reconocimiento concreto del Estado de Israel por parte de los palestinos. En 1993 se firmaron los Acuerdos de Oslo entre el Presidente de la OLP, Yasir Arafat, y el Primer Ministro israelí, Isaac Rabin, donde se estableció un proceso paulatino para llegar a la creación del Estado Palestino, libre, soberano y viable. Sin embargo, la ultraderecha israelí (fundamentalista) entonces no decidió mejor cosa que asesinar a Isaac Rabin el 4 de noviembre de 1995.”
 
 -¿Por qué?
 
 “Porque los Acuerdos de Oslo preveían que en un plazo de 5 años Palestina estructuraría las instituciones que configuran a un Estado, para luego discutir el estatus definitivo respecto de las fronteras, Jerusalén y los temas pendientes. Naturalmente que con el asesinato de Rabin, el proceso fue paralizado en mucho de sus aspectos, y los Acuerdos de Oslo se volvieron letra muerta. Sólo se cumplió con la creación de la Autoridad Nacional Palestina. Fue enterrado el compromiso de la cesación inmediata de toda construcción de asentamientos en Cisjordania. Es decir, Israel violó una vez más lo pactado, como lo hizo con la resolución 181 de la ONU que dio origen al Estado Israelí y al Estado Palestino; la resolución 194, donde a cambio del retorno de los refugiados palestinos, Israel fue aceptado como Estado en las Naciones Unidas. Tampoco honró la resolución 242 de 1967 que exigía a Israel volver a la frontera previa a la ‘Guerra de los 6 Días’. Por tanto, los incumplimientos permanentes, más la colonización que luego de los Acuerdos de Oslo se triplicó, no le dejaron otra alternativa al gobierno palestino que concurrir a la misma fuente que vio nacer al Estado israelí: la ONU.”
 
 “OBAMA SE PUSO DEL LADO DEL VERDUGO Y EL OCUPANTE EN LUGAR DE LA VÍCTIMA Y EL OCUPADO”
 
-¿Cómo caracterizas la ocupación en territorio palestino?
 
 “Desde la surgimiento del Estado de Israel, se ejecutó contra Palestina una verdadera limpieza étnica a través de la muerte y la exclusión. En Palestina vivía alrededor de un millón 200 mil personas. 726 mil fueron expulsadas por el terror de las masacres provocadas por las bandas armadas judías. Y esas bandas fueron dirigidas por ‘conspicuos’ sionistas que acabaron siendo primeros ministros de Israel. Esto es, dos tercios de la población palestina debieron abandonar su territorio. La falsa teoría israelí se fundó en la idea de que ellos llegaban a una tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra. Sin embargo, allí había una cultura, una historia, ciudades, una sociedad civil, un gobierno. No llegaron a ‘tierra de nadie’; llegaron a una tierra de árabes. Esta infamia puede resumirse en que los europeos cometieron el peor crimen del siglo pasado por medio del holocausto y los palestinos, sin tener nada que ver en ese conflicto, pagaron las consecuencias. Los palestinos son las víctimas de las víctimas.”
 
-¿Cómo se explican las relaciones carnales entre el Estado corporativo de Estados Unidos y el Estado de Israel?
 
“Por dos causas clave. Israel es el portaviones más grande que tiene Norteamérica en el mundo. Es su punta de lanza en medio oriente, su gendarme. Israel le resulta necesario como base militar y apoyo en una región que bajo su suelo tiene la mayor riqueza petrolera conocida. Asimismo, existe en Estados Unidos un poderoso lobby judío, representado por la American Israel Public Affaire Committee (AIPAC), que es propietaria de muchos medios de comunicación y que ejerce una coerción económica sobre los políticos norteamericanos, tanto demócratas como republicanos. La AIPAC financia en gran medida las campañas electorales. Se trata de un chantaje permanente en el corazón de la sociedad estadounidense y sus organizaciones políticas. Por eso, tal como lo definió un analista israelí a propósito del discurso hecho ahora último por Obama en la ONU, ‘Barak Obama obtuvo la certificación coaching’, es decir, no pudo haber defendido mejor los intereses del Estado de Israel que el propio Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu.”
 
 -¿Cuáles han sido los giros de Obama al respecto?
 
 “Barak Obama hizo su primera visita fuera de Estados Unidos como Presidente a Egipto donde ofreció una nueva relación con el mundo árabe, con el mundo musulmán y se comprometió a dar una solución definitiva al que llamó él mismo, el ‘drama’ del pueblo palestino. En mayo de 2011, a 24 horas del arribo del Primer ministro de Israel a Estados Unidos, Obama dijo por televisión que la solución de Palestina pasaba por la constitución de un Estado fundado sobre las fronteras establecidas en 1967, con intercambio de territorios. ¿Pero qué ocurrió desde entonces hasta el discurso aberrante que planteó en la ONU? Obviamente privilegió no la paz mundial, sino que priorizó que el año entrante hay elecciones en Estados Unidos. Cambió la paz estratégica por su política interna. Obama no tuvo la virilidad de señalar siquiera el sufrimiento y la humillación que ha padecido el pueblo palestino. ¡Le faltó poco para afirmar que Israel está ocupado por Palestina! Se puso del lado del verdugo y el ocupante en lugar de la víctima y el ocupado.”
 
“EL PUEBLO ARGENTINO ESTÁ CON PALESTINA”
 
 -Fue numerosa y graneada la marcha a favor de Palestina en el barrio Recoleta de Buenos Aires el 20 de septiembre…
 
“Las organizaciones populares argentinas están con la causa Palestina. Pero una fracción de la sociedad argentina, mediáticamente, impide y obstaculiza que la razón Palestina sea visible. La presión vergonzosa de las instituciones judías en Argentina es tremenda a escala comunicacional. Finalmente, el ‘éxito’ de la campaña judía está en meter en un mismo saco los conceptos ‘semita’, ‘sionista’, ‘israelí’, ‘judío’.”
 
-¿Y cuáles son las diferencias sustantivas?
 
“Yo soy ‘semita’ por mi origen árabe. El ‘semitismo’ bebe de la fuente de 7 lenguas distintas, entre las cuales está el hebreo, el árabe, el arameo, etc. En cambio, el ‘sionismo’ es una ideología política colonialista que montada a caballo en el ‘judaismo’ se funda sobre una supuesta promesa divina que señala que la Biblia es un ‘título de propiedad’ y Dios es un ‘agente inmobiliario’. Pero el judío es quien profesa la religión judía, e ‘israelí’ es un ciudadano del Estado de Israel. En Argentina, el Estado de Israel es el único en La Tierra que tiene tres embajadas: la embajada del Estado de Israel, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), y la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA).”
 
-Pero ese poderío no impidió la alocución pro Estado palestino de la Presidenta Cristina Fernández en la ONU…
 
“Argentina históricamente ha sostenido una posición de principio respecto del tema palestino, apoyándolo tal como lo afirma la ley. Es decir, el derecho a retorno de los refugiados, a construir un Estado soberano. Y la Presidenta, ni más ni menos, ratificó esos criterios. Lo distintivo es que ella realizó una pública y vehemente defensa del derecho palestino a contar con un Estado propio. Fue un acto de valentía al confrontar los poderes fácticos de este país.”
 
 -¿Qué viene luego del 23 de septiembre?
 
“La decisión política de la Autoridad Nacional Palestina de proseguir todos los pasos que dictan las normas y que contempló y contempla ir al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para obtener el reconocimiento pleno como Estado y, a su vez, que el Consejo de Seguridad recomiende a la Asamblea General de la ONU la aceptación de Palestina como Estado con todos los derechos pertinentes. Independientemente de que el gobierno norteamericano ya anunciara su veto a la medida, el Presidente Mahmud Abbas indicó que no importa que lo usen. Ese hecho pondría en evidencia ante la opinión pública mundial que Estados Unidos jamás ha resultado un mediador objetivo en el conflicto. Actualmente, existen alrededor de 140 Estados del globo dispuestos a votar a favor de la creación del Estado palestino en la Asamblea General. Ello produce hacia Israel una situación de aislamiento. El Estado de Israel, en su desesperación, ha conseguido que el Cuarteto (EEUU, Rusia, Europa y Naciones Unidas) haga un llamado al diálogo. El gobierno palestino, firmemente, ha dicho que no, hasta que ese llamado no considere un período expreso de suspensión de las colonias israelíes en Cisjordania como condición para encarar cualquier negociación.”
 
-¿Cómo funcionan esas colonias?
 
“Son verdaderas ciudades. Avanzadas de colonos y tras ellos, el ejército de Israel. En la ciudad de Hebrón que tiene más de 100 mil habitantes, se han instalado 600 judíos y mil 500 soldados que han trastornado toda la vida de la comunidad. Los israelíes han construido un muro de 800 kilómetros de largo y 8 metros de alto, equivalente a la distancia que media entre Buenos Aires y Córdoba para un territorio de 5 mil kilómetros cuadrados. Y donde el muro no rodea la ciudad, le han puesto un portón con candado donde la gente tiene horario para salir y entrar. El portón se abre de 7 a 8 de la mañana, y se vuelve a abrir de 6 a 7 de la tarde para que la gente retorne de sus trabajos. Sino cumplen con el horario, los palestinos están obligados a dormir fuera de sus casas. ¡Por qué un palestino tiene que pedir a un militar israelí el permiso para comprar un cilindro de gas de uso doméstico! Es un régimen de apartheid. Las casi 200 colonias judías en territorio palestino están interconectadas por carreteras por donde pueden transitar ellos y jamás los palestinos y los árabes.”
 
TODAS LAS PATRIAS
 
-¿Cuántas patrias tienes?
 
“Mi patria es donde me toque estar. Yo tenía un profesor en Argentina que era un marino y abogado profundamente anti chileno que me hostigaba mucho ‘porque ustedes los chilenos son expansionistas y nos quieren arrebatar nuestro territorio’. Le contesté, ‘mire profesor, si estuviera en Bolivia me gustaría ser el mejor de los bolivianos, si estuviera en Perú me gustaría ser el mejor de los peruanos, y si estoy en Argentina quisiera ser el mejor de los argentinos. Porque las fronteras no las inventé yo, sino gente como usted.’ Amo a Chile y a Argentina, por su generosidad y solidaridad con los chilenos y con la causa Palestina. Hoy Argentina acoge a miles de estudiantes chilenos como alumnos gratuitos en las universidades del Estado. Pero me averguenza que nuestro país, Chile, le haya robado ese derecho a los jóvenes desde los tiempos de la dictadura. Por eso reivindicamos el movimiento estudiantil chileno desde Argentina.”
 
Septiembre 28 de 2011
https://www.alainet.org/es/articulo/152867?language=es
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS