Obstáculos para la constitución de un Estado

El país y la muerte de los mineros

17/10/2006
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¿Qué expresa la muerte de 16 mineros por estos tiempos en Bolivia? (1) ¿Es producto de un desgobierno como afirman no pocos intelectuales y analistas? ¿Es producto de un acto de provocación de la oposición al gobierno nacional, hecho efectivo o inducido por terceros actores? Algo de todo ello existe, pero: ¿Por dónde pasa el eje del conflicto principal en Bolivia, cuando a cada paso y en cada plano de la realidad se suceden los enfrentamientos sociales y políticos con inusitada crudeza? A menos de un año de asumir el gobierno de Evo Morales con el voto de las mayorías, parecería ser que se ha perdido la batalla central, cual es la desarrollada en el área de los hidrocarburos, con el desplazamiento del ministro Andrés Solís Rada, entre otros funcionarios.

 

Veamos. El enfrentamiento por la explotación del estaño en el cerro Posokoni, se desencadenó por las contradicciones entre la Central Obrera de Bolivia (COB), asalariados sindicalizados; en defensa de la gran empresa nacional (Comibol) y la Federación Nacional de Cooperativas (Fencomin), cooperativas alguna de ellas respaldadas por emprendimientos privados, dando como resultado el choque violento entre ambos agrupamientos y el posterior desplazamiento del ministro del área.

 

La protesta social recorre todo el territorio de Bolivia

 

Desde campesinos arrojados del campo a la periferia de las ciudades dispuestos siempre a cortar las rutas en procura de dar solución a sus necesidades, pasando por los transportistas y empleados públicos de algunos departamentos. Sin embargo es en el área de la explotación de los hidrocarburos en donde se focaliza uno de los centros de gravedad del conflicto, como lo demuestra a demás de la muerte de los mineros, y el ya mencionado desplazamiento del Ministro Solís Rada. Intereses económicos y financieros de mayor peso que el mismo gobierno se han opuesto con éxito a la política de nacionalización de la propiedad de los hidrocarburos sostenida con vehemencia por el ministro desplazado como es el caso de la empresa Petrobras, Repsol, etc.

 

Si observamos la dinámica de las migraciones hoy día en Bolivia, la información nos dice que se van del país una gran cantidad de población en busca de mejores perspectivas de vida, amén de las migraciones de campesinos del interior del país hacia la periferia de las ciudades. (2)

 

A la ya reconocida polarización social que existe entre sus capas de población burguesas y una gran masa de población en situación de extrema pobreza, el momento actual agrega un pronunciado proceso de emigración de técnicos y profesionales en busca de trabajo a Europa, Argentina y EEUU, mientras paradójicamente sus explotaciones de minerales y de gas natural alcanzan una dinámica superlativa. Una vez más el volumen de la riqueza generada, la distribución de esa riqueza y la participación democrática de toda la sociedad no se corresponden.

 

Mientras tanto el eje del conflicto general en el plano institucional pasa por el tratamiento de una nueva Constitución que se supone saldrá de los debates de la Asamblea Nacional Constituyente. Aquí se destaca entre otros temas el de las autonomías, fogoneado principalmente por las regiones ricas del oriente (Santa Cruz de la Sierra, Pando, Beni, etc) .

 

De la protesta social con centro en el Alto en las afuera de La Paz en el 2003, al conflicto de la actualidad: El movimiento de la protesta social y su metamorfosis institucional ¿Qué es lo que caracteriza el conflicto principal? La no correspondencia entre la relación de fuerzas políticas y sociales y la naturaleza del gobierno constituido. ¿En qué consiste las diferencias y cuáles son los indicadores más salientes? Los hechos insurreccionales de 2003, fueron procesados institucionalmente por el gobierno actual ideológicamente coincidente con una fuerza social que se ha desplegado de manera ascendente en varios países de América.

 

Pero evidentemente a la hora de constituir un Estado no se puede hablar de la presencia de un poder alternativo establecido. La pregunta más importante es determinar cual es la composición social de la alianza estratégica inmediata con la que cuenta el gobierno y cuál será la relación que establecerá con los sectores que detentan el poder real y manejan los resortes y el entramado de relaciones económicas esenciales, más allá de los criterios ideológicos. De la llegada al gobierno a la conquista del poder (Formación de un Estado): Este problema que tan crudamente presenta Bolivia puede hacerse extensivo al resto de los países de América del Sur. La llegada al gobierno por medio de las elecciones parlamentarias- a diferencia de otros tiempos, y con alguna excepción en Venezuela-, esteriliza la fuerza social que fuera conformada con anterioridad.

 

El entramado institucional, tan viciado por los medios de comunicación masivos, los intereses enquistados en el aparato del estado, las burocracias viejas y los nuevos provocadores profesionales, hacen que aquella fuerza original se derrame en un recorrido institucional y discursivo hacia otros fines que los originariamente pensados. (3) ¿Que es lo que produce ese fenómeno en Bolivia en la Argentina y en otros países? La existencia de un entramado institucional y legal estatuido y la presencia casi vitalicia de los especuladores, oportunistas y arribistas de siempre. Esos que nunca se van, sino que cambian de trabajo dentro del aparato del estado ante la llegada de un nuevo gobierno El problema, es que se piensan las alianzas políticas solamente en función electoral y no desde una perspectiva estratégica de largo alcance y de raíz profunda. Esto supone dejar de lado los pre-conceptos ideológicos y pasar a construir alianzas reales de poder en donde los fines supongan decisiones de transformación revolucionarias.

 

La caída de Solís Rada es el quiebre en este gobierno de gran empatía para los sectores progresistas suramericanos, pero que ha caído en una nueva trampa, no solo por los sectores imperialistas, sino por las mismas debilidades internas. La lucha contra el enemigo externo que históricamente vació la riqueza de nuestras naciones, va unida a la lucha contra las fracciones sociales que fueron funcionales a semejante despojo. Localizar y limpiar esa resaca es igualmente importante como re-estatizar el control de los recursos naturales. De lo contrario no hay transformación posible, sino un simulacro de cambio que en poco tiempo se hace insostenible y provoca la reacción inversa.

 

En la Argentina la situación no es exactamente igual, aunque tenga ribetes similares, pero para pensar en el alcance de la propuesta de gobierno hay que ver con claridad quienes manejan los resortes del poder. Si se sigue ampliando la diferencia entre el llamado oriente rico y el occidente pobre, no hay manera de resolver el dilema de Estado en Bolivia.

 

La autonomía debe ser en todo caso de tipo administrativa pero existen sectores que demandan una independencia total. Ante las dicotomías de siempre entre Oriente y Occidente; entre ricos y pobres; entre indios y blancos, es necesario abordar el problema de manera dialéctica. La tensión entre el problema nacional (suramericano) y el problema social (de clase), lleva a pensar en esta coyuntura definitivamente de forma dialéctica y realista. Si es necesario profundizar las luchas sociales dando un salto hacia adelante como sostienen algunos analistas, o es el momento primero de consolidar un Estado nacionalista fuerte y centralizado, en verdad no lo sabemos. Los tiempos solo lo dispondrá la sociedad boliviana. Como el problema es político debe resolverse políticamente.

 

El sector de poder del Oriente petrolero y gasífero tiene que destacar una fracción de burguesía nacional patriota, que es la que debe enlazarse con los obreros y campesinos del Oriente entre otros componentes, de lo contrario no habrá solución en Bolivia. Romper la dicotomía es alejarse de alguna manera de la situación de guerra “civil latente” por la que atraviesa el pueblo boliviano. Santa Cruz no puede quedar al margen del proyecto de constitución del Estado, ni tampoco erigirse en región independiente, es el corazón geo-estratégico de Bolivia, por lo tanto centro vital en el proceso de integración de Suramérica. Por tal motivo se requiere de una lectura dialéctica en donde la alianza básica no anule la posibilidad de armar una alianza táctica con los sectores burgueses urbanos ligados a la explotación hidrocarburífera no necesariamente imperialista.

 

¿Existe esa fracción? ¿Cuál es el lugar que le cabe a las FFAA, más allá de la presencia incómoda e indefinida que han tenido en el choque de trabajadores mineros en Huanuni? La pelea por una nueva Constitución es el debate institucional formal en donde la tendencia es a extraviarse entre los vericuetos legales, dando como resultado un texto con letras muertas, como sucede en otros países en donde el poder se ejerce y no se declama. Es la alianza política y social que no está constituida lo que hay que resolver más que la Constitución originaria que no convence ni a propios y a ajenos. La naturaleza de la composición social de tal alianza es la que determinará el alcance Nacional y social de la proyección del Gobierno y no al revés. El proceso de conformación de los Estados Nacionales en América siguió una lógica inversa que en el viejo continente.

 

En Europa los Estados siguieron a la existencia de la Nación, mientras que en nuestro sub-continente una gran Nación indefinida y aún por resolverse fue orientada por una serie de Estados fragmentados. La resolución del problema del Estado en Bolivia es la resolución de la tensión entre la cuestión nacional y la cuestión social y la orientación que finalmente tomará tal tensión será esencial para el futuro de la Comunidad Suramericana de Naciones.

 

Notas

 

(1) El Nuevo Día, 6 de Octubre de 2006, Sta Cruz de la Sierra: En el distrito minero de Huanuni (Oruro), en el cerro Posokoni se produjo un enfrentamiento entre asalariados mineros y cooperativistas que dio como resultado la muerte de 16 trabajadores.

 

(2) Solamente en los primeros tres meses del año emigraron a España unos 3000 bolivianos, y se han emitido en lo que va del año más de cien mil pasaportes; ver Nuevo Día 6/10/06.

 

(3) A modo de ejemplo podemos mencionar la mecánica de las comisiones de negociación que el gobierno constituye y que después de 16 reuniones no resolvieron el problema, o la intervención a posteriori de instancias tales como el defensor del Pueblo o la Asamblea de los DDHH, cuando el conflicto merece una intervención directa y centralizada del gobierno central; ver los periódicos: El Mundo; El Deber; La Razón de Bolivia entre otras fuentes. Fuente: Centro de Estudios Estratégicos Suramericanos (CEES), Argentina

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