El acto de terror que presenciamos el 9-11, no tiene justificación. Un sentimiento de solidaridad hacia el pueblo Norteamericano invade a todos. Digerir este evento traumático implica buscar explicaciones. Según opinión siquiátrica la motivación terrorista existe en personas sicopáticas indiferentes al sufrimiento ajeno o en las que han sido víctimas de agresión desde su infancia. Basándonos en este enfoque individual trataremos de entender la práctica terrorista de los estados. Colocar sus intereses por encima de todo sentimiento humanitario, ha sido sustento del terrorismo de las Grandes Potencias. Izando banderas de libertad, Justicia, Paz mundial y Democracia siembran el terror y la muerte en pueblos considerados inferiores. Esto destila el imaginario de Kennan, funcionario del Departamento de Estado. “A la chusma se les puede enseñar modales a la manera de las bombas que Inglaterra hizo explotar en Irak hace setenta años, gas venenoso, como el autorizado en aquella época por Churchil para aplicar a >tribeños incivilizadosterror vivo