Momento crucial para la integración sudamericana

27/11/2014
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A

 

 
Nueva sede de UNASUR en Quito, Ecuador
 
La Cumbre de los Presidentes de los países de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) a realizarse el próximo 5 de diciembre en Quito, Ecuador, se convierte en un acontecimiento crucial en el momento actual que vive la región, debido a la existencia de contradicciones internas, el debilitamiento del proceso integrador y la existencia de presiones imperialistas por frenar un impulso importante de independencia iniciado hace una década cuando se produjo el rechazo regional al proyecto del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) impulsado por el gobierno de Estados Unidos.
 
Las posiciones encontradas entre los gobiernos que impulsan procesos antiimperialistas (Bolivia, Ecuador y Venezuela) y los que se han aglutinado junto a Estados Unidos en la Alianza del Pacífico (Colombia, Chile y Perú) marcan las tendencias opuestas dentro de UNASUR. Los primeros buscan radicalizar las posiciones de UNASUR y avanzar fuertemente en los procesos de integración comercial, económica, militar y monetaria, en tanto que los segundos están apostando a una política más abierta a las potencias y a la liberalización del comercio y las economías.
 
 
La posición intermedia la ocupan principalmente los gobiernos de Brasil, que ha tenido recientemente unas elecciones muy disputadas, Uruguay, que ha mantenido una posición ambigua y equidistante, y Argentina, que se ha visto presionada internamente por los grandes exportadores de soya y su jugada cambiaria y externamente por los llamados “fondos buitres” que pretenden especular con una parte de la deuda externa, que han frenado sus iniciativas regionales. La situación del régimen paraguayo, después del derrocamiento de Fernando Lugo y la realización de elecciones, es claramente proclive a posiciones conservadoras.
 
 El panorama sudamericano de complementación autónoma y de acercamientos solidarios ha tenido un momento de desaceleración con la muerte del comandante Hugo Chavez, quien se había convertido en el principal impulsor de los procesos de integración y unidad de América Latina y el Caribe como una necesidad histórica frente a los desafíos que traía la mundialización de la economía y la geopolítica internacional en el siglo veintiuno.
 
 Es que desde la Guerra Fría, la crisis y desmantelamiento soviético y el avance del poder unipolar de Estados Unidos, al iniciarse el presente siglo, los países de América Latina experimentaron un importante avance de sus relaciones intrarregionales, desarrollaron un discurso de integración, unidad y recuperación de la memoria histórica e impulsaron organismos propios para determinar sus políticas económicas, sus relaciones diplomáticas y la defensa de sus territorios e intereses frente a las metrópolis.
 
 La cumbre de Quito, más allá de las declaraciones oficiales, deberá servir para poner en la agenda del debate, y la toma de posición correspondiente, temas estratégicos como:
 
 La política de defensa y seguridad conjunta frente a la amenaza latente de Estados Unidos e Inglaterra; la creación ejecutiva de un ente bancario y financiero regional para enfrentar la crisis del capitalismo occidental y asegurar la complementación económica y comercial sudamericana; la ejecución de un plan conjunto respecto a la autosuficiencia de energía y petróleo, agua y alimentos; el impulso de un sistema de medios de comunicación alternativo al de las transnacionales; la integración vial con carreteras y ferrocarriles de norte a sur y de este a oeste; y la formación de un centro de educación, historia, ciencia y tecnología aplicadas.   
 
 Las conferencias que dicten el ex Presidente de Brasil, Lula Da Silva, el Presidente de Uruguay, José Mujica, quien recibirá la Presidencia pro-tempore de UNASUR, el ex Presidente de Colombia y actual Secretario General de UNASUR, Ernesto Samper y el Vicepresidente de Bolivia, Alvaro Garcia, en un Seminario sobre “La Unidad y la Integración Latinoamericana: pasado, presente y futuro”, en presencia de los delegados de países y representantes de CELAC, ALBA, CAN, MERCOSUR, A. del P., ALADI y CARICOM, serán un referente importante sobre el momento que viven nuestros países y sus perspectivas.
 
-       Eduardo Paz Rada es sociólogo boliviano, docente de la UMSA. Escribe en publicaciones de Bolivia y América Latina.
 
https://www.alainet.org/pt/node/165762
Subscrever America Latina en Movimiento - RSS