Protestas y propuestas ante ajuste
29/09/1998
- Opinión
La severa política de ajuste del gobierno de Andrés Pastrana ha provocado una serie de protestas,
cuyo punto culminante es un paro de 48 horas de los 800.000 trabajadores estatales, previsto para
el 23 y 24 de septiembre.
La administración pastranista presentó al Congreso la Ley de Presupuesto que incluye un proyecto
de ajuste fiscal, que contempla, entre otras medidas, la limitación de los salarios a un 14% para
1999, la ampliación del Impuesto de Valor Agregado, IVA, a buena parte de la canasta familiar y
varios gravámenes más. Con ellas, el régimen pretende descargar el peso de la crisis interna e
internacional sobre los trabajadores y la población en general.
En lo relacionado al IVA, el proyecto gubernamental propuso una mínima rebaja del mismo (del 16
al 15%), con el propósito de extender el tributo a un centenar de artículos y servicios de
primerísima necesidad.
El equipo económico, además, tenía como objetivo gravar con el impuesto a la renta a quienes
devengaban más de dos salarios mínimos, pero tuvo que retroceder ante la presión de los
sindicatos.
A este panorama, se suma la ampliación del techo de la banda cambiaria, que en otros términos
significa la devaluación del peso en relación al dólar, lo que encarece el costo de la vida. El
desempleo llega a un 16%, constituyéndose en uno de los problemas más graves.
En ciudades como Bogotá, Cali, Neiva y Valledupar se desarrollaron movilizaciones de vendedores
ambulantes, trabajadores y médicos para pedir trabajo, pago de salarios atrasados, rechazo a los
despidos y no al cierre de hospitales.
Cambio de rumbo
El Comando Nacional Unificado ampliado, integrado por las tres centrales obreras y los
pensionados, señala que el Congreso de la República que tiene como fecha límite el 19 de octubre
para aprobar el Presupuesto Nacional, está en la obligación de atender las justas demandas de los
asalariados, que no "tienen por qué pagar los impuestos que los ricos evaden".
Los sectores sindicalizados se han pronunciado por el cambio de rumbo en la economía, planteando
el respeto al derecho al empleo y la conservación del poder adquisitivo de los salarios. El aumento
del salario de los trabajadores, según el analista económico César Giraldo, no tiene efectos fiscales
considerables y en cambio estimula la economía. Cada punto de incremento en los salarios equivale
a la milésima del Producto Interno Bruto, PIB. Es decir, si el gobierno en vez de reajustar los
salarios en un 14 %, los aumentara al 20%, el efecto sería del 0.3% del PIB, tres milésimas del PIB.
Los trabajadores organizados plantean un modelo alternativo que permita defender el mercado
interno y poner barreras a la importación indiscriminada de productos, fenómeno que está teniendo
efectos catastróficos para la economía, especialmente luego de las crisis rusa y asiática y el
derrumbe de las bolsas de valores. Para los sectores laborales, la pérdida de competitividad de la
economía colombiana es resultado de las políticas de expansión del capital financiero. Al ser la
crisis mundial el reflejo del sistema capitalista, no se puede plantear que sean los trabajadores los
que tengan que pagar los "platos rotos", aseguran.
Las propuestas concretas para establecer un modelo alternativo de desarrollo son las siguientes:
* Recuperar el control frente a los capitales financieros. No se puede aceptar que éstos continúen
llegando a nuestros países, obtengan rentas sin hacer ninguna inversión productiva, o sea en la
economía real, y se vayan impunemente por donde llegaron. El capital financiero debe pagar
impuestos.
* Recortar el IVA e incrementar los impuestos a las importaciones.
* Redefinir las reglas del juego frente a los bonos de pensiones. No es justo que el ahorro de los
trabajadores vaya a dar a manos del capital financiero especulativo, como lo está proponiendo la
reforma Pastrana.
* Renegociar la deuda. La mitad de los gastos de la nación se va en el pago del servicio a la deuda:
35 ó 40 por ciento del presupuesto nacional, mientras el otro 15 por ciento se transfiere a los
fondos privados de pensiones.
https://www.alainet.org/es/articulo/104199?language=en