América Latina

Diaconía, economía y sociedad

Héctor Fernández

30/11/2011

Opinión

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Mi perspectiva, mi práctica y reflexión teológica está influenciada por mi contexto como salvadoreño, centroamericano, y por la labor pastoral con jóvenes y personas adultas en situación de vulnerabilidad socio – económica, en una práctica diaconal - ecuménica.

1.- La grave situación económica que golpea a la región Centroamericana, y con sus matices a países de la región Latinoamericana, es en gran parte, resultado de que los sistemas económicos de nuestros países son altamente dependientes del sistema económico capitalista norteamericano, de allí que las crisis que se han profundizado para Estados Unidos son doblemente sentidas en nuestros países. Aunque la hegemonía norteamericana hoy, no es la misma de la década de los años 70. No hay que olvidar que Estados Unidos, su gobierno, mantiene su política imperialista, hegemónica, militarista y que no solo trata, sino que incide en las políticas internas de nuestros países, altamente dependientes. Nunca deberíamos olvidar este aspecto en los acontecimientos cotidianos de nuestros países.

“Aproximadamente uno de cada tres latinoamericanos es pobre (definido como no tener suficientes ingresos para satisfacer sus necesidades básicas). Uno de cada ocho se encuentra en pobreza extrema (definido como no ser capaz de cubrir sus necesidades nutricionales básicas, aún si gastaran todo su dinero en alimentos.” “América Latina parece ser la región más desigual del mundo, según el indicador de desigualdad del ingreso más generalizado, el índice de Gini, cinco de los diez países más desiguales del mundo se encuentran en América Latina. Uno de ellos— Brasil— supone casi una tercera parte de la población total de la región. Incluso los países más equitativos de América Latina tienden a ser más desiguales que los más desiguales en Europa”

The Inter-American Dialogue. Noviembre 2009. Banco Mundial 2008.

Las políticas neoliberales, y los desastres ecológicos, han provocado enormes cifras de excluidos, entre los que predominan los jóvenes, hombres y mujeres jóvenes, estos al verse marginalizados y sin posibilidades de ascender legalmente en la escala social, se organizaron en un inicio en la defensa de calles y territorios urbano marginales, este fenómeno socio económico ha venido deformándose y aliándose, en algunos casos, con otro fenómeno vinculado a estratos de ex militares que al concluir los conflictos armados en la región centroamericana, cambiaron sus acciones de operativos como Escuadrones de la Muerte, para convertirse y fortalecerse como Crimen Organizado, en los últimos años estos grupos están mas fortalecidos en algunos territorios de nuestros países centroamericanos y actualmente estos fenómenos sociales son aprovechados por la “narco actividad” que además de utilizar los territorios de nuestros países para transportar los estupefacientes a Estados Unidos (principal consumidor) también promueve el pequeño y mediano comercio de sustancias adictivas entre nuestras poblaciones, principalmente a los jóvenes.

2.- El modelo capitalista, militarista, consumista, norteamericano, a pesar de estar enfrentando una de sus más graves crisis históricas en la actualidad, ha promovido y continúa promoviendo políticas depredadoras de lo que conocemos como “Medio Ambiente”, y con ello profundiza la grave situación en las condiciones de vida de las personas más vulnerables. En estos días otra señal preocupante por parte del gobierno norteamericano forzó para que Rusia envíe barcos de guerra a la costa Siria para evitar otra catástrofe militar por parte de Estados Unidos que pretende enmascarar otra guerra comercial, en una “guerra humanitaria”.

3.- En lo interno de nuestros débiles procesos democráticos participativos, con sus matices en cada país de Centro América, y con mayores matices en la región Latinoamericana, hemos visto desde finales de la época de los noventa hasta hoy, que tenemos algunos gobiernos, principalmente en el Sur de América, que acceden al poder vía votaciones, de esa manera, han sido elegidas personas que no son del total agrado del gobierno de Estados Unidos, personas que de una u otra manera, con aciertos y errores, y con realidades mundiales y locales adversas en varios sentidos, ensayan abrir posibilidades de experimentar formas de gobernar que, a pesar de limitaciones, intentan, ser novedosas, principalmente después de sufrir décadas de gobiernos comprometidos con acciones militaristas que trajeron mucho sufrimiento, dolor y muerte. Aunque en su gran mayoría, estos gobernantes de hoy continúan administrando las políticas neoliberales y muy poco cambiando las estructuras injustas. Este, aspecto merece una análisis mas profundo que incluya muchas otras aristas, para nombrar algunas: Los gobiernos totalmente fieles al Capitalismo Neoliberal, al ver perdidas sus posibilidades de seguir permaneciendo en el poder formal, aseguraron Tratados de Libre Comercio y dejaron otros amarres en legislaciones internas y aseguraron que los gobiernos venideros no pudiesen ni siquiera intentar acercarse a temas vinculados con la estructura dominante sin poner en riesgo la violación de aquellos tratados internacionales o vinculados a leyes secundarias internas; Dejaron contratos de trabajo con los cuales garantizaban la permanencia de personas fieles a los intereses locales capitalistas en estructuras gubernamentales, que bloquean, obstaculizan el avance de acciones que puedan beneficiar a la población mas necesitada. Aun así, algunos de estos “nuevos gobiernos” no se atreven a colocar la mirada en el horizonte, mas allá de la “mano amiga” del gobierno norteamericano

4.- En los últimos años, los países de la región centroamericana también hemos experimentado, que aumentan con más profundidad los desafíos a la Iglesia Cristiana:

a.- Fenómenos de las Mega Iglesias. En algunos casos, con personas mas capacitadas técnicamente para presentar propuestas a gobiernos y además, en algunos casos, con discursos que reflejan menores índices de ideologización, mas pastorales, mas eclesiales, acompañados del elemento liberador en sus teologías.

b.- Fortalecimiento o llegada de religiosidades y espiritualidades que por una parte son originarias de nuestros pueblos, pero también otras, de pueblos muy lejanos a nuestros contextos, en ambos casos, son opciones que están irrumpiendo en los escenarios centroamericanos y en algunos casos, buscadas por personas sedientas y hambrientas de Dios y respuesta a sus necesidades espirituales y materiales, que ya no son satisfechas en las iglesias que un día, en el pasado, fueron referentes de teologías y practicas contextuales.

c.- El escenario de desesperanza, se complica aun más al evidenciar el desencanto de un buen porcentaje de las juventudes, hacia las propuestas de prácticas y discursos eclesiales que ya no responden a la nueva situación del mundo. Aunque en nuestras sociedades centroamericanas los estratos mas pobres no logran total inserción en las nuevas pistas de comunicación virtual, la informática ha dado un vuelco a la situación de las juventudes actuales, entre otras situaciones, estas redes sociales ofrecen una “inclusión” social, que es más bien un espejismo despersonalizado. Pero también son un espacio para conocer otras formas de espiritualidad. La nueva ola de “juventudes” utiliza otras claves lingüísticas, por lo que los discursos de las iglesias, solamente continúan siendo escuchados por generaciones de adultos y ancianos, y reducidos grupitos de jóvenes, que repiten lo que enseñan las antiguas generaciones. Es urgente revisar los discursos que provienen de agentes cristianos, si quiere tener algún impacto aunque sea mínimo entre los amplios sectores de la juventud centro y latinoamericana, ya no vivimos en las décadas anteriores, aunque el orden justo de las cosas aun no llega, el contexto ha cambiado. Por otra parte la preparación de los “relevos generacionales” no se esta haciendo, aquí es necesario revisar los modelos educativos teológicos que son demasiado costosos económicamente que solo terminan fortaleciendo la dependencia y la mantención de elites pastorales, diaconales.

d- A este escenario se suma el desencanto y/o debilitamiento de agencias cooperantes. Probablemente las ofrendas han disminuido a causa de las crisis del capitalismo, probablemente los ofrendantes ya no ofrendan con las mismas porcentajes de años atrás, probablemente la orientación hoy es mas técnica que filosófica, probablemente las agencias cristianas y no cristianas cooperantes que por mas de treinta años creyeron en modelos eclesiales, que finalmente no llenaron sus expectativas, se sientan hoy defraudados, también se dice que hoy el cristianismo, ya no tiene su eje central en Europa, sino que en América Latina, y si eso es así, somos muchos cristianos con poca o ninguna capacidad económica para sostener modelos diaconales en una nueva situación mundial, sea como sea, la realidad es que escasean los recursos económicos para acciones diaconales de nuevo tipo.

A estos y muchos otros desafíos, son a los que debemos dar respuesta con la acción diaconal transformadora hoy.

Centro y Periferia, fue una herramienta importante de la teología latinoamericana, hoy el centro es mas concentrador y al mismo tiempo mas difuso, y la Periferia es ahora mucho mayor que en los años anteriores, los cinturones de pobreza ahora son los jóvenes que mueren diariamente, y las personas sin ninguna oportunidad de accesar a un empleo con trato justo, los millones de marginados, hombres y mujeres que en tanto estamos aquí reunidos, ellos no tienen ni siquiera un poquito de comida en sus platos o para alimentar a sus hijos. Esas personas son las que ven en su vida diaria, a los cristianos encerrados en sus enormes templos, vestidos de gala, orando, cantando y aplaudiendo o les ven en día a día solamente marchando y protestando, pero sin propuesta ni de nuevas formas de gobernar, mucho menos de nuevas formas de ser y actuar como cristianos.

Inmersos en realidades donde las personas se debaten entre ser parte de los tentáculos de la comercialización de estupefacientes, migrar a Estados Unidos o morirse de hambre, surge fortalecida la Espiritualidad de la Resistencia. Auténticamente cristiana, esa que a pesar de los escasos recursos busca ser creativa y trabajar para avanzar con recursos mínimos. Diaconía “de pobre a pobre”, es una alternativa ante demasiada dependencia y poca creatividad para recurrir a fondos económicos locales. Y además recordar que: “nadie es tan rico que no pueda recibir, ni tan pobre que no pueda dar”

• Esta es una Espiritualidad mas allá de un dialogo interreligioso. Que tiene su génesis en la indignación ética, y el principio-misericordia, que orienta a la comunidad eclesial a la desprivatización, y a sus integrantes a vivir insertos, asumiendo como propia la causa de la liberación de los pobres. Y esto le exige ser realista, haciéndose responsable de actuar ante la realidad.

• Esta nueva Espiritualidad necesita de: Voz profética dentro y fuera de la iglesia

Probablemente en la gran misericordia de Dios, la acción diaconal cristiana en los tiempos venideros será una acción diaconal que haga verdaderamente presente uno de los principios de la Reforma del siglo 16, sobre el que tanto se ha hablado y racionalizado pero que muy poco se ha puesto en practica, quizá en los nuevos tiempos esto si, finalmente, llegue a ser una realidad practica: La acción diaconal comprendida como responsabilidad de todas las personas que creemos, haciendo por fin realidad el principio del “real sacerdocio de todos los creyentes”. Partiendo de este principio probablemente comencemos a hablar más con Dios que hablar tanto de Dios.

Ponencia en el Seminario Latinoamericano de formación para la Diaconía, “Diaconía, economía, sociedad”, martes 22 nov. 2011.

Héctor Fernández.

Instituto Ecuménico Diaconal Esteban.

El Salvador, Centro América.

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