Brasil afirma que el ALCA salió de su agenda. Chávez promueve el ALBA. Los movimientos sociales rechazan los Tratados de Libre Comercio. ¿Se consolida la integración sudamericana? Durante la segunda quincena de abril el tema del ALCA (Area de Libre Comercio para las Américas) parece haber vuelto a tener tono de debate en los distintos países de la región. Sin embargo, esta vez las voces que se escucharon desde Sudamérica son contrarias a la firma de ese tratado, tan importante para la hegemonía de Estados Unidos. El 11 de abril las cosas parecían mostrar otra postura, los poderosos industriales de San Pablo, la capital económica brasileña, afirmaron que el Mercado Común del Sur (Mercosur), y en especial Argentina, son freno y una carga para su país en las negociaciones para crear el ALCA y concretar el demorado acuerdo con la Unión Europea (UE). El director de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (FIESP), Roberto Giannetti da Fonseca, manifestó que "Brasil, solo, ciertamente haría una propuesta mejor a la Unión Europea. Pero la propuesta del Mercosur incorporó muchas restricciones de sectores industriales, colocadas por Argentina". Para Gianneti, a Brasil le convendría que el Mercosur dejara de ser una unión aduanera, que exige a sus cuatro socios originales a negociar acuerdos comerciales en conjunto, para regresar al estadio de área de libre comercio, en el cual cada socio tendría libertad de acción. Pero el gobierno del presidente Luiz Inacio Lula da Silva afirmó en varias oportunidades que no está dispuesto a permitir que el Mercosur retroceda a un área de libre comercio. Del mismo modo se manifestaron los gobiernos de Argentina, Uruguay y Paraguay, los otros tres miembros plenos del bloque del Sur. Otro punto a destacar es la visita que realizó el 19 y el 20 de abril el presidente chileno, Ricardo Lagos a Venezuela, donde se registraron signos positivos para el proceso de integración regional. Esa fue la primera visita que el presidente Lagos realizó a Venezuela y el clima de cordialidad y entendimiento, así como las declaraciones de ambos mandatarios frente a la prensa parecieron dejar resueltas antiguas fricciones, provocadas a partir de opiniones expresadas por el presidente Hugo Chávez respecto a Bolivia y su salida al mar. Esas manifestaciones del líder venezolano provocaron susceptibilidad en el gobierno chileno. Más aún, este encuentro estuvo signado por la propuesta mutua de relanzar las relaciones entre ambos Estados y llevarlas a una nueva etapa. Sin embargo, el hecho mas significativo seguramente estuvo en las declaraciones del presidente Lula, quien dijo el 20 de abril que sacó al ALCA de la agenda de debates y defendió la integración de Latinoamérica y de ésta con África. Esta afirmación y la primera reunión de cancilleres de la Comunidad Sudamericana de Naciones realizada en Rió de Janeiro, marcaron una semana de pronunciamientos y acciones integracionistas. "Hace dos años que no se discute más el ALCA en Brasil, porque nosotros sacamos el ALCA de la agenda", manifestó el mandatario brasileño. Por su lado Lula también afirmó que, en el caso del Mercosur, Brasil necesita de Argentina y ésta de Brasil, y ambos "tienen que ayudar a Uruguay y Paraguay a desarrollarse. También destacó que ahora se intenta construir una alianza Mercosur- Unión Europea, y aclaro que el Mercosur ya no es sólo Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, sino que comprende a toda América del Sur y se busca dar el paso siguiente para "juntar a todos los países de América Central y del Caribe". Por su parte, Argentina también se refirió al tema. Desde la Cancillería abogaron por consolidar los mecanismos de integración ya existentes en el Cono Sur, antes de avanzar en el fortalecimiento de la Comunidad Sudamericana de Naciones (CSN), nacida el año pasado. “Nuestra posición es muy clara, debemos primero trabajar en el marco económico entre la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y el Mercado Común del Sur (MERCOSUR), para luego pasar al perfeccionamiento de la Comunidad Sudamericana de Naciones (CSM)”, afirmó el canciller Rafael Bielsa. Dentro de este marco, el 27 de Abril comenzó el IV Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA en el Palacio de las Convenciones de la Habana, Cuba. El doctor Osvaldo Martínez, presidente del Comité Organizador del evento y director del Centro de Investigaciones de la Economía Mundial, precisó que habrá una sesión especial sobre la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), propuesta venezolana que, a diferencia del ALCA, expresa los intereses de los pueblos de la región. Consideró también que la batalla continental posee hoy características peculiares y precisó que los Tratados bilaterales de Libre Comercio que el gobierno norteamericano negocia con varios países andinos y centroamericanos se han convertido en el último año en el centro de la lucha de los movimientos sociales. Sumado a esto, indígenas de Ecuador pidieron al flamante presidente de ese país, Alfredo Palacio, que suspenda las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) promovidas por Estados Unidos. Una declaración de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE), firmada por su máximo líder, Luís Maca, destaca la necesidad de que el nuevo gobierno respete la lucha heroica de la ciudad de Quito y del resto del país, que reclama la modificación de la agenda del ex presidente Lucio Gutiérrez. Pero a pesar de esos reclamos, el ministro de Comercio Exterior, Oswaldo Molestina, pidió una ronda adicional de negociación del TLC para analizar el tema agrícola. El Presidente Palacio también dijo que se continuarán las negociaciones, pero se convocaría a referéndum. También se puntualizó que la X ronda se realizará en Ecuador, a pesar de que voceros en Perú y Colombia (países que también participan de las conversaciones) han solicitado trasladarla a otro lugar Por su parte, Estados Unidos, Colombia y el Perú señalaron estar esperando que el nuevo gobierno de Ecuador decida si seguirá negociando el TLC, si organizará la próxima ronda y, de ser ese el caso, que fije la fecha y el lugar de la reunión. Por otro lado, el presidente venezolano, Hugo Chávez, acaba de participar en la Primera Reunión Cuba-Venezuela para la aplicación de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), en compañía de una amplia delegación, integrada por ministros, altos funcionarios del Gobierno, personalidades y empresarios, quienes intercambiarán durante dos días con sus contrapartes cubanas. Es muy importante tener en cuenta que el ALCA o los Tratados de Libre Comercio bilaterales o multilaterales son estratégicos para los intereses hegemónicos de Estados Unidos. El escritor brasileño, Luis Alberto Moniz Bandeira, en su libro “Argentina, Brasil y Estados Unidos, de la Triple Alianza al MERCOSUR”, plantes lo siguiente: “ La posibilidad de que la América del Sur integrada emergiese, con su propia identidad, constituía un desafió a la hegemonía económica y política de Estados Unidos, que trataba de organizar el "Third American Empire", y cuyo objetivo geopolítico después de la Guerra Fría, consistía en extender su dominio a Europa Oriental y a los Balcanes, controlar Eurasia, las fuentes de energía en el Medio Oriente, el Golfo Pérsico y Asia central, contener a China, e impedir el surgimiento de potencias locales en los subsistemas, especialmente si eran contrarios a sus intereses” A comienzos de febrero de 2002, el entonces secretario de estado, Colin Powell, al hablar ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense, señaló que Estados Unidos estaba vendiendo más a América Latina y al Caribe que a la Unión Europea. De ese modo se encuentra dibujado el tablero para nuestra región. Pero es importante no olvidar que a los latinoamericanos los une un camino común de supervivencia ante un mundo hostil a la región durante siglos. El 9 de diciembre de 2004, se firmó el inicio de la Comunidad Sudamericana de Naciones. Sudamérica tiene una población superior a los 350 millones de habitantes, su PBI ronda 1 billón 185. 000 millones de dólares, y abundan las riquezas naturales por toda la región. Frente a la dependencia y el subdesarrollo, la repuesta es la integración. * Juan C. Alfaro, desde La Plata, Argentina. APM - Agencia Periodística del MERCOSUR