Hemos perdido el juicio?
26/09/2010
- Opinión
Si la justicia existe, tiene que ser para todos; nadie puede quedar excluido, de lo contrario ya no sería justicia. (Paul Auster)
Hace unos días, en Irán se suspendió la lapidación de Sakineh M. Ashtianí, tal vez debido en parte al revuelo que se formó en los medios de comunicación y que levantó la alarma en todas partes. De hecho, el artículo del país del 8 de septiembre, comenzaba diciendo: “La presión internacional ha surtido efecto.” Valga como ejemplo.
Días después, se conoció el caso de una mujer estadounidense, Teresa Lewis, que fue condenada a muerte por instigar la muerte de su marido y de su hijo. El coeficiente mental de esta mujer estaba en 72, lo que la convertía prácticamente en deficiente, según la legislación estadounidense, que fija el límite en 70.
Supongo que el hecho de tratarse de una ciudadana estadounidense, explica que antes de la ejecución no tuviera lugar ningún revuelo en la prensa, que se limitó a remarcar el hecho de que esta mujer se convertiría en la primera mujer víctima de la pena de muerte desde 2.005.
Teresa Lewis fue acusada de planear e instigar el asesinato de su marido y su hijo. Planear el asesinato con 72 de coeficiente intelectual. Vaya. Los autores físicos de los crímenes fueron condenados a cadena perpetua. Quien planea: pena de muerte. Quien asesina: cadena perpetua. Vaya.
La ejecución tuvo lugar finalmente el pasado día 23, según informa Público, en una nota que ha pasado casi de puntillas tanto en este diario como otros.
Es sorprendente el doble rasero con el que se miden algunas cosas en este mundo.
Según estos baremos:
—Me gustaría saber qué condena les caería a los responsables de que los Objetivos del Milenio no se vayan a cumplir ni en lo que queda de milenio, ya que tal incumplimiento comporta la muerte, planeada o no, de millones de personas todos los años.
—Me gustaría saber qué condena les caería a los integristas de Wall Street por ahogar la economía de medio mundo, como abanderados de la codicia y la ambición, y cuya consecuencia más inmediata es sumir en la pobreza más inhumana a millones de personas en todo el mundo.
—Me gustaría saber qué condena les caería a los gobiernos que instigan a guerras crueles y estúpidas en territorios lejanos, que causan la muerte, planeada o no, de cientos de miles de inocentes, a los que se etiqueta como “daños colaterales” sin pasar por la contabilidad oficial de bajas.
—Me gustaría saber qué condena le debería caer al militar que planeó el asesinato de José Couso y a los militares que lo ejecutaron.
En fin, me gustaría saber tantas cosas de este mundo insólito.
Enlace al original: http://impresionesmias.com/2010/09/27/¿hemos-perdido-el-juicio/
https://www.alainet.org/es/articulo/144422?language=es
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