32 millones sobrevivieron al COVID. 32 millones de un total de 33 millones de infectados. Son cifras de la OMS.

De acuerdo con una población mundial estimada en 7000 millones; después de 10 meses de comenzada la epidemia, según la OMS, los infectados en todo el mundo fue de 33 millones, apenas el 0,471% de la población mundial.

Al final, resultó no ser tan contagioso como para justificar tantas precauciones restrictivas.

De esos 33 millones contagiados, 32 millones sobrevivieron a la enfermedad; de modo que no se trata de una enfermedad mortal. Las cifras dicen que los infectados son raros y que los infectados tienen un 97% de posibilidades de sobrevivir. Como con cualquier gripe estacional. Estas son cifras oficiales de la OMS y lo demás es simple aritmética, que puede calcular cualquier estudiante de primaria.

Sin duda que son buenas noticias.

¿Es que ahora nos van a dejar vivir en paz?

Estas cifras confirman ahora la tasa de mortalidad dadas por China en enero de este año. Las cifras de morbilidad y de mortalidad que dio China se confirman después de 9 meses en la Pandemia. Fue en base a las cifras dadas por China que Suecia optó por no sumarse a la histeria de confinamientos recomendada por las autoridades de Bruselas y replicada por los políticos del establishment, propensos siempre a someterse a los dictados de lo que los mentideros del cotilleo en la izquierda y la extrema derecha coinciden en atribuir al grupo Bilderberg u órdenes de la Alta Finanza.

Las autoridades sanitarias de la Unión Europea y algunos establecimientos de alta reputación científica en Inglaterra, vaticinaron que la decisión en Suecia de dejar que los suecos siguieran con su vida normal era un grave error. Según ellos, causaría centenares de miles de víctimas mortales en Suecia durante los primeros 3 meses. Sus pronósticos alarmistas se equivocaron rotundamente.

De los 15 millones de suecos, apenas hubo 5842 (al17/09) contagiados (3% del total de los habitantes). De los infectados un 97% sobrevivió.

La campaña mundial para aterrorizar a los ciudadanos con el Coronavirus, fue algo deliberado y orquestado desde noviembre 2019. Esa campaña está teniendo un nuevo resultado adverso inesperado.

Ha desencadenado una epidemia de pesadillas relacionadas con el Coronavirus entre niños y la gente influenciable o psíquicamente débil, según reportaron a principios de esta semana pasada algunas agencias de noticias europeas

Es que las noticias se dan de manera calculada para inspirar miedo.

Por ejemplo, los titulares de prensa sobre esa misma noticia que comentamos antes. La diferencia es que la reportamos en tono neutro y positivo.

Los diarios de establishment podían haber dicho que en el mundo 32 millones sobreviven al Coronavirus.

No fue así Los gruesos titulares decían UN MILLON DE MUERTOS POR CORONAVIRUS EN EL MUNDO. Solo más adelante se decía que era un millón sobre un total de 33 millones de infectados mundialmente.

Igual hubieran podido decir que, de 33 millones de infectados, 32 millones habían sobrevivido.

No se dice, porque señalar que hay tantos sobrevivientes disminuye el miedo.

Igual hubieran podido decir que después de 10 meses de desatada la epidemia, a apenas se habían contagiado a 33 millones, que es el 0,4% de los 7000 millones de habitantes de todo el mundo.

Las noticias sesgadas y los aspavientos exagerados de los gobiernos buscan deliberadamente asustar con espantapájaros y peligros exagerados. Con ello, fabrican un pretexto sanitario para confiscar las libertades cívicas individuales. Nunca ese tipo de conjura va a ser para beneficio de los ciudadanos.

Un indicio de lo que se intenta hacer es la insistencia en repetir la siniestra frase de que después de Coronavirus se impondrá una Nueva Normalidad sobre la cual ya hay proyectos de legislación.

Nueva Normalidad impuesta por ley es un nombre orwelliano que hace pensar que el secuestro de las libertades garantizadas por las constituciones europeas va a ser permanente. Eso crea un precedente para América Latina. El precedente es que una mayoría parlamentaria circunstancial puede derogar derechos garantizados por la Constitución. Eso es precisamente lo que está sucediendo en España, Inglaterra y otros países que se dicen países basados en estados de derecho. Un principio básico del derecho es que no se aceptan leyes ni decretos contrarios a la Constitución del país.

Algo que el gran rebaño de borregos asustados va a apoyar luciendo sus bozales, porque acostumbrar al secuestro de libertades y derechos es el objetivo probable de la campaña de exageraciones manipuladas.

Temo que otro objetivo sea hacer la vacunación contra el COVID obligatoria; para obligarnos a aceptar en nuestro cuerpo un elemento extraño, cuyos resultados sobre la médula espinal (mielitis), según los experimentos realizados por la farmacéutica Astra Zeneca en Inglaterra, son bastante peores que los del Coronavirus. Otra noticia tendenciosa es que, según la prensa occidental, Rusia le robó el secreto de la vacuna a Astra Zeneca.

Rusia está en campaña nacional de vacunación nacional gratuita, sin resultados adversos. Astra Zeneca aún no la tiene lista y sigue usando cobayas humanas (estudiantes?) para experimentos.

Otra buena noticia es que la vacuna rusa, ya probada y con éxito, comenzará a exportarse a Venezuela desde enero 2021.

Almeria 02/10/2020