Sobre Poder Local y Derechos Indígenas
Encuentro Mesoamericano de Líderes y Autoridades
15/07/1998
- Opinión
Lo que hemos logrado, lo que nos queda por hacer
A través del intercambio de ideas y de experiencias, por parte de líderes, autoridades, intelectuales,
hemos constatado que existe una diversidad de criterios sobre los conceptos y las formas en que se
expresa y se está redefiniendo la participación indígena en los diferentes niveles de poder y su
relación con los temas de la descentralización, la democracia y los procesos de paz. Esto expresa la
riqueza cultural de nuestros pueblos, pero también señala la necesidad de ampliar los mecanismos
de comunicación, intercambio y solidaridad entre los distintos sectores sociales de la región
mesoamericana. El encuentro Mesoamericano de Líderes y Autoridades Sobre Poder Local y
Derecho Indígenas, llevado a cabo en Quetzaltenango, del 3 al 6 de julio de 1.998, nos ha
permitido valorar inicialmente importantes temas que señalan acciones futuras a realizar en
conjunto.
Nuestros pueblos han sobrevivido a todos los procesos de genocidio y exclusión. Nunca perdimos
nuestras culturas, que son la fuente de nuestro poder y autonomía, las cuales han ejercido a lo largo
de su historia. Esta es fuente de propuestas y soluciones para la construcción de nuevas relaciones
de respeto.
Siglos de opresión cultural y de explotación han configurado los intentos de destrucción y
marginación, la violencia y el racismo, y han fragmentado a nuestros pueblos. Las recientes
coyunturas abren espacios favorables para el desarrollo de nuevas capacidades, haciendo valer
nuestros derechos, nuestra identidad, nuestros idiomas y todos los valores de nuestras culturas
ancestrales.
Estamos convencidos de la necesidad y la urgencia de plantear una nueva relación entre los pueblos
indígenas y los Estados Nacionales en la región, para lograr verdaderas democracias que se definan
sobre una relación incluyente y pluralista. Además, que se basen en los principios de participación
política a todos los niveles, libertad y tolerancia para un desarrollo pleno e integral de los pueblos
indígenas.
Los delegados a este Encuentro, identificamos la necesidad de continuar conceptualizando,
sistematizando los procesos de descentralización de los Estados Nacionales y las formas de
participación ciudadana y de poder local. Reconocemos que los procesos de descentralización y
municipalización que se viven en los países de la región ofrecen oportunidades y espacios idóneos
para fortalecer los poderes locales e incidir en la solución de los problemas actuales de nuestra
sociedad.
Tenemos que facilitar espacios y mecanismos viables para continuar articulando y compatibilizando
nuestras formas de democracia y la de los Estados Nacionales. Construir un encuentro que genere
soluciones enriquecedoras para ambas práctica democráticas. Construir una democracia
multiétnica.
La experiencia de conflictos en Mesoamérica, en los cuales hemos estado involucrados, nos permite
afirmar que el aporte de los pueblos indígenas debe ser considerado para profundizar las
perspectivas del diálogo y para construir una paz duradera. Convocamos a nuestros pueblos a
identificar y sistematizar las contribuciones que han hecho, hacen y pueden hacer para la resolución
pacífica de conflictos basados en sus métodos y prácticas tradicionales.
Considerando los alcances logrados en este Encuentro Mesoamericano, planteamos la necesidad de
un seguimiento a esta actividad, de forma a coadyuvar a los procesos de reflexión, evaluación y
organización de los pueblos indígenas en la región.
Los líderes, autoridades e intelectuales reunidos en este Encuentro, hemos reafirmado que los
pueblos de la región estamos frente a una coyuntura compleja llena de retos y desafíos; hemos
entendido y comprendido que aún hace falta construir la armonía entre los pueblos indígenas y los
Estados Nacionales. Cada uno de nuestros pueblos ha logrado éxitos, muchas veces a partir de
esfuerzos aislados, por lo tanto, nos proponemos continuar trabajando juntos con el propósito de
redefinir conceptos, fundamentar propuestas y construir mayores espacios de participación, para
enriquecer dichos éxitos de forma que beneficien a los diversos actores, que han pagado y
continúan pagando un precio alto por aspirar a la paz.
ENCUENTRO MESOAMERICANO DE LIDERES Y AUTORIDADES
SOBRE PODER LOCAL Y DERECHOS INDÍGENAS
XE´LAJUJ NOJ QUETZALTENANGO, 6 DE JULIO DE 1998.
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