Juan Orlando Hernández de la mano del FMI

Para el FMI no importa que un gobierno sea ilegítimo, lo que cuenta es que las medidas neoliberales draconianas recomendadas no se cuestionen.

26/07/2019
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Foto: Telesur
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Alguien dijo una vez que el apoyo del FMI a un gobierno ilegitimo es mayor que a uno democrático, siempre y cuando las medidas neoliberales draconianas recomendadas no se cuestionen.

 

Honduras avanza, por lo que hay que apoyarla para que consiga posicionarse como uno de los países de más rápido crecimiento económico y reducción de la pobreza y la desigualdad. Esta parece ser la conclusión a la que llegaron los personeros del Fondo Monetario Internacional (FMI), después de constatar los logros alcanzados por el país en estabilidad macroeconómica. Una piedra en el zapato es el déficit financiero de la ENEE, que supera los 63,000 millones de lempiras, pero que no de preocupar ya que en el próximo convenio se corregirá. Otra piedra es el excesivo gasto corriente en salud y educación, pero que será corregido con las nuevas reformas sectoriales apoyadas también por BID y Banco Mundial que están siendo avaladas por actores de cada sector con ayuda de expertos internacionales.

 

A la Dra. Suyapa Figueroa y su Plataforma en Defensa de la Salud y Educación del pueblo hondureño, hay que dejarla que se entretenga, en tanto, el gobierno no está interesado en seguir con una política pública universalista de salud y educación gratuita, ni el FMI también y demás OFIs.

 

El nuevo convenio suscrito recientemente entre el gobierno y el FMI, es un Acuerdo Stand Bay y servicio de crédito ampliado por 24 meses, donde la institución pone a disposición 311 millones de dólares, más los recursos de otras fuentes multilaterales e incluso bilaterales de crédito, que esperaban con ansias la firma de dicho acuerdo. Se ha dicho por autoridades de gobierno que este acuerdo no contempla acciones ni medidas tendentes a privatizar los servicios de salud y educación, tal como fue la intención original a pretender autorizar al Ejecutivo para que pueda realizar despidos de empleados sin consulta a los gremios, violando las leyes y estatutos vigentes.

 

Aunque no se conocen todavía los alcances en detalle del convenio suscrito, el énfasis de las medidas estará orientado a subsanar las finanzas de la ENEE, sobre la base de la vigencia plena de la Ley General de Energía Eléctrica, el fortalecimiento de la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE), la constitución del Operador del Sistema, un nuevo esquema tarifario y la reducción efectiva de las perdidas; ello, aun cuando, se otorgue un voto de confianza a la Empresa Energía Honduras (EEH), encargada de cumplir con dicha meta, pero que su gestión ha deja mucho que desear. Para diputados del Partido Nacional, caso de Oscar Nájera, esta Empresa debe desaparecer.

 

Con este Convenio, el FMI da de nuevo un fuerte espaldarazo al gobierno del presidente Hernández, cuando se creía por dirigentes de los partidos de oposición todo lo contrario, por los problemas de corrupción y narcocratifico, y el mal manejo de la crisis de dicha empresa, en una coyuntura de crisis económica generalizada y crisis política en ascenso.

 

Se habla incluso que el FMI, contrario al pasado inmediato, no recomiende nuevos impuestos, ya que la carga fiscal es de 20%, muy superior a la de Guatemala (10%) por ejemplo. Está conforme con la política gradual de liberalización del mercado cambiario, donde el 40% de las divisas es retenido directamente por los exportadores, por lo que la subasta de divisas, uno de los principales instrumentos para estabilizar el mercado de cambios después del gobierno neoliberal de Callejas Romero, se debilita. El FMI espera que Honduras liberalice de una vez este mercado y consolide el régimen de metas de inflación. Se espera que el FMI exija un techo a las exoneraciones fiscales otorgadas por el Estado, principalmente a los maquiladores y empresas de zona franca y comidas chátaras, pero todavía JOH no está muy de acuerdo, ya que sus principales aliados son los dueños de estas empresas.

 

Este apoyo del FMI al gobierno de JOH es una clara manifestación de satisfacción por los esfuerzos realizados en reducción de déficit fiscal, control de la inflación y crecimiento del PIB (3.7% en 2018 y 3.3% para 2019). No dice nada sobre el aumento del desempleo y subempleo (trabajos de mala calidad), la migración y de la pobreza. Al parecer el sector real de la economía y las variables sociales no le interesan al FMI, lo que se considera una debilidad en su análisis de país. Incluso se muestra satisfecho con el nivel de endeudamiento total, no superior al 50%/ PIB según sus cifras, pero no dice nada sobre la corrupción e impunidad que afectan también el ritmo de la actividad económica y el cumplimiento de metas de desarrollo, en especial aquellas ligadas a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

 

JOH ha manifestado que no se quedará un día más en el poder después de cumplir su segundo periodo al frente de gobierno (2018-2021), ya que la reelección presidencial, según él y no la Constitución de la República, debe ser por una sola vez. Sin embargo, con estos espaldarazos a su gestión, todo parece indicar que, incluso, puede aspirar a un tercer mandato ya que todavía las reglas del juego siguen vigentes: las mismas instituciones, personas y prácticas corruptas. Controla la Corte Suprema de Justicia, Fiscalía, las FFAA, Tribunal Supremo Electoral y Registro Nacional, entre otras. Tiene además el apoyo de EEUU, OEA y la mayor parte de los organismos de cooperación bilateral y multilateral con sede en Honduras, lo que lo convierte en un líder e interlocutor confiable frente a ellos, en temas de cooperación, derechos humanos, migración y seguridad nacional y regional.

 

Para el FMI, la administración de JOH muestra una gestión eficiente, si se mide por el cumplimiento de los compromisos y metas establecidas en los Convenios de Cooperación, graduado con notas de excelencia. No interesa si se le acusa de corrupto, narcotraficante, violador de la Constitución y mentiroso, lo que interesa es que bajó el déficit fiscal y la inflación, estabilizando la economia, promoviendo reglas claras (entrega de los bienes públicos y recursos naturales) para la inversión extranjera, la cual sigue siendo baja, pero ya aumentará.

 

¡JOH presidente 2022-2025 de la mano del FMI! Quién lo para, el Chapulín Colorado ya murió y la oposición política adora el chingaste.

 

Tegucigalpa, DC, 26 de Julio de 2019

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/201242?language=es
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