Desde que legisladores federales, debemos de decirlo representantes de algunas compañías radiofónicas, impusieron en la anterior LIX Legislatura de la Honorable Cámara de Diputados al contador público, Arturo González de Aragón como auditor de superior de la Federación, denunciamos, sin que nadie nos tomara en cuenta, que se trataba de un verdadero pájaro de cuenta.

Acostumbrado a manejarse de acuerdo a los intereses de sus clientes, sobre todo en el sector público, este individuo sin la menor ética, aceptó el importante y altamente rentable puesto que no sólo le daba seguridad económica sino además una influencia superlativa en el aparato gubernamental. Desde ahora lo decimos y lo denunciamos, la Ley Televisa no es ajena a este contadorcillo.

Pues el caso, que además de las denuncias anteriores de que sus hijos, nos referimos a los de Arturo González de Aragón, se manejaban en trabajos en dependencias del Gobierno Federal, que auditaba su padre, ahora resulta que diputados de la actual LX Legislatura descubrieron que prestó servicios personales a dependencias a las que luego también revisó.

La nueva noticia es que le niegan amparo a este espécimen, por no decir absurdo auditor superior de la Federación, contra la amonestación de los legisladores, además de que deberá enfrentar proceso por las irregularidades en la cuenta pública de 2004.

Entremos en materia: el titular de la Auditoría Superior de la Federación ASF, Arturo González de Aragón, nos informa el Diario La Jornada, perdió una batalla legal con la Cámara de Diputados, luego de que el juez primero de distrito, José Antonio Montoya García le negó una solicitud de amparo que interpuso para evitar la amonestación privada impuesta por la Comisión de Vigilancia legislativa, por el presunto conflicto de intereses del funcionario.

La sanción tuvo su origen en el hecho de que la Cámara descubrió en 2004 que el despacho González de Aragón y Asociados otorgó sus servicios profesionales a diversos entes de gobierno, que posteriormente fueron auditados por la ASF, como el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y las comisiones Federal de Competencia y Nacional del Agua.

Nosotros agregaríamos a Petróleos Mexicanos y muchas otras dependencias y organismos descentralizados. Arturo González de Aragón debe de ser investigado en su situación de concesionario de estaciones de radio en sociedad con funcionarios y ex funcionarios públicos que obtuvo inclusive con amenazas de muerte.

Este proceso, agrega el rotativo, es independiente de la solicitud de responsabilidad interpuesta por el ex diputado Jesús González Schmal, por las presuntas irregularidades en la revisión de la cuenta 2004 al supuesto tráfico de influencias de los hijos de Marta Sahagún, a los que definitivamente favoreció para asegurar el apoyo del poder.

Definitivamente, y lo decimos con conocimiento de causa, Arturo González de Aragón es un pájaro de cuenta, y no le tememos ahora a sus amenazas de muerte. !¡Ya basta de tanta corrupción!

- Teodoro Rentería Arróyave es periodista y escritor mexicano, vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP.  

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