El gobierno de El Salvador tiene una deuda pendiente con las mujeres del país, una deuda que sólo se puede pagar con justicia, dijo hoy Amnistía Internacional al hacer pública - en el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres - una carta enviada al Presidente Saca. En la carta, Amnistía Internacional señala con preocupación la falta de disposición de las autoridades para investigar minuciosamente los casos de asesinatos de mujeres y el trato que reciben los familiares de las víctimas al presentar sus denuncias. Entre finales de 2002 y mediados de 2004, al menos 20 mujeres y niñas fueron abusadas sexualmente y brutalmente asesinadas en El Salvador. En 12 de los 20 casos, los cadáveres estaban desfigurados, descuartizados o decapitados. Algunos mostraban señales de haber sido quemados y dos de los cuerpos estaban completamente carbonizados. Sólo en tres de los 20 casos los responsables fueron juzgados y sentenciados. En el resto, las investigaciones fueron ineficientes o inexistentes. "Las características de los asesinatos son muy similares a las que utilizaban los escuadrones de la muerte durante los años setenta para aterrorizar a la ciudadanía. Esto, sumado a la falta de investigaciones, produce un clima de miedo y desconfianza popular en el sistema de justicia," dijo Amnistía Internacional. Una investigación llevada a cabo por la Relatora Especial sobre la violencia contra las mujeres de las Naciones Unidas, confirmó que el número de denuncias de violencia contra las mujeres recibida por el gobierno es muy bajo en relación con el de incidentes registrados por la prensa y organizaciones de derechos humanos. Sus recomendaciones, al igual que llamamientos por parte de instituciones y organizaciones locales, han sido ignoradas por las autoridades. "La falta de justicia en El Salvador no sólo amenaza el funcionamiento del estado de derecho sino que deja a las mujeres del país en una situación de constante peligro." Amnistía Internacional ha llamado a las autoridades salvadoreñas a investigar de manera urgente los asesinatos de mujeres y niñas y a llevar a la justicia a los responsables. La organización también ha recalcado la importancia de tomar medidas concretas para evitar que estos crímenes sean cometidos en el futuro.