Las organizaciones de derechos humanos miembros del Equipo Regional de Monitoreo y Análisis de los países de Guatemala, El Salvador , Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, luego de tres meses de ocurrido el asesinato de tres diputados salvadoreños del PARLACEN y su piloto, quisiéramos hacer las siguientes consideraciones:

1. Algunos de nuestros países, como Guatemala, El Salvador y Honduras estuvieron involucrados en la década de los setenta en conflictos armados, en donde las estructuras policiales y militares fueron cómplices de graves violaciones a los derechos humanos, ya que durante los regímenes militares jugaron un rol de defensa de los intereses de los grandes poderes económicos. Aún en los países centroamericanos en donde no hubo conflictos armados, el problema del sometimiento de las instituciones policiales y militares a la ley y al respeto de los derechos humanos, siempre ha sido una preocupación,

2. Con la finalización de los conflictos armados en la región, y con las firmas de acuerdos de paz en algunos de nuestros países, nuestras instituciones militares y policiales fueron sometidas a procesos de redefinición y reestructuración en donde el eje central de la discusión fue la separación entre la seguridad nacional y la seguridad pública y la idea de una policía de carácter civil. La mayoría de nuestros países han pasado por esos procesos, y los avances en estos años han sido importantes, pero hoy en día se puede decir que la mayoría de las instituciones de seguridad en la región siguen violando los derechos humanos de la población.

3. Un factor que ha impedido el éxito de estos procesos ha sido la corrupción, y la incapacidad de nuestras instituciones de depurar y deducir responsabilidades sobre los responsables de crímenes de lesa humanidad en el pasado reciente, lo que ha ido complejizandose con el fenómeno del narcotráfico y el crimen organizado. Conforme lo define el Código Penal Alemán, Crimen organizado es la violación planificada de la ley al objeto de adquirir beneficios económicos o poder, cuyos delitos son independientemente o en su conjunto de especial gravedad y se llevan a cabo por más de dos participantes que cooperan en el marco de una división laboral por un periodo de tipo prolongado o indeterminado utilizando (a) estructuras comerciales o paracomerciales, o (b) violencia o otros medios de intimidación, o (c) influencia en la política, en los medios de comunicación, en la administración pública, en el sistema de justicia y en la economía legítima.

4. El asesinato el día 19 de febrero de los corrientes de tres diputados del Parlamento Centroamericano y su piloto en ciudad de Guatemala, constituye un caso que además de conmocionar al público por las condiciones en que se da y el perfil de las victimas, denota a juicio de nuestras organizaciones; el caso más revelador en los últimos años de que el crimen organizado se ha enquistado en nuestras instituciones.

5. Conforme los acontecimientos que se han ido dando luego de los asesinatos, ahora es claro que dentro del Ministerio de Gobernación y la policía guatemalteca ha venido funcionado una estructura paralela responsable de actos de limpieza social, y conectada con estructuras del crimen organizado. Una carta de uno de los involucrados prófugos dada a conocer hace algunas semanas, también señala el involucramiento del Presidente Oscar Berger dentro de estas estructuras.

6. Los hechos también indican, que los mismos involucrados en los asesinatos y en estas estructuras se hicieron cargo de las investigaciones, e hicieron todo lo posible por entorpecer la misma: ocultando o destruyendo información, dando versiones falsas o inexactas de los hechos y hasta su involucramiento en la muerte de los cuatro policías señalados como autores materiales que fueron asesinados dentro de una prisión a tan solo 24 horas de haber ingresado.

7. A juicio de nuestras organizaciones, el caso de la muerte de los diputados en Guatemala, no debería verse como un fenómeno exclusivo de este país. La existencia de estructuras paralelas que funcionan al margen de la ley, son un fenómeno que se ha dado en las historia de nuestros países bajo diferentes formas como los llamados “Escuadrones de la Muerte ” o grupos de exterminio o limpieza social. Por ejemplo, en El Salvador , en las década de los noventa, Víctor Rivera, alías Zacarías, el mismo que era asesor del Ministro de Gobernación guatemalteco, tenía una estructura montada con la anuencia del entonces Ministro de Seguridad Salvadoreño. Prácticamente hay denuncias de la actuación de grupos al margen de la ley en la mayoría de países de la región

8. Estos grupos ilícitos que funcionan al margen de la ley, que en el pasado fueron parte de estructuras militares, han evolucionado hacía una compleja red de criminales involucrados ya no solo en la represión política, sino en el narcotráfico, en el lavado de dinero y otras formas de crimen organizado. Aunque no se conoce con exactitud los niveles de injerencia, se considera que estos grupos han penetrado prácticamente todos los niveles de instituciones de nuestros Estados, especialmente si consideran los casos de funcionarios centroamericanos que han sido procesados o detenidos por su relación con el crimen organizado en los últimos años.

9. El resultado de la investigación hasta ahora no ha identificado a los autores intelectuales, ni despejado las dudas sobre que otros funcionarios puedan estar involucrados, por lo que tememos que debido a la influencia de los grupos ilícitos en nuestras instituciones, este caso, quede en la impunidad, como tantos otros. Por ello se impone la necesidad de una investigación independiente e imparcial que asegure explorar hasta sus raíces los móviles y los involucrados. No puede dejarse por tanto en esta investigación, la posible relación o participación de algunos de los diputados asesinados con actividades de narcotráfico o crimen organizado. Sobre todo tomando en consideración, que en nuestros países hay ya varios casos de diputados o funcionarios involucrados en actividades ilícitas.

10. Al reflexionar sobre el caso de los diputados salvadoreños, debe tomarse en cuenta que se trataba de funcionarios de un organismo supranacional, como el Parlamento Centroamericano, es decir, funcionarios envestidos de una alta importancia en el espectro político centroamericano.

11. Nuestras organizaciones, preocupadas por la situación de derechos humanos en la región, hacen un llamado a las autoridades de Guatemala y El Salvador, para contribuir al esclarecimiento de la muerte de los diputados del PARLACEN, a través de un proceso independiente e imparcial que permita identificar, juzgar y sancionar a los responsables, incluidos los funcionarios involucrados.

12. A las autoridades del PARLACEN contribuir al combate del crimen organizado y su injerencia en nuestros gobiernos, propiciando el desarrollo , debate o cumplimiento de las normas internacionales para el combate del crimen organizado y de la corrupción.


- El Equipo Regional de Monitoreo y Análisis está integrado por las siguientes. Organizaciones: el Grupo de Apoyo Mutuo – GAM – de Guatemala; el Comité de Familiares de Víctimas de violaciones a los derechos humanos –CODEFAM – “Marianela García Villas” de El Salvador; el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos – CENIDH - ; la Comisión de Derechos Humanos de Panamá; el Comité de Derechos Humanos de Honduras –CODEH – , el Centro de Promoción de los Derechos Humanos de Honduras –CIPRODEH-, el Departamento Jurídico de la Iglesia Luterana Costarricense - ILCO - y la Fundación salvadoreña para la Aplicación y Estudio del Derecho – FESPAD.