Durante esta semana, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) realiza en Lima su trigésimo quinto periodo de sesiones. El tema fundamental está relacionado con Igualdad y buscan, mediante estas reuniones, enfocarse en los dos grandes retos que enfrenta el desarrollo en América Latina y el Caribe: lograr mayores grados de igualdad y buscar sostenibilidad en la dinámica del desarrollo de cara a las nuevas generaciones.
Ayer martes, el presidente Ollanta Humala inauguró este encuentro y señaló que el crecimiento económico peruano no ha bastado para reducir las brechas de desigualdad. A ello añadió particular atención al tema de industrialización. Sin embargo, como hemos mencionado reiteradas veces en Otra Mirada, el Plan de Industrialización para el Perú, a todas luces necesario, sigue lejano de alcances concretos. Las brechas se mantienen también por este detalle.
La semana pasada, el ingeniero Humberto Campodónico entrevistó a Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL y ella brindó datos importantes para, justamente, alcanzar mayor igualdad y desarrollo sostenible. Señaló que la base para que los beneficios de la expansión del Producto Bruto Interno sean percibidos por la población de cada país es el empleo con derechos. En un contexto como el peruano donde sólo el 12% de la PEA tiene empleo con derechos laborales, este es un dato fundamental.
Bárcena afirmó que el dinamismo de los países asiáticos, y en particular de China, ha tenido gran impacto en el mundo y, por consiguiente, en los países de la región. El Perú buscó crear condiciones internas que le permita beneficiarse de este contexto relativamente favorable; sin embargo, el aprovechamiento de estas fue sólo parcial ya que no se tomaron medidas fuertes para fomentar la diversificación de la estructura productiva. De esta manera, se sigue dependiendo fundamentalmente de las materias primas con lo cual el “desarrollo” sigue a merced del contexto internacional en lugar de depender de nuestro mercado interno y su capacidad de producción.
CEPAL plantea un Cambio Estructural (CE) con igualdad. Ello implica transformar la composición del producto y del comercio internacional, del empleo y del patrón de especialización, explica Bárcena. Hay dos dimensiones relacionadas entre sí dentro de esta propuesta: por un lado el aumento del peso en la producción y, por otro, la conducción a una inserción en mercados mundiales lo cual permita fortalecer la demanda agregada, expandir la producción y, por tanto, generar empleo. Esto logrará efectos favorables sobre la distribución del ingreso, tema urgente y aún sin resolver en el Perú. La intención es que este CE constituya un núcleo del proceso de desarrollo y combine las tasas elevadas de aumento de la productividad y logre la caída del desempleo abierto y del empleo informal de subsistencia.
Como señalamos en nuestro suplemento número 33, en un país con empleo sin derechos no se puede consolidar un crecimiento real ni desarrollo justo. Las brechas de desigualdad se acrecientan y nos encontramos frente a un grupo significativo de trabajadores que realizan su labor en condiciones de precariedad. El discurso del “emprendedurismo” surge como paliativo perverso de este sistema ya que deja de notar que el “emprendedor” no es otra cosa que el sobreviviente de las condiciones injustas generadas por el sistema.
Finalmente, Bárcena indica que hay cuatro hechos que justifican la necesidad de que la política macroeconómica priorice el cambio estructural. Primero, debido al probable escenario futuro en que los altos precios de los productos básicos que exportamos sean reducidos. Segundo, pues el crecimiento del PBI en los últimos años ha sido menor y genera aporte negativo de las exportaciones netas por lo cual no contribuyen a disminuir la vulnerabilidad externa. Vale decir, sigue fomentando nuestra dependencia y por tanto, no podemos hablar de sostenibilidad a largo plazo. Tercero, porque la inversión es un canal clave para el progreso tecnológico y el aumento de la productividad. Y, finalmente, porque en los últimos años la inversión en los sectores no transables ha aumentado más y es necesario revertir dicha situación para que el proceso sea más equilibrado.
Se anuncia la presentación del documento “Pactos para la igualdad” durante estas sesiones de CEPAL en Lima. Se espera que se tomen en cuenta estos acuerdos a fin de desarrollar la agenda urgente por la igualdad que tenemos pendiente en el Perú. Que este evento no pase desapercibido en los medios ni en la agenda de gobierno es fundamental.
Foto: OtraMirada