Juan Manuel Santos, Titular de la Defensa en Colombia

Revelaciones del ministro que ordenó bombardear Ecuador

01/06/2008
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El pasado sábado 24 de mayo la noticia de la muerte de Manuel Marulanda, máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, conmocionó a la opinión pública colombiana e internacional y dejó en segundo plano cuestiones igualmente relevantes de lo dicho por Juan Manuel Santos Calderón, ministro de defensa de esa nación sudamericana, en la entrevista que le realizó la revista Semana.

La entrevista, titulada “Tirofijo está muerto” y que da la impresión de haber sido muy estudiada, empieza así:

“M.I.R.:¿Quién tomó la decisión en el caso de la incursión al campamento de las FARC en Ecuador? ¿Usted convenció al Presidente, o el Presidente lo convenció a usted?”

“J.M.S.: Ni el uno ni el otro. Se tomó la decisión cuando se supo por vía inteligencia que allá estaba Raúl Reyes. Yo autoricé esa operación y, conociendo al Presidente, sabía que él también la iba a autorizar”.

Esto estaría indicando que no se incursionó en territorio ecuatoriano por una persecución “en caliente” a guerrilleros que desde allí atacaban el territorio colombiano, como fue la información que el presidente Uribe le dio al presidente Correa en un comienzo.

Luego se habla de las computadoras atribuidas a Raúl Reyes y de la situación en que se encontrarían algunos dirigentes de las FARC y se produce este diálogo:

“M.I.R.:¿Y ‘Tirofijo’ en qué anda?”

“J.M.S.: Debe estar en el infierno.”

“M.I.R.: ¿En cuál infierno?”
“J.M.S.: Al que se van todos los criminales muertos.

”M.I.R.: A donde 'Tirofijo' se va a ir...

“J.M.S.: La información que tenemos es que ya se fue.”

“M.I.R.:¿Cómo así,'Tirofijo' se murió?

“J.M.S.: Esa es la última información que tenemos y que estamos corroborando.”

“M.I.R.: ¿Puedo titular esta entrevista, 'Tirofijo' está muerto?

“J.M.S.: El riesgo es suyo.”

Luego Santos le dice que Marulanda murió el 26 de marzo y que el sucesor iba a ser Alfonso Cano.

Y el tercer punto importante de la entrevista es el siguiente:

“M.I.R.: De dos años acá se ha producido un cambio total en su vida. De la franja “no sabe no responde” ha pasado a ser una figura que produce unos resultados contundentes en materia de seguridad ¿Cómo analiza eso desde el punto de vista de su carrera?

“J.M.S. Pues sin duda estoy en el momento más interesante de mi carrera y de pronto me va a tocar tomar unas decisiones de mucho fondo, una de ellas si el Presidente decide no reelegirse. Si decide reelegirse, estaré a su lado incondicionalmente.”

¿Madruguete o pugna?

Los reproducidos son los aspectos más importantes de la entrevista, donde lo relativo a Marulanda se trata como algo casual, pero al titular con eso se centra la atención del lector en ese hecho, que se convierte automáticamente en un punto a favor del entrevistado, aunque Marulanda haya muerto de un infarto, lo que distrae mientras los mensajes implícitos en los otros dos puntos tienen otro destinatario, talvez fuera de Colombia. Juan Manuel Santos ha ejercido el periodismo y entiende de medios.

Según algunos periódicos colombianos al presidente Uribe le molestó lo hecho y dicho por su ministro y justificó una molestia que era visible, diciendo que no estaba de acuerdo con que la información se le diera a un medio solamente. Es que el mandatario no fue informado de que Santos daría esa entrevista, lo supo cuando ya estaba publicada porque uno de sus asesores se lo contó durante una reunión de cabildo en la localidad de Florida y en la transmisión televisiva se vio y oyó cuando le preguntaron si aceptaría la renuncia que se decía estaba redactando el ministro y lo dio por no escuchado.

En cualquier país el ministro que ignora al presidente de la república sabe que tiene contados los segundos de su permanencia en el cargo, pero en este caso Juan Manuel Santos sigue en su lugar y continúa dando a conocer documentos que atribuye a la computadora de Reyes. La interrogante que surge es si había un acuerdo entre él y el mandatario para ir perfilando un sucesor o si se trata de una pugna por el poder en la que el ministro estaría mejor posicionado.

Para reelegirse para un tercer mandato consecutivo, Uribe necesita que se vuelva a modificar la constitución, lo que se ha hecho difícil a raíz de las denuncias de una ex congresista de que para la reforma anterior hubo sobornos a algunos parlamentarios, como a ella, para que no asistieran a la sesión del congreso y le dieran así la mayoría a los que estaban a favor de la misma. Los asesores del presidente han empezado a hablar de convocar a un referéndum ante la dificultad de encontrar los votos necesarios en el parlamento.

Mientras tanto, el ministro goza de gran protagonismo gracias al poder mediático de la familia Santos, que durante décadas fue la dueña exclusiva de la Casa Editorial El Tiempo, que incluye al periódico El Tiempo, varias revistas, Radio Caracol Noticias y filiales, City-TV que llega hasta Miami y es el conglomerado mediático más grande del país. Le vendieron el 80 por ciento al grupo español Planeta en 338 millones de dólares, pero conservan la dirección del diario. Son el clan familiar de los Santos Calderón, hermanos y primos hermanos de los mismos apellidos porque son hijos de dos hermanos Santos que se casaron con dos hermanas Calderón y nietos de un periodista que compró el diario, le dio prestigio y después se convirtió en presidente de Colombia. El actual vicepresidente de la república, Francisco Santos Calderón, es primo del ministro y Alejandro Santos Rubiano, director de la revista Semana es su sobrino.

Perdida la computadora de Mancuso

En este contexto, mientras el ministro sigue dando información de las computadoras atribuidas a Reyes, otras computadoras importantes están perdidas y algunas estuvieron perdidas durante horas. Son las de los paramilitares que fueron extraditados a Estados Unidos, en una acción que analistas colombianos consideraron destinada a acallar los escándalos que los extraditados estaban denunciando. El hecho es que, según los acuerdos de desmovilización, los “paras” están autorizados para tener computadoras en la cárcel. A los que extraditaron se las retiraron el 13 de mayo y quedaron en custodia de los directores de las prisiones hasta el 15 de mayo, en que fueron entregadas a la fiscalía.

Ya se sabe que en ese lapso algunas fueron abiertas, en algunos casos porque se las entregaron por unas horas a familiares de los extraditados, y los contenidos fueron modificados o borrados. Pero la computadora de Salvatore Mancuso, el último jefe máximo de los paramilitares está desaparecida. Según las informaciones ese computador se echó a perder y el 6 de mayo lo sacaron de la cárcel, supuestamente para arreglarlo, y a Mancuso le permitieron usar uno prestado hasta el 10 de mayo, pero ahora no aparece ninguno de los dos. Otro tanto pasó con los teléfonos celulares que también tienen autorizados los “paras” presos. Estas computadoras y celulares no han sido revisados por la INTERPOL.

- Frida Modak, periodista, fue Secretaria de Prensa del Presidente Salvador Allende.
https://www.alainet.org/es/articulo/127858?language=es
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