El Frente de Resistencia contra el régimen del presidente Jean-Bertrand Aristide anunció haber tomado el control de la ciudad de Gonaives (centro-oeste del país), luego de enfrentamientos con la policía que dejaron 4 muertos, 20 heridos y varias casas incendiadas, de acuerdo con un balance que fue comunicado a la prensa por los responsables del Frente. La comisaría de la ciudad, abandonado por los policías luego de algunas horas de resistencia, ha sido tomado e incendiado por los miembros del Frente de Resistencia, antiguos partidarios incondicionales del actual régimen. Otros edificios, entre ellos la residencia del alcalde Topa Moise, fueron incendiados. Un centenar de presos aprovechó la situación para huir. Ninguna autoridad local ha sido vista en Gonaives, donde los tiros aislados se oían todavía al final de la noche, de acuerdo con testimonios obtenidos por teléfono por Alterpresse. El portavoz del Frente, Winter Etienne, quien se proclamó el 28 de enero, alcalde de la ciudad, dio a conocer que las muertes registradas corresponden a civiles que pasaban cerca de la comisaría en el momento de los incidentes. Él ha declarado a Gonaives "ciudad liberada". Los miembros del Frente anunciaron una amplia lucha para "liberar" las otras ciudades del departamento de Artibonite. Han expresado que la seguridad se establecerá a fin de favorecer el retorno de las actividades comerciales. Millares de personas salieron a las calles al inicio de la noche para manifestar su alegría y reiterar su demanda de demisión del presidente Aristide, según reportaron corresponsales. Ninguna reacción oficial ha sido registrada a propósito de los graves incidentes que se produjeron en Gonaives, ciudad céntrica, que da acceso vial a otros tres departamentos del país, el nor-oeste, el norte y el nor-este. La violencia había crecido estos últimos días en Gonaives, en medio del espectáculo horrendo de cuerpos en descomposición tirados en la calle y devorados alegremente por chanchos o perros. Al menos cuatro situaciones de este tipo han sido constatadas por corresponsales de la prensa desde el 30 de enero pasado, alimentando las especulaciones en una ciudad fuertemente dividida, con dos focos de tensión mayores, los barrios de Raboteau y de Descahos. Raboteau es el feudo de los partidarios del antiguo jefe de banda de Lavalas, Amiot Metayer, quienes le dieron la espalda a Aristide, a quien atribuyeron el asesinato, en septiembre pasado, de su líder. En Descahos, la policía local habría armado una banda rival, cuyo jefe es Guy Poupoutre, para combatir a la "guerrilla" de Raboteau, según dieron a conocer los responsables del Frente. Habiendo perdido el control efectivo de la ciudad, la policía seguía marcando su presencia únicamente mediante incursiones esporádicas, muchas veces mortales, en zonas sensibles. Dos personas fueron muertas y cinco heridas en la noche del 31 de enero al 1º de febrero, durante una operación policial. Los miembros del Frente de Resistencia continuaron sin embargo desafiando a las autoridades. Sus manifestaciones casi cotidianas para reclamar la demisión del Jefe de Estado fueron desbordando su feudo para extenderse a otras partes de la ciudad. La violencia registrada en Gonaives desde el 23 de septiembre pasado ha dado como resultado, hasta ahora, más de 50 muertos y un centenar de heridos.