Continúa el planificado descalabro de Codelco

02/09/2014
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El 29 de agosto fueron presentados públicamente los resultados de Codelco para el primer semestre de 2014, que arrojaron excedentes de US$ 1.310 millones. De lejos, son los peores resultados de toda la historia de la empresa, habida cuenta del volumen de producción y los precios alcanzados por el cobre y subproductos. Estos excedentes no son siquiera un tercio de los excedentes del primer semestre del año 2006. Sin embargo, ese año, el precio y la producción de cobre fueron inferiores en 6% al precio y la producción del primer semestre de 2014.
 
Los desastrosos resultados del primer semestre de este año no son casuales ni el fruto de una mala administración, sino el resultado de una política planificada para endeudar y arruinar Codelco, con el propósito de crear las condiciones para su privatización. Este planificado descalabro de Codelco fue puesto en obra a partir de abril del año 2010, cuando las trasnacionales mineras se apropiaron de la administración de la Corporación, con Diego Hernández en la Presidencia Ejecutiva, Thomas Keller en la Vicepresidencia de Finanzas, y otros ejecutivos en vicepresidencias y gerencias de Codelco.
 
Las transnacionales lograron el control de Codelco gracias a dos hechos esenciales. Primero: el Nuevo Estatuto Orgánico de la Corporación establecido por la Ley 20.392, aprobado en noviembre de 2009, en el primer mandato de Michelle Bachelet. Entre otras disposiciones, el Nuevo Estatuto dispone que el Presidente Ejecutivo de Codelco no sea designado por el presidente de la República, sino por el Directorio, del cual, además, excluye a los Ministros de Hacienda y de Minería. Adiós el control del Estado. Segundo: en marzo de 2010, Sebastián Piñera, nombró un nuevo Directorio de la Corporación, y este designó Presidente Ejecutivo a Diego Hernández, abriéndole las puertas a los secuaces de las transnacionales mineras que tomaron el control total de la empresa.
 
Los comentarios de la prensa y de los “expertos” fueron favorables a estos nuevos ejecutivos, cuya gran capacidad técnica y experiencia en diversas transnacionales mineras prestigiaban a Codelco y aumentarían significativamente sus resultados. Sólo nosotros nos atrevimos a pronosticar, en abril 2010, que con Diego Hernández y estos nuevos ejecutivos se inauguraba la época de las pérdidas para Codelco.
 
Desafortunadamente, tuvimos razón. Los excedentes de Codelco disminuyeron entre un 30 y 35 % en los años 2010 y 2011. En los años que siguieron los resultados fueron un verdadero descalabro, particularmente el año 2013 y el primer semestre de 2014, cuando los excedentes se redujeron a menos de un tercio de lo que habían sido.
 
Ni siquiera nosotros imaginamos que las transnacionales irían tan rápido, tan lejos, y tan fraudulentamente para destruir Codelco. Los pésimos resultados de los ejercicios 2010, 2011, 2012, 2013 y del primer semestre de 2014, son el producto del fraude y de la estafa. Las pruebas reposan en el análisis de los ingresos por ventas de la Corporación.
 
Para el primer semestre 2014, Codelco declaró ingresos por venta de cobre de US$ 5.002 millones.
Sin embargo, tomando las cifras entregadas por Codelco, si multiplicamos las ventas de 779.000 toneladas de cobre (la producción fue de 877.000 T.), por el precio promedio del primer semestre de 3,14 la libra (US$ 6.914/ton.), los ingresos debían ser de US$ 5.391 millones.
 
¿Cómo “desaparecieron” US$ 389 millones en ese primer semestre, solo por ventas de cobre? ¿En cuánto disminuyeron los ingresos por ventas de los demás subproductos o ingresos de filiales de Codelco como El Abra, La Disputada, Cupic, etc.? No lo sabemos porque esta información no figura en los resultados publicados el 30 de agosto pasado.
 
Para analizar la inexplicable caída de los ingresos desde el año 2010 en adelante, es útil examinar los cuadros estadísticos tomados de las Memorias Oficiales de Codelco, de los ejercicios 2006 a 2013 ( www.svs.cl) titulados "Codelco Antecedentes relevantes".
 
El año 2006 los ingresos de Codelco alcanzaron US$ 17.077 millones. La producción de cobre fue de 1.676.000 ton. y el precio promedio de US$ 6.722/ton.
 
Las ventas de cobre alcanzaron US$ 11.266 millones, o sea el 66% de los US$ 17.077 millones de los ingresos de ese año, ingresos que incluían las ventas de subproductos y las ganancias de filiales como Minera El Abra, Inca de Oro, Agua de Falda S.A., Codelco-Kupferhandel en Alemania, y desde el 2011 Anglo American Sur, ex Disputada.
 
El 2013, lo ingresos fueron de US$ 14.956 millones, US$ 2.081 millones menos que el 2006. Resultado inexplicable habida cuenta que el precio del cobre fue un 14% superior, y para el oro, la plata y el ácido sulfúrico más del doble. Sólo el molibdeno conoció un precio inferior al de 2006. Considerando el precio y la producción del cobre y subproductos, los ingresos de Codelco debían haber superado los US$ 19 mil millones. ¡Unos 5 mil millones de dólares desaparecieron sin explicación alguna, solo en el ejercicio 2013!
 
Las cifras del cuadro anterior muestran que a contar del año 2010 han desaparecido, anualmente, miles de millones de dólares. Es la información de los ingresos por venta, proporcionada por Codelco, la que pone en evidencia que estamos frente una escandalosa defraudación de la Corporación.
 
La única explicación posible es que el cobre y sus subproductos hayan sido exportados a precios muy inferiores a los del mercado internacional. Lo que constituye un delito porque eso está prohibido por el art. 36 de la Ley de la Renta.
 
Es ilegal exportar a precios inferiores al mercado internacional. El N° 4 del art. 97 del Código Tributario establece que las declaraciones maliciosamente incompletas o falsas pueden ser castigadas con presidio menor en sus grados medio a máximo (de 541 días a tres años), y multas del cien al trescientos por ciento de lo defraudado.
 
Exportar el cobre y sus subproductos a precios inferiores al mercado constituye incluso fraude aduanero, en aplicación de las letras a y b del art. 181 de la Ordenanza de Aduanas, delito castigado con presidio en su grado mínimo a medio y multas de 5 veces del valor de lo defraudado.
 
Además se configuraría el delito de malversación de caudales públicos de los art. 233 y siguientes del Código Penal.
 
La cosa puede ser aún más grave: no parece factible que la totalidad del cobre y subproductos hayan sido exportados a precios inferiores al mercado. Probablemente sólo una parte de esas exportaciones se hizo a menor precio y fue comprada por determinadas empresas que estaban al corriente de estos precios de remate. ¿Cuáles empresas? Aquí precisamente podría estar el delito más grave: la asociación ilícita.
 
Que las empresas beneficiadas con estos precios de remate pudieran estar ligadas a las transnacionales mineras para las cuales trabajaron los actuales y ex altos ejecutivos de Codelco sorprendería sólo a los ingenuos.
 
Con relación a estas pérdidas y las ocurridas en los mercados de futuro del cobre, hicimos una denuncia ante el Consejo de Defensa del Estado, en noviembre 2013. El Consejo de Estado designó dos abogados para la investigación, pero hasta la fecha no ha entregado ningún informe acerca de esta investigación. El desfalco no terminará mientras las transnacionales mineras sigan regentando Codelco.
 
Y quienes hacen la vista gorda –incluyendo al Ejecutivo– incurren en notable abandono de sus deberes.
 
Julián Alcayaga - presidente ONG Chile-Cobre
 
https://www.alainet.org/es/active/76750
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