La “suave” indolencia de la corrupción que amenaza con devorar a la sustentabilidad socialista cubana posible

15/07/2016
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 suave indolencia
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La Contralora General de la República Gladys Bejerano, rindió informe ante la Comisión de Defensa Nacional durante la VIII Legislatura de la ANPP.

 

la revolución verdadera, de liberación humana y social y de creación de personas nuevas, es difícil, conflictiva y a veces inaceptable

Fernando Martínez Heredia.

 

La transición socialista posible será el ejercicio democráticamente empoderadoi(1) del grado pertinente de cultura política, durante actos efectivos de justicia social garantes de la soberanía nacional, para una reproducción que corresponda a la equidad sustentable contra la falta de control popular vinculante sobre esa reproducción. La rendición de cuentas protege al grado de cultura política socialista pertinente contra la evasión a ese control popular. O el intento de moderarlo.

 

La corrupción acosa a la cultura política socialista, precisamente durante la normalización de las relaciones bilaterales entre Cuba y los EEUU.

 

Durante las sesiones de la recién terminada VIII Legislatura de la ANPP (Asamblea Nacional del Poder Popular) la contralora general de la República Gladys Bejerano confirmó que más allá de la batalla que lleva el país en materia de prevención y enfrentamiento a las indisciplinas y manifestaciones de corrupción, los problemas aún persisten, con un daño significativo para la economía y la sociedad cubana; al intervenir en la Comisión de Defensa Nacional, para presentar un informe acerca del comportamiento de las indisciplinas, ilegalidades y manifestaciones de corrupción administrativa, reportadas en el 2015.

 

Los hechos delictivos que ocurren en las organizaciones económicas ponen de manifiesto que las acciones desarrolladas para disminuirlos no tienen aún todo el efecto deseado, pues prevalece en algunas administraciones un ambiente de descontrol e impunidad. Bejerano confirmó que se documentaron en el período daños en más de 132 millones de pesos moneda nacional, fundamentalmente con la motivación del desvío de recursos para la venta ilícita. Los hechos reportados tienen sus mayores incidencias en el MINAG, MINCIN y el Consejo de la Administración Provincial de La Habana. La capital cubana fue el territorio con mayor número de casos.

 

Los recursos más afectados en la mayoría de los sectores son los medios informáticos, el combustible, los materiales de construcción, las piezas y neumáticos. La principal causa de estas manifestaciones es la falta de control, caldo de cultivo para incentivar a la gente a cometer la corrupción, insistió Gladys Bejerano, en un llamado que abrió el paso a la reflexión y el debate por parte de los integrantes de esta comisión de la Asamblea Nacional. En muchas entidades no se toman las medidas establecidas, y que persisten malos hábitos, así como mucha falta de responsabilidad; hoy no hay un suficiente control del efectivo, cuando existen unidades que se pasan más de una semana sin depositar y no hay una reacción inmediata frente a estos incumplimientos.

 

El mayor número de implicados se concentra en el comercio, la gastronomía, y el sector agroalimentario. Bejerano llamó la atención sobre la excesiva demora que se está experimentando en el reporte de los hechos de corrupción administrativa detectados. De los analizados en el período, el 58 por ciento fue informado posterior a los 6 meses, mientras que un 13 por ciento después de un año transcurrido ii(2)

 

En esta misma Comisión, el Coronel Idael Fumero Valdés, jefe del Departamento de Información y Análisis del PTI del MININT, presentó una valoración sobre los resultados del cumplimiento de las medidas dirigidas a incrementar la prevención y el enfrentamiento a las manifestaciones de indisciplina social, ilegalidades y el delito en el país; declaró que en todo el territorio nacional continúa trabajándose de manera mancomunada para frenar los intentos de introducción y producción de drogas, punto en el que precisó que en el período se incrementó la detección de cultivos de marihuana en zonas como Matanzas, Mayabeque, y Ciego de Ávila. Entre las principales ilegalidades a las que el país hace frente persiste el interés de emigrados y extranjeros de introducir fondos ilícitos para invertir en el sector no estatal y en bienes, lo que se conoce como lavado de activos.iii(3) Estimulado por la Ley de Ajuste Cubano, tiene que ver con que operan en el escenario actual redes de tráfico de personas unidas por el interés de salir del país, dirigidas y financiadas desde el exterior, quienes han reacomodado su accionar con nuevas rutas en Suramérica.

 

Un tema que más de una vez ha provocado el malestar de los cubanos no fue perdido de vista por el informe presentado por el coronel. Se trata de la existencia de un mercado negro o subterráneo en el país, que deviene espacio para la comercialización de una amplia gama de productos bienes y servicios que muchas veces provienen del delito y el robo. Fumero llamó la atención en que conviven actualmente en el país diversas modalidades de juegos prohibidos, como las carreras de auto, peleas de perro, y lidias ilícitas de gallos (a inicios del periodo especial agencias de turismo especializado como Ecotur, ofertaban a los pax extranjeros peleas de gallos), sin que exista una cohesión clara de hacia donde tenemos que trabajar todos mirando en común. Son temas que demandan una mirada pausada, pero que sobre todo exigen un mayor enfrentamiento ante las ilegalidades y delitos por parte de las diversas entidades y organizaciones que integran nuestra sociedad, para evitar que la corrupción y el delito hagan metástasis en Cuba. En ello coincidieron los diputados de la Comisión Defensa Nacional.iv(4)

 

La implementación socialista aún padece de insuficiencias durante la reproducción en busca de equidad social. El empoderamiento del pueblo políticamente organizado todavía es su “talón de Aquiles”.v(5) El control legal sin el empoderamiento antes enunciado es un instrumento político de la autoproducción burguesa.

 

Levando velas desde el canon angloestadounidense, hoy globalizado, de “libertad en la desigualdad” cada proceso que se semantice como capital es apalancadovi(6) por la administración de su acopio desde la ley burguesavii(7) para su reafirmación que responde a los intereses de los grupos de poder político con un fuerte soporte ideológico neoliberal.viii(8) La inversión social es sometida al valor de cambio de dicho acopio. O los grupos de poder exigirán el regreso al redil de su control.

 

La emergencia del neoliberalismo para compensar a la crisisix(9) agravada desde el 2007 desanudó las riendas sobre una disciplina fiscal burguesa. Los grupos de poder tras el divorcio del dólar de su dependencia del oro como patrón de medida a principios de los setenta en EEUU y junto al desmantelamiento de la sociedad del bienestar, mantienen secuestrado al control “legal” de dicho proceso; al dólar-USA y a sus implicaciones bursátiles.

 

El imperialismo vapulea a las mayorías; el control plutócrata tiene su esencia en una potencia social particularx(10) en que devino ese acopio parasitario que es una relación de poder.xi(11) Durante la crisis agravada del sistema capitalista se recorta o desaparece la inversión social, los fondos de jubilación; la deuda y la hipoteca del insolvente expolian a los países deudores. Los intereses apalancados son un nodo básico para el acopio parasitario capitalista en esa relación de poder. El concepto plutócrata de accountability reacciona sobre quién deslice un índice hacia (o contra) esa acumulación.

 

El político burgués no interactúa con el cuerpo social sino que pugna contra él. El grado pertinente de cultura política capitalista dilucida quién y cómo somete a las relaciones entre las gentes y el Estado, es decir, entre la ciudadanía y la forma en que ésta se representa ante el Estado para el encausamiento de demandas sociales y la resolución de los conflictos.

 

Todo lo anterior subordinado, mediante la economía neoclásica, a la autoproducción burguesa en su acopio parasitario de capital como relación de poder.

 

En tal contexto se evidencia a la irresponsabilidad política como el pináculo de la accountability posible en los entuertos de las agencias internacionales que prestan bajo intereses leoninos; como de los gobiernos que se sobre-endeudan.xii(12) La plutocracia global, sus finanzas y acciones operativas someten a los estados y a las culturas. Una contraloría alternativa sería el comienzo de un trastorno que la accountability sistémica se encargaría de hacer pasar por ilegal.

 

Las propuestas socialistas, durante el incio del cambio radical hacia una sociedad anticapitalista, no aplicaron suficiente control legal económico-financiero sobre el movimiento de los recursos estatales en manos de individuos malversadores que los disciernen como propiedad privada; como prerrogativas materiales y sociales en medio de conflictos graves debido a la insustentabilidad en la producción de bienes materiales, a los trastornos en su valor de uso y a la imprevisión contra una economía ilegal –que no, simplemente informal. Soportada, en el caso de Cuba por un bloqueo genocida angloestadounidense que rebaza ya el medio siglo. A casi dos años del incio del proceso de normalización de las relaciones bilaterales entre Cuba y los EEUU, continuamos de la parte de adentro de la zona sitiada, debido a la aplicación y actualización de una herramienta que pertenece a la denominada por el imperialismo guerra no convencional (GNC).

 

Estado y legalidad son relaciones ineludibles en la transición socialista posible. Trabajo y productividad son sociorelacionales. Sin ética (que no sacrificial), ni libertad individual en equidad habrá antagonismos tensando aún más la bisagra entre la cultura (el proyecto emancipatorio) y la política.xiii(13)

 

El derecho a la libertad ciudadana individual, a mofarse de las jerarquías serviles, dogmas y verticalismos, a escoger la ocupación laboral que mas beneficie no puede estar por sobre el derecho, la dignidad, la equidad y la libertad ciudadana individual de los otros en la autoproducción socialista posible. La libertad ciudadana en equidad es una relación a reproducir en democracia. La ciudadanía está en permanente reajuste socialista; su cultivo sociorelacional mantiene a la subjetividad ciudadana en una búsqueda –ardua, accidentada- de la equidad efectiva en la diversidad.

 

La reproducción de la decencia como valor social y los trastornos que esta padece aún son insuficientemente analizados en la hegemonía efectiva socialista. Lo que trae a colación a un entuerto que despolitiza a la sociedad manifestándose en el funcionariado que convierte a la autoridad popular delegada en él, en culturalmente oligofrénica que le garantiza semantizarla como un salario, asignación material y legitimidad social al margen del mandato popular empoderado por democrático.

 

La pasividad social dribla en la vida privada y pública de individuos subjetivados dentro del actual modelo cubano hegemónico, durante los problemas entre personas naturales y/o jurídicas que entrañan algún modo tóxico de relación social y convergen en la tragedia de una inercia resentida que degrada al compromiso político socialista; que es una relación social contra la pacificación mental imperialista.

 

La autoproducción burguesa aprovechó cualquier interpretación hermenéutica anterior a ella para promover una virtus “helénica”xiv(14) que eternice al sistema capitalista y a su poder durante la intersubjetivación entre los “selectos” o autodilucidada “clase media”, al acopiar durante la expansión histórica de su cultura a todos los modos de dominación que le precedieron.

 

Ese trastorno obstaculiza a la lucha por la equidad para todos al invocar a una integridad pseudo-revolucionaria. De ahí que durante el cambio radical socialista apunte a una selectividad individualista que posibilite el acceso al poder social (como funcionario) a un individuo supuestamente decente bajo compromiso político irrisorio.

 

Todo está en que los intereses individuales sean los que culturicen a la memoria común de los individuos subjetivados para disimularlos contra la socialización hasta lo posible de la libertad ciudadana en democracia mediante distribución equitativa del poder. Aun si la transparencia absoluta es improbable debido al complejo tráfico de la información hacia su semantización, históricamente contextualizada, para devenir en conocimiento.

 

Esos intereses evaden la transparencia al rendir cuentas durante el cambio social radical contra la autoproducción burguesa. Alguien puede presentarse ante sí y ante los demás como merecedor de crédito; ejemplar. Pero desafiará a su conciencia ante una catarsis que lo ciegue, concentrándose en su propio ombligo como centro abstracto de discernimiento, en medio de una realidad que lo implica y a la que no puede (o no quiere) comprender en toda su dimensión política. La tentación de quien acepta o calla ante el desorden y la ilegalidad; subordinado al “equilibrismo oportuno” por sobre los trastornos que provoque.

 

La sumisión o la simulación políticas eluden a lo que resulte conflictivo si equivale al análisis crítico por orgánico; y advierten un interés sinuoso por paralizar toda iniciativa que pueda resultar «sospechosa».

 

Ser «gente confiable» dentro del espacio social en que ciertos individuos intersubjetivados procuran mantenerse más en función de sus “cualidades” que enfrentando a los problemas sociales. Inmerso en la obsesión por aparecer inofensivo para las instituciones; escudriñando la mejor relación con una instancia del poder que proteja a sus intereses, hasta hoy insuficientemente estudiados.

 

El corolario es una rendición de cuentas donde priman la hipocresía, el disimulo, la «doble vida», la negación a reconocer los fallos propios e incoherencias en lo político. Y la amenaza de articularse superior a los demás -por legitimación académica, etnócrata, fenotípica, de género u opción sexual, o socioclasista.

 

Se puede asumir el cambio radical en favor de la justicia social efectiva con el grado pertinente de cultura política, apelando a instituciones que expediten esas buenas intenciones. Pero si se entra en las reglas del juego de ciertas mediaciones particulares e institucionales cualquiera, por muy buena voluntad que tenga, se podría ver acosado por los entuertos de una ideología que se disfraza de praxis política socialista para el cambio social, siendo el producto de otros alicientes que poco o nada tienen que ver con aquella.

 

A partir de una ideología (apelamos a la perspectiva marxista del concepto) una casta burocrática sacrifica la transición socialista a sus intereses personales de poder. No existe neutralidad política; simplificar a la praxis política para el cambio social radical en la transición socialista tiende a una prerrogativa de casta.xv(15)

 

El individuo se intersubjetiva en un contexto histórico determinado como sujeto político. No existe decencia posible sin honradez política. No se cultiva al modo sociorelacional ciudadanía sin posicionamiento político.

 

Durante la cotidianidad en transición socialista ciertos conflictos se deslizan por inferencias deshistorizadas que evadan sospechas acerca de los fines de algunos individuos “decentes”. El resultado sería la emergencia de quienes puedan insertarse en la insoportable polarización de la distribución (global) de lo “escaso”.

 

El capitalismo se guía por los intereses de los sectores sociales, aun a riesgo de mantener una inestabilidad crónica (Marx). Y descansa sobre las tensiones de sus crisis que reajustan mediante su accountability al acopio parasitario socialmente improductivo; apelando al capital como una relación social de poder.

 

La actual hegemonía del capitalismo es políticamente autista porque se concentra en servir a esa potencia social particular que vigoriza y expande a la polarización insoportable en la distribución de la riqueza; está en función de blindarla contra el cambio radical socialista.

 

Modelar alternativas aún será arduo y plagado de amenazas que obligan al despliegue de voluntad política socialista y creatividad suficientes durante ese cambio social radical. El ejercicio del poder es la más urgente y compleja de las funciones políticas para una alternativa anticapitalista.

 

El imperialismo exige hacer implotar a la capacidad de disenso político anticapitalista dentro del socialismo; despolitizarlo sometiéndolo a su expansión cultural.

 

En el socialismo hacer política hoy obliga a cultivar con delectación al disenso crítico por orgánico, subjetivamente a irse por sobre la cotidianidad chata y banal existente. Situar al proyecto socialista por sobre el poder; algo que ya se ha dicho pero a ratos parece insuficientemente redundado.

 

La norma para la praxis política anticapitalista tiene que ser (es) el discernimiento crítico pertinente mediante el cual trazar la dimensión de la libertad ciudadana propia, y a partir de allí respetar la libertad de, y la equidad con los otros en función de alcanzar el equilibrio posible contra las dominaciones y las exclusiones a través de actos de justicia social efectivos. Tiene que concurrir un modo radicalmente socialista, desde cabeza propia respetando el criterio y el espacio del otro, siempre que ese otro no intente subvertir al estado de Derecho y a la legalidad, consensuados en democracia. Porque el diálogo y el consenso posibles desaparecerían.

 

Con la autoproducción burguesa nunca se negocia. Es la política socialista.

 

Tales límites comunes durante la praxis política en la convivencia social tienen una fuerte dependencia de la acumulación histórica en una sociedad. Sin esa implicación sería improbable la praxis política socialista. Hay una interacción ineludible durante la reproducción entre esa acumulación, el nivel de cultura política (socialista) pertinente y la función antes enunciada para la producción y distribución amplia, por democrática, del poder.

 

Tocante al carácter sistémico de la cultura política, en la medida en que se complica el estudio sobre la autonomía del campo de lo político "y de lo político mismo" sin agotarlo en la actuación estatal, ni en su importancia durante la praxis pertinente para la rectificación radical posible del actual modelo de socialismo cubano, aumenta la implicación del grado de la cultura política como producto a largo plazo de la historia; es decir, adquiere un carácter sistémico.

 

La cultura política es la consecuencia de acumulaciones históricas desde las que, mediante selectividad intersubjetiva, se diseña y adquiere sentido un sistema político para el cambio radical o la continuidad no-teleológica del pasado en su interacción con el presente hacia futuridad. Debido a la deshistorización en el ejercicio de su poder, el sistema político capitalista “reconfigura” sociedades mediante la dominación política indispensable.

 

¿Por qué esa interacción, mediante selección intersubjetiva, para la continuidad no-teleológica del pasado en su interacción con el presente hacia futuridad, entre acumulación histórica y modelo de sociedad (o cotidianidad), indispensable a la cultura política en su grado pertinente?

 

Es necesario reconocer la imposibilidad de teleologizar a la imprevisible dinámica cultural que manifiesta la sociedad en su reproducción a través de reajustes permanentes a aplicar para el consenso, indispensable durante pugnas y demarcaciones comunes. Tal proceso es improbable sin el grado de cultura política socialista pertinente.

 

No es sino la garantía de la concienciación de modos relacionales a socializar hasta lo posible, como libertad, ciudadanía u honradez en democracia mediante distribución equitativa del poder.

 

El grado pertinente de cultura política se actualiza a través de esa interacción (por selectividad intersubjetiva) entre acumulación histórica y modelo de sociedad. Dicho grado de cultura política pertinente implica:

 

-Al proyecto de emancipación social asumido y a la praxis política posible para su materialización.

 

-Al empoderamiento en democracia y libertad posibles de los sujetos (no meros individuos) a partir de ese grado pertinente de cultura política que conmina a reconocer al de la libertad propia y la del otro o los otros. A partir de la apropiación consciente de una interacción desalienada dentro de la diversidad, principio bastante maltrecho desde la intensión política imperialista de provocar una implosión al interior del socialismo.

 

-A partir de tal empoderamiento, al derecho de los sujetos concienciados en democracia efectiva, conque eliminar la posibilidad de dominación de unos sobre los otros. Es decir, al control democrático sobre la política desde el grado de empoderamiento que corresponda a cada uno, en pos de un proyecto social de emancipación (socialista), que equivalga al compromiso del poder político con el proyecto de emancipación. Cuando dicho poder somete al proyecto de emancipación, lo domina mediante intereses políticos que inevitablemente lo constriñen a una circunstancia determinada dentro de la compleja sistémica social.

 

-A la garantía de ese grado de cultura política socialista pertinente que impida que alguna expresión de la diversidad cultural activa dentro de la sociedad, aprovechando trastornos en la cultura política, apele a ellos para someter a otra porción social de esa diversidad. O contra la auto-banalización de expresiones de la diversidad cultural, hasta que sus portadores crean posible, o mejor, beneficioso existir en el campo de la cultura al margen de lo político, o trocándolo por su valor de cambio: rentismo improductivo. La despolitización de alguna expresión de dicha diversidad, apropiándose de lo social sin vínculo con los asuntos y problemas sociales. Es la política manifiesta en el analfabetismo funcional, cuando el poder somete al proyecto de emancipación y constriñe a la cultura; es decir, condiciona de manera trastornada al reajuste del grado de cultura política pertinente.

 

La representatividad actual más avanzada en la democracia socialista aún es insuficiente para inmunizarse del proceso anterior.

 

Existe una tendencia (casi naturalizada) a la burocratización del poder político al limitarlo a la simple administración y el orden de la sociedad, a partir de normas y directivas que emanan de dicho poder representante conque acomodarse a un modo de dominar, por muy “blanda” que parezca la opción asumida al respecto.

 

-No existe acto de justicia social eficaz dentro de un proyecto de emancipación socialista, desde una opción del poder político que someta al grado pertinente de cultura política. Siempre tendrá un límite impuesto no por la integración de los sujetos a partir de la distribución democrática y amplia del poder, sino por los intereses burocratizados del grupo o casta en el poder político-económico. Esta tendencia a la burocratización del poder para blindarlo de la intervención (contraloría) del pueblo políticamente organizado es consuetudinaria en la modernidad capitalista.

 

Desde lo que nos queda del legado de la cultura liberal o la socialdemocracia de euro-occidente, donde el poder es una abstracción constantemente separada del control posible por parte de los sujetos (ciudadanos); la disposición de clases, grupos y estratos, o núcleos familiares, devino en una condicionante psicosocial que, por ejemplo, ahora mismo vapulea sinuosa al modelo actual de sociedad cubano, activándose a nivel medio, o comunitario desde un "arriba" que implica a normativas inamovibles.

 

Organizaciones sociales como los CDR, los sindicatos, asociaciones gremiales y comunitarias, que pueden o no formar parte de lo que en la actualidad se denominan movimientos sociales, son susceptibles de ser acorraladas dentro de la burocratización conque asegurar intereses de corporativismo político.

 

La imposibilidad de la dominación política imperialista coherente a nivel global refuerza al corporativismo político del capitalismo colectivo; son sus intereses los que están en función de esa implosión política socialista.

 

-Es improbable que pueda concebirse al pueblo políticamente organizado y empoderado desde distribución amplia por democrática del poder para evitar el sometimiento del proyecto de emancipación (cultura), sin el grado pertinente de cultura política socialista. Las inquietudes al respecto solo pueden ser solucionadas a partir de una subjetividad culta en democracia; que los ciudadanos con independencia de su labor profesional, oficio u ocupación laboral disciernan de qué se habla cuando exista alguna referencia a tales asuntos. Nadie podría defender su libertad, respetar a la libertad de los otros, conservar y defender valores, ni crear un espacio equitativo de interacción social, desde la insustentabilidad o la falta de actualización en el grado de cultura política socialista pertinente; que equivale al de cultura general. De esa dificultad no se salva ni la misma dirigencia que represente a ese pueblo políticamente organizado, si adolece de tal problema.

 

Con asesores se mitiga el asunto solo en parte. Que, por cierto, puede extenderse a una porción de la producción de pensamiento.

 

-Esa interacción entre acumulación histórica y modelo de sociedad, que se manifiesta de manera selectiva por parte de una subjetividad en contexto histórico determinado, puede experimentar retrocesos, obstrucciones, desajustes; y crisis por incertidumbre a partir de un reajuste deficiente del grado de cultura política socialista pertinente. La dinámica de una cultura es imprevisible.

 

La tendencia histórica durante procesos revolucionarios para el cambio social anticapitalista, radical, manifiesta etapas de retroceso que propician clausuras culturales impuestas por la burocratización, el primer síntoma del poder político al someter a la cultura con que relegar a los sujetos a normativas que obedecen a los intereses de determinada manifestación de corporativismo político (¿no parece un objetivo estratégico de la GNC angloestadounidense contra Cuba?). Dirigentes o grupos, municipales o provinciales que durante décadas ocuparon (¿ocupan?) puestos determinados en la organización social, leyes y procesos legales y organizativos que se añejan hasta la inoperancia sin que "alguien" se percate. Determinados modos de control, o acomodamiento a los caprichos y conveniencias de un grupo en específico.

 

No se refiriere a la administración ni al orden de la sociedad; sino al modo en que los sujetos reconocen, y se manifiestan dentro de la dimensión de la libertad y sus límites.

 

Puede ocurrir un abandono del proyecto emancipatorio socialista que se manifieste mediante una dispersión imprevista del grado de cultura política alterando la dirección en la que debe encausarse el cúmulo de los problemas y asuntos sociales; muy bien aprovechado por las agencias de espionaje en función de esa implosión socialista de lo político. Ya están abiertas y activas las embajadas en las respectivas capitales políticas de Cuba y los EEUU; las agencias angloestadounidenses comenzarán a operar del lado de adentro de la zona aún bloqueada.

 

Cuba está empeñada en la rectificación radical que asegure a la sostenibilidad socialista y antiimperialista con justicia social efectiva. En medio del bloqueo angloestadounidense es estólido que alguien acumule “capital” mediante rentismo parasitario, coma, se vista y beba cerveza a costas de los otros del lado de adentro de la zona bloqueada; o se creen espacios del mercadeo de bienes materiales y los servicios que equivalgan a “centros bursátiles de bolsillo” en la comercialización de productos agropecuarios durante la puja especulativa de los precios. La economía es intrínseca de la política, no hay economía a secas.

 

Emerge un rentismo despolitizante –plusvalía al margen del trabajo-, recurriendo a la insuficiencia salarial real como alegato, para el acopio sin utilidad social ni respeto a las leyes. Ese colmo de la incultura política evade compromisos sociales; más que descansar en el acopio de objetos, impide la socialización productiva necesaria a la praxis política socialista. Con sujetos mentalmente pasivos o asistencializados indiferentes ante el compromiso social sería improbable abolir a ese rentismo.

 

Se da una situación política anómala pero ideal para la malversación cuando, al despolitizarlos se alienan actos efectivos de justicia social contra el desamparo persiguiendo el valor de cambio de esos actos. No se niega el derecho legal a enajenar una propiedad, o de recibir asistencia social. Pero uno de los objetivos para la implosión del disenso anticapitalista emerge cuando un acto de justicia social efectiva se despolitiza hacia su valor de cambio en la cotidianidad que busca sustentabilidad política (en democracia) durante la transición socialista posible.

 

Los valores ideopolítico y ético interactúan con lo material desde una acumulación histórica que soporta a la cotidianidad como sistémica política durante la responsabilidad en la praxis socialista que significa dar, quitar, disminuir o enfrentar esa responsabilidad en democracia, ante sí y ante lo otro o los otros. Improbable durante la despolitización de actos de justicia social efectiva, para una disminución sensible de la conciencia política indispensable a la sustentabilidad del socialismo.

 

Lo que las gentes se comunican entre sí es acumulación cultural en contexto político históricamente definido; las consecuencias de la interacción entre presente y pasado en pos de futuridad posible reajustan a la reproducción social a través del grado de cultura política socialista pertinente. Lo que implica a una aptitud intelectiva eficaz contra el “socotroquismo” político soportado por la banalidad. En el apremio durante la rectificación radical socialista posible, se olvida de manera displicente que “el gran proceso de democratización de los consumos culturales que emprendió el capitalismo, [fue y aún es] un instrumento que ha tenido un valor grande y creciente en las reformulaciones de su hegemonía.”xvi(16)

 

La simbiosis entre la liberación nacional y el socialismo devino en un gran logro revolucionario que Cuba le aportó a la cultura del siglo XX; solo posible a través del crecimiento y expansión de un grado de cultura política (anticapitalista) pertinente del que emergió la semantización de pueblo políticamente organizado, antes “masa”, a empoderar en democracia socialista.

 

La economía es "abstraída" de la política durante la pugna de fuerzas en la lucha de clases para despolitizar a la sociedad. Y hacer inoperante al socialismo. Determinándola como parcela que sirve de “tubo de escape” a sus crisis.xvii(17)

 

La pasividad social, de manera fluctuante, se extiende al espacio privado dentro del actual modelo cubano hegemónico (local), como a lo institucional cuando nos referimos a los problemas subjetivos que converjan en la degradación del compromiso político; que es también una relación social.

 

El ámbito laboral y el privado evidencian disfunciones. Se puede ejemplificar en que si a alguien no le llega el agua a su apartamento debido a un problema subjetivo, frente al televisor, en la sala de su casa viendo un documental de Discovery Channel acerca de los avances tecnológicos de las instalaciones hidráulicas en los inmuebles del “primer mundo”, recodará constantemente con amargura, como un entuerto despolitizado, que no le llega el agua a su casa; esa despolitización canibaliza a los espacios a contracorriente de la hegemonía imperialista.

 

Ante el consenso burgués-estadounidense, global, de libertad en la desigualdad se disciernen como insustentables en lo económico a las alternativas socialistas. De ahí la defensa a todo trance de mantenerse como “dueños del grifo”; ver la GNC contra Venezuela Bolivariana.

 

La apertura de Cuba al mercado internacional alteró la ansiedad en un país pobre y bloqueado, con tradicionales y muy complicados problemas con el parque automotor; dependiente de un stock derivado de la segunda postguerra mundial (1944-61) en la expansión industrial angloestadounidense. El parque del antiguo Campo Socialista quebró en su suministro; pero aún si se conduce un Lada, un Moskovich o un Polski se “sueña” un carro “americano”. ¿Obama no lo sabe?

 

Pudiera acotarse que en medio de, e intentado contradecir a los avances de la sociedad cubana mediante actos efectivos de justicia social, "portar" un auto estatal o privado, o ser el chofer de un ómnibus discierne a un podercillo inculto y despolitizado durante la reproducción de relaciones tóxicas, en que la disponibilidad abusiva por ilegal de un vehículo estatal es una mística que desguaza a la economía del país. ¿Y el combustible a malversar?

 

Los vehículos estatales son los más “demandados”; su asignación es un sortilegio. En la cotidianidad burguesa global andar a pie es un tabú de los peores que relega al cualquiera a la exclusión; al deambular deslocalizado de los desempleados o los homeless, de gran utilidad para el desanimo y el conformismo. Las condiciones actuales en el país para la transportación de las personas aún no desarman a ese trastorno.

 

Existe, además, una degradación ineludible: la de la biosfera producida por las emanaciones de dióxido de carbono emitidas a la atmósfera, que en cantidades insoportables hacen de ciudades como México DF, Tokio, Shanghái, Sao Paolo, Madrid, Nueva York, Los Ángeles, Hong Kong, Taiwán o Nueva Delhi lugares irrespirables. ¿A quién se le ocurrió que la transición socialista sustentable incluiría la posibilidad, político-económica, de un auto para cada individuo? Huele a referente de la cultura masiva angloestadounidense.

 

Las personas aún ocupan demasiado tiempo en el horario laboral sin que esto se revierta en una socialización productiva ética y eficiente. Entra por la puerta de servicios, como trastorno sutil que se agudizada durante la primera década del Periodo Especial –aunque emergió antes-, dificulta en extremo la racionalización indispensable debido a que no pocas plazas laborales estatales están ocupadas, aún, por personas que perciben sueldos tan improductivos que llegan a parecer rentas; pese a la relativa insustentabilidad salarial en el país.

 

Es un síntoma tropicalizado el que las administraciones de centros preferentemente de servicios en ocasiones descomercializados, abran lo suficiente esa hendija para “controlar” a los trabajadores adhiriéndolos a una relación social tóxica. Y se manejen estrategias para cubrir el problema de manera tal que este no impida alcanzar, por momentos, condiciones de destacado o vanguardia sindical. Los administrativos que ven en riesgo su permanencia en un puesto suelen utilizar esa opción apelando a intereses inconfesables.

 

Se evidencia en la cotidianidad cubana la existencia de un estrato que persigue el acopio parasitario de “capital” tras el culto al dinero, para quienes la diferencia entre desigualdad e igualitarismo es venal.

 

Todo lo que se integre al estrato que logre, en diversidad de niveles, su acceso a ese “acopio” es discernido como socialmente respetable y exitoso en una desigualdad despolitizada. Lo contrario entra en una relación “igualitarista” que no merece respeto y es considerado un mortal común manipulable: un “igual que yo” obligado a admitir el estatus de convivencia impuesto en un reducto de "igualitaristamente iguales" (pseudo-colectivista) que deprecia a la diversidad equitativa. ¿Y los principios?

 

Las dificultades materiales y financieras son seudo-discernidas desde una lectura políticamente atrófica que se hace de la sociedad propia y del concepto de ciudadano a través de los referentes que promueve el imperialismo, hacia la imposibilidad de un orden político sustentable para el reajuste radical socialista al modelo actual cubano.

 

La semantización del valor de uso se deprecia en beneficio del acopio de dinero duro por cualquier vía, mediante el valor de cambio. Si no es una generalidad si una tendencia inserta en la implementación de variantes del cuentapropismo que emerge como reajuste necesario al mercado del trabajo en el país.

 

Ese culto al dinero –equivalente al dólar angloestadounidense-, repta a través de las hendijas que los individuos le dejan a la convocatoria global que promueve la despolitización de las mayorías. Se filtra hacia los espacios de la convocatoria revolucionaria, para que se esté “adentro” y "afuera" al mismo tiempo en correspondencia con la función agenciada, o no, a la convocatoria burguesa desde el espacio revolucionario.

 

¿Es, o no, una situación generalizada?; lo suficientemente expandida como para compartir espacio físico y mental con las alternativas anticapitalistas.

 

La inhabilidad intelectiva para discernir las rectificaciones políticas, crea opositores abiertos o disimulados asumiendo dos opciones: el total rechazo (canibalesco) al modelo por rectificar, o la adhesión disimulada que generalmente cosiste en reproducir normas y cotidianidad que deben ser cambiados, la actualización deficiente de, o la información mal procesada hacia conocimiento en contexto histórico determinado.

 

La inmersión en variantes de la conciencia social que tiendan a la sociorrelación limitada a una religión, a un grupo con la misma orientación sexual, “racial”, o hacia un reducto social auto-secluído. Muy útil a los objetivos que persigue esa economía despolitizada.

 

Pese a los sensibles avances en las ciencias sociales que hoy estudian a la sociedad cubana, se percibe –paralelamente-, un "academicismo neutral" que lidia por "descubrir" en qué y hacia dónde debe encaminarse el actual modelo de sociedad cubano -evitando siquiera rozar con el marxismo-, contra una transición socialista sustentable mediante soporte teórico crítico imprescindible a la praxis política.

 

La torpeza epistemológica mutila a la destreza cultural que exige la memoria común (memoria histórica o memoria a largo plazo) durante la socialización del pensamiento crítico. La praxis desde el pensamiento crítico socializa al grado de cultura política socialista pertinente contra la “espontaneidad de las masas” que somete a los individuos tergiversando a la intelección del paso del tiempo; su gasto irrecuperable. Las nostalgias sopeadas en la añoranza por una burguesía “boyante” ejerciendo el “derecho a la libre expresión”, durante la guerra económica y política angloestadounidense -y nuestros propios errores- son descontextualizados por ese “academicismo neutral”.

 

La academia angloestadounidense genera una incesante producción mercantil (de teoría) que se des-comercializa con rapidez. Existe una relación innegable entre poder político y producción de conocimiento que es al mismo tiempo producción de poder político para el ejercicio de la dominación.

 

Lo que se cataloga en el contexto académico global como producción de cuerpos dóciles, no es sino una perentoriedad de la dominación capitalista. No solo para la generación incesante de plusvalía; sino para el control –y si es necesaria la destrucción-, de la diversidad de ecosistemas donde trascurre la cotidianidad existente. Sometiendo al grado de cultura política socialista pertinente a la violencia social en sus variadas opciones.

 

Por esos rumbos llegó la noción imperialista actual de que sobra gente en el mundo sometido a su racionalidad genocida. ¿Hacia dónde corren en masa los cubanos que exigen emigrar, de cualquier forma, hacia los EEUU? Es aceptar la existencia de personas que políticamente valen nada. El proceso anterior se blinda con la socialización de que resulta parafílico pensar tanto en el poder político, en vez de adherirse al consumismo incoercible. Se evita que avance dentro de las pugnas del pensamiento social la necesidad de la toma del poder político para el cambio radical anticapitalista.

 

Ciertas acciones públicas de movimientos sociales, sobre todo en Europa exigen una socialización sin la toma del poder político. O pasan de las revoluciones ante el “temor” a una toma de poder no socializado. Lo que demuestra trastornos evidentes en el grado de cultura política.

 

Es indudable que para la materialización de proyectos de emancipación socialista hay que asumir una producción de conocimiento que pueda transformarse en poder político contra la dominación imperialista.

 

La noción del tiempo y el progreso de la modernidad se someten a la temporalidad (calendario) del capitalismo; es la condición cultural del capitalismo colectivo, en tanto, herramienta de dominación que subordina a la diversidad de culturas políticas a las normativas de ese calendario. Es decisivo discernir que el de los Estados Unidos es un gobierno que genera y socializa una cultura política profundamente anti-intelectual.

 

La pugna cultural entre el capitalismo y el socialismo es despolitizante del lado del capitalismo, y amenaza con trastornar a la temporalidad acumulativa misma de la cultura cubana como fundamento de la praxis política socialista posible. Por su fuerte implicación antisocialista. Se manifiesta en la pasividad subjetiva “anticapitalista” cuando el capitalismo en crisis reajusta la reproducción de su poder. Para el capitalismo es vital la preservación de su poder sobre mayorías despolitizadas. Abrir relaciones con Cuba sin desmantelar al bloqueo ni desalojar a sus tropas de la ilegal Base Naval de Guantánamo.

 

El disenso crítico anticapitalista cultiva a la política -aun si las rectificaciones corren el riesgo de ser contaminadas por la ineptitud político/cultural-, a la memoria histórica o memoria a largo plazo que se manifiesta durante su socialización. La deshistorización y la despolitización del poder capitalista invalidan a la memoria histórica para endilgarle un compromiso social manipulable durante la desigualdad que se agudiza con la crisis actual del sistema burgués.

 

Inhabilitar política y económicamente a la autoproducción socialista posible trastorna al valor de uso de lo necesario despolitizando a la justicia social efectiva. Aliena sus actos contra el desamparo aplicándoles valor de cambio desde la despolitización imperialista.

 

Tras la violencia en la implosión imperialista de lo político ronda la amenaza de una esterilidad del discernimiento en la cultura política socialista. Todo lo que urge rectificar para la transición socialista o lo que urge alcanzar para el cambio radical socialista posibles, podría enfilarse hacia el tamiz de terciopelo de una pasividad espiritual que margine a los conflictos antagónicos en la lucha de clases mediante la culturización burguesa.

 

El discernimiento actualizado de una cultura política en tanto producto a largo plazo de la Historia, es su praxis durante el compromiso radical socialista mediante el disenso anticapitalista necesario –ahora en peligro de pasar de moda-; teniendo en cuenta que si el intelecto no se desarrolla en un contexto teórico cultural anticapitalista los conceptos efectivos estarían ausentes de esa praxis.

 

Si la estolidez política ambiente somete a la destreza cultural necesaria, cuando su praxis debe socializar al fundamento socialista de lo político para la subversión anticapitalista contra la “espontaneidad de las masas”, la despolitización camuflará al desplazamiento de la sígnica del código angloestadounidense hacia esa cotidianidad como la cultura (política) posible. Tener en cuenta a la pasarela del jet set “americano” en que se ha convertido la Habana desde hace casi dos años.

 

¿Cuál es el consenso político impuesto por la hegemonía capitalista?

 

El que establece que estar en contra de los intereses de su poder (su excepcionalismo) sitúa en medio de un desierto saturado de convocatorias a la violencia “despolitizada” –sobre todo “naranja”-, con que enganchar en el aire todo lo que lancen desde adentro de ese consenso.

 

La praxis socialista, aplicando el grado pertinente de cultura política en democracia, está implicada en el empoderamiento amplio del pueblo políticamente organizado como la manera esencial de la cultura.

 

La rectificación radical socialista se alcanzará y superará a sí misma, en tanto expresión del grado de cultura política pertinente, dependiendo del nivel de intelección crítica anticapitalista que alcancen durante la autoproducción democrática, empoderada y libre, los individuos en pos de un proyecto de emancipación social.

 

La ineptitud se oferta en la deslealtad política. Que los burócratas sean traicionados porque sufren a otros burócratas es un sarcasmo que encubre los efectos del insuficiente grado de cultura política socialista pertinente durante el control democrático sobre la burocracia misma. Recomendar a la herramienta que los anglos llaman accountability quizás sea el consuelo de una decencia a la que le resta lealtad política a un asunto tan grave durante la rectificación radical para una transición socialista posible.

 

A estas alturas de la crisis integral capitalista el significado operativo de accountability ha variado sensiblemente como para invocarlo al referirse al control social durante la rectificación radical socialista posible.

 

No existe contraloría efectiva sin lealtad política culta en la decencia individual comprobada, si se quiere que aquella deje de atenazar, para amansarlo, al grado pertinente de cultura política socialista. La mayoría de a pié es la que sufre a esa asfixia en su propia yugular. De ahí lo perentorio del empoderamiento popular políticamente organizado para una contraloría permanente y vinculante sobre el orden y la administración del sistema. No parece viable una economía socialista sostenible, ni autoridad delegada por el pueblo políticamente organizado sin lealtad política crítica cultivada, por orgánica, a prueba de un ataque nuclear.

 

La transparencia en la rendición de cuentas pública es un compromiso que tiene que pesar sobre quien la asuma. A partir de que sea interiorizada con la tranquilidad y relajación que propicia el ejercicio de una autoridad abstracta hiede a individualismo desleal en la incultura política socialista que ordeña a dos vacas a la vez: la del interés público democrático que se delega en alguien; y la del interés individual que acosa a esa delegación.

 

Las burocracias que mutan en castas generan más o menos los mismos vicios y problemas. La diferencia está en sus efectos. No es lo mismo supervisar y custodiar al acopio parasitario capitalista protegiéndolo de lacras y procesos ilegales internos o extraterritoriales al que provoca, y de los que, a su vez, se aprovecha,xviii(18) que la contraloría ejercida de manera delegada y legalmente vinculante por el pueblo políticamente organizado en democracia, que asuma la rectificación radical socialista posible en medio del asedio insoportable por parte de la política angloestadounidense –aún si con embajadas abiertas en las capitales políticas de ambos países-, durante más de medio siglo. Deberá ser un modo de control nuevo por diametralmente distinto del capitalista.

 

Bajo el peligro consuetudinario de los funcionarios desleales resultaría quimérica tal rectificación radical socialista. La esencia posible ya no es seria sino la de custodiar a la acumulación parasitaria capitalista.

 

Esa autoridad abstracta ronda la testa de cualquier individuo subjetivado como ciudadano. Evitarla o salir de ella es agobiante y exige, hoy, un adiestramiento consciente -de la agudeza (política) culta, el pudor, la lealtad y la honestidad ciudadanas-; casi relegado al Libro Rojo de las especies en vías de extinción.

 

La autoridad abstracta custodia al poder a su vera. En el contexto local cubano puede implicar a la potestad omnívora con que “re-distribuir” lo escaso desde una noción políticamente desleal a la delegación democráticamente recibida del soberano; haciendo implotar a los actos efectivos de justicia social. Si es cierto que la palabra burocratismo encuentra su sentido peyorativo en la necesidad del ordenamiento en todas las estructuras sociales, en todos los modos de producción durante toda la historia, la deshistorización a que ha sido sometido el concepto anglo de accountability no hace sino agudizar los trastornos a los que la sistémica capitalista somete a su ordenamiento social.

 

El ordenamiento y control de la sociedad son constantemente separados de su interacción equilibrada con el grado pertinente de cultura política socialista, en tanto, conveniencia cultural durante la manipulación política de cualquier contraloría alterna a su dominación. Los errores e inconsecuencias en la contraloría socialista pueden manifestarse como actos de sometimiento a esa dominación en crisis.xix(19)

 

La eficacia del funcionamiento social (sus mecanismos) es hija de la responsabilidad; un término en castellano insuficientemente analizado al efecto.

 

Existe aún la “tendencia” cultural de resignarse a cualquier forma de autoridad que implique a un poder circunspecto desde esa misma lógica del sometimiento: estatal, político, cultural, profesional, religioso o de familia. No es todavía una tradición sujetar a esa autoridad a debate crítico permanente en su organicidad. Generalmente las personas prefieren vivir bajo el “sosiego” del sometimiento acrítico a una autoridad. La vigencia y salud, políticas de una revolución socialista son ajenas a la apropiación individualista de una porción del poder social.

 

El Poder Popular es (debe ser) una autoridad delegada por esa contraloría popular políticamente organizada, en democracia. La rendición de cuentas establecida desde 1976 en Cuba, aún es un proceso lastrado relativamente por el insuficiente grado de cultura política socialista pertinente; que equivalga al de cultura general. Los mecanismos eficaces, legalmente vinculantes para custodiar al sistema en la rectificación radical de la transición socialista posible dependen de la energía democrática de esa contraloría popular que reajuste radicalmente a todas las implicaciones éticas y profesionales que pudiesen estar involucradas.

 

Es la cultura de la responsabilidad efectiva en la praxis política socialista, ante sí y ante lo otro o los otros a través de esa contraloría popular. No es un limbo lingüístico monopolizado por la cultura capitalista, sino ubicado en su hermenéutica político-cultural históricamente contextualizada; liberando al grado de cultura política socialista pertinente.

 

La indigencia intelectual propagada por el sistema capitalista en crisis, oculta que a través de la economía se toman decisiones políticas que afectan según el lugar que se ocupe en la pugna de fuerzas entre clases sociales antagónicas. En medio de la volatilidad de la dimensión social “clase media”xx(20) que la plutocracia imperialista global apenas necesita, las formas de control imperantes refieren a una contraloría coercitiva sobre la sociedad para la “despolitización” de la decencia y la eticidad ciudadanas.

 

La cultura burguesa obliga a la cotidianidad a manifestarse dentro de la reproducción social a través de su valor de cambio. A concentrarse hipnóticamente en los desarrolladores de prueba del sistema capitalista, contra el pensamiento crítico, los cuestionamientos a esa autoridad; y los desafíos contra ella.

 

Se origina el conflicto de que los actos de justicia social sean reajustados en su discernimiento por algunos de los beneficiados a partir de su valor de cambio despolitizado. Aún existe cartilla de racionamiento; atención médica (universal) e instrucción escolar gratuitas con una enorme inversión social a su haber, subsidios al consumo doméstico de energía eléctrica, al costo del pasaje en el transporte público urbano y a la tarifa telefónica. Aunque todavía lejos del equilibrio social sustentable, la permanencia del sistema socialista cubano no es un azar de los misterios en las ciencias sociales.

 

La convocatoria a una revolución “naranja” no comienza por los actos de violencia en espacio público; el sometimiento cultural a la dominación política capitalista, mediante sus relaciones sociales de producción la precede.

 

Se acercan a tres las generaciones sin vivencias de la época anterior -1959/89-, a la actual. Está creciendo la que no vio a Fidel Castro Ruz al frente del gobierno revolucionario. Si de algo puede servir la memoria activa en la acumulación cultural, este es el momento; porque el ejercicio del poder hegemónico imperialista es deshistorizado.

 

El acopio rentista, por improductivo puede alcanzar su clímax en el riesgo para la sustentabilidad socialista que encarna una autopretendida clase media portátil: el funcionariado con ingresos relativamente modestos que busca subvertir las disposiciones económicas que rocen con aspereza a nacionales o extranjeros con capital privado acopiado mediante vía non sancta –en pos de un lavado de activos-, buscando imponer una semántica trastornante de producción.xxi(20)

 

¿Cuál la propiedad privada sobre los medios fundamentales de producción que podría barruntarse en un país socialista como Cuba? Cierta pesadilla trastorna a la digestión de la memoria histórica. ¿Todavía en Cuba existe lucha de clases aún si de “bolsillo”? Nos acosa la molicie intelectiva que impide pensar críticamente al modelo cubano socialista posible contra el acoso imperialista.

 

A tales efectos interactúan la irresponsabilidad social y la incultura política contra la lealtad efectiva del individuo subjetivado como ciudadano. La des-semantización del modelo socialista posible desde una castilla burocrática ignara que intenta su autoproducción soñando con el excepcionalismo angloestadounidense; relativamente oculta en la acumulación histórica socialista. Y una conjura contra el cultivo del conocimiento actualizado, como el erario de la conciencia para el ejercicio de la libertad en la responsabilidad desde cabeza propia, durante la angustia de que la revolución no sea solamente un proceso racional, sin dejar de serlo.

 

La rectificación del tránsito socialista para la autoproducción responsable, no justifica al desespero por “pegar” cualquiera ladrillo que aumente al relajamiento social desde la (in)cultura capitalista de masas, que divorcia a la economía de la política durante el regodeo en jolgorios globales donde dominadores y excluidos disfrutan, circunstancialmente juntos, de lo “nutritivo” que resulta ser un explotado sin molestar demasiado al explotador.xxii(22)

 

La economía es intrínseca de la política; no hay economía a secas.xxiii(23) El control sobre la administración estatal está soportado por el grado de cultura política socialista pertinente, que equivale al de cultura general.

 

Desde la etapa colonial padecemos, aún, las secuelas de una porción de esa acumulación histórica culturizada para la adhesión al engaño, los trucos y el sometimiento a la codicia y al expolio, que a manera de dominación tramposa legisla a los modos de contraloría convenientes a la deshistorización en el ejercicio del poder capitalista durante la autoproducción burguesa.

 

La tesis no estaría sino en promover al ejercicio consciente de la responsabilidad desde la inteligencia política culta, el pudor, la lealtad y la honestidad ciudadana puntuales, para que se salvaguarde a la rectificación radical socialista posible por el pueblo políticamente organizado y empoderado, en democracia; salvando al grado de cultura política socialista pertinente durante la implosión imperialista de lo político.

 

Resumen breve de algunos comentarios de los lectores al artículo de Granma:

 

-La metástasis ya esta y no son muchos las que batallan porque no se extienda. Las Sanciones a los corruptos deben ser penas fuertes; no nos debe temblar la mano cuando está en juego la integridad de la nación. Si hay algo que ya le está creando serios trastornos a nuestro proyecto social es justamente los actos de corrupción administrativas; enfrentarla es la máxima de los revolucionarios y de los organismos de control, como la Contraloría, La Fiscalía, y otros.

 

-La corrupción está bien entronizada, y lo peor, que el que lo hace tiene la conciencia tranquila porque piensa que lo que hace no está mal y que se merece más, por eso lo toma de donde no debe.

 

-Es importante lo que dijo un diputado sobre promover un análisis entre empresarios acerca de por qué ELLOS incurren en hechos de corrupción e ilegalidades. Al final los que dan lugar a este tipo de hechos son principalmente los JEFES DE LOS DISTINTOS NIVELES, ya sea por estar implicado directamente, por negligentes, o por BLANDENGUES.

 

-¿Cómo le van a dar información transparente a los trabajadores? ¿Están locos? Sería darles poder, y la burocracia nunca empodera, al contrario. Ese no es el principio bajo el que funcionan las cosas, sino al contrario. Como el 99.99% de las veces la gente no será capaz de elaborar otra alternativa de lo que sea, porque no cuenta con información, pues ya está. Aprobado por unanimidad.

 

-¿De verdad no sabíamos esto? WOW!!! Si todas las piezas insumos y combustibles y lubricantes de los particulares, provienen de las que se roban del mismo estado… pero eso lo conoce Cuba entera.

 

-Un aspecto importante a tener en cuenta en el enfrentamiento a la corrupción e ilegalidades es la transparencia en la información de los casos y los responsables de las entidades involucradas en los hechos. Los funcionarios públicos tienen que estar sometidos al escrutinio publico, no tenemos que llegar a crear una cronica roja, pero si que el pueblo conozca quienes y como han actuado en contra de sus intereses. No son pocos los que involucrados en situaciones de este tipo aparecen tiempo despues dirigiendo en entidades con importantes recursos; tiene una doble lectura: (1) demorar para disminuir el impacto del hecho y por consiguiente atenuar las medidas a aplicar. (2) superficialidad en los análisis de los mismos en los órganos de dirección afectados. Si este es un combate de todo el pueblo y sus trabajadores, corresponde brindarles las herramientas necesarias para combatir; le corresponde a la ANPP exigir en las rendiciones de cuenta de los OACE que este sea un punto vital en su informe, donde se señalen todos los antecedentes y medidas adoptadas y que este aspecto sea público como establece la Constitución de la República.

 

-NO es momento de llamados, debe existir un mayor enfrentamiento de las autoridades, ser más profesionales y actuar en todo momento en busca de los valores perdidos,

 

-La Auditoria General de la República informa públicamente de sus múltiples inspecciones en las que encuentra todo tipo de delitos e irregularidades en el cumplimiento de lo establecido, lo que nadie sabe son las medidas que se adoptan como respuesta para solucionar esos problemas. O es que solo es muela? ¿Dónde los resultados o solo son más gastos en inspecciones?

 

-… no existen ni organismos ni se han creado métodos para eliminarla o los métodos no son efectivos y no es que no hayan personas con capacidad, solo que están en las posiciones equivocadas aunque tengan deseos de participar. Cuantos cuadros o dirigentes entran a estos sitios a leer o interactuar con los criterios que aquí se debaten?, Ninguno. Aquí pueden encontraran la solución, pues los comentarios tienen buena base muy sólida

 

-Control dicen que esa es la solución, considero que si se analiza de esa forma solamente estaremos viendo la superficie, si buscamos un poquito creo que cualquier padre sensato enseñó a su hijo que debía ser horado no tomar lo que no era suyo y todo lo que por parte de la educación familiar se le puede ofrecer a estas personitas. Ahora habrá que preguntarse si precisamente estamos cargando con el lastre de un período especial al cual ninguno quiere volver ni siquiera las personas que toda se vida han vivido humildemente de su salario. Considero que se ha llegado un punto que lo llamaría deshumanización del pensamiento y búsqueda de la satisfacción real de las necesidades. Eso se aniquila desde dentro, y está en cada persona, pueden controlar de diferentes formas pero si los que controlan son deshonestos hasta con ellos mismo entonces de que estamos hablando. Ni en Cuba la gente quiere ser pobre para buscar la verdad Se confundió luchar = moda robar.

 

-Una posible solución es que los cuadros no sean designados, sino elegidos por votación libre, secreta y directa por los trabajadores. Las masas deben tener todo el poder para revocar a los dirigentes que ellos eligieron. Las masas se equivocan menos que los jefes que designan. De esa forma las masas podrán ejercer un verdadero control porque el dirigente dependerá de las masas y no al revés.

 

-¿Se acuerdan los lectores cuando salió en estas páginas lo del ron Havana Club adulterado en los establecimientos de CIMEX? ¿Cuál fue la “respuesta” administrativa? Cambio de puesto de trabajo para uno, limitación del 25% del salario para otro y nada más, por una estafa mayoritaria que trascendió a los medios de comunicación. ¿Y cuántas cosas más suceden que uno no las conoce porque no se divulgan? ¿Por qué no crean una línea confidencial? No para mandar anónimos cobardes, sino para que la gente exprese los casos de corrupción y violaciones de la legalidad que hay a su alrededor y se identifique apropiadamente. No es que sea la solución pero ayuda en algo si de verdad se quiere luchar contra esto que ya es un mal bastante grande; hay mucha gente honesta que quiere denunciar actos de ilegalidad y corrupción y por muchas razones no lo hace. Las razones: Muchas, importante: falta de confianza en autoridades y organizaciones locales, tanto en el ámbito laboral como en el lugar de residencia.

 

-Las vías establecidas para obtener bienes y servicios no funcionan. Al menos no para los trabajadores comunes y corrientes. Esta es la primera causa. Después, la negligencia, el acomodamiento y hasta la complicidad de jefes, la policía, los inspectores; etc. No funciona bien el transporte. Se incrementa el número de boteros legales o ilegales; pero todos compran el combustible a los choferes de carros estatales. En San Miguel de Padrón los camiones, rastras y ómnibus “duermen” frente a las casas de sus choferes; y los ves vendiendo el diesel si siquiera cuidarse de los que pudieran verlos. Es algo tan común que parece la propia metástasis.

 

-No veo que se menciona el incremento galopante de la bolita. Ni acción de las autoridades contra esto.

 

-Creo que es hora de tomar medidas drásticas. Hoy somos mucho más débiles en muchos aspectos de lo que éramos antes del Período Especial. A los revendedores del mercado paralelo de ladrones que medraban ante los ojos de las autoridades el pueblo los llegó a llamar el “grupo de apoyo” Es decir se hizo normal comprar o adquirir y no preguntar la procedencia. Nuestros niños, los jóvenes de hoy, se criaron viendo esos casos como algo normal en su forma de vida. Recuerdo cuando era niño como el gobierno satanizó la mariguana y su tenencia que hasta el nombre estaba prohibido y decirlo era como nombrar al diablo en una iglesia. Hoy es normal hasta en las canciones. Recuerdo un vecino que fue condenado a cinco años por la tenencia de una matica de marihuana en una latica de leche condensada. ¿Qué le hubieran hecho a los que tienen un sembrado? ¿Fusilado? Bueno, advertidos están Raúl dijo una vez que la droga en Cuba entera a sangre y fuego, y nos sentimos tranquilos con ese planteamiento, hoy no lo estamos tanto. Ya está proliferando la marihuana especialmente en la mente de los que opinan que” no es tan malo, eso es cuestión de cada cual” Tratemos eso como una maniobra de inteligencia enemiga para desmovilizar a nuestra juventud. Hay que ver lo que sucede en otros países. A cuba sumida desde siempre en una profunda crisis económica, lo que le va quedando es la tranquilidad ciudadana y la falta del crimen organizado alrededor de la droga. Si perdemos eso, dejaremos de ser el “paraíso” que pintan los amigos y nos convertiremos de una vez en el “infierno” que pintan nuestros enemigos.

 

-La corrupción en Cuba es algo preocupante y reflexionemos usando un punto de vista diferente. ¿Por qué a veces los dirigentes u otras personas con acceso a recursos los toman? Simplemente es por la indolencia, y la necesidad, necesidad de todo porque a todos nos hace falta de todo, siempre necesitamos algo y de eso no hay ni la menor duda y si tenemos acceso a algo que no necesitamos en ese momento es mejor aprovechar porque en un futuro nos pudiera hacer falta. Ahora la indolencia , a esas personas no les duele tomar esos recursos ni a los dirigentes o a los que ejercen control sobre un área determinada donde exista recursos que los tomen , sencillamente porque el dinero para acceder a ellos no sale de su bolsillo ni se ve afectado directamente su patrimonio. Pongamos por ejemplo y simplificándolo de alguna manera, el dueño de un paladar, no permite que sus trabajadores tomen nada lo cual afecte a su vida económica ni a su negocio, sencillo ¿verdad? Tomemos como ejemplo al dueño del paladar y veamos los resultados.

 

-Si bien es importante son todas estas informaciones al pueblo por la Contralora General de la República; que pasa con todas aquellas violaciones que se cometen a diario por la inexistencia de una legislación que proteja al consumidor y entiéndase que sucede en todos los lugares tanto de divisas como de moneda nacional. Porque son irrisorias las medidas con los que irrespetan la disciplina social en los lugares públicos y que los medios televisivos los han denunciado. El pueblo quiere saber que pasa con todos aquellos que violan lo que está dispuesto, porque no se dice nada al respecto, tenemos que pasar del dicho al hecho y acabar con la doble moral que está lastrando a esta sociedad.

 

-Bueno, a veces estos mensajes son más nocivos que los delitos que se cometen, cuando no vienen las explicaciones debidas. Se llama a la lucha frontal, pero no se llama a quien tiene en primer lugar el deber por su cargo del enfrentamiento. El ciudadano simple cuando lo hace puede sufrir consecuencias si no tiene acompañamiento. Vaya a usted a protestar por el peso de un producto y la propia cola lo tilda de ridículo, o la pesa de comprobación está más alterada que la otra. Y de la noticia resalto una parte que me preocupa: se habla de juegos prohibidos: carreras de autos (dónde, cuales y ahí está el combustible perdido) peleas de perros (se sabe dónde están las vallas y por qué no se actúa?) y por último “lidias ilícitas de gallos”, quiere decir que hay lidias lícitas? Ojo con la forma de escribir, que es perjudicial a veces.

 

Notas

 

i (1)"Empoderamiento, aquí, tiene la doble connotación de: -apropiación de los recursos de competencia (reflexividad, creatividad, interacción constructiva, autorrealización profesional) individuales y colectivos, así como, -disponibilidad del ejercicio de poder en los diferentes ámbitos sociales. La formación de personas-colectivos [comprometidos y] portadores de competencias reflexivas-creativas, pasa por la promoción de acciones de integración de conocimientos, capacidades, motivaciones y valores para la interacción social humana cooperada, la autodirección personal y social, referidas a todos los campos de la vida y que, [...] se aplican [...] sobre todo en [...] la autogestión social y para el emprendimiento solidario, pero también referidas a la acción ciudadana emancipatoria." Ovidio D'Angelo Hernández. Contextualidades complejas y subjetividades emancipatorias. CLACSO.

http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/Cuba/cips/20120822022318/angelo17.pdf. Pág.12

 

ii (2)María del Carmen Ramón. Asamblea Nacional: Para que la corrupción y el delito no hagan metástasis en Cuba. Granma. 5 julio 2016. http://www.cubadebate.cu/noticias/2016/07/05/asambleanacional-para-que-la-corrupcion-y-el-delito-nohagan-metastasis-en-cuba/#.V36btBLAan8

 

iii (3)Ver: Víctor Andrés Gómez Rodríguez. Asalto de una exégesis burguesa al proceso de normalización entre los EEUU y Cuba. SurAmericaPress. 17.06.16 http://suramericapress.com/?p=10325&print=1

iv (4)María del Carmen Ramón. Asamblea Nacional…

 

v (5)"en el proceso de construcción de las alternativas posibles del poder popular, las instituciones deben ser “vigiladas”, el funcionariado debe ser controlado por formas de participación popular democráticas que eviten la instauración de burocracias alienadas de las necesidades e intereses de las masas populares." Ibidem. Pág.13

 

vi (6)Apalancamiento es la relación entre capital propio y crédito invertido en una operación financiera que al reducir el capital inicial a aportar produce un aumento de la rentabilidad obtenida. El apalancamiento aumenta los riesgos de la operación, porque provoca menos flexibilidad o mayor exposición a la insolvencia o incapacidad de atender los pagos. Tiene su coincidencia etimológica en inglés en la palabra “leverage” (apalancar). (N.A.)

 

vii (7)Ver: Tommy Unger. Which billionaire could buy your city? -Research Center | Redfin. June 5, 2014.

http://www.redfin.com/research/reports/special-reports/2014/us-cities-...

 

viii (8)Ver: Thierry Meyssan. ¿Quién es el enemigo? Red Voltaire. 4 de agosto de 2014.

http://www.voltairenet.org/article184972.html. Págs. 4-5

 

ix (9)Hasta la emergencia de la primera crisis mundial de postguerra, tras un periodo largo de acopio capitalista a finales de los sesenta y principios de los setenta del siglo veinte, dicho control era más o menos orgánicamente disciplinado. (NA)

 

x (10)“El movimiento del capitalismo está ordenado por una potencia social particular, [...] una gigantesca acumulación de dinero convertido en "capital" o que aspira a serlo. Esta potencia social tiene dos particularidades. Primero la de autonomizarse frente a la sociedad, alzarse frente a ella, a medida que se refuerza gracias a largas fases de acumulación ininterrumpidas (como la que se inició durante la Segunda guerra mundial). Y después, la de ser incapaz de concebir que su expansión pueda tener algún límite." François Chesnais. Un año después del crack bancario y financiero. Rebelión. Sección Economía. 29de diciembre de 2009. http://www.rebelion.org/

 

xi (11)"Desde comienzos de la década de 1840 Marx afirma que el capital no es una cosa o una cantidad de dinero; es una relación social que cree que se define en dos dimensiones. En primer lugar es la relación entre el trabajo asalariado y el capital y la explotación del trabajador con la extracción de la plusvalía y, en segundo lugar, la relación entre los distintos capitales, lo que Marx en los Grundrisse, el primer borrador de El Capital, llama los "muchos capitales". En particular, toma la forma de competencia entre capitales rivales. Son estas dos relaciones y sus interconexiones las que para Marx definen la naturaleza del capitalismo. Creo que esa es una visión crucial." Alex Callinicos. Explorar El Capital. Sinpermiso.info. 22/6/2014. Traducción: Gustavo Buster http://www.sinpermiso.info/

 

xii (12)Los bancos estadounidenses –durante la custodia imperialista de su acumulación-, son el clímax del fraude crediticio global sin precedentes históricos. Mayúsculo aquelarre en la historia financiera pasa casi inadvertido hasta para los espacios a contracorriente del capitalismo de donde un porciento no despreciable de jóvenes emigra hacia aquel Leviatán. N.A.

 

xiii (13)"Es indispensable que la concepción del socialismo vuelva a formar parte de la cultura política, un socialismo que esté a la altura de nuestras necesidades, y de las realidades, los proyectos y los sueños del siglo XXI, para que sea capaz de reforzar e iluminar mejor la identidad nacional, y de ayudarnos a elaborar nuestro proyecto. Es necesario que lo político sea considerado como parte de la cultura del país, y no la cultura un “frente” que se atiende políticamente [...] lo político y la práctica política tienen que estar en el centro de la vida. Es imprescindible para que un país como Cuba sobreviva y continúe siendo lo que es, y no sea abandonado al supuesto “libre juego de las leyes de la economía”, una opción que sería suicida. Pero para desempeñar ese papel central, la política tiene que desarrollarse, y volverse capaz de animar y conducir la vida social y las motivaciones y los intereses y valores de los individuos." Fernando Martínez Heredia. Identidad y cultura nacionales: historia y temas actuales. Revista Caminos.

http://revista.ecaminos.org/articles/article/identidad-y-cultura-nacional...

 

xiv (14)Patrimonial, egoísta, fanática, homofóbica, misógina, etnócrata, geófaga y racista dominante. NA.

 

xv (15)"La lógica pequeña o perversa, mezquina o simplona, solo sirve para entender vidas y sociedades que tengan esas mismas características: no sirve para entender la necesidad ni la vida de las revoluciones [...] [es propia] de un orden burgués de la vida social, que no se va y se resiste a desaparecer, que se recupera y puede ser capaz de regresar y de hundir todo." Fernando Martínez Heredia. Silvio Rodríguez: Por todo espacio, por este tiempo. lahaine.org. 14/4/2014.

http://www.lahaine.org/blog.php?disp=impr&blog=1&p=76881

 

xvi (16)Fernando Martínez Heredia. Revolución, cultura y marxismo. La Jiribilla, No. 665, 8 al 14 de febrero de 2014. http://www.lajiribilla.cu/articulo/6906/revolucion-cultura-y-marxismo

 

xvii (17)"El capitalismo es un complejo sistema institucional, que limita al capital en su propio interés a largo plazo y que asegura (en primer lugar con la ayuda del estado) su expansión [económica] en el espacio. Esto último es de vital importancia para el capitalismo debido a su orientación extensiva. El capitalismo no puede ser de otra manera, porque resuelve muchas de sus contradicciones [sobre todo las económicas], trasladándolas fuera de su propio marco y creciendo en el espacio [...] para funcionar con normalidad el capitalismo necesita la zona no capitalista, que convierte en la periferia capitalista y sin la cual tampoco puede existir [...] La zona no capitalista ha desaparecido y ahora el capital(ismo) ya no puede resolver sus problemas, sacándolos fuera – no hay dónde. Y las guerras como las de 1914-1918 y 1939-1945 tampoco son posibles" Andrei Fúrsov. Desmontaje del capitalismo y el fin la Época de las Pirámides. Traducido del ruso para Rebelión por Arturo Marián Llanos. Rebelión. 26-04-2013. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=167278

 

xviii (18)"la economía global se apoya en cinco “pilares”: el comercio del petróleo; el comercio de las armas; tráfico de drogas; comercio con el oro y los metales preciosos; la prostitución y porno-business. Algunas de estas ramas tienen el carácter totalmente criminal, algunas parcialmente criminales. La nación-Estado que por definición debe luchar contra el crimen para defender los intereses estatales, nacionales, tampoco en este plano se adecua a la economía global con su gigantesco segmento criminal global. Sin embargo, la CE resuelve de una manera casi ideal la contradicción entre los segmentos criminal y legal, porque desde su punto de vista, al igual que desde el punto de vista de la economía global de las corporaciones, lo principal es el beneficio, la rentabilidad económica, y no la estatalidad o la moral."Andrei Fúrsov. La corporación-Estado. Informe presentado en la reunión del Club “Plaza Roja”. Traducido del ruso por Arturo Marián Llanos. Andreyfursov.ru.

http://andreyfursov.ru/news/gosudarstvo_ono_zhe_korporacija/2008-01-01-6

 

xix (19)"la crisis del capitalismo es la crisis [...] de la civilización humana tal y como existe en los últimos 10-12 mil años (13 653 siguiendo la cronología hindú; 13 542 siguiendo la cronología egipcia antigua y asiria; 10 498 -10 499 según la cronología de los olmecas y los mayas)." Andrei Fúrsov. Desmontaje del capitalismo y el fin la Época de las Pirámides...

 

xx (20)Ver: Albert Recio Andreu. LA CRISIS LAS ACERCA A LA CLASE OBRERA TRADICIONAL ¿El fin de las clases medias? Mientras Tanto. Lunes 3 de Diciembre e de 2012. http://www.mientrastanto.org/boletin-108/notas/cuadernode-depresion-15

Paul Mason. ¿Quiénes forman en el mundo las nuevas clases medias? Sorpresa, sorpresa. Sinpermiso.info. 26/01/14. Traducción Lucas Antón. http://www.sinpermiso.info.

Reynaldo La Cámara. ¿Una nueva clase media latinoamericana? La Haine. 12/3/2013.

http://www.lahaine.org

 

xxi (21)"Marx desarrolló una idea que es clave para captar su interpretación de los fenómenos sociales: la producción es también apropiación. La apropiación es un fenómeno fundamental de la producción. El concepto de apropiación señala el proceso complejo en el cual los seres humanos, al producir su mundo, se producen a sí mismos y producen su subjetividad. El hombre se apropia de la realidad porque la produce, la hace suya al crearla mediante su actividad práctica [...] el modo en que se apropia de ella, la interioriza y la traduce en elementos de su subjetividad (sus capacidades, potencialidades, ideas, aspiraciones, valores etc.), está condicionado por el modo en que la produce. Producción y apropiación, por tanto, forman un todo indivisible [...] Al afirmar que la propiedad privada nos ha vuelto tan estúpidos y unilaterales que consideramos que un objeto es nuestro sólo cuando lo poseemos físicamente, cuando lo consumimos, Marx destacó el carácter enajenante de una sociedad que lleva a patrón de toda la relación el vínculo entre el individuo aislado y la mercancía" Jorge Luís Acanda. Sociedad civil y Hegemonía. EDT. Centro Juan Marinello. La Habana. 2002. Págs. 214-215.

 

xxii (22)"La victoria mayor del capitalismo es lograr que el colonizado consienta serlo, y que considere a la dominación que sufre como el único horizonte posible de vida cotidiana y cívica, al que deben sujetarse incluso sus proyectos. El colonialismo mental y de los sentimientos es una de las más graves y persistentes debilidades de nuestro campo –alguna vez le llamé “colonialismo mental de izquierda”–, y hoy constituye una de las fuerzas principales del sistema, frente a las contradicciones sin solución visible a que lo ha llevado su naturaleza actual." Fernando Martínez Heredia. Identidad y cultura nacionales...

xxiii (23)"[que] la economía se manifieste como no-política, para que a su vez la política se manifieste como no-económica [...] la desigualdad social imperante en la esfera económica se presenta como no-política: [supuestamente] no hay nada de dominio y de poder –en tanto relaciones entre agrupamientos clasistas–, sino sólo operaciones técnicas, las presentes en la generación de riqueza y pobreza en el capitalismo. Las responsabilidades por la presencia de una y de otra reposan a su vez en razones puramente individuales." Ver: Jaime Osorio. “La ruptura entre economía y política en el mundo del capital”:. Marxismo Crítico. 02/12/2013.

http://marxismocritico.com/2013/12/02/la-ruptura-entre-economia-y-pol...

https://www.alainet.org/en/node/178811?language=en
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