Posiciones políticas sobre la interferencia internacional: EEUU, Rusia y Venezuela
- Análisis
Dos años después, con los aparatos de inteligencia más sofisticados y todos los grandes medios de comunicación indagando, hasta ahora las pruebas de interferencia por parte de Putin en las elecciones de 2016 en Estados Unidos son básicamente inexistentes.
William Binney, el genio de la NSA que generó sus plataformas más poderosas, ha confirmado que manipulación informática del voto desde Rusia, basado en el hackeo del DNC, es técnicamente imposible, dados los registros proveídos por el mismo DNC (https://www.youtube.com/watch?v=Sv0-Lnv0d0k); autores de libros con nombres como “Collusion” no pueden señalar la colusión, sino que rápidamente revierten su discurso a hacer referencia a lo malo que es Putin (https://www.youtube.com/watch?v=9Ikf1uZli4g); y Google, Facebook y otros gigantes de la tecnología le señalan al congreso de EEUU, que después de investigaciones a profundidad solo pueden encontrar pocos cientos de dólares desde Rusia, en compra de propaganda durante las elecciones, una gota en el mar de financiamiento multi millonario que caracterizan las elecciones de EEUU
(https://www.youtube.com/watch?v=fELg3ws7aj4. Puede que se encuentre lavado de dinero y evasión de impuestos de oligarcas rusos vía Trump, etc., pero hasta ahora la interferencia y colusión rusa en las elecciones de 2016 no cuentan con evidencia, aunque sería causal de impeachment y cárcel.
Pero, ahora, ¿no aplicaría lo mismo para el nuevo supuesto salvador de Venezuela, Juan Guaidó? Él toma las directrices públicas de Washington vía televisión y Twitter del vicepresidente Pence, que lo reconoce e invita a autoproclamarse presidente, sin tener un solo voto. Trump amenaza a Venezuela diciendo que puede optar por entrar militarmente a tomar su petróleo (https://www.youtube.com/watch?v=QiBvdhoS9nY), “de gran beneficio económico”; su consejero de Seguridad Nacional John Bolton habla en público de la necesidad de sacar a Maduro para tomarse el petróleo de Venezuela y el enviado especial para Venezuela Elliot Abrams, un criminal de guerra juzgado por mentir al congreso estadounidense para encubrir la masacre de El Mozote y el resto de la guerra sucia en Centro América liderada por Reagan, coordina con Guaidó para reconocerlo como presidente y ejecutar la toma de Venezuela y las riquezas señaladas por sus jefes (https://www.youtube.com/watch?v=wVQn_DdkYlU&t=53s). Abrams fue instrumental en llevar armas para los grupos más asesinos en nombre de ayuda humanitaria a los Contras, según Alan Fiers, jefe de la fuerza de trabajo de la CIA en el momento (https://shadowproof.com/2019/02/13/elliott-abrams-melts-down-as-muslim-congresswoman-questions-role-in-crimes-against-humanity/).
Sin embargo, el sentido común fabricado por los medios de comunicación alineados a los intereses de Washington, es por un lado, el rechazo, sintiéndose toda una Estatua de la Libertad, de la supuesta interferencia y colusión rusa en las elecciones de Estados Unidos, sin evidencia y sin que Putin haya amenazado militarmente, ni haya dicho que sería para apropiarse del petróleo en Texas; y por otro lado, el apoyo a Juan Guaidó, el instrumento de interferencia y colusión abierta para apropiarse de los recursos de Venezuela y avanzar la agenda geopolítica imperial.
¿Es un buen presidente Maduro? No me parece. ¿Creo que su política es profundamente incorrecta? Sí, genera inflación, corrupción y socava el desarrollo autónomo individual y colectivo de los venezolanos. ¿EEUU tiene el derecho a intervenir en Venezuela? No. Tanto las políticas económicas de Maduro, elegido por los venezolanos, como el asedio e interferencia ilegal en derecho internacional bajo Bush, Obama y Trump son causantes del desbarajuste de Venezuela. ¿Mejoraría Venezuela bajo Trump y sus aspirantes a micro-dictadores? No lo creo, ¿o es que Irak, Siria y Libia brillan por la paz y prosperidad? ¿O es que Guaidó ha presentado su política económica (decir, “bajar la inflación”, no es un plan)?
Venezuela merece mejores alternativas, pero la formación de ellas no será posible bajo el asedio imperial constante. Que Venezuela encuentre su propia vía, que EEUU suelte el gatillo y saque las manos de bolsillos ajenos, y que el gobierno venezolano le importe más ayudar a resolver los problemas de su gente y le importe menos las ideas simplistas de propaganda. El resto, hacemos bien no creyéndonos la Estatua de la Libertad cuando condenamos a Putin y alabamos la instalación de una colonia de Trump sobre las reservas de petróleo más grandes del mundo, en América Latina.
¿Qué quiere decir que resuelvan los venezolanos sus propios asuntos? Lo básico es con negociaciones y elecciones. Sin embargo, cuando se iba llegando a un acuerdo de negociaciones, la MUD dejó a Zapatero de mediador y al gobierno venezolano, esperando la concreción en último momento; y abundan las elecciones en Venezuela, las cuales hasta su muerte Jimmy Carter caracterizó como las más transparentes y seguras del mundo. Cuando hay elecciones, la oposición boicotea o si gana (como pasó con la Asamblea Nacional), viola la independencia de poderes, desconociendo al Ejecutivo y omitiendo aprobar leyes (su responsabilidad constitucional). ¿Nos podemos sorprender si el Tribunal Supremo desconoce en consecuencia al Legislativo y autoriza la elección de la Asamblea Constituyente? Después de boicotear o perder las elecciones, pide de nuevo elecciones.
No olvidemos que hasta la seguridad del voto del sistema elogiado por Carter fue víctima de la oposición venezolana y la compañía que operaba el sistema auditable cesó sus operaciones en Venezuela. Así lo dijo Smartmatic cuando afirmó que no podía avalar los resultados de las elecciones de la Asamblea Constituyente:
¿Qué ocurrió? ¿Y por qué garantizamos los resultados de las elecciones anteriores pero no podemos decir lo mismo de esta última elección?: Nuestro sistema automatizado está diseñado para evidenciar cualquier manipulación, pero deben existir personas observando el sistema y esperando por esas evidencias: los auditores. En esta elección no hubo auditores de la oposición porque ésta no participó. http://www.smartmatic.com/es/noticias/articulo/declaracion-de-smartmatic-sobre-la-reciente-eleccion-de-la-asamblea-constituyente-en-venezuela/
No tengo muchas esperanzas ni para la opción madurista ni trumpista en Venezuela. Ojalá que emerja una opción progresista de verdad que llegue al poder ganando elecciones, no una figura, que si bien fue electa, no reconoce los problemas que su política también ha causado en su país ni busca seriamente solucionarlos; y no una opción impuesta por un auto-proclamado salvador figuretti al servicio de Washington.
Ricardo Restrepo Echavarría
Directorio Ejecutivo del Observatorio de Educación | Universidad Nacional de Educación
Parroquia Javier Loyola [Sector Chuquipata]
Azogues, Cañar, Ecuador
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