Crispación en la Cámara
29/11/2006
- Opinión
Puebla.- Ante los hechos bochornosos ocurridos en la víspera y que todo hace suponer que continuarán, calificados por la mayoría de los reporteros parlamentarios de muy violentos, aunque la sangre fue moderada, puesto que no pasaron de jaloneos, empujones y una que otra cateadita, se desprenden algunos análisis y también varios escenarios ante lo que se supone inminente protesta de ley del presidente electo, Felpe Calderón Hinojosa para así convertirse en Presidente Constitucional.
Lo primero es de mencionarse que no había ninguna necesidad de llegar a esta situación de crispación en la Cámara de Diputados, desgraciadamente todo se fue dando desde el corazón mismo del poder al no llevar al cabo un proceso electoral limpio, impoluto y sobre todo convincente. Nadie puede decir con certeza que esto convenga a cualquiera de las fuerzas políticas del país, todas absolutamente todas continuarán acumulando desprestigio.
Desprestigio que llega hasta al mismo Poder Legislativo. Para nadie es ajeno que, según las encuestas de todas las casas especializadas, en el ánimo del pueblo están en el sótano de las calificaciones los partidos políticos y los diputados y senadores. Esa es una realidad cuya reconstrucción va a constar mucho quehacer de la política profesional, no en la rupestre que parecer ser es la que priva a lo ancho y a lo largo de todo el territorio nacional.
Tomar la tribuna del salón de pleno de la Cámara de Diputados, donde se supone rendirá su protesta el presidente electo, Felipe Calderón Hinojosa no sólo, que era de esperarse por la bancada del Partido Revolucionario Institucional sino también por los miembros del Partido Acción Nacional, ha provocado la sorna de los perredistas que han colocado una manta que a la letra dice: PAN y PRD nos unimos para evitar la toma de posesión del intruso, mientras cómodamente instalados en sus curules los del Revolucionario Institucional festejan sonrientes el sainete porque saben que se han convertido en el fiel de la balanza de estos tiempos de crispación.
¡Cómo estarán las cosas de graves, que lo que primero que se le ocurre a la Mesa Directiva de la Cámara baja, cuyo presidente es el panista, Jorge Zermeño, es desalojar la sala y por delante los medios de comunicación para luego defenderse con el falso argumento de que lo que se pretende para no existan confusiones es que sólo queden en el recinto únicamente legisladores.
Otra vez como se ve se constituye el "corralito de la ignominia", con el cual se trata de acotar la labor periodística para que así la opinión pública quede ahíta de lo que ocurre y ocurrirá entre los llamados anteriormente "padres conscriptos".
Los escenarios los enumeran los propios emberrenchinados legisladores y los priístas que sacan y sacarán raja de estos innobles y vergonzosos acontecimientos. Que gracias al diálogo se llegue a un arreglo y la toma de posesión presidencial trascurra normal, que se busque una sede alterna para la ceremonia de protesta, que no se presente al acto el presidente saliente, Vicente Fox Quesada, como exigen algunos diputados, que se unan al Frente Amplio Democrático legisladores molestos del PRI del PAN y de Convergencia y no se lleve al cabo el rito sexenal y el peor, que no se presente Felipe Calderón y ante ello la Constitución es muy puntual y precisa, si así ocurriera el Congreso nombraría un presidente interino el que convocaría a elecciones en un termino de 14 a 18 meses para elegir al sustituto.
Momentos de crispación, totalmente acumulables al Gobierno que se va. Esperemos que el talento y la buena fe se impongan en beneficio de la nación.
Lo primero es de mencionarse que no había ninguna necesidad de llegar a esta situación de crispación en la Cámara de Diputados, desgraciadamente todo se fue dando desde el corazón mismo del poder al no llevar al cabo un proceso electoral limpio, impoluto y sobre todo convincente. Nadie puede decir con certeza que esto convenga a cualquiera de las fuerzas políticas del país, todas absolutamente todas continuarán acumulando desprestigio.
Desprestigio que llega hasta al mismo Poder Legislativo. Para nadie es ajeno que, según las encuestas de todas las casas especializadas, en el ánimo del pueblo están en el sótano de las calificaciones los partidos políticos y los diputados y senadores. Esa es una realidad cuya reconstrucción va a constar mucho quehacer de la política profesional, no en la rupestre que parecer ser es la que priva a lo ancho y a lo largo de todo el territorio nacional.
Tomar la tribuna del salón de pleno de la Cámara de Diputados, donde se supone rendirá su protesta el presidente electo, Felipe Calderón Hinojosa no sólo, que era de esperarse por la bancada del Partido Revolucionario Institucional sino también por los miembros del Partido Acción Nacional, ha provocado la sorna de los perredistas que han colocado una manta que a la letra dice: PAN y PRD nos unimos para evitar la toma de posesión del intruso, mientras cómodamente instalados en sus curules los del Revolucionario Institucional festejan sonrientes el sainete porque saben que se han convertido en el fiel de la balanza de estos tiempos de crispación.
¡Cómo estarán las cosas de graves, que lo que primero que se le ocurre a la Mesa Directiva de la Cámara baja, cuyo presidente es el panista, Jorge Zermeño, es desalojar la sala y por delante los medios de comunicación para luego defenderse con el falso argumento de que lo que se pretende para no existan confusiones es que sólo queden en el recinto únicamente legisladores.
Otra vez como se ve se constituye el "corralito de la ignominia", con el cual se trata de acotar la labor periodística para que así la opinión pública quede ahíta de lo que ocurre y ocurrirá entre los llamados anteriormente "padres conscriptos".
Los escenarios los enumeran los propios emberrenchinados legisladores y los priístas que sacan y sacarán raja de estos innobles y vergonzosos acontecimientos. Que gracias al diálogo se llegue a un arreglo y la toma de posesión presidencial trascurra normal, que se busque una sede alterna para la ceremonia de protesta, que no se presente al acto el presidente saliente, Vicente Fox Quesada, como exigen algunos diputados, que se unan al Frente Amplio Democrático legisladores molestos del PRI del PAN y de Convergencia y no se lleve al cabo el rito sexenal y el peor, que no se presente Felipe Calderón y ante ello la Constitución es muy puntual y precisa, si así ocurriera el Congreso nombraría un presidente interino el que convocaría a elecciones en un termino de 14 a 18 meses para elegir al sustituto.
Momentos de crispación, totalmente acumulables al Gobierno que se va. Esperemos que el talento y la buena fe se impongan en beneficio de la nación.
https://www.alainet.org/es/active/14742
Del mismo autor
- Cambio climático o el Apocalipsis 19/08/2021
- Democracia participativa 03/08/2021
- Un crimen delesa humanidad que ni la ONU puede parar 25/06/2021
- “López Obrador es el mejor presidente que han tenido”: Trump 10/07/2020
- Los trumpistas mestizos 25/01/2019
- Inédito aumento al salario 19/12/2018
- Los salarios ofensivos 12/12/2018
- Esa ultraderecha golpista y asesina 06/08/2018
- Nuevamente AMLO marcó la agenda 14/06/2018
- España: Se acabó la era Rajoy 01/06/2018