Oviedo puede decidir las elecciones paraguayas

El oficialismo apunta sus baterías contra Fernando Lugo

26/07/2007
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El fortalecimiento de la candidatura presidencial de ex obispo Fernando Lugo, desató la ofensiva del gubernamental Partido Colorado para eliminarlo de la lista de candidatos, dividir a la oposición, o ensuciarlo con falsas acusaciones en todos los medios de comunicación.

El Partido Colorado se ha mantenido en el poder ininterrumpidamente desde 1954, cuando el general Alfredo Stroessner asumió el poder en un golpe de Estado. Su dictadura duró hasta febrero de 1989, cuando fue derrocado por su compadre y consuegro el general Andrés Rodríguez. Rodríguez y los sucesivos presidentes, Juan Carlos Wasmossy, Raúl Cubas, Luís González Macchi y el actual Nicanor Duarte, pertenecen también al Partido Colorado que, durante la dictadura, usaba y abusaba del aparato del Estado.

Por ejemplo, los funcionarios públicos y oficiales del ejército, debían afiliarse obligatoriamente a esa estructura partidaria. Si bien esta obligatoriedad caducó con el fin de la dictadura, el poder del partido dentro del aparato del Estado se mantiene, al punto que el 80% de los funcionarios, están afiliados aún al mismo.

Las elecciones nacionales están convocadas para el 20 de abril de 2008, y aunque todavía no están decididas todas las candidaturas –recién comenzarán a registrarse después del 24 de septiembre- la consigna del gobernante Partido Colorado es impedir a toda costa que Lugo acceda a la presidencia.

La maniobra realizada tiempo atrás con colaboración del Vaticano para que no prosperara su candidatura parece haber fracaso, por lo que ahora se buscan otros métodos. Desde la acusación infundada de mantener vínculos con “secuestradores y terroristas” hasta promover la división de la Concertación Nacional que postula a Lugo y, en lo que sería la última maniobra, acceder a liberar al general (r) Lino Oviedo, preso por un intento golpista en 1996, para que pueda postularse como candidato a presidente.

Actualmente el grupo escindido del Partido Colorado que responde a Oviedo, Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (UNACE) permanece en la Concertación Nacional pero ya ha discrepado y amenazado con salir de la coalición, por discrepancias en la forma en que se resolvió conceder la plaza de candidato a la vicepresidencia al Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).

Precisamente cuando se aprobaba la fórmula Lugo-PLRA –aún no se ha nominado al candidato- el gobierno negociaba la posibilidad de liberar a Oviedo mientras sus partidarios exigían una definición de la Suprema Corte al entender que ya ha cumplido la pena por el intento golpista y ha prescripto la otra acusación sobre su responsabilidad intelectual en el asesinato del ex  vicepresidente de la republica, Argaña y la muerte de estudiantes en la manifestación de marzo de 1997 (en ambos casos, Oviedo estaba fuera del país).

Todos contra Lugo

“Impedir el acceso al gobierno de nuestro país de un sospechoso de tener vínculos con secuestradores y criminales, como Fernando Lugo, es la consigna”, aseguró un funcionario de Aduanas y líder de una seccional del Partido Colorado, Ernaldo Edgardo Cardozo al diario ABC Color de Asunción.
“Como nunca, la dirigencia colorada está ante el reto de lograr, como sea, seguir en el poder”. El dirigente colorado sostuvo que la consigna de impedir el acceso al gobierno de Lugo, fue planteado en las reuniones de más alto nivel de su partido, y en especial en encuentros con el presidente de la república, Duarte Frutos.

El mismo día, el presidente Duarte, en plena campaña electoral contra la oposición, acusaba a los medios de comunicación de manipular hechos contra el Partido Colorado, mientras protegen al ex obispo Lugo. Duarte sostuvo que “hay una conspiración de sectores mediáticos, periodistas inescrupulosos y opositores incapaces, ineptos, contra el gobierno, contra el Partido Colorado, por vía de la manipulación de los hechos, de la distorsión de la realidad”. Aseguró que “cuando un colorado resulta sospechoso sin ninguna prueba, sin ninguna evidencia, sin ningún indicio, se le condena de antemano desde el poder mediático.

Sin embargo, cuando el sospechoso de un hecho punible o de vinculación con bandas de secuestradores es un anticolorado y mejor si le enfrenta al coloradísimo, la maquinaria mediática y los grupos opositores le encubren, le protegen y hasta le ensalzan, como ejemplo de moralidad”, dijo en alusión a Fernando Lugo.
Pero la ofensiva contra Lugo no se centra solo en las declaraciones. Días atrás, fue ampliamente difundido un dossier –supuestamente elaborado por servicios del Ministerio del Interior- donde se acusaba al ex obispo de vínculos con grupos radicales de izquierda y con sospechosos de secuestros y asesinatos, y hasta de tener una hija pese a su voto de castidad como sacerdote.

Los servicios activos

Aunque el debate se centró en rechazar las acusaciones completamente sin pruebas contra Lugo, la operación de desprestigio reveló que los aparatos de seguridad del gobierno siguen operando contra los ciudadanos, espiando sus vidas y montando operativos de propaganda al servicio del Partido Colorado.
Previo a la divulgación del dossier, el presidente de la república acusó a Lugo, en diversos actos públicos, de tener vinculación con el secuestro y asesinato de Cecilia Cubas –la hija del ex presidente y cuyos autores serían ex miembros del grupo de izquierda Patria Libre y de algunos policías- y de proteger a secuestradores. La precandidata presidencial nicanorista Blanca Ovelar y su compañero de fórmula Carlos María Santacruz, se sumaron al ataque y también lanzaron dudas sobre el ex prelado. Santacruz llegó a decir que Lugo estaría financiando su campaña electoral con dinero producto de secuestros.

El dossier, sostiene que en los expedientes judiciales constarían las pruebas de la vinculación de Lugo con los secuestradores de María Edit Bordón de Debernardi y Cubas, ambos hechos atribuidos a Patria Libre. Otro de los puntos del dossier atribuye al ex obispo vínculos con narcotraficantes, vínculos con la muerte de un campesino y denuncia presuntas relaciones amorosas con mujeres y la paternidad de un hijo o hija.

Como prueba, el dossier presenta una fotografía de una marcha donde Lugo aparece caminando cerca de dos dirigentes de Patria Libre, acusados ahora del secuestro y asesinato de Cecilia Cubas. Otras de las “pruebas” es una fotografía borrosa donde Osmar Martínez, presunto líder de Patria Libre y preso por el secuestro y asesinato de Cubas, aparece en un teatro en un Congreso en Libia junto a un hombre que se parece a Lugo. El propio Martínez declaró que el hombre de la foto es un dirigente de izquierda mexicano y afirmó que Lugo nunca fue a ese congreso en Libia.

Con esta vaguedad de pruebas, el presidente Duarte acusó a Lugo de ser “perjuro y fariseo”, “protector de criminales y secuestradores” y “estafador de los sueños del pueblo católico”. Presionando a la justicia, Duarte reclamó que “los fiscales se animen a investigar” al ex obispo de San Pedro.

En la misma línea salió a declarar el precandidato a vicepresidente de la república por el oficialismo, Carlos María Santacruz. “A monseñor Lugo no le espera el palacio de López –sede de la presidencia- sino la cárcel, porque él tiene que pagar el delito que cometió” sostuvo.

Por su parte Lugo rechazó las denuncias y entregó un informe en las oficinas del fiscal antisecuestro Rogelio Ortúzar, exigiendo que sus acusadores presenten pruebas de las graves afirmaciones que lo vinculan a hechos criminales. El fiscal, aclaró que su oficina no tiene ninguna prueba que vincule a Lugo con los hechos denunciados por el oficialismo.

Oficializan candidatura de Lugo

La semana pasada, la mesa de presidentes de partidos de la Concertación Nacional resolvió por mayoría designar a Fernando Lugo como candidato presidencial para el 2008.

La decisión no fue aceptada por Unace, Patria Querida y el Partido Independiente, minando así la unidad de esa fuerza opositora.

Carlos Filizzola, ex alcalde de Asunción, y titular del Partido País Solidario informó que, por “una amplia mayoría”, decidieron apoyar la postulación presidencial de Lugo y la vicepresidencia para un representante que nombre el PLRA. Destacó que esta determinación también es respaldada por todos los sectores de la sociedad civil organizada, integrantes de la Concertación Nacional, que ya resolvieron semanas atrás apoyar la dupla Lugo-PLRA.

La resolución fue respaldada por los partidos PLRA, País Solidario, Encuentro, Febrerista, Demócrata Cristiano, Socialista y por Rafael Filizzola, quien participó de la reunión en representación del ex obispo.

Los grupos más a la derecha de la coalición, Unace, Patria Querida y el Partido Independiente, sostienen que la definición de las candidaturas es apresurada, y esperaban competir con Lugo para encabezar la fórmula presidencial. El empresario Pedro Fadul, de Patria Querida, quería competir con Lugo a través de la realización de una encuesta a fines de octubre, y lo mismo querían hacer los representantes de Unace, más adelante, ante la certeza de que su líder, el general Lino Oviedo, salga en libertad y sin impedimentos para presentar su candidatura a tiempo.

La decisión dejó lesionada la coalición y apresuró las negociaciones del gobierno con Unace para liberar a Oviedo. Su liberación y posible candidatura sería un golpe demoledor a la coalición opositora, y podría volver a reunificar a los sectores del Partido Colorado detrás del ex militar.Aunque los grupos disidentes sostienen que se mantienen dentro de la Concertación, la posibilidad de una ruptura quedó abierta.

En un comunicado conjunto, señalaron que la decisión fue ilegal y contraria a los acuerdos fundacionales de la Concertación de febrero. El dirigente de Patria Querida, Daniel Codas, sostuvo que “los intereses personales empañan el proceso. Este episodio demuestra que aún existen personas dispuestas a incumplir los acuerdos”.

Por su parte, el presidente de Unace, Enrique González Quintana, dijo que su partido hará su convención, y recién entonces adoptará una posición definitiva sobre las elecciones del 2008.

Estimó que de concretarse la libertad de Oviedo, se daría inicio a una nueva etapa y aclaró que tanto Unace como Patria Querida continuaran pugnando por la chapa presidencial con miras al 2008.

Mientras tanto, el oficialismo, que fracasó en su intento por reformar la Constitución y permitir la reelección, presenta tres precandidatos a la presidencia que se resolverá en elecciones primarias en el mes de diciembre.

Hasta ahora se postulan la ex ministra de Educación, Blanca Ovelar, apoyada
por el presidente Duarte, el actual vicepresidente, Luís Castiglioni, y el titular del partido, José Alberto Alderete.

Liberar a Oviedo

El general Oviedo, considerados por unos como preso político y golpista por otros, es la clave para la victoria electoral de las próximas elecciones. Según las últimas encuestas, el partido oviedista, sin su líder como candidato, tiene alrededor de 15 por ciento de la intención de voto para las próximas elecciones.

El ex militar emergió como una figura política importante luego del golpe del 3 de febrero de 1989, que puso fin a la dictadura del general Alfredo Stroessner. Enfrentado a otro sector del Partido Colorado –vinculado al strossnismo- Oviedo fracasó en sus intentos de llegar a la presidencia.

Se encuentra en prisión en una unidad militar desde 2004, cumpliendo una condena a 10 años de prisión por su frustrado levantamiento en abril de 1996 contra el ex presidente Juan Carlos Wasmosy (1993-1998). También enfrenta un proceso como presunto autor moral del asesinato del vicepresidente del país, Luís María Argaña, el 23 de marzo de 1999, y de la muerte de siete jóvenes en los disturbios callejeros que siguieron a ese hecho.

En 1997 Oviedo fue ungido candidato del Partido Colorado para las elecciones presidenciales, pero un Tribunal Militar Extraordinario ordenó su arresto por el golpe frustrado contra Wasmosy. Desde prisión, Oviedo impulsó la campaña de su compañero de fórmula, Raúl Cubas, quien finalmente obtuvo la presidencia. Apenas asumió el cargo, Cubas conmutó la sentencia del ex militar y lo dejó en libertad.

En 1999 Oviedo intentó alcanzar la presidencia del Partido Colorado, pero la historia dio un giro a causa del asesinato de Argaña. Cubas partió al exilio y fue reemplazado por Luís González Macchi (1999-2003). Oviedo huyó del país. Primero se estableció en Argentina y luego en Brasil, hasta que en 2004 volvió a Paraguay y se sometió a la justicia.

Actualmente se están desarrollando dos caminos para la liberación de Oviedo. En primer lugar fue presentado un proyecto de amnistía en la Cámara de Senadores, elaborado por Unace y que ya ha recibido el respaldo de la dirigencia del Partido Liberal Radical Auténtico. Sin embargo, aún no están los votos suficientes, ya que legisladores de la Concertación Nacional –que integra Unace- no están de acuerdo con liberar al ex jefe del ejército.

Paralelamente, y aunque todas las partes lo desmienten, se desarrollan negociaciones entre el gobierno y Unace y la justicia militar y civil analizan dar por cumplida una de las condenas de Oviedo y aceptar la caducidad de otras.

El presidente Nicanor Duarte, vaticinó en un acto político que en breve se disolverá la Concertación, lo que fue interpretado por los analistas políticos como un adelanto de la liberación de Oviedo, ya que se estima que en libertad presentaría y ello dividiría a la coalición opositora ya que hay sectores que no aceptan otra candidatura que la de Lugo.

Los abogados de Oviedo presentaron un escrito para revisar la condena ya que si la Suprema Corte de Justicia Militar anula el fallo, el militar quedará habilitado para candidatarse a la presidencia de la República. También indican que sumando el tiempo que estuvo preso antes de ser liberado por Cubas y después de su regreso al país en 2004, el general ya ha cumplido más de la mitad de la condena de 10 años por su intentona golpista.
En los procesos llevados adelante por la justicia ordinaria por la masacre de jóvenes y el crimen de Luís María Argaña, la defensa de Oviedo solicitó la extinción de ambos juicios. Si se hace lugar a la pretensión del militar, quedará totalmente desvinculado de las causas. Esta posibilidad quedó abierta con las últimas designaciones en la Suprema Corte de Justicia, donde 2 de los 3 miembros responden al PLRA que se pronunció por una amnistía.

Todos niegan negociaciones

En una de sus pocas declaraciones públicas, el general Oviedo negó que exista un acerbo con el gobierno para ser desvinculado de los procesos judiciales. “Yo no necesito una negociación. El Ejecutivo mismo dijo que no es un juez, ni un ministro de la Corte. Mi caso está por una parte en la Corte y en la cámara de apelaciones, y allí se tiene que resolver”, refirió. “Yo solo vine a pedir lo que a mí me corresponde en derecho, y eso es mi libertad por todo el tiempo que estoy procesado”, manifestó.

El presidente del Partido UNASE, Enrique González Quintana, aseguró que no se negocia con el oficialismo la liberación de Lino Oviedo. “El va a salir porque la ley lo ampara”, indicó. “¡Que negociacion puede haber! No existe negociación, ya que no tenemos nada que ofrecerle a Nicanor. Si él está hablando con nosotros, no va a salir a contar. Esa es la lógica de la vida. Cuando se cuenta sobre algo que se está negociando, no tiene sentido”, manifestó González Quintana.

Sin embargo, el ex presiente Juan Carlos Wasmosy dijo que es evidente que Lino Oviedo está negociando con el Ejecutivo y que sería liberado en algunas semanas más.

De la misma opinión es el senador colorado Juan Carlos Galaverna.

El polémico senador oficialista dijo que “no es nueva la situación de charla entre Unace y Nicanor... se dieron con mucha fluidez, solo que ahora adquirió estrado público, para la especulación morbosa”. Agregó que hay numerosa comunicación telefónica.


Los paraguayos elegirán al sucesor del presidente Nicanor Duarte el 20 de abril de 2008 para un nuevo periodo de gobierno de cinco años.

Juan Manuel Morales, presidente del Tribunal Electoral, dijo que a partir del 24 de septiembre próximo los movimientos y partidos políticos podrán entregar sus padrones para verificaciones, pero sólo desde el 18 de febrero se autorizará la propaganda electoral.

Los anotados en el padrón electoral nacional, que hasta el momento son un poco más de dos millones de mayores de 18 años, elegirán presidente y vicepresidente, y además a 80 diputados, 45 senadores y 17 gobernadores departamentales con sus respectivos miembros de concejalías locales.

"El 23 de mayo de 2008 haremos las proclamaciones de los candidatos electos y la asunción al mando del presidente, vicepresidente y gobernadores se cumplirá el 15 de agosto", añadió el funcionario.

Fuente: Barómetro Internacional
Análisis Político y Social Nacional e Internacional
De Venezuela y el Resto del Mundo.
https://www.alainet.org/es/active/18772
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