Pobre el mundo, tan lejos de Dios y tan cerca de Trump

26/01/2017
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Análisis
donald_trump.jpg
Agência Brasil
-A +A

El nuevo presidente norteamericano Donald Trump, ha mostrado con hechos lo que había prometido en su larguísima y comentada campaña electoral. Mucho de aquello que parecía diatriba de brabucón, hoy está firmado y en vías de realización.

 

Algunos insisten en que durante la ceremonia misma de juramento, se hizo del tiempo para firmar el decreto con que derrumbaba el logro más importante de la administración Obama, el plan de salud conocido como el “Obamacare”, oficialmente “Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible” promulgada en 2010 y que procuraba dar cobertura médica a los ciudadanos de bajos recursos, es decir a unos 56 millones de estadounidenses sin acceso a servicios de salud.  En la actualidad el sistema cubre a unos 30 millones de personas y se estima que al ser desactivado podrían morir 44 mil personas por año. Se cree que recién para 2019 el nuevo sistema que pretende implantar la administración Trump, se pondría en marcha.

 

En el orden interno además Trump ha ordenado congelar las contrataciones del gobierno federal, con excepción de las Fuerzas Armadas. Ha ordenado quitar la financiación a los grupos que militen a favor de la legalización del aborto o que lo promueven a través de un método de planificación familiar, al tiempo que esa misma medida la ha extendiendo contra las organizaciones que, de alguna manera, practiquen o promocionen el aborto fuera de los Estados Unidos, reactivando una disposición de Ronald Reagan de 1984.

 

Pero esta no fue su única promesa de campaña cumplida antes de la primera semana de mandato, de otro plumazo fue eliminada de la página web de la Casa Blanca, la solapa en español, y todo aquello que tuviera relación a la comunicación oficial con los colectivos pertenecientes a las minorías sexuales.

 

Este último lunes 23, Trump, firmó la orden ejecutiva para retirar a los Estados Unidos del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés), el mayor bloque económico del mundo. El TPP fue suscrito en febrero de 2016, por una docena de países que representan el 40% de la economía mundial, lo que representa cerca de 800 millones potenciales de consumidores.

 

Esto dejará un tendal de víctimas entre los que se cuentan fundamentalmente: México, Chile y Perú, cuya débiles economías dependían no solo de estos acuerdos, sino de las proyecciones de intensificación comercial.

 

El presidente mexicano Peña Nieto se ha puesto en comunicación urgente, con las autoridades canadienses para saber cuánto se puede salvar tras el Huracán Donald.

 

Quizás tanto corazón herido solo pueda ser sanado por China que se convertiría en el sucesor de Estados Unidos, en ese marco comercial, pero claro,  Beijín negociará conociendo las necesidades de sus posibles futuros socios y no dejará de aprovecharse la desesperación.

 

Hasta ahora sin duda ha sido México el país más damnificado por la nueva administración norteamericana, la gran cantidad de maquilas o ensambladoras que abastecen con exclusividad al mercado estadounidense sufrirán un aumento de aranceles de ingreso a Estados Unidos y particularmente la industria automotriz que el año pasado exportó a su vecino del norte el 77% de la producción total, es decir dos millones 133 mil 724 vehículos.

 

El miércoles 25, con bombos y platillos, el vocero de la Casa Blanca Sean Spicer anunció que el presidente ha firmado la orden para el inmediato inicio de la construcción del muro que separara los dos países.  

 

El muro cubrirá la totalidad de los 3200 kilómetros de frontera, de los que ya hay casi mil construidos por diferentes administraciones. Una empresa de origen israelí, la Magal Security Systems, ha sido la primera en postularse para un negocio de 8 mil millones de dólares. Ese desembolso, según Donald Trump, de una u otra manera los terminará pagando México. Es importante señalar que las remesas de mexicanos enviadas a su país desde Estado Unidos, el año pasado superó las ventas petroleras mexicanas alcanzando los 28 mil millones de dólares.

 

Uno de los tantos daños colaterales que traerá a México la construcción de muro, quizás de inmediato será la intensificación de la guerra entre los carteles de la droga, ya que a partir de la intensificación de la seguridad fronteriza, tras los ataques de septiembre de 2001, provocó el estallido de una guerra, que no se detiene y ya ha dejado, mal contados 200 mil muertos. Un cierre absoluto generará la intensificación de la lucha por las vías de paso de la droga rumbo al norte, lo que sin duda multiplicarán los muertos de manera astronómica.

 

Por otro lado ha dispuesto anular las visas y derechos de asilo a ciudadanos de Afganistán, Somalia, Yemen Irak, Siria, Irán y Sudán. Además de agregar un pesado conjunto de restricciones a todos aquellos que quienes ingresar a territorio de la Unión.

 

La ultra derecha europea busca un papá

 

Envalentonados por el triunfo de Donald Trump y los avances que han logrado en sus propias naciones en los últimos años la extrema derecha europea, lanzó una cita continental el día 21 de enero en la localidad alemana de Coblenza.

 

Convocados bajo la consigna “Libertad para Europa” y organizado por el grupo del Parlamento Europeo “Europa de las Naciones y la Libertad”, un nutrido grupo de recalcítrateles neonazis debatió sobre los nuevos tiempos que parecen cernirse sobre el mundo tras la irrupción del nuevo presidente norteamericano.

 

Representantes del francés “Frente Nacional” (FN), de Marine Le Pen, “Alternativa para Alemania” (AfD) encabezada por Frauke Petry, la italiana “Liga Norte” de Matteo Salvini, el “Partido de la Libertad de Austria” (FPÖ) de Norbert Hofer, el holandés “Partido por la Libertad” (PVV) de Geert Wilders y el VOX español de Gonzalo Abascal, entre otros han analizado el nuevo panorama mundial tras la asunción de Trump.

 

 Las discusiones giraron en torno al “Patriotismo, fronteras seguras, el islamosocialismo (sic), revolución política, Brexit, identidad nacional, la oligarquía financiera, la nueva Europa, una primavera patriótica, Donald Trump, el miedo al futuro, y el inicio de una nueva era”.

 

 Con consignas y propuesta eurófobas y ultranacionalistas, pretenden encontrar un destino junto al BREXIT y Trump.

 

Es muy pronto para pensar en la posibilidad de que Donald Trump, considere la posibilidad de aceptar el liderazgo que los ultra nacionalistas europeos le están ofreciendo.

 

Trump, no es un político, es un empresario recalcitrantemente pragmático. Sus intenciones son claras, liderar una “revolución” norteamericana en Norteamérica.

 

Por lo que un liderazgo internacional a esta altura le debe importar muy poco, además de que lo tiene porque, es intrínseco al cargo que asumió el viernes 20 de enero.

 

Como ya se ha dicho el zar de la construcción está dispuesto a atender lo que él considera los intereses de sus votantes y para a una panda de fanáticos, que además huelen rancio.

 

Guadi Calvo es escritor y periodista argentino. Analista Internacional especializado en África, Medio Oriente y Asia Central.

En Facebook: https://www.facebook.com/lineainternacionalGC

 

https://www.alainet.org/es/articulo/183135?language=es
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS