Elocuente avance del Sí a la Paz

21/09/2016
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
Mural Monumental pintado en la sede de la Comisión de Reconciliación Nacional Justicia y Paz. Bogotá,  Colombia, por Matiz M. Gustavo mural colombia
-A +A

El “Sí” en el debate sobre el Plebiscito por la Paz, que se realizará el próximo 2 de octubre, viene imponiéndose en los sondeos y encuestas, también en el ambiente de las ciudades y en el campo, en las redes sociales y en el encendido e intenso debate político sobre los 52 años de conflicto y su resolución; situaciones sensiblemente positivas para politizar un país como Colombia, muy acostumbrado a callar y a escuchar la opinión de la prensa hegemónica. Está ocurriendo tal y como lo dijo el apóstol de la libertad José Martí sobre la lucha de independencia: una idea justa que aparece, vence.

 

Más de 34 millones de personas están habilitadas para votar en todo el territorio nacional y en los consulados de 64 países donde viven millones de exiliados y migrantes del país cafetero. La tendencia histórica de participación en las elecciones es muy baja, donde la abstención ronda siempre el 50% y es mucho más alta cuando se trata de llamados a participar sobre temas distintos a las elecciones regulares de los poderes públicos. Las dos últimas experiencias fueron la convocatoria a la Constituyente en 1991 donde la abstención fue del 78%1 y en el referendo que perdió el uribismo en el 2003 que no pasó del umbral mínimo establecido del 25% de participación2.

 

Dos encuestas realizadas en los últimos 5 días, dan como ganador al Sípor la paz con un margen importante. En la encuesta de la empresa Ipsosel resultado es de una gran ventaja para el Sí, con el 72% a favor, y por el No el 28% con una diferencia abismal del 44%3 ; y en el sondeo del Opinómetro de Datexco, el 55,3% por ciento de los encuestados anunciaron votar a favor del Sí y el 38,3% apoya el No, con una diferencia del 18%4. Ambos sondeos estadísticos indican la creciente movilidad de discursos, argumentos y campañas mediáticas en el debate electoral; las tres semanas restantes para las votaciones serán determinantes para que el Sí sostenga la ventaja, y resista a los ataques mediáticos emprendidos por la agresiva campaña de la extrema derecha con el No.


Se inscribieron 197 comités de campaña por el Sí y 37 comités de campaña por el No, impulsados por partidos, fundaciones y grupos de la ciudadanía5. Los partidarios de la paz se inscribieron desde la coalición de gobierno, el Polo, la Alianza Verde, y la Paz Sí es Contigo; mientras que desde la otra orilla se inscribió el Centro Democrático y algunas fundaciones ligadas a los sectores conservadores.

 

Uno de los temas a resaltar es que el debate sobre la paz o la guerra ha venido ampliándose en la ciudadanía, producto del inicio en pleno de las campañas y se ha logrado poco a poco correrse de la polarización Santos vs. Uribe tan nociva para la positiva refrendación popular de los acuerdos. Mientras Uribe envía constantemente mensajes retadores en contra del presidente para mantener esa corrosiva tendencia del debate polarizado, Santos ha entendido la necesidad de hacer transversal la campaña a la que vienen adhiriendo cantantes, actores/as, deportistas, comités ciudadanos, los partidos aliados del gobierno, estudiantes y toda la izquierda.

 

El desarrollo de la campaña se caracteriza por el intento de los partidarios del Sí para explicar de forma pedagógica el contenido de las 297 páginas del acuerdo de paz. Han desarrollado con mucho ingenio infografías, videos cortos, canciones, movilizaciones en la calle y performance. También, en esta campaña, el uso de redes sociales es fundamental, especialmente twitter6. Los medios hegemónicos vienen tímidamente apoyando este proceso, desprendiéndose poco a poco de su papel activo en la guerra, con rescatables editoriales a favor de la paz en los medios escritos y de las noticias televisivas menos dependientes del capital. Del lado del No, la campaña se ha centrado en producir mensajes basados en la poca información sobre los acuerdos, con un discurso que tiende a tergiversar el contenido del acuerdo, diciendo que éste le entrega el país al “castrochavismo”7.

 

El plebiscito también está siendo visto como el lanzamiento de la campaña presidencial para el 2018. En este contexto los discursos en favor del Sí son variados: las campañas como “La Paz Sí es Contigo”, la del Polo Democrático y la de Gustavo Petro “Paz Sí, pero con Constituyente”, buscan construir una base que respalde el proceso de paz sin que esto signifique un tácito apoyo al gobierno; mientras que desde la coalición de gobierno vienen haciendo todos los esfuerzos por mostrar la paz como un logro de la política de Santos. Por su parte Uribe dijo abiertamente que el No tiene todas las de perder, pero que los votos que obtenga serán el primer gran medidor para las elecciones presidenciales8.

 

Quienes ya anunciaron su candidatura han impulsado sus propios discursos en el plebiscito, el vicepresidente Germán Vargas Lleras, como candidato del santismo, ha realizado un apoyo muy formal al Sí y no se le nota muy comprometido con el contenido de los acuerdos; Alejandro Ordoñez el procurador destituido, viene sumándose a la campaña del No uribista, en el mismo tono y con los mismos mensajes agresivos; y Gustavo Petro viene realizando una gira por todo el país impulsando el Sí y una constituyente. El respaldo a la paz de los partidos se ve muy tibia y acartonada, muy parecida a lo que son en la realidad, mientras que las expresiones outsider y de la ciudadanía vienen mostrando una fuerza especial, contundente y están marcando la tendencia positiva por el Sí en el plebiscito, un elocuente avance de una paz que con esa participación ya viene ganando.

 

Javier Calderón Castillo / CELAG

@javiercc21

http://www.celag.org/elocuente-avance-del-si-a-la-paz/

 

 

5 http://www.larepublica.co/“esperábamos-más-de-500-comités-para-el-plebiscito”_422011

https://www.alainet.org/es/articulo/180409?language=en
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS