Alto a la islamofobia y al NOM

Salvador González Briceño

13/01/2015

Opinión

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Llevado al extremo y en cualquiera de sus formas, el fundamentalismo (religioso o político, resulta discriminatorio, racista y xenofóbico) deviene en violencia; y la violencia en inculcación generalizada del miedo, los asesinatos, los “crímenes de guerra” llamados “daños colaterales” y, por tanto, de “crímenes de lesa humanidad”.

La geopolítica de ataque al terrorismo que se impone como política exterior desde el 11/S por la familia Bush de Estados Unidos, con la participación del “socio” Al Qaeda primero, y luego a través del ejército de mercenarios “entrenado y abastecido” por EU y Arabia Saudita, rige como estrategia imperial de reciente creación justificada como ardid de “bandera falsa” no obstante el declarado síndrome de decadencia imperial. Para dominio y control global.

La mejor prueba es la reciente sustracción del petróleo de los territorios invadidos a sangre y fuego con pretextos religiosos, que luego corre hacia el mercado negro con la finalidad de contener los precios del petróleo para tratar de derribar aquellas economías como la rusa y la venezolana, ambos “enemigos” de los intereses estadounidenses. O el reinado de los intereses de las empresas de EU.

La estrategia del terrorismo se lleva a cabo con fines de control y dominio regional, de territorios de reserva energética. Amén el derrocamiento de gobiernos no afines. Eso ocurre contra Siria, país ajeno a la influencia del Fondo Monetario Internacional y al control de inversiones o monetario desde la Reserva Federal de EU, razón por la cual se intentará por todos los medios de derrocar al “incómodo” Bashar al-Asad. Irán se cuece aparte por su ofensiva más de propaganda pero sobre todo por su arsenal nuclear.

Entretanto, cada vez se impone —en Francia y en el mundo— la versión sustentada en evidencias, que el atentado en París contra la satírica burlesca y antiislamista revista Charlie Hebdo (la inmoralidad, el insulto y la ofensa muy por encima de una “libertad de expresión” por cierto irrenunciable) es no solo de bandera falsa sino una “gran mentira” terrorista (solo los muertos son reales, decíamos. Ver: http://www.elpuntocritico.com/reporte-global-salvador-gonzalez-briceno.html o http://alainet.org/active/80009&lang=es)

Más aún. Es el resultado de un guion hollywoodense orquestado desde la elite nazisionita internacional, mediante organismos como el Mossad, la CIA y la OTAN, para justificar la islamofobia como tesis central de la geopolítica fundamentalista del imperio y soporte de la tesis del “choque de civilizaciones” de Huntington.

Con brotes de violencia en el viejo Continente, la marcha de los presidentes en París contra el terrorismo tanto pone en evidencia el cinismo de los gobiernos participantes como describe la mismísima política de EU para con Europa. Involucrarla a como dé lugar contra los neoenemigos (Rusia y China) en una suerte de “neoguerra fría”, aún a costa de sus propios ciudadanos.

Sí. A EU como imperio, que utiliza todos sus instrumentos de inteligencia y guerra en resguardo de su “seguridad nacional” y supremacía para orquestar este tipo de acciones de “falsa bandera”, no le importa que los muertos estén de este lado del “charco”. Que florezca el terrorismo en pleno centro de la Unión Europea, para así entrometer a los aliados en su lucha contra sus “enemigos”, al mismo tiempo que se ejercita en desestabilizar países enteros golpeando directamente a la población.

Pronto veremos que entre las políticas imperiales brotará cínicamente el uso de ejércitos, como el de EU, para el control directo del ciudadano. El Gran Hermano en acción. No únicamente en países siempre víctimas de África, Asia o Latinoamérica, como en todas las grandes urbes. Hasta eso pretende llegar el terrorismo, el fundamentalismo que se basa en acciones tipo bandera falsa como el recién atentado al Charlie Hedbo.

Luego entonces, contener la osadía fundamentalista de EU no depende solo de los franceses, cuanto de los ciudadanos del mundo. No hacerlo es permitir la desestabilización violenta de los ciudadanos europeos de inicio; así como el avance del pretendido Nuevo Orden Mundial (NOM).

Correo: sgonzalez@reportemexico.com.mx

https://www.alainet.org/es/articulo/166781