El anillo de doña Laura
- Opinión
El anillo de doña Laura Chinchilla, que tan flamantemente lució en su principal imagen de campaña, requirió la extracción de más de 250 toneladas de rocas y minerales, que después de pasar por un proceso de lixiviación con cianuro, fueron reducidos al fragmento de oro con el que se confeccionó la joya que lleva en el dedo.
Es decir, que entre ella y su esposo, requirieron 500 toneladas de materiales removidos y sometidos al proceso químico mencionado, con el fin de sellar con oro su unión matrimonial.
Quizás
Si doña Laura leyera el texto completo, además de la resolución de abril del Parlamento Europeo, y la documentación mundial sobre el tema, y si se hubiera tomado la molestia de escuchar nuestros argumentos sin rechazarlos mecánicamente, quizás no se quitaría el anillo –que debe tener un elevado valor sentimental para ella y para el señor Rico más allá del oro-, pero sí tendría más elementos para decidirse a derogar el decreto de Oscar Arias que declara de Conveniencia Nacional el proyecto minero en Crucitas. Es la única persona con la potestad de hacerlo, según lo reconoció
La peor demanda para Costa Rica, será la factura ambiental que nos pasará esa industria voraz y destructora, y el juicio más duro será el de la historia, y el de las generaciones venideras que señalarán a los responsables de no cumplir con el encargo que les fue dado para proteger lo que es también de quienes no han nacido.
David Rojas,
17 días en Huelga de Hambre
Domingo 24 de Octubre, 2010
Del mismo autor
- Indemnización e institucionalidad 22/10/2010
- El anillo de doña Laura 30/09/2010