Elecciones son ilegales

ALAI

26/10/2009

Opinión

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Mientras la OEA ha entrado en el juego de los golpistas de “quemar tiempo”, la Resistencia señala que si el presidente Manuel Zelaya no es restituido, las elecciones son ilegales y el gobierno que salga de ellas no tendrá ninguna validez ni legitimidad.

“El Frente Nacional contra el Golpe de Estado tiene la posición de que si el Presidente Zelaya no es restituido ahorita en el mes de octubre, las elecciones son ilegales, no podrán ser reconocidas (…) porque al participar en las elecciones estaríamos reconociendo al gobierno de facto, y como pueblo hondureño tenemos muchos días de lucha, y no vamos a vender nuestra convicción de que se debe restituir a nuestro presidente constitucional”, señala Wendy Cruz, integrante de Vía Campesina –Honduras, una de las organizaciones sociales más activas en la Resistencia al golpe de Estado que derrocó al Presidente Zelaya el pasado 28 de junio.

Desde el 21 de septiembre, fecha en que regresó el Presidente Zelaya a Honduras y se alojó en la Embajada de Brasil, el mandatario ha permanecido cercado y sometido, por parte de los golpistas, a un constante acoso. El retorno de Zelaya, sin embargo, forzó a los golpistas a dialogar. Wendy Cruz señala que la vía de la solución es el diálogo y los métodos pacíficos, sin embargo, el gobierno de facto, encabezado por Roberto Micheletti, se “ha estado burlando del diálogo porque un día acuerda una cosa con la comisión del presidente Zelaya y después, al día siguiente, luego de que Micheletti ha ido a consultar con las FFAA, viene con otra postura”.

“Una de las cosas – continúa Wendy- que no quieren que quede evidenciado es que hubo un golpe de Estado contra nuestro país, y nuestro presidente, y al restituir al Presidente Zelaya, y firmar un pacto es reconocerlo, y ellos no quieren reconocerlo. Están queriendo imponer una tercería, que no se quede ni el Presidente Zelaya, ni Micheletti sino otra persona. Pero esto es anti-inconstitucional, en la Constitución de nuestra República eso no está contemplado. Ellos están alargando el periodo, porque dicen que quieren entregar el poder en enero. Entonces lo que quieren es fortalecer a la oligarquía del país, que es la que ha mantenido el golpe de Estado”.

Este 26 de octubre se cumplieron 121 días de lucha popular en contra de la asonada militar. El Frente ha mantenido una decisión inquebrantable de luchar, pese a la constante represión y a la permanente violación de los derechos humanos. ¿Cuáles son los factores que impulsan al pueblo a continuar en la pelea?, preguntamos a Wendy.

“En la actualidad vivimos –responde- altos índices de pobreza, de exclusión y de desempleo, pero hemos tenido momentos de reivindicaciones para la población hondureña. Por ejemplo, el Presidente Zelaya aumentó el salario mínimo en un 60 por ciento. Para el área rural, se aprobó un decreto para legalizar 408 expedientes de grupos campesinos que habían estado luchando por la tierra por más de 30 años. No se permitió la privatización de la portuaria, de la empresa nacional de energía eléctrica, de Hondutel (telefonía). Tenemos un alto grado de inseguridad, de desempleo, desigualdad social, la población vive en una extrema pobreza. Toda esa desigualdad social ha llevado también a buscar respuestas. El pueblo dice: ahora ya no queremos promesas de campaña, queremos cosas concretas para el pueblo y necesitamos cambios”.

Y continúa: “el golpe de Estado ha venido a darnos un alto grado de madurez política. Nunca en la vida habíamos soñado romper el partidismo que hemos vivido durante 100 años, que nos ha tenido sometidos, hoy sabemos de esa falsa democracia participativa que nos han impuesto durante años, ahora reclamamos una participación activa y propositiva ante todas las autoridades. Porque nosotros en Honduras estamos en una indefensión total, porque están raptadas las instituciones del Estado, como la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio Público, el Fiscal General de la República. Y nosotros nos preguntamos: ¿por qué está todo raptado? Porque en el Congreso Nacional está todo el poder, ahí se elige el Tribunal Supremo Electoral a los magistrados de la Corte Suprema. ¿Y quienes son los representantes del Congreso? Son los representantes de los empresarios. Y han llegado al poder manteniéndonos en una democracia falsa, porque ellos tienen control del Tribunal Supremo Electoral, hacen fraude que la población ni se entera”.

Los objetivos irrenunciables del Frente

Las organizaciones sociales han sido uno de los puntales del Frente Nacional contra el Golpe de Estado que aglutina tanto a las fuerzas sociales como a las fuerzas políticas progresistas de Honduras. En la dura lucha por la restitución del hilo constitucional de Honduras, el Frente se ha ido ganando el reconocimiento pleno y genuino de la población. Uno de los factores que han permitido la consolidación del Frente es la unidad de todos los movimientos sociales, derrotando así los intentos de división que se han lanzado a través de campañas mediáticas.

Para Rafael Alegría, dirigente de Vía Campesina y del Frente, éste último tiene tres objetivos irrenunciables: (1) Luchar hasta lograr la restitución del orden constitucional en el país. (2) La restitución del Presidente Zelaya y (3) Que llegó la hora de una Asamblea Nacional Constituyente, formada por los varios sectores y actores de la sociedad hondureña, como estudiantes, mujeres, campesinos, indígenas, y también de los partidos políticos. Alegría aclara que “algunos de nosotros no hemos sido zelayistas ni liberales, pero reconocemos que él es el Presidente que el pueblo hondureño ha elegido y que en el último año y medio hizo obras a favor de los mas desposeídos”.

En el transcurso de los diálogos entre los representantes de Manuel Zelaya y los golpistas, el Frente ha hecho conocer que no renunciará a la lucha por la Asamblea Nacional Constituyente. Wendy Cruz enfatiza: “Este proceso nos ha dado como ciudadanos/as una maduración política, antes nadie sabía lo que era una Asamblea Constituyente, ahora todo el pueblo sabe, y esa no es una reivindicación del Presidente Zelaya sino de todo el pueblo. Nosotros queremos una nueva constitución incluyente, democrática y participativa. Una participación igualitaria de todos los movimientos, sin excluir a empresarios, pero también nosotros queremos recuperar nuestros recursos naturales, porque en Honduras, tenemos un índice de pobreza del 80% de la población y en el área rural un 60% de extrema pobreza”.

Y concluye: “Nosotros somos optimistas y estamos convencidos que vamos a vencer, que vamos a ganar esta batalla. Nosotros hemos dado una lucha de 121 días, y no estamos dispuestos a renunciar a nuestras reivindicaciones sociales. Nosotros decimos: ¡hoy o nunca van a surgir los cambios en Honduras! Y estamos firmes, convencidos que con la firmeza, convicción y compromiso que pongamos cada uno de los hondureños/as vamos a hacer esos cambios en el país. Claro, es un camino lleno de espinas, pero a los movimientos sociales, nadie nos ha regalado nada, todo nos ha costado sangre, y muchas vidas, y por aquellos que han dado sus vidas, por esa lucha vamos a continuar firme, adelante, exigiendo los cambios y construyendo ese mundo y ese país mejor para los hondureños y hondureñas. Nosotros somos ricos en recursos naturales, y lamentablemente, en la práctica, nuestras familias están pobres. No es posible seguir viviendo en una exclusión social de más de 100 años, los ricos que están en el poder, más ricos, y nosotros más pobres. Como decimos en Honduras: nunca más un golpe de Estado ni en Honduras ni en el Mundo”.

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