Golpe de Estado

08/08/2011
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No, no se alteren, no me refiero a la conflictiva situación que afrontamos, tampoco a la concreción de una amenaza velada de un campo pagado recientemente publicado por algunos militares, ni se trata de la reacción al llamado a la sedición de algún dirigente que obedece más a intereses personales que de partido.
 
Este fue el titular de la primera nota que el Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (Cerigua) circuló en su estreno como una Agencia de Noticias Alternativa.
 
Era el año 1982, la época álgida de los conflictos bélicos en Centroamérica.
 
Hace 28 años, con un télex, teléfonos, máquinas de escribir, que para la juventud ya son instrumentos de museo, iniciamos este trabajo informativo, desafiando a quienes urdieron la infamia de ocultar lo que estaban haciendo con nuestro pueblo y sus heroicas luchas.
 
Imperaba el silencio, el terror, la intimidación a la Prensa nacional e internacional para que no informara sobre hechos terribles que sucedían a diario. Era la época de la censura y la autocensura, originada en la política contrainsurgente del Estado, la era de los asesinatos y desapariciones forzadas de periodistas, cuyo recuento parcial logró hacer el desaparecido periodista Marco Tulio Barrios, en su escrito Mártires del Periodismo.
 
Esa pequeña agencia es una de las pocas de su género que aún existe en América Latina. Fue la que dio a conocer las violaciones a los derechos humanos de la patria de Luis Cardoza y Aragón, de Tito Monterroso, Otto René Castillo y Luis Turcios Lima. Llamó la atención sobre la represión, señalando a los responsables; cubrió el proceso de negociación, estuvo en la entrega del Premio Nobel a Rigoberta Menchú, invitada por un sindicato de periodistas de Noruega, alertó sobre la “Ruta del Desierto” que hoy estamos transitando debido a la falta de políticas ambientales.
 
Recorrió, al lado de los refugiados, el camino de regreso a su patria, trabajó reportajes en los campamentos de desmovilizados, entrevistó a personalidades nacionales e internacionales, ocupó puestos directivos en la Asociación de Corresponsales Extranjeros en México, abrió su banco de datos y centro de documentación a periodistas, escritores, investigadores e innumerables intelectuales de varias nacionalidades, entre ellos Myrna Mack, Susan Jonas y muchos más.
 
De la información distribuida por télex, hemos pasado a la tecnología. Somos pioneros en la investigación sobre las formas en que se cubre la noticia de la violencia hacia la mujer y el femicidio; continuamos divulgando nacional e internacionalmente las luchas sociales, acompañamos a movimientos de mujeres en la construcción de sus estrategias de comunicación.
 
Cerigua es un referente internacional en materia de libertad de expresión, asiste a los periodistas en riesgo, es miembro de la Red Ifex y de su Grupo Latinoamericano; es referente del Foro Feminista Latinoamericano, miembro de la Red de Periodistas con visión de Género y de la Federación Latinoamericana de Periodistas. La Cámara Guatemalteca de Periodismo la honró con el Premio Isidoro Zarco, en reconocimiento a su labor en pro del periodismo departamental.
 
Hoy, como socia de ONU Mujeres, del UNFPA, de Idea Internacional, de la OPS, del OACNUDH, entre otros, su trabajo sigue vigente, con credibilidad y el renovado entusiasmo de un equipo que busca contribuir a la democracia.
 
- Ileana Alamilla, periodista guatemalteca, es directora de la Agencia CERIGUA. http://cerigua.info/portal/
https://www.alainet.org/pt/node/151763
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