Brasil concentra 10% de todos los homicidios del mundo, según un estudio del Ipea

24/03/2016
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Un estudio realizado por el Instituto de Pesquisa Económica Aplicada (IPEA) en colaboración con el Fórum Brasileño de Seguridad Pública (FBSP) contabiliza 59.697 muertes producto de la tenencia de armas de fuego y la violencia policial en 2014.

 

En 2014, Brasil alcanzó la mayor cantidad de homicidios ya registrados: fueron 59.697 muertes producto de las armas de fuego y de la violencia policial. Ese total representa el 10% de todos los homicidios en el mundo, lo que posiciona al Brasil como el país con mayor número absoluto de muertes violentas. Los datos son del Atlas de Violencia 2016, levantado por el Pesquisa Económica Aplicada, en colaboración con el Fórum Brasileño de Seguridad Pública, divulgado el último martes (22).

 

Según el estudio, la tasa brasileña es de 29,1 homicidios por cada 100 mil habitantes. “Es extremadamente preocupante. La tasa [de homicidios] sigue una trayectoria de crecimiento de la violencia letal dese los años 1980. Dio una frenada en 2003, con el Estatuto de Desarme (Ley 10.826/03), pero a partir del 2008 comenzó a crecer de nuevo”, analiza Daniel Cerqueira, técnico del Planeamiento e Investigación del Ipea.

 

El Atlas apunta que el perfil de las víctimas es de hombres, jóvenes, negros: 46% de las muertes de hombres en la faja etaria de 15 a 29 años son registrados como homicidios y, en un recorte de edad de 15 a 19 años, ese índice sube para el 53%. En la población negra, hubo un aumento de la tasa de homicidios de 18,2%, en cuanto entre individuos que no son considerados negros o pardos, la tasa cayó al 14,6%.

 

Los negros continúan súper representados en las camadas más pobres de la sociedad y están más vulnerables a la violencia. Otro factor es la cuestión de racismo histórico y de racismo institucional. Hay acciones cotidianas de las instituciones que no están escritas en los libros ni en los manuales, pero que están atravesadas por la cuestión de raza. En el comportamiento de la policía, por ejemplo, que usa la violencia en los abordajes de negros. Existe una gran diferencia en el tratamiento en relación a los abordajes de blancos”, compara Daniel.

 

Letalidad policial y conflictos de informaciones

 

Inicialmente, el levantamiento del Ipea sobre la letalidad policial llevó en consideración los datos del Sistema de Informaciones sobre Mortalidad (SIM) y contabilizó 681 muertes por intervenciones policiales en 2014. Sin embargo, por medio de la Ley de Acceso a la Información (LAI), los dos órganos responsables por el estudio descubrieron que el Anuario Brasileño de Seguridad Pública indicaba 3009 muertes en enfrentamiento con la policía. De estos, 2669 fueron causados por las fuerzas de seguridad del estado durante el servicio.

 

“Las organizaciones policiales deberán existir para proteger los derechos y a la ciudadanía. Muchos policiales en la calle tienen el poder de la vida o la muerte. Entonces, esas organizaciones deben ser vigiladas, transparentes. Los datos de la Ley de Acceso a la Información, indican una cantidad enrome de muertes promovidas por la policía en servicio, pero creemos que ese número pueda ser aún mayor”, apuntó Daniel Cerqueira.

 

Los estados que presentan los mayores índices de muertes causados por la policía son São Paulo, con 965 muertos, Rio de janeiro, 584, y Bahía, con 278. Según el Anuario de Seguridad, entre 2004 y 2014, fueron por lo menos 20.418 muertes en enfrentamientos con la policía en servicio.

 

Sudeste registra una caída del número de muertes

 

Entre los estados brasileños, São Paulo tuvo la mayor caída (52,4%), seguidos de Rio de Janeiro (33,3%). Ya Espíritu Santo dejó la lista de los cinco más violentos del país.

 

Sobre São Paulo, Daniel Cerqueira marcó diversos factores que contribuyeron para la disminución de los índices de homicidios, desde la manutención del ingreso, pasando por cuestiones demográficas, como la disminución del número de jóvenes en la región y la mayor cantidad de empleos, hasta la organización de la fracción criminosa Primer Comando de la Capital (PCC).

 

“El CPP genera un cartel y, al hacer eso, disciplina el mercado de drogas. Eso hace que las personas no se enfrenten entre sí porque ellas tienen cuotas del mercado. Es posible que eso haya contribuido para la disminución de los homicidios”, evaluó Daniel.

 

El aumento de la criminalidad fue mayor en las regiones Sur y Nordeste. En la Bahía, por ejemplo, las ciudades de Senhor do Bonfim e Serrinha, que eran entendidas como pacíficas, ingresaron en el índice de las micro regiones con más homicidios, liderado por otros dos municipios bahianos: Cotegipe y Barreiras.

 

Violencia de género

 

En 2014, la indagación revela que trece mujeres son asesinadas por día en Brasil. La tasa de homicidios entre 2004 y 2014 aumentó 11,6%. En el estudio, el Ipea indica que la Ley Maria da Penha, creada para evitar este tipo de crímenes, no ha dado resultados y debe ser fruto de cambios.

 

“Aunque el homicidio contra mujeres sea el menor en las estadísticas generales, es una cuestión que debe ser llevada en serio, porque la violencia doméstica es la madre de todas las violaciones. Cuando los niños presencian ese tipo de agresiones dentro de casa, ellos también estimulan para ser violentos en las calles”, agregó Daniel.

23/03/2016

 

- José Eduardo Bernardes, Brasil de Fato (São Paulo)

 

http://www.brasildefato.com.br/node/34549

 

https://www.alainet.org/es/articulo/176290?language=en
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