Revolución Ciudadana: Origen y crisis

02/04/2018
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Y en el origen, los gases lacrimógenos con el viento del sur en Quito, capital de Ecuador, amenazaban con cubrirnos la valentía en medio de las consignas de más de 100.000 Forajidos; así llamados por el Coronel Lucio Gutiérrez en el ejercicio de la presidencia.

 

Marchábamos obreros, profesionales, empresarios indignados, universitarios, indígenas, académicos y entre ellos Rafael Correa , quien vivía sus primeras experiencias del poder del pueblo, en ese mar libertario de ciudadanos, que destronó al mandatario símbolo reencauchado de la Partidocracia, un histórico 20 de abril de 2005. En medio de esa red organizada ciudadana en las calles de Quito, como en gran parte de las ciudades del Ecuador, estábamos todos: Miembros de organizaciones sociales, Organismos no gubernamentales, foros académicos, comités barriales y futuros dirigentes de Movimiento Alianza PAÍS. Anécdotas emblemáticas se presentaban de calle en calle, desde un betunero gritando que bajen de la tarima los discurseadores o una señora con su bebe en brazos, a cinco cuadras del Palacio de Gobierno, diciéndoles a dirigentes políticos, por cual calle avanzar para protegerse de los gases lacrimógenos, al son de la consigna “que se vayan todos”. Así nacía el germen de la “Revolución Ciudadana-RC” con una nueva forma de organización democrática cuyas características eran las que Raimundo Franco y Heinz Dieterich, denominaron Sistemas Dinámicos Complejos Humanos-SDCH. Franco (Director del Instituto de Cibernética, Matemáticas, y Física de la Habana) lo desarrolló desde lo científico en el libro “EL NUEVO PROYECTO HISTÓRICO” edición abril 2003 de la Editorial -La Tierra, Ecuador.

 

¿Cuáles son los factores políticos-organizativos - después de una década de conducción política del Estado ecuatoriano con la presidencia de Rafael Correa, líder del proceso de la Revolución Ciudadana - por lo cuales esta tendencia histórica en similitud de condiciones de otras en América Latina, entró internamente en contradicciones antagónicas terminales en el año 2017? Luego del triunfo electoral de la Revolución Ciudadana el 2 de abril, con la candidatura presidencial del ex vicepresidente Lenín Moreno, se manifestaron gradualmente dos polos confrontados en Alianza PAIS, actualmente con la dirección de Lenín Moreno; y, el reciente movimiento denominado Revolución Alfarista con la conducción de Rafael Correa.

 

Evidentemente, existen múltiples factores que inciden en esta contradicción, en especial la contraofensiva continental concertada de las derechas cipayas con las transnacionales y sus gobiernos intervencionistas, judicializando la política contra los gobiernos y líderes progresistas y democráticos de América Latina; pero hay factores como los políticos-organizativos de la Revolución Ciudadana interdependientes con los anteriores - sin eximir las responsabilidades propias por los roles que mantuve en el proceso de la Revolución Ciudadana – que convoca a un ejercicio de análisis histórico del periodo de 2005-2008 del origen de la RC e inicial ejercicio del poder político del Estado, que presentan factores políticos-organizativos claves de la RC de incidencia en el desenlace de la crisis y renacimiento de la RC en el 2018.

 

El referente más temprano del origen de la RC, se sitúa en el proceso de expulsión y destitución/caída del presidente Coronel Lucio Gutiérrez, en donde las redes de los movimientos sociales de los Forajidos se generaron con ciudadanos organizados en estructuras abiertas, democráticas, anti jerárquicas y con formas innovadoras de conectividad urbana y a nivel rural con pautas ancestrales de decisiones colectivas y cadenas de comunicación orales. En lo urbano con la tecnología informática, los Forajidos constituyeron cadenas virtuales vía internet, celular o radio, convirtiendo la realidad de la movilización de los Forajidos en un mundo mágico de actores directos de los sucesos históricos “en vivo, en directo y a colores”. En ese contexto, la verticalidad y jerarquía de los partidos políticos entró en crisis, como también la información y las imágenes que trasmitían algunos canales de televisión y periódicos, que intentaron vender a la conciencia ciudadana una versión falsa de la realidad insurreccional pacífica del pueblo. Como dirían Franco-Dietrich, fueron sistemas abiertos y de autosimilaridad en donde las “relaciones de interacción con el mundo circundante (entorno) son vitales para su sobrevivencia” (El Nuevo Proyecto Histórico. Pág. 106. Editorial La Tierra. 2003).

 

La creatividad y la capacidad democrática ciudadana se tomaba el poder Entre las manifestaciones registradas de día y sobre todo de noche en casi todos los barrios y valles aledaños, se organizaron los "cacerolazos", el "reventón" (reventar globos), el "tablazo" (golpear tablitas), el "rollazo" (salir con papel higiénico para limpiar tanta mierda), el "golpe de estadio" (protestas masivas en contra del gobierno en los estadios de fútbol), el "basurazo", el "escobazo", etc.” así lo narraba Alberto Acosta ( ex ministro de Energía y ex presidente de la Asamblea Constituyente) dos días antes de la caída de Lucio Gutiérrez, en el mundo soberano de la proclama que “Se vayan todos” impulsada por la organización democrática de los ciudadanos.

 

Lo interesante de esta práctica política ciudadana fueron saberes acumulados desde la década del 90 e inicios del Siglo XXI, vinculada a instancias académicas, sociales, de organismos no gubernamentales, organismos de solidaridad con los pueblos, consultorías, medios de comunicación alternativos, literatura; todo ello en franca y sustentada oposición a constituir estructuras organizativas tradicionales de izquierda por sus características jerárquicas, impositivas, sectarias, dogmáticas, tradicionales y consideradas anacrónicas o desubicadas de las nuevas corrientes del pensamiento político. La rebelión de los Forajidos no fue un hecho fortuito, fue la continuación de esa rebelión que derrocó del poder presidencial a Abdala Bucaram (1996) y Jamil Mahuad. Su organicidad replicaba las formas de organización alternativa que se construyeron sin libreto de revolución luego del ciclo represivo del gobierno socialcristiano de León Febres Cordero en la década de los 80. De allí renacieron los integrantes del Colectivo Político, con un líder que jamás fue de un partido político y por tanto no tuvo práctica militante partidaria: Rafael Correa Delgado, que representó el imaginario singular del movimiento Forajido. La dinámica compleja del fenómeno Forajido se caracterizó por una gran creatividad política, libre albedrio, democracia interna y aleatoriedad de factores que caracterizan la Zona de Creatividad o Democracia que se concretó con la organización del CPO y la formulación de los lineamientos programáticos de la RC.

 

Como Dios no juega a los dados, vale resaltar que Rafael Correa se inauguró en el ejercicio del poder real como ministro de Economía del gobierno del Dr. Alfredo Palacio, que siendo vicepresidente en el Gobierno de Lucio Gutiérrez asumió a su caída la presidencia de la república del Ecuador el 20 de abril del 2005, y sinuosamente fue evidenciándose cercano a los intereses de la derecha socialcristiana y de sectores militares filogringos. Un “déjá vu” de futuro es la carta de renuncia de Rafael Correa: “Temo que el verdadero problema son las fuertes presiones para impedir cualquier relación con un Alianza PAÍS hermano como Venezuela”. Esas relaciones se vinculaban a la colocación de bonos en el mercado internacional, con la compra del 50% por parte del Gobierno de Venezuela, presidido por Hugo Chávez; y, además las negociaciones para refinación de petróleo y comercialización directa de gas. Fue un 5 de agosto del 2005 del cual aún tengo el recuerdo.

 

El nacimiento del proyecto político-electoral de izquierda, de acuerdo al testimonio de Rafael Correa, fue en reuniones de trece personas que se reunían en sus propias casas u oficinas en Quito o Guayaquil. Era un Colectivo Político, que a veces irónicamente se auto titulaban el “Club de Tobi” haciendo referencia a una famosa tira cómica que salía en los periódicos del Ecuador en el siglo pasado. Cuando Rafael Correa renuncia al ministerio enclave burocrático del FMI, se genera una dinámica propia de constitución del Colectivo Político dando carta de naturalización a una nueva tendencia y liderazgo político en Ecuador con la impronta de las corrientes continentales del denominado Socialismo Siglo XXI o del Buen Vivir, para diferenciarse de las corrientes socialistas del Siglo XX: socialdemócratas, marxistas, revolucionarias, o insurreccionales.

 

La estructura germinal del Colectivo Político Originario –CPO, estaba constituido por Alberto Acosta, ex Presidente de la Asamblea Constituyente; Ricardo Patiño Aroca, ex Canciller y actual dirigente del movimiento Revolución Alfarista liderado por Rafael Correa; Xavier Ponce, ex Ministro de Agricultura; Augusto Barrera Guarderas, ex Alcalde de Quito y actual Secretario de Educación Superior, Ciencia y Tecnología – Senescyt – del gobierno de Lenín Moreno; y Virgilio Hernández Enríquez, ex Asambleísta Nacional y actual directivo del nuevo movimiento Revolución Alfarista. A ellos los había conocido en diferentes circunstancias relacionados con el mundo de la academia, la política o los organismos no gubernamentales, y los volví a ver en agosto del 2005 integrados en ese CPO. El centro de operaciones fue la oficina que Rafael Correa implementó en la ciudad de Quito en Torres Whimper Of. 501 ubicada en Almagro N32-27 y Whimper.

 

Todos los integrantes del Colectivo Político Originario - CPO, tenían en común tener posiciones de izquierdas no ortodoxas y no ser parte de la organicidad de izquierda en crisis luego de la conversión neoliberal de la URSS en el siglo pasado. También tenían en común que en la década heroica de los 80 y del 90 del siglo pasado, algunos fueron dirigentes nacionales del Partido Socialista, Partido Comunista Marxista-Lenínista, Movimiento Revolucionario de los Trabajadores, Movimiento de Izquierda Revolucionaria y Pachacutik. Cada uno de los integrantes del CPO, eran ampliamente conocidos en la contracultura de la sociedad civil confrontada a la sociedad política de la partidocracia en Ecuador y a cerca de 30 años de democracia controlada. Ellos daban la visión de futuro de los derechos por conquistar, el aval y la credibilidad política para el nuevo liderazgo que nacía y fundamentalmente la confianza en la construcción de un poder alternativo y ciudadano. Las metas estaban establecidas: Asamblea Constituyente, Gobierno de la Revolución Ciudadana y construcción del Socialismo del Siglo XXI, corriente mundial de principios de siglo, de renovación humanista de Paz, Solidaridad y Equidad.

 

 

A finales de agosto del 2005 me incorporó al CPO y asumo el rol de Coordinador de elaboración del Programa Político de la Revolución Ciudadana. Se integra también al Colectivo Betty Amores (ex ministra de Coordinación Política) y Fander Falconí Benítez (ex Canciller y actual ministro de Educación). Durante el 2005, Augusto Barrera como parte del CPO trabajó conmigo, realizando aportes sustantivos a la elaboración colectiva y sistematización histórica para la formulación de los lineamientos programáticos de la Revolución Ciudadana: concreción de nuevos derechos ciudadanos, económicos, ambientales, sociales y políticos y políticas alternativas de participación ciudadana, solidaridad y soberanía, contestatarias a la globalización, neoliberalismo, militarismo y las verdades incomodas de destrucción ambiental del planeta. De igual manera aportó Leonardo Vicuña. El aporte principal fueron los pronunciamientos de derechos sociales de la última década, formulaciones programáticas históricas, reuniones de trabajo en el territorio y los discursos de precampaña de Rafael Correa. En el 2006 y previo al inicio de la campaña electoral, Fander Falconí y Alberto Acosta en base de un proyecto de estudio, se responsabilizaron de la elaboración técnica del Plan de Gobierno 2007-2011 del Movimiento PAIS para la candidatura presidencial de Rafael Correa.

 

Para ese momento en Ecuador, los movimientos ciudadanos y políticos debatían las opciones de participación electoral con un horizonte limitado por las candidaturas de León Roldós, General Paco Moncayo, Luís Macas, Auki Tituaña e incluso de Rodrigo Borja ex presidente socialdemócrata del Ecuador. La alternativa electoral de la Revolución Ciudadana era Rafael Correa. El solía decir en sus recorridos iniciales de campaña: “es como si estuvieran alineados los planetas en toda América Latina” y el verdadero alineamiento se dio en la construcción de redes nacionales a partir de las redes del movimiento Forajido que dieron sustento al CPO; y, entre ellos, se destacaron el Foro Ecuador Alternativo, el Movimiento Jubileo 2000 y el Foro Urbano.

 

El Foro Ecuador Alternativo integraba a parte de los intelectuales orgánicos y de la academia de izquierda provenientes de FLACSO, ILDIS, Universidad San Francisco, Universidad Católica, etc. de Quito y Cuenca; liderado por Alberto Acosta. Pertenecía al Foro el propio Rafael Correa, Jorge Jurado (ex ministro de la Secretaria del Agua), Carlos Marx Carrasco Vicuña (ex Director del SRI – Servicio de Rentas Internas), Fander Falconí y Jeannette Sánchez (ex Ministra de Inclusión Social). Fue el Foro Ecuador Alternativo que el 7 de enero del 2005 dio el campanazo político desde la contracultura ciudadana forjada en las últimas décadas para oponerse a Lucio Gutiérrez que ejercía la Presidencia de la República, proclamando: “...ha llegado la hora de la acción. No hay espacio ni tiempo para el diletantismo, ni para la simple crítica. Pensamientos y acciones deben convertirse en un ejercicio ciudadano urgente”. Está proclama, al igual que muchas otras que se expresaban en boletines de prensa, pintas en las paredes, conversaciones en las plazas, volantes, discursos en los cabildos barriales; recorrían el espíritu universal libertario de la Declaración de los Derechos del Hombre de 1789, el Manifiesto Comunista de 1848, el Mensaje a la Tricontinental del Che Guevara en 1966 y el Mayo Francés de 1968.

 

En cambio, el Movimiento Jubileo 2000, ha sido una ONG de activistas por el NO pago de la Deuda Externa dirigida por Ricardo Patiño Aroca (ex Ministro de Relaciones Exteriores y actual dirigente del nuevo movimiento Revolución Alfarista). En Jubileo 2000 confluyeron exlíderes de izquierda de Guayaquil, Cuenca, Quito y otras ciudades del Ecuador. Estos exlíderes de izquierda habían pertenecido a la Izquierda Cristiana, Socialistas Populares, cristianos de la Teología de la Liberación, Movimiento de Izquierda Revolucionaria, etc. La mayoría de los integrantes de esta ONG, plegaron por la precandidatura de Rafael Correa Delgado. Otros sectores minoritarios se orientaron a apoyar la candidatura de León Roldós quien estaba promovido desde Guayaquil por su sobrina Martha Roldós Bucaram; Rafael Guerrero Burgos, ex subsecretario de Agricultura; Raúl Patiño Aroca, ex Secretario General de Inteligencia –SENAIN- y actual dirigente de Alianza PAIS liderado por Lenín Moreno y otros que en la segunda vuelta electoral por la Presidencia de la República en el 2006, apoyaron la candidatura de Correa.

 

Es necesario destacar también al Foro Urbano, estructurado como Organismo No Gubernamental y actuando como sujeto político. Sus dirigentes fueron Augusto Barrera y Virgilio Hernández que integraron el CPO y Miguel Carvajal (ex ministro de Defensa y actual Secretario de la Gestión Política del gobierno de Lenín Moreno). En el 2006, Barrera y Hernández se retiraron del CPO por diferencias en las visiones de construcción política-orgánica de lo que sería movimiento Alianza PAÍS. Los integrantes de este Foro con implantación política en la región de la sierra ecuatoriana y relacionada con redes de consultores de Quito, habían estado articulados a Pachakutic, brazo político del movimiento indígena del Ecuador. En esa condición participaron en los primeros meses del Gobierno de Lucio Gutiérrez hasta el 6 de agosto del 2003, cuando fue evidente el alineamiento de este gobernante con el FMI, el neoliberalismo y el Gobierno de Estados Unidos; tan evidente fue este alineamiento, que públicamente declaró el 12 de febrero de 2003 ante George W. Bush y de testigo de honor Guillermo Lasso (Banquero y ex candidato presidencial en el 2017), ser “el mejor amigo y aliado de los Estados Unidos”.

 

Durante los primeros meses del 2006 el Foro Urbano confluye con el Grupo Ruptura de los 25 (se originó en un programa de la Fundación ESQUEL) de Paula Romo (ex Asambleísta Constituyente y actual dirigente socialdemócrata en Izquierda Democrática) y Juan Sebastián Roldán (ex Subsecretario de Gobierno y actual Secretario de la Presidencia con Lenín Moreno), apoyados posteriormente por Fernando Bustamante (ex Asambleísta Nacional). La alianza de estas agrupaciones se llamó Alternativa Democrática y en esa calidad adoptaron un apoyo crítico a la candidatura presidencial de Rafael Correa en la segunda vuelta presidencial del 2006.

 

Desde otro referente ideológico y confluyendo en los principios del proceso Forajido fueron los militantes originarios del MIR-Movimiento de Izquierda Revolucionaria: Patricio Pazmiño Freire, (ex Presidente de la Corte Constitucional); Ernesto Pazmiño Granizo, (Defensor Público General del Ecuador), Oscar Bonilla (ex Subsecretario de Gobierno); Lenín Moreno, ex vicepresidente de la república y actual Presidente del Ecuador. De igual manera se insertó en este proceso Alianza Bolivariana Alfarista-ABA fundada el 25 de junio de 2005 y dirigida por René Vargas Pazzos (ex Embajador de Ecuador en Venezuela, ex Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del Ecuador y quien fue dirigente de la Democracia Cristiana); Leonardo Vicuña, (ex Gerente del Banco del Estado BEDE y actual Presidente del Banco del Pacífico público) impulsor del Movimiento Ecuador Siglo XXI con el cual estaba integrado al ABA; Marcelo Larrea del movimiento bolivariano y un amplio sector de Alfaro Vive Carajo. Actualmente Leonardo Vicuña mantiene y lidera ABA con su propia militancia y su hija María Alejandra Vicuña es la actual vicepresidenta del Ecuador.

 

El Movimiento Iniciativa Ciudadana conformado con militantes originarios de la izquierda revolucionaria y de lo que fue el APRE liderado por el General Frank Vargas Pazzos, que habían inicialmente promovido la precandidatura presidencial de Gustavo Larrea (ex ministro Coordinador de Seguridad), se integra al proceso de Alianza PAIS a finales del 2005. Gustavo Larrea actualmente lidera el Movimiento Democracia Si, que apoya al presidente Lenín Moreno. Entre los Movimientos Políticos con sede en Quito e influencias regionales, estaba el movimiento político más representativo de la diversidad ideológica de la Revolución Ciudadana, Alianza Democrática Nacional. Fueron dirigentes de este movimiento, Fausto Cordobés y Manuela Gallegos (Ex Secretaria de Pueblos, preseleccionada para el actual Consejo de Participación Ciudadana Transitorio), que venían de una matriz ideológica nacionalista y habían tenido un rol importante en la oposición Forajida al gobierno de Lucio Gutiérrez.

 

Existieron otros movimientos políticos que constituyeron Alianza PAÍS con roles no protagónicos en la campaña presidencial del 2006 y que tenían incidencias regionales. Muchos de sus dirigentes, fueron parte de partidos populistas, socialdemócratas o democratacristianos y algunos estaban en puestos ministeriales del Gobierno del Dr. Alfredo Palacio y por tanto compartían una credibilidad y confianza técnica con el ex miembro del Gabinete Ministerial, Rafael Correa. Entre los movimientos con este tipo de matriz ideológica y cobertura territorial en Guayaquil, estaba el Movimiento de Lucha Ciudadana de Nicolás Issa Obando + (ex Embajador de Ecuador en España) y el Movimiento Participación Cívica Ciudadana de Antonio Gagliardo Valarezo (ex Ministro de Trabajo). Los líderes de estas organizaciones tenían matrices ideológicas socialdemócratas y devinieron vinculados a organizaciones como el Partido Roldosista del ex presidente del Ecuador, Abdala Bucaram. De igual manera se integran al proceso de la Revolución Ciudadana un amplio sector socialdemócrata originarios del Partido Izquierda Democrática, como Ramiro González (ex Ministro de Industrias); Gustavo Baroja Narváez, Prefecto de Pichincha; Elizabeth Cabezas (ex asesora de Presidencia de Rafael Correa, actualmente promovida por Alianza PAIS presidenta de la Asamblea Nacional); Eduardo Paredes (ex viceministro de Gobierno y actual viceministro de la Secretaria Nacional de Gestión de la Política).

 

Todas estas organizaciones y líderes políticos con matrices ideológicas y prácticas políticas diferenciadas, confluyeron en el 2006 en la conducción de la campaña a la presidencia de Ecuador de Rafael Correa Delgado. En esta dimensión también se concretó la alianza con partidos clásicos de la izquierda con registro electoral como el Partido Socialista, alianza que la mantiene actualmente con el Movimiento Alianza PAIS liderado por Lenín Moreno a través de Patricio Zambrano Presidente del Partido Socialista (ex Parlamentario Andino, actual Ministro de Defensa); Movimiento Popular Democrático y el Movimiento Pachakutik. Estos dos últimos movimientos pasarían a la oposición al gobierno de Rafael Correa a partir del 2008 y el 2009 respectivamente.

 

Estaba naciendo una nueva fase de la estructuración política de la Revolución Ciudadana. La zona de Control-Dirección del Sistema Dinámico Complejo Humano- SDCH - tomaba cuerpo en una Primera Dimensión de la representación ciudadana herencia del movimiento forajido y sus ramificaciones por ámbitos de derecho, con sus organizaciones y colectivos naturales sociales, académicos, ambientalistas, genero, comunitarios, indígenas, barriales, campesinas, etc.

 

La Segunda Dimensión de la organización de la Revolución Ciudadana fue a través del Movimiento Alianza PAIS; efectivamente fue una alianza múltiple que intentó replicar y apalancarse en la organicidad natural ciudadana en el territorio (Primera Dimensión) direccionada más a la participación electoral en el territorio y simultáneamente centrada al apoyo de las políticas de gobierno. Inicialmente el debate interno de su constitución giró en torno al tipo de organización; ¿Partido de cuadros políticos? ¿Partido de masas? ¿Partido federativo? ¿Frente amplio de organizaciones? ¿Movimiento unitario? ¿Movimiento de tendencias? Se impuso el marco regulatoria de la Ley Orgánica Electoral y de Organizaciones Políticas del Ecuador que formalmente configuró un movimiento integrado por afiliados y adherentes permanentes, órganos de dirección, etc. Por lo tanto internamente mantuvo latente su organicidad real diferenciada con múltiples liderazgos nacionales y locales, que derivaron en ocasiones a agendas paralelas confrontadas o compitiendo por las direcciones y de cara a resultados eficientes.

 

La Tercera Dimensión de la estructuración política de la Revolución Ciudadana fue posterior al triunfo y posesión presidencial de Rafael Correa del 15 de enero del 2007, es la organización para el ejercicio del Poder del Estado en todos los niveles nacionales, subnacionales y locales. Esta Dimensión organizativa en que se incorporan los mejores cuadros políticos de Alianza PAIS, sus aliados y relacionados, a cuenta de asegurar el proyecto de revolución y sus planes de gobierno, limitaría directamente la Dimensión ciudadana/social de la Revolución Ciudadana; que en comparaciones de preferencia o similaridad de categorías de análisis, ha sido una constante en Latinoamérica en la última década de gobiernos progresistas. También se incorporan en esta Tercera Dimensión expertos en funciones ministeriales consideradas técnicas; algunos de ellos provenientes del Gabinete Ministerial del saliente presidente Dr. Alfredo Palacio. Igual se incorporaron los expertos técnicos de los equipos de la campaña electoral en lo financiero, marketing político, asesores políticos-jurídicos, etc. De ellos, como Vinicio Alvarado Responsable de Propaganda de la campaña (ex Secretario General de la Administración Pública), posteriormente pasaron por coaptación a consolidar un original Buro Político Ministerial del gobierno de Rafael Correa en la cual participaban los miembros de la Dirección Nacional de Alianza PAIS; significaba por tanto una instancia transversal de la Dimensión Ciudadana y la Dimensión de Organización Política.

 

El transepto del poder político del Estado en el periodo del 2007 al 2008, se convirtió incrementalmente en nave perpendicular a la nave central organizativa de la Revolución Ciudadana y aseguraron en principio la consolidación del gobierno de Rafael Correa. El proceso final de la Asamblea Nacional Constituyente y la aprobación de la nueva Constitución de la República en el Referéndum del 28 de septiembre del 2008, fue un hito de esta correspondencia histórica. Pero en este proceso, las razones de Estado que impulsó la Revolución Ciudadana desde el poder político entraron en encuentros y desencuentros con el estado de la razón del origen de la Revolución Ciudadana.

 

El direccionamiento político de la RC desde la acción del poder ejecutivo fue responsabilidad oficial del Ministerio de Gobierno durante el 2007 en la administración de Gustavo Larrea Cabrera y Fernando Bustamante. En el 2008 los ámbitos políticos pasan al nuevo Ministerio Coordinador de la Política con la administración de Ricardo Patiño. Durante esos años participé con cada uno de ellos en Subsecretarias Técnicas y pude constatar la complejidad de las relaciones entre la sociedad política y la sociedad civil. Las fronteras eran imperceptibles entre las acciones en las dimensiones de Ciudadanía movilizada, Organización Política en el territorio y la de Poder Político del Estado. Los estilos y procedimientos de construcción y vida de la Organización de la Revolución Ciudadana y sus orígenes Forajidos , derivaron en los años siguientes, en una generalización de los estilos de funcionalidad del Estado en proceso de modernización y eficiencia; con enunciados ilustrados y técnicas de gestión estatal y gobernabilidad como cultura política del siglo XXI.

 

La primera gran prueba del estado real de las tres dimensiones organizativas de la RC, fueron las elecciones internas de primarias del Movimiento Alianza PAIS del 25 de enero del 2009, que por primera vez se aplicaba en Ecuador para la selección de candidatos a las elecciones del 26 de abril de 2009: Presidencia de la República, 23 prefectos, 221 alcaldes, 1039 concejales urbanos, 542 concejales rurales y 3970 miembros de las juntas parroquiales. Pero la realidad desbordó parcialmente la intencionalidad de la democracia participativa proclamada, cuando se registraron enfrentamientos focalizados y declaraciones cuestionando la transparencia del proceso por parte de 13 precandidatos, que fueron sancionados por el Tribunal Electoral del Movimiento Alianza PAIS presidido por Manuela Gallegos, ex Secretaria de Pueblos y preseleccionada por el presidente Lenín Moreno en el 2018 para el Consejo de Participación y Control Social Transitorio.

 

Esta crisis interna de Alianza PAIS del 2009, fue como alerta temprana histórico para la Revolución Ciudadana. Se la superó entre otras causas, gracias a la conjunción de factores como la aprobación mayoritaria popular de los derechos conquistados y los programas eficientes del poder ejecutivo, incidió la gran alianza e integración multidiversa de fuerzas políticas y sociales de Ecuador en torno a la RC. Esto aseguró el ejercicio legítimo del gobierno de Rafael Correa y el triunfo electoral arrollador de Alianza PAIS en el marco de la democracia burguesa de las elecciones del 26 de abril del 2009. Con esta victoria se acumularon cinco en las urnas: la elección presidencial del 2006; la Consulta Popular del 15 de abril del 2007, para la instalación de la Asamblea Constituyente; la elección mayoritaria de asambleístas constituyentes en las elecciones del 30 de septiembre del mismo año; y el referéndum aprobatorio de la nueva Constitución de la República del Ecuador el 28 de septiembre del 2008.

 

Pero este estado de situación organizativa de la RC - como ironía dramática - llevaba en su seno una de las causas internas de su propia crisis, que se manifestaría en la diversidad de tendencias con sus contradicciones internas en la Dimensión de la Organización Política del Movimiento Alianza PAIS agravada por la Dimensión de la Organización Ciudadana debilitada. El riesgo potencial de esta situación seria capacidad limitada y debilidad creatividad política para responder a entornos hostiles o antagónicos imprevisibles, impulsados por los contradictores naturales nacionales e internacionales a la Revolución Ciudadana. A pesar de la impronta del movimiento forajido en la izquierda ecuatoriana, estructural e históricamente hubo constantes de muchos movimientos y partidos de América Latina que ante la irreversible necesidad de la “toma pacífica del poder político del Estado burgués” promovieron gobiernos denominados progresistas, asumiendo la existencia de fracciones patrióticas/nacionalista de la burguesía; de la viabilidad de alianzas policlasistas confluyendo en frentes amplios; la suposición del carácter democrático e institucionalista de las fuerzas de seguridad del Estado; la viabilidad de una economía justa y de sustitución de exportaciones; la capacidad del Estado para modernizarse y ejercer el control del poder del mercado, etc.

 

Fue la Dimensión de la Organización del Poder Político del Estado - con el liderazgo firme del presidente Rafael Correa, que aseguró en los siguientes años de forma gradual e incremental la dirección del proceso de la RC. Pero el proceso desigual y combinado con las otras dos dimensiones derivó entre otros factores estructurales, a un clivaje histórico en el 2017, con la selección conflictiva del candidato presidencial de la RC, triunfo del binomio concertado Lenín Moreno-Jorge Glass el 2 de abril de 20017, posesión presidencial de Lenín Moreno el 24 de mayo de 2017 y crisis/división de la Revolución Ciudadana el 24 de agosto de 2017 en que renuncian los Consejeros presidenciales de Lenín Moreno, miembros del Colectivo Político Originario de la Revolución Ciudadana en el 2005: Ricardo Patiño, Virgilio Hernández y Paola Pabón; manifestándose dos liderazgos con contradicciones antagónicas: Rafael Correa y Lenín Moreno.

 

El clivaje histórico de división de la RC insertó a Ecuador en las dinámicas de judicialización de la política a nivel regional, como contraofensiva de la derecha neoconservadora monitoreada por el las transnacionales y gobierno de EEUU contra líderes y gobiernos progresistas de América Latina, como parte de dinámicas funcionales al reposicionamiento geoestratégico-financiero de EEUU y sus transnacionales en la competitividad mundial por los mercados y los bienes de la Tierra, contra China y Rusia principalmente. Se impone entonces urgente, el renacer desde los orígenes de la Revolución Ciudadana como un verdadero Sistema Dinámico Humano que supere los factores adversos a la RC e impulse las tres dimensiones organizativas unitarias para ejercer - más temprano que tarde - el poder democrático permanente en las tres dimensiones: Poder Ciudadano, Poder Territorial Político y Poder del Estado.

 

Ese será nuestro aporte y legado desde el centro del planeta para vencer la vorágine en el último círculo de Dante - pobreza extrema de millones de seres humanos, guerras digitales, espionaje electrónico con intervenciones militares, crisis humanitaria/ambiental por el cambio climático, disputa nuclear, el armamentismo en la atmosfera - como baile de demonios sobre el último epitafio humano de la Tierra… Dios no tiene quien le escriba.

 

1 abril 2018

 

Fernando Garzón Orellana fue Primer Responsable (Secretario General) del Movimiento de Izquierda Revolucionaria –MIR del Ecuador, en los primeros años de la década de los 80.

 

fgarzon@gye.satnet.net

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/191979?language=en
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