Ante la avalancha de tratados comerciales que vienen imponiendo los Estado Unidos y la Unión Europea, como respaldo a la obligada globalización económica, Venezuela viene promoviendo entre los países latinoamericanos una iniciativa donde se supone que el "desarrollo" se encuentra al servicio de los pueblos involucrados en contraposición a los TLC maquinados desde los países industrializados y el afán de afianzar el saqueo económico de América Latina que se ha venido dando durante siglos.

ALBA ( Alternativa Bolivariana para la America) surge como una respuesta al nefasto ALCA (Area de Libre Comercio de las Américas) promovido por los Estados Unidos como parte de su política de un mundo unipolar y la ratificación de la Doctrina Monroe (1).

A los casi dos siglos de la independencia de los países latinoamericanos, los Estados Unidos continúan ejerciendo su influencias militar, cultural y económica, hasta el punto de haber diluido los estados-nación y haberlos convertidos en entidades anexas al imperio. La pax americana, a través de la imposición de la política del garrote y la zanahoría, en la actualidad viene acompañada de tratados de libre comercio que implican una entrega de las exiguas soberanías nacionales.

El vergonzoso TLC-CA que firmaron los Estados Unidos con los presidentes de los países centroamericanos, fue casi simultáneo a las toma de Bagdad por las tropas de la alianza liderada por los Estados Unidos, guerra que cada día más claro, fue motivada por el control de los yacimientos de hidrocarburos que posee ese país. La entrega de los recursos naturales del istmo se hizo sin la necesidad que las tropas imperiales dispararan un sólo tiro, y con la venia de la pequeña elite de poder la cual siempre ha estado dispuesta a seguir los mandatos de sus amos del norte.

La elaboración del TLC-CA estuvo sumida en un gran hermetismo, y el lacónico Melvin Redondo - el representante de Honduras en las negociaciones - colaboró a concebir un tratado infectado por la asimetría económica, donde se hicieron enormes concesiones a favor de los Estados Unidos, con el propósito de aumentar la cuota maquilera textil que beneficia a un reducido grupo de empresarios locales y explota la mano de obra con estrategias feudales.

La entrada en vigor del TLC-CA surge el infame y fallido Plan Puebla Panamá, el que incluyó una serie de proyectos de infraestructura destinados a agilizar el transito de mercancías a través del istmo acompañado por una red de electrificación y la construcción de cientos de represas con el propósito de exportar electricidad hacia los vecinos del norte (2).

Entre una de las zanahorias ofrecidas por el otrora Plan Puebla Panamá, ahora rebautizado como Iniciativa Mesoamericana, se encuentra una refinería promovida por el Banco interamericano de Desarrollo (BID), la que supuestamente será abastecida con petróleo proveniente de México. Da la casualidad de como México viene perdiendo su autonomías y autosuficiencia en materia de hidrocarburos, sin producir en la actualidad el excedente necesario para alimentar el proyecto mesoamericano.

En Honduras se ha desatado una controversia alrededor del ALBA alimentada por los medios de prensa escrita, adheridos a la SIP (Sociedad Internacional de Prensa), donde alimentan los miedos inculcados durante la guerra fría sobre la perfidia de los comunistas y la amenaza roja. La guerra de percepción y desinformación que vienen ejecutando los medios en Centroamérica los coloca al servicio de la Iniciativa Mérida, la que es nada más que una réplica del Plan Colombia para México y Centroamérica.

La historia de Honduras en el siglo xx se enmarca en la frase acuñada por el escritor estadounidense O. Henry, cuando en 1903 en su novela De Reyes y Repollos, utilizó el descriptivo concepto de país bananero. Pocos años después (1911) San Zemurray - uno de los pioneros de las multinacionales bananeras - financió una invasión y golpe de estado en Honduras con el propósito de adquirir tierras a bajo costo, y excluirse del pago de impuestos. Sin lugar a dudas con esa intervención San Zemurray se convirtió indirectamente en el padre del estado moderno de Honduras, y abre paso a un nuevo capítulo del colonialismo donde el estado-nación pasa a ser un cautivo de las compañías transnacionales.

Casi un siglo después el Partido Nacional que fue fundado por Manuel Bonilla - el "socio" de San Zemurray en la invasión - se opone a la aprobación del ALBA, al igual que la clase empresarial, anclada en una visión obsoleta de servilismo a los intereses de las transnacionales y los mandatos de Washington.

Desafortunadamente desde la independencia y la creación de las sistema republicano, América Latina ha estado maniatada a los intereses de las potencias extranjeras. Simón Bolivar en 1826 convocó al Congreso Anfictiónico en la Ciudad de Panamá, su sueño era la unificación de América Latina para poder frenar la intervención de los Estados Unidos. La reunión sufrió de los embates del fracaso. El General Francisco de Paula Santander invitó a los Estado Unidos a participar, contradiciendo el espíritu que quiso insuflar Bolivar al Congreso de Panamá.

El maestro de Bolívar, Simón Rodríguez , viajero incansable, el cual marchó en varias ocasiones lo largo de los Andes, abriendo escuelas e imprimiendo libros, publicó un opúsculo en 1828 llamado " las Sociedades Americanas" en el cual apareció por primera vez el "Inventamos o Erramos" (3), frase que hasta la fecha resuena por el continente como un cuestionamiento al servilismo y la capacidad de imitación y subyugación que han hecho alarde buena parte de las oligarquías locales.

El ALBA surge como una respuesta no solo económicas sino cultural al saqueo que ha padecido América Latina. Mientras los Estados Unidos cada día muestran las señales equivocas de la decadencia, no sobran en Honduras quienes abjuren de sus orígenes y se presten a las fabulaciones de las agencias de fabricación de consentimiento (4) , área en la que el imperio afina sus técnicas utilizando empresas especialista en la distorsión de la información y la elaboración de percepciones (5).

Pero a pesar de todas las perversiones marrulleras del imperio, queda la voz de José Martí, el que en su artículo Nuestra América (1891) señalaba: "De todos sus peligros se va salvando América. Sobre algunas repúblicas está durmiendo el pulpo. Otras, por la ley del equilibrio, se echan a pie a la mar, a recobrar, con prisa loca y sublime, los siglos perdidos."

Es de esperar que la aciaga historia de entreguismo practicada por alguno cuantos en Honduras, se revierta y el Alba de la esperanza sea para todos y cesen la ignominias en nombre de unos cuantos.

Notas

(1) La Doctrina Monroe sintetizada en la frase “América para los americanos”, fue elaborada por John Quincy Adams y atribuida a James Monroe en el año 1823. Dirigida principalmente a las potencias europeas con la intención de que los Estados Unidos no tolerarían ninguna interferencia o intromisión de las potencias europeas en América. (wikipedia)

(2) http://www.internationalrivers.org/files/Inventario.pdf

(3) ¿Dónde irémos a buscar modelos? ...
-La América Española es orijinal = ORIJINALES han de ser sus Instituciones y su Gobierno = ORIJINALES los medios de fundar uno y otro.
o Inventamos o Erramos.

(4) El periodista estadounidense Walter Lippman a finales de los años 20 señaló como la fabricación de consentimiento por una elite de clase ya se había convertido en un arte

(5) El papel de empresas contratadas por el Pentágono como el Rendon Group, señala la importancia que se le da por parte del imperio a la guerra de información y la operaciones psicológicas.