ATRÁS, ASTRA, ARSAT

12/02/2019
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La empresa pública ARSAT contrató el satélite de SES, con 20 años de antigüedad, por 7 millones de euros para proteger la posición orbital 81 asignada a la Argentina con prioridad en banda Ka que vence en septiembre de 2019. En esa banda debería operar hoy el ARSAT 3.

 

Otras de las consecuencias de las decisiones políticas del gobierno de Cambiemos, por haber discontinuado el Plan de desarrollo Satelital Argentino desconociendo la Ley 27.208, es que ARSAT contratará a empresas extranjeras, ancho de banda Ka para los servicios que los clientes demanden ya que el ARSAT 1 y 2 no trabajan en la banda citada.

 

Así la empresa orgullo de los argentinos, transita el camino de haber sido primero colonizada y luego empobrecida por la gestión del radical yerno de Aguad, Rodrigo De Loredo (2016/2017) y del SOCMA Raúl Martínez (2018/2019).

 

El operador satelital estatal argentino ARSAT celebró un acuerdo con SES para la ubicación del ASTRA-1H en la Posición Orbital Geoestacionaria (POG) de 81° Oeste para proteger la prioridad que la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) otorgó a la Argentina en banda Ka y que tiene vencimiento en septiembre de 2019.

 

El acuerdo, publicado por el diario Página12i, tiene vigencia hasta diciembre de 2019. Por la ejecución de la orden de servicio y el arribo del ASTRA-1H a su nueva posición orbital SES le cobró a ARSAT 2 millones de euros. Por la operación del satélite, que funcionará en órbita inclinada, SES cobrará a ARSAT 454 mil euros mensuales por 11 meses entre febrero y diciembre de 2019 inclusive.

 

ASTRA-1H es un satélite lanzado al Espacio en el año 1999 con una vida útil de diseño de 15 años. Fabricado por Hughes Space and Communications Company.

 

Déjà vu: perdida de la Soberanía Satelital Argentina

 

Nuestro país, obtuvo derechos en la posición orbital (PO) de 81° Oeste en 1995 como resultado de negociaciones para permitir al operador privado de televisión satelital Directv prestar servicios en el país. Nahuelsat (operador argentino privatizado) fue adjudicada para explotar esta posición orbital con cobertura continental en las Bandas Ku y C e incluso con la capacidad de ofrecer servicios en los Estados Unidos. Nahuelsat no cumplió con su obligación y puso en riesgo la asignación de UIT.

 

La creación de ARSAT en el año 2006 mediante la ley 26.092, para suplir desde el Estado las obligaciones pendientes del sector privado, impulsó el diseño y fabricación de ARSAT-1 y ARSAT-2 en la empresa INVAP. El estatuto societario de ARSAT establece que los satélites de la empresa deben ser fabricados en el país.

 

Desde la creación de ARSAT hasta la puesta en órbita de ARSAT-2 en septiembre de 2015 pasaron nueve años durante los cuales la Argentina protegió con éxito la posición de 81° colocando distintos satélites con capacidad de transmitir en las frecuencias asignadas.

 

ARSAT acordó con Intelsat en 2007 la migración del satélite Galaxy 9 desde la posición de 74° Oeste a la de 81° Oeste por el término de dos años. El 4 de diciembre de 2008 se firmó un contrato complementario con Intelsat para el traslado del satélite SBS-6 a la posición orbital 81° Oeste. Finalmente, el 30 de marzo de 2010 se realizó un convenio de cooperación estratégica con Intelsat para ubicar temporalmente el satélite IS-3R en la órbita 81° Oeste. Luego, se firmaron acuerdos con la empresa SES para contratar el AMC-5 (2011) y el AMC-2 (2013) y con Intelsat por el IS-603 para cubrir las asignaciones continentales vigentes hasta el lanzamiento de ARSAT-2. ii

 

El costo de proteger las posiciones orbitales de 81° Oeste, como consecuencia del fracaso de Nahuelsat, representó alrededor de USD 5 millones anuales para la administración argentina.

 

Ayer con presidencia de CM y la privatización de Nahuelsat hoy con la presidencia de MM y el empobrecimiento de ARSAT, la historia se vuelve a repetir y el Estado Argentino tiene que afrontar el costo de decisiones políticas que entregan soberanía argentina.

 

Antecedentes privatizadores

 

La carta de intención firmada por el presidente de ARSAT Rodrigo De Loredo con los representantes de la empresa estadounidense Hughes Network Systems (2017) para crear juntos una nueva empresa, cuyo capital accionario se repartirá en Hughes con al menos el 51% y ARSAT tendrá como mucho el 49%, establece que el accionista mayoritario tendrá el control ejecutivo de la nueva empresa llamada “Newco”. La “new Company”, lanzaría en conjunto “uno o varios” satélites geoestacionarios. El primero de ellos será el ARSAT-3, aunque aclaran que podrían cambiarle el nombre.

 

Con este acuerdo, Hughes hace un negocio descarado: tiene acceso gratis a dos posiciones orbitales, la 71, 8º O y la 81º O. Los usos y costumbres de la industria y lo que fija la ley internacional son que las posiciones son propiedad transitoria de los estados nación que las hayan pedido a la Unión Internacional de Telecomunicaciones y las usufructúen. Por ende, si Argentina tolerará un satélite de Hughes en alguna posición, debería ser alquilándola.

 

Esta concesión de la Argentina es especialmente grave en el caso de la 81º O. La 81º O permite iluminar las Tres Américas, desde la tundra canadiense a la Península Antártica. La firma del acuerdo ARSAT- Hughes es como mínimo una enajenación dolosa y anticonstitucional del patrimonio satelital nacional

 

Hughes se queda con el uso discrecional y por pago de un satélite cuya banda, la Ka, estaba planificada por la dirección fundacional de ARSAT para dar internet satelital en todo el país; particularmente a las 13.000 escuelas rurales aisladas del país a las que es imposible conectar por fibra óptica por razones de topografía y distancia. Esto es uno de los muchos agravantes de la cesión del ARSAT 3 a Hughes sin que la firma norteamericana realice la inversión que significa el desarrollo del ARSAT 3.

 

Luego de conocerse el acuerdo con Hughes se publicó un nuevo informe periodístico iii donde, queda en evidencia que al no avanzar la fabricación y puesta en órbita de ARSAT-3, la Argentina podía perder los derechos de uso de la banda de frecuencias Ka desde la posición de 81° Oeste.

 

En una nota enviada por el Subsecretario Hugo Miguel al Secretario de las Tecnologías de la Información y la Comunicación del Ministerio de Comunicaciones (actualmente dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros) Héctor Huici, le señalaba que de no ubicarse un satélite que opere en banda Ka en la posición de 81° Oeste antes de septiembre de 2019 se perdería la prioridad y, por lo tanto, la posición orbital.

 

“Que no se preocupen los muchachos… ” fue la frase dicha por el presidente MM descartando rumores de privatización. Se trata de una "alianza estratégica con la empresa estadounidense Hughes para subsanar problemas de comercialización de los desarrollos tecnológicos". 

 

Corolario

 

En suma, es evidente que la consecuencia de las decisiones del gobierno de Cambiemos en políticas de ciencia y técnica como la satelital y de telecomunicaciones es el alejamiento del Estado como motor para el desarrollo. Como también es evidente, que la gestión de MM y las políticas de ARSAT favorecen estrategias como las de Hughes para sacar a ARSAT del mercado satelital, más o menos del mismo modo que durante el menemismo (CM) la Lockheed Martin se quedó con la Fábrica Militar de Aviones de Córdoba.

 

En ambos casos, ayer el aeronáutico, hoy el satelital, el objetivo no era eliminar a un competidor de la industria aeroespacial estadounidense, sino cortar de raíz la posibilidad de que éste pudiera surgir.

 

Ayer Lockheed y hoy Hughes, vienen a garantizar que EE. UU. continúe teniendo el monopolio regional de los cielos y del espacio.

 

En el mundo actual, la relevancia que tienen los avances tecnológicos y el rol clave del desarrollo científico tecnológico pone en valor las políticas desarrolladas en el período 2006/2015 que posibilitaron el desarrollo satelital argentino en bienestar de todos los ciudadanos y la recuperación de la soberanía tecnológica.

 

 

- Alfredo Moreno, Computador Científico, Profesor TIC en Univ. Nacional de Moreno. Delegado FOETRA ARSAT

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/198117
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