La perversa idea de la ‘nueva normalidad

25/05/2020
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
pandemia_salud.jpg
-A +A

Algunos ‘analistas’ en estos días de “pandemia” han divulgado la idea de una ‘nueva normalidad’, la incubación de esta imagen ha sido tomada de manera gustosa por algunos gobiernos, con esa idea se busca implantar en la mente de los ciudadanos una postura inmovilizadora, nos dicen ‘que solo podemos aspirar a una nueva normalidad’, que la ‘vida que conocíamos se ha terminado’, ‘que tendremos nuevas reglas de comportamiento y organización social’.

 

Esta supuesta ‘nueva normalidad’ es perversa porque tiene un tufo a absoluto y niega la dialéctica. Es filosofía barata que desconoce los procesos pasados y presentes y hace una mala apreciación de la diversa realidad acontecida con esta “pandemia”, por ejemplo, no observa que las estrategias asumidas por los gobiernos para enfrentar la crisis sanitaria se enmarcan en un amplio espectro de respuestas que obedeció a las diferentes realidades y condiciones de sus respectivos países, variables que van desde factores culturales, demográficos, desarrollo tecnológico, capacidad de su infraestructura sanitaria, particularidades sociales de su población, sistema político, etcétera.

 

En este marco la izquierda debe develar estas intenciones, evaluar lo acontecido para obtener lecciones y prepararse para enfrentar supuestas nuevas pandemias. La evolución tecnológica no se ha detenido y el internet con todas sus implicaciones y aplicaciones ha sido en gran parte positivo. Esta tecnología no ha provocado distanciamiento social, sino todo lo contrario, como nos demuestra la existencia de redes de cooperación específicas sin limitaciones geográficas y redes sociales en general. En el campo de la comunicación, el internet ha sido fundamental para romper el monopolio de la opinión de los grandes medios mercenarios y mercantilizados, por ejemplo.

 

Es evidente que se le ha dado un uso político al COVID 19, y para el caso europeo Thierry Meyssan lo señala claro: Un grupo transnacional identificado sólo en parte está ‎aprovechando una oportunidad única para imponer una transformación ‎profunda de las sociedades europeas, exactamente como utilizó los atentados del 11 de ‎septiembre de 2001 para transformar Estados Unidos. Pero todavía estamos a tiempo ‎de oponernos a la jerarquización del mundo que pretenden imponernos.”,‎ y añade: “el confinamiento obligatorio ‎generalizado de la población sana es algo que nunca existió antes. Eso no tiene nada que ver con ‎el confinamiento de los enfermos. No es una medida de carácter médico sino una manera de ‎transformar las sociedades. China nunca recurrió a tal método, ni frente a la epidemia de H1N1, tampoco ante la epidemia de SARS, ni ante la de Covid-19. El confinamiento en la ciudad de Wuhan, a principios de 2020, fue una ‎medida política del gobierno central chino para recuperar el control de toda una provincia que ‎el gobierno provincial no había sabido manejar. No fue una medida de carácter médico.”[1]

 

Lo perverso está en que determinados gobiernos, han acogido esa idea, para justificar mayor control social o gobiernos como el ecuatoriano que sin inmutarse, han aprovechado de la “pandemia” para radicalizar su programa neoliberal. Es necesario señalar que la vigilancia intrusiva debido al amplio acceso a internet –que es diferenciado de país a país e incluso dentro de los mismos países-, no será un tema eterno porque está en curso el desarrollo de nuevas tecnologías que lo pueden impedir. Además los pueblos organizados y decididos a luchar contra todo tipo de tiranía, hallarán la forma de burlar ‘al gran hermano’ como de hecho ha estado ocurriendo, siendo conscientes de los alcances del espionaje digital.

 

Hay expertos que se han pronunciado en el sentido de que no se trata de ninguna pandemia mundial, y vemos que varios países no adoptaron cuarentenas, por innecesaria o por adoptar una estrategia propia de acuerdo a su realidad, por lo que la paranoia planetaria en gran medida ha sido promovida por los grandes medios, sin con ello insinuar que el virus no sea real.

 

En adelante vamos a colocar elementos para que usted estimado lector saque sus propias conclusiones respecto a la pregunta que todo el mundo se ha hecho: ¿El virus fue inoculado a propósito o no? Está bien que muchos no tomen en serio las teorías conspirativas, pero no percatarse que las realidades de la conspiración existen, es una ingenuidad.

 

Si revisamos la historia del capitalismo, sus crisis son consecuencia de procesos inherentes a su naturaleza, no a ningún virus. Ninguna pandemia provocará un golpe mortal al capitalismo como ha afirmado Slavoj Zizek, la historia nos ha enseñado que pueden haber factores catalizadores, pero los grandes cambios son desenlace de ‘lentos’ procesos de tipo social, cultural, económico y político, los virus no hacen revoluciones, sino los pueblos.

 

La idea de la ‘nueva normalidad’ deja entrever que no hay alternativas al hipercapitalismo y a su modo de vida, deja entrever que debemos acostumbrarnos al aislamiento social. Hay un desproporcionado pánico que ni la denominada ‘gripe española’ desato, que ha propósito, es un hecho histórico comprobado que se originó en EEUU y no en España. 

 

También se ha dicho que gracias al virus sobrevendrá el fin de la globalización, en especial la neoliberal. De la misma manera, el virus no tiene nada que ver con un proceso que ya estaba en curso resultado del fortalecimiento de un mundo multipolar o tripolar, donde en especial, las tres grandes potencias: China, EEUU y Rusia han ido consolidando sus áreas de influencia y veremos un mundo con una sui generis globalización híbrida, una mezcla entre libre mercado y proteccionismo.

 

Sobre la aparición del COVID 19 hay dos posibilidades o escenarios: a) fue un virus manipulado en algún laboratorio, o b) su origen es natural.

 

Respecto al primer escenario:

 

  1. A consecuencia del brote que el gobierno chino informó se produjo en la ciudad de Wuhan; el 30 de enero de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declara la emergencia de salud pública de preocupación internacional (PHEIC, por sus siglas en inglés)[2]. En ese momento el problema se limitaba a la República Popular de China, ya que casos confirmados de contagio en otros países eran ínfimos respecto al número de sus habitantes y mucho más en el marco de una población mundial de 7.800 millones. En relación a esto hay que colocar dos antecedentes: 1) Posteriormente nuevas evidencias demostraron que en EEUU varias personas pudieron haber fallecido con COVID 19 sin haber sido diagnosticadas de esa manera. Casos destacados son por ejemplo, Michael Melham, alcalde de Belleville, Estados Unidos, dio positivo de anticuerpos de la COVID-19 y cree que contrajo el virus en noviembre, más de un mes antes de que China reportara sus casos iniciales, informaron medios estadounidenses.”[3] Es decir, el origen del virus pudo ser en EEUU; esto nos lleva al segundo antecedente; 2) El gobierno chino denunció que militares estadounidenses transmitieron la enfermedad en Wuhan[4]:

 

  1.  

"En octubre de 2019, Estados Unidos trajo a 172 (realmente 369) atletas militares a Wuhan para los Juegos Militares Mundiales. A pesar de tener el ejército más grande del mundo, diez veces, EEUU quedó en el puesto 35 detrás de naciones como Irán, Finlandia y Eslovenia. No existen videos o fotos del equipo de los EEUU, no se guardaron registros, un equipo enorme pero una actuación lamentable para los mejores militares del mundo.

 

Al equipo estadounidense le fue tan mal que los chinos los llamaron "soldados de salsa de soja". De hecho, muchos nunca participaron en ningún evento y se quedaron cerca del Mercado Mayorista de Mariscos de Huanan, donde se dice que la enfermedad se originó solo días después de que EEUU Abandonara el área. El equipo de EEUU se fue a su casa el 28 de octubre de 2019, y en 2 semanas, se vieron los primeros casos de contacto humano de COVID 19 en Wuhan. Los chinos no han podido encontrar el "paciente cero" y creen que era miembro del equipo estadounidense. También tienen fuentes que dicen que EEUU había tergiversado la influenza que, según Trump, había matado a miles, influenza llevada a China por el equipo de EEUU, Influenza que realmente era COVID 19, una enfermedad desarrollada en una instalación militar de guerra biológica en el estado de Washington, ahora "zona cero" en los EEUU para COVID 19. Los chinos afirman, algo censurado en los EEUU, que la actitud desatenta y los resultados desproporcionadamente inferiores a la media de los atletas estadounidenses en el juego indican que podrían haber estado para otros fines y que en realidad podrían ser agentes de bioguerra, y que su lugar de residencia durante su estadía en Wuhan también estuvo cerca del mercado mayorista de mariscos de Huanan, donde ocurrió el primer grupo conocido de casos." [5]

 

  • Siguiendo el hilo de la declaración inicial antes mencionada, no es la primera vez que la OMS genera una pandemia de miedo: “Cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró en junio de 2009 que la gripe porcina era una pandemia, los científicos advirtieron que podría ser la peor amenaza de salud pública de los últimos cuarenta años”[6]. El tiempo demostró que los datos fueron manipulados y que la directora de la OMS en ese momento, Margaret Chan, no ocultó su inclinación a favorecer los intereses de las grandes farmacéuticas.[7]  Para el 20 de febrero de 2020, el actual director de la OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus elevó a “muy alto” el riesgo de propagación del virus y tempranamente anunció que “más de 20 vacunas contra el covid-19 se están desarrollando en el mundo”.[8]

 

  • Otro dato ‘curioso’ a considerar son las fuentes de financiamiento de la OMS. Entre otras, este organismo recibe donaciones de carácter privado, siendo su segundo mayor financiador la Fundación Bill y Melinda Gates que en el período 2018-2019 aportó con el 9% de su presupuesto.[9] Recordemos que esa fundación se ha visto envuelta en una polémica por su participación en un simulacro de pandemia realizado el 18 de octubre de 2019 en la ciudad de Nueva York con el nombre de Evento 201. La reunión fue convocada:
  •  

por tres organizaciones neomalthusianas: la Universidad Johns Hopkins —a través del Centro para la Seguridad de la Salud, vinculado a los multimillonarios Bloomberg y Soros—, el Foro Económico Mundial y la Fundación Bill y Melinda Gates.

 

La Universidad Johns Hopkins dijo que el ejercicio sirvió para ilustrar las áreas «en las que serán necesarias alianzas público/privadas durante la respuesta a una pandemia severa para disminuir las consecuencias económicas y sociales a gran escala».

 

Llama la atención que el principal interés del Evento 201 fuera el de proyectar las «necesarias alianzas público/privadas» para “disminuir las consecuencias económicas y sociales a gran escala». Primero el dinero, después lo demás.

 

  1.  

 

Menos de un mes después del Evento 201, las autoridades de China dieron a conocer al mundo que se había detectado un nuevo tipo de coronavirus: el Covid-19, variante de otra cepa mortal, la del SARS.[10]

 

La OMS prácticamente desde sus inicios estableció relaciones incestuosas con el negocio farmacéutico, y es una burocracia internacional que obedece a grandes intereses antes que a la salud de los pueblos, boicoteando la auténtica cooperación horizontal entre naciones. Sus directivos dependen de las cuotas y su dependencia económica les hace obedientes de sus ‘socios’ más poderosos, entre los lobbies que influyen en la OMS están las siguientes:

 

 

                

 

 

 

  1. En estos días de COVID 19, EEUU anunció que adopta el séptimo dominio de la guerra, esto es, sumar a los dominios convencionales: tierra, mar, aire, espacio, ciberespacio y logística, el dominio de la guerra biológica:

 

  • edición virtual de la conferencia anual Mar, Aire y Espacio (Sea-Air-Space 2020) de la Liga de la Marina de EE.UU.

 

"Creo que deberemos tener eso en cuenta en nuestros preparativos para la disuasión y la defensa en el futuro", aseveró Foggo, quien también es el comandante del Mando Aliado de Fuerzas Conjuntas Nápoles de la OTAN, con base en la ciudad italiana[12].

 

 

 

Hay que recordar que en el año 2001 EEUU se retira e impide que se concrete un tratado para el control (verificación) de armas biológicas:

 

“Desde principios de año, los norteamericanos se han negado a ratificar el recientemente aprobado Protocolo de Kioto sobre medio ambiente, han minado los esfuerzos de Naciones Unidas por concluir un acuerdo que limite el tráfico de armas ligeras y han manifestado serias reservas hacia la creación de un Tribunal Penal Internacional, que el anterior Gobierno de Bill Clinton firmó por los pelos. En esta ocasión, los argumentos de Washington son parecidos a los que presentó para oponerse a Kioto: está de acuerdo con el fondo, desaprueba la forma y anuncia, sin mayores especificaciones, una solución alternativa. La negativa de EEUU impedirá que el protocolo se apruebe en la revisión del tratado, prevista para el 19 de noviembre.

 

El representante estadounidense en el comité de Naciones Unidas reunido en Ginebra, Donald Mahley, aseguró que el nuevo texto no evita la fabricación y uso de las armas químicas y biológicas por países como Irak, y que no mejora la capacidad para verificar el cumplimiento de la Convención de Armas Biológicas, principal objetivo del protocolo, por lo que 'servirá de poco para disuadir a aquellos países que buscan desarrollar armamento de este tipo'. Mahley aseguró que el documento poco menos que alentaba el espionaje industrial. 'El protocolo pone en peligro nuestra seguridad nacional y la confidencialidad de nuestros negocios'. Y añadió que el enfoque que había funcionado para otro tipo de armas no servía en este caso.

 

El borrador del tratado, que se está negociando desde hace seis años, establece controles para evitar la proliferación de armas biológicas, obliga a los países firmantes a declarar las instalaciones que podrían utilizarse con este propósito y crea un órgano de control, que hasta ahora no existía, para llevar a cabo visitas anunciadas con dos semanas de antelación. En caso de sospecha de violación del tratado, el órgano también tendría autoridad para efectuar controles sorpresa.”[13]

 

Existe una Convención de Armas Biológicas, que tiene antecedentes de desarrollo y creación desde 1925 del siglo pasado, pero en la práctica ese instrumento es inútil ya que no existe mecanismo de verificación. China y Rusia acusan a EEUU de financiar laboratorios biológicos secretos en al menos 25 países[14] que están bajo dominio geopolítico estadounidense, como Afganistán, Ucrania y Georgia, donde se conoce la existencia del Centro Richard Lugar. Es un hecho conocido que EEUU tiene un Programa de Guerra Biológica. También fue conocido el Centro de Investigación de Enfermedades Infecciosas del Ejército de EEUU ubicado en Fort Detrick – Maryland, que cerró el 2 de julio de 2019.

 

En ese marco no sorprende que el portavoz del gobierno chino Lijian Zhao haya señalado que fue el ejército de EEUU quien llevó el virus a Wuhan; de la misma manera, el líder de la República Islámica de Irán, el Ayatolá Seyed Ali Jamenei, el país más afectado por el COVID 19 en el Asia Occidental, manifestó que dicho agente fue “fabricado específicamente para Irán usando datos genéticos de iraníes que han logrado por diferentes medios” [15] y culpó de aquello a los EEUU.

 

Esos antecedentes nos indican que no es descabellado plantear que una guerra biológica es un escenario a contemplar, de ahí no sorprende que el biólogo ruso y ex miembro de la Comisión de Armas Químicas y Biológicas de la ONU, Igor Nikulin, acuse directamente a los EEUU de la creación del coronavirus[16].

 

Finalmente la página estadounidense ‘Veterans Today’ que tiene como eslogan: “Serving the clandestine community” (Sirviendo a la comunidad clandestina), en su artículo “Pandemic exposes US as only Bioweapons Superpower”[17] (Pandemia expone a EEUU como la única superpotencia en armas biológicas) menciona nuevamente la constelación de laboratorios biológicos con que cuenta EEUU y el gran financiamiento que reciben.

 
  1. No deja de ser sugerente que hayan aparecido Nostradamus modernos que pronosticaron la aparición de un ‘brote sorpresa’ durante la administración Trump. Nos referimos al amigo de Bill Gates, el Dr. Anthony Fauci director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los EEUU desde 1984, es decir, es el Edgar Hoover de los virus. La comparación no es ociosa para quien conoce todo el poder que llegó a acumular el fundador de la Oficina Federal de Investigaciones más conocida como FBI y que controló la institución durante 37 años, hasta su muerte. También agencias de inteligencia estadounidenses pronosticaron la aparición de un virus virulento, por ejemplo, el Consejo de Inteligencia Nacional (NIC) en su informe de noviembre de 2008 ‘Global Trends 2025: a Transformed World’[18], señalo que antes del 2025 aparecería un virus que puede convertirse en pandemia mundial.

 

Con los hechos mencionados no queremos afirmar necesariamente que el COVID 19 fue creado como arma biológica, hay extensos argumentos, que no los vamos a mencionar para evitar hacer muy espacioso este artículo, que favorecen a quienes indican que la contaminación y la producción industrial de pollos, cerdos, ganado, en resumen el modo de producción capitalista, sin controles ecológicos y sanitarios, son los que pueden provocar la aparición de virus peligrosos; sin embargo, si esto fuera así, es decir, el COVID 19 no es una arma biológica, el hecho concreto y verificable es que sí está siendo usado como arma biopolítica, es un abordaje diferente que nos lleva casi al mismo resultado.

 

 

 

Maquiavelo solía decir, que si no hay enemigo, hay que inventarlo, dado que el supuesto enemigo ‘terrorismo internacional’ se ha devaluado, como antes ‘el enemigo comunista’, posiblemente a alguien se le ocurrió la “genial” idea de crear un obscuro enemigo ‘biopolítico’.

 

En este sentido pensadores como Michel Foucault o George Orwell, -los más populares y conocidos, entre los que han estudiado la temática-, se han puesto de moda durante la “pandemia”. Se habla que el coronavirus está facilitando la construcción de una arquitectura de la opresión, donde ciertos gobiernos han usado la crisis sanitaria para sacrificar derechos y libertades. No deja de haber razones para interpretar así los acontecimientos, todo el miedo generado, se parece a una gran operación psicológica de alcance mundial, que ha permitido a gobiernos como el ecuatoriano por ejemplo, a agudizar sin inmutarse el programa neoliberal, antes que conducir el problema suscitado como un asunto de salud pública.

 

Hemos observado que hubo gobiernos que no tuvieron que recurrir a la cuarentena total para ‘domesticar al bicho’, lo que nos demostró que el virus era un parámetro absolutamente controlable y que realmente era imposible que el COVID 19 tenga la capacidad de diezmar a la población mundial como algunas voces lo señalaron. Estamos viendo de acuerdo a las estadísticas, que el ‘bicho’ ni siquiera va a adquirir la letalidad que produjo la mal llamada ‘gripe española’ que dicen mató a por lo menos 50 millones de personas, donde fueron las tropas estadounidenses durante la 1ra Guerra Mundial (1918-19), quienes provocaron el masivo contagio en Europa.

 

Sería ampliar demasiado este artículo analizar las diferentes estrategias que adoptaron los Estados, pero las autoridades de cada país deberían hacer los respectivos análisis y obtener aprendizajes, porque puedo asegurar que hechos similares se sucederán en el futuro. De la misma manera se puede aseverar, que si atrás de esta supuesta pandemia hubo algún actor interesado, éste estará sacando sus propias enseñanzas. El COVID 19 ha convertido al mundo en una especie de laboratorio de pruebas. Y no se puede descartar una verdadera pandemia con alta tasa de mortalidad.

 

Volviendo al asunto del bicho como arma biopolítica, algunos ‘analistas’ nos dicen que el estilo de vida que conocíamos nunca volverá, es lamentable que se promuevan esas visiones, sobre todo porque insinúan que debemos resignarnos. ¿Resignarnos a la opresión? ¿Al control social perverso? ¿A la vigilancia intrusiva? ¿A la inmovilidad? ¿Al distanciamiento social? ¿A una pandemia permanente? ¿Al quiebre de la economía que se relaciona con la relación social? Lo concreto es que las sociedades siempre se han movido y sus estructuras evolucionan de forma permanente, sean estas las geopolíticas, políticas, económicas, sociales y culturales. Y las rebeliones populares no dejaran de existir, porque es inevitable manifestarse frente a un orden neoliberal y geopolítico que oprime a vastos sectores poblacionales, como nuevamente está sucediendo en Ecuador en medio de esta sospechosa “pandemia”.

 

Tampoco han faltado los planteamientos extremos, como la Slavoj Zizek que mostrando un optimismo desbocado nos dice que se acerca una nueva era de ‘comunismo’, una colaboración global que pueda controlar y regular la economía,  o el pesimista de Byug Chul Han que señala que habrá mayor aislamiento e individualización de la sociedad, por lo tanto, un terreno fértil para un capitalismo más salvaje. Respecto a la perspectiva de Byug Chul Han, los datos empíricos en el caso ecuatoriano lo contradicen. Durante esta crisis sanitaria se han realizado varias encuestas y dan como resultado datos interesantes, por ejemplo la gente responde que ha aprendido a ser más solidaria, que ve la necesidad de apoyar a los productores locales, etcétera. Pero además han alcanzado interesantes dimensiones nuevas redes, como por ejemplo, la de huertos urbanos, o intercambios directos entre los productores rurales y la ciudad y se han reactivado los negocios barriales. Mucho de esto, seguramente permanecerá, pero de ninguna manera es el comunismo. Y a propósito, estas relaciones e intercambios se han establecido gracias al internet. La gente ha promovido alternativas para solventar las necesidades básicas consecuencia de la cuarentena.

 

Para concluir esta parte, se debe hacer una deducción algo más sofisticada: más que una arma biológica militar, el bicho es una arma biológica biopolítica. Si el virus hubiese sido diseñado como arma estrictamente militar el alcance de su letalidad hubiese sido mayor, en cuanto a pérdidas humanas. Como arma biológica biopolítica ha cumplido sus objetivos a la perfección. En este sentido la manipulación psicológica ha sido enorme, y si algún día se hiciera una investigación seria, probablemente se descubrirá que los fallecidos POR el COVID 19 en comparación de los fallecidos CON el COVID 19 son igual de numerosos. En la lista de fallecidos POR el COVID 19 hay un amplio espectro de posibilidades: personas con enfermedades pre-existentes y que fallecieron en sus casas sin acudir a sus controles por temor a contagiarse en los hospitales, personas a las cuales se les aplicó protocolos equivocados, personas que perdieron sus trabajos y se suicidaron, personas con extrema vulnerabilidad social que vieron agravada su situación, etcétera.

 

La funcionalidad del virus estuvo, -considerando que los muertos son reales-, en la hipertrofia anímica del fenómeno. Con técnicas sico-emotivas y ambigüedad informativa, en la percepción de la gente, los mil muertos podían llegar a ser millones. Los médicos chinos y rusos dijeron en su momento que el virus cuando penetra en un organismo, este se ve afectado conforme a su sistema inmunológico, enfermándoles o agravando enfermedades pre-existentes, que en el caso de personas adultas mayores pueden tener desenlaces graves, como en muchos casos sucedió especialmente en países europeos con basta población mayor. Entonces ¿Qué de nuevo nos trajo el COVID 19 desde la perspectiva estrictamente médica? Fue la OMS Occidental y no China la que elevó a pandemia mundial una epidemia el 11 de marzo de 2020 cuando los casos no superaban los 118.000:

 

“Por lo tanto, hemos evaluado que COVID-19 puede caracterizarse como una pandemia.

 

Pandemia no es una palabra para usar a la ligera o descuidadamente. Es una palabra que, si se usa incorrectamente, puede causar un miedo irrazonable o una aceptación injustificada de que la lucha ha terminado, lo que lleva a un sufrimiento y muerte innecesarios.

 

Describir la situación como una pandemia no cambia la evaluación de la OMS sobre la amenaza que representa este virus. No cambia lo que está haciendo la OMS, y no cambia lo que los países deberían hacer.

 

Nunca antes habíamos visto una pandemia provocada por un coronavirus. Esta es la primera pandemia causada por un coronavirus.

 

               Y nunca antes hemos visto una pandemia que pueda ser controlada, al mismo tiempo.

 

La OMS ha estado en modo de respuesta completa desde que nos notificaron los primeros casos.

 

               Y hemos pedido todos los días a los países que tomen medidas urgentes y agresivas.

 

               Hemos tocado el timbre de la alarma alto y claro.”[19]

 

Una verdadera pandemia es el VIH/Sida que se lo detecta en 1980 y hasta la actualidad ha provocado la muerte a 32 millones de personas aproximadamente. El COVID 19 hasta el 20 de mayo ha provocado 330.000 muertes[20], de acuerdo a esta fuente citada. Países como la República Socialista de Vietnam (es el nombre oficial) no tienen fallecidos, a pesar de tener más de 91 millones de habitantes.

 

Decíamos anteriormente que el COVID 19 es totalmente controlable siempre y cuando se aplique la estrategia correcta y se le dote de los medios necesarios. El científico italiano Sergio Romagnani señaló que el éxito de la localidad de Vo es no haber seguido a la OMS, aquí una fracción de la interesante entrevista:

 

PREGUNTA. En la localidad de Vò Euganeo (Véneto, norte de Italia) se produjo uno de los primeros brotes. Decidieron hacer test a toda la población, a los 3.500 habitantes, y aislar a todos los positivos, incluidos los asintomáticos. Y la epidemia se frenó en seco, al revés de lo que ocurrió en Lombardía... o en Madrid.

 

RESPUESTA. Vò es una localidad en la que había una situación muy parecida a la de Codogno (Lombardía). De hecho, había habido contactos entre los dos pueblos, que están muy cerca aunque pertenecen a regiones distintas. E igual que en Codogno, Vò se convirtió en 'zona roja' desde el principio y se cerró completamente a la población. La diferencia es que aquí entró en juego mi discípulo, Andrea Crisanti, con quien he hablado mucho estos días. Aconsejadas por él, las autoridades decidieron hacer test a todos los habitantes del pueblo.

 

P. ¿Y cuál fue el resultado?

 

R. El resultado se obtuvo sobre una muestra muy pequeña, pero aun así es muy revelador. Un total de 58 personas dieron positivo en los test realizados entre el 22 y el 25 de febrero y, de todos ellos, 33 eran totalmente asintomáticos. De los menores de 50, la mayoría lo eran. Establecimos la hipótesis de que entre el 50% y el 70% de los infectados no estarían desarrollando síntomas, que recogieron los periódicos italianos. Y lo más importante: 10 días después solo dieron positivo 19 de los asintomáticos y 10 de los que tenían síntomas.

 

P. Un estudio posterior, en China, incide en que alrededor del 80% de los contagios lo provocan infectados no detectados, entre ellos asintomáticos.

 

R. Claro, porque son muchos y son una fuente formidable de contagio. Por eso hay que aislarlos inmediatamente. La mayoría eran personas jóvenes y sanas. Pero lo más interesante de todo es que cuando los contagiados asintomáticos fueron aislados en Vò, el porcentaje de enfermos disminuyó de golpe del 3,2% al 0,3%. ¡Más de 10 veces! Llegamos a la conclusión de que la circulación del virus alrededor de una misma persona, aunque ya esté infectada, agrava su patología.

 

P. Antes de seguir con eso, me queda una duda, ¿los asintomáticos no presentaron síntomas después del primer test, no?

 

R. No, no. Ya le digo que a los 10 días les volvieron a hacer el test y ya más de la mitad dieron negativo. Creo que en todo el brote allí solo ha muerto una persona. ¡Compárelo con Codogno, donde ha habido tantísimas víctimas! La impresión de Crisanti, que comparto, es que quizá fue el aislamiento de los asintomáticos positivos lo que frenó la epidemia. Es una hipótesis, pero creemos que cuando el virus circula muchas veces por el mismo ambiente, potencia su acción.[21]

 

Donde se empleó una estrategia similar, es decir, cuarentena selectiva gracias a la aplicación de pruebas masivas, no fue necesario paralizar la economía. 

 

¿Cuáles fueron los objetivos materiales de esta arma biológica biopolítica?

 

Hemos constatado que en el marco de la confrontación geoestratégica entre el imperialismo yanqui y el hegemón emergente que es China, el gobierno estadounidense ha desatado una campaña sin recatos al mejor estilo ‘macartista’ en contra de China. Ha señalado por ejemplo, que el virus tuvo su origen en un laboratorio de Wuhan, de ahí el calificativo de ‘virus chino’.  Ha atemorizado a la sociedad científica estadounidense y Occidental persiguiendo o encarcelando a científicos[22] de manera de ir anulando progresivamente la cooperación que se venía dando con universidades chinas, aun existiendo de por medio acuerdos legales y públicos. Todo esto en el marco por conservar la delantera en la investigación tecnológica y científica que China le estaba disputando o la perdió –hasta el momento- como es el caso del conflicto relacionado a la tecnología 5G, que sobre la misma se ha desatado toda una campaña conspiranóica, tanto que en redes sociales llegan videos de vandalización de torres 5G. En fin, la lista de hechos de ese tipo puede ser larga, pero evidentemente la guerra comercial desatada por el gobierno de Trump es la acción más fuerte, -hasta hoy-, para frenar a la locomotora china.

 

La pregunta obvia es: ¿Por qué el actor interesado que hipotéticamente propagó el virus lo haría, si un virus es incontrolable, y tarde o temprano lo afectaría también a él? La respuesta no es complicada, el objetivo no era liquidar grandes masas de población, sino alterar el ritmo normal económico y socio-político de la humanidad usando como instrumento al bicho, y especialmente construir un relato para frenar a China, posicionando como creíble la existencia de una pandemia. Las muertes que ese hipotético actor pudo haber sufrido en su propio terreno, son como suele decir el Pentágono, daños colaterales. Por lo demás, es una típica forma de proceder fascista.

 

Mirada desde la perspectiva de la economía política

 

Como no podía ser de otra manera, el COVID 19 ha sido el chivo expiatorio para ponerle fisonomía a la siempre latente crisis económica inherente al capitalismo. Las burbujas de este capitalismo financiero neoliberal están ahí producto de las contradicciones que por antonomasia le caracterizan y estallan de vez en cuando. Así, como arma biológica biopolítica, a determinados gobiernos y políticos les viene bien cargar la culpa a la “pandemia” de los resultados de su política económica, como lo ha hecho el gobierno de Moreno sin ruborizarse.

 

Algunos analistas dijeron que el coronavirus permitirá el retorno del Estado, -como algo mágico-, la realidad es diferente a los deseos sin sustento. Ningún virus va a cambiar las correlaciones de fuerzas políticas que tengan las diferentes sociedades, ni será la causa modificaciones geopolíticas profundas en el mundo, consideremos que el mundo multipolar o tripolar existente en la actualidad es consecuencia de un proceso de varias décadas. Una correlación de fuerzas cambia debido a los procesos políticos que suceden en cada país o región, y para ello se requiere de organización, actores políticos y líderes con legitimidad, credibilidad y claridad estratégica. Así ha sido históricamente.

 

Teniendo en cuenta lo mencionado, lo ‘racional’ era que los gobiernos eviten el cierre de empresas para preservar el empleo. En muchos casos, empresas -en especial medianas y pequeñas- que cierran no pueden volver a funcionar y ese empleo no se recupera, y en general el país se vuelve más pobre por la pérdida de fuerzas productivas. Nuevamente colocando como ejemplo paradigmático, el gobierno ecuatoriano, hizo justamente todo lo contrario, provocó el cierre de empresas y pérdida de cientos de miles de empleos. ¿En el escenario ecuatoriano, qué va a matar más, el ‘bicho’ o el neoliberalismo?

 

En este marco, las élites financieras requerían una crisis –en su momento, así se pronunciaron-, y necesitaban responsabilizar a alguien de ella, nada mejor que un virus, no podían ser los bancos, están muy desprestigiados, y los ciudadanos aborrecieron los rescates financieros producidos en la crisis del 2008, entonces que mejor instrumento que una “pandemia” que además puede ir ambientando la justificación de un panóptico digital y legitimar ‘la nueva normalidad’.

 

Se perjudicó a la economía, el comercio, el transporte, el sector turismo entra en grave crisis y aquellos que tuvieron información privilegiada hicieron un carnaval con operaciones especulativas. Hay que aclarar que todas esas afectaciones deben ser analizadas de manera específica, ya que debido a las diferentes estrategias adoptadas por los países el impacto ha sido distinto según el caso. Sin embargo, hay un daño general a la economía del mundo, se han generado innumerables bancarrotas y pérdida de millones de empleos.

 

Si este problema fue diseñado previamente, hay beneficiarios claros, y uno de ellos es el negocio farmacéutico, interesados en vender una vacuna, que siendo un virus que muta, no resuelve el problema en su totalidad. Aun siendo el COVID 19, de acuerdo a lo que nos dicen, un virus muy contagioso, hemos constatado que no todos los países recurrieron al confinamiento generalizado, evitando así parar sus economías. Aun en el caso ecuatoriano que es el ejemplo de como no debe manejarse una crisis sanitaria, no era necesaria aplicar la cuarentena total en escenarios tan diferentes como el urbano y el rural.  

 

Los beneficiarios de esta “pandemia” van desde gobiernos que han hecho uso político de esta situación, poderes mundiales que han maniobrado para ir avanzando en sus propias agendas geopolíticas/geoestratégicas y los grandes millonarios, así, según el informe del Institute for Policies Studies, Billionaire Bonanza 2020, la riqueza de Jeff Bezos, Bill Gates, y Warren Buffett, entre otros, aumentó un 9,5 por ciento en solo 23 días durante la crisis de COVID-19.[23]

 

Carlos Marx nos dejó un pensamiento solido respecto a las crisis capitalistas y su recurrencia cíclica. Señaló que de periodo en periodo el capitalismo necesita destruir fuerzas productivas para reorganizarse, reinventarse, restructurarse, y si tiene que recurrir a la violencia, lo hace. Este planteamiento está demostrado por la historia. No estamos frente al fin del capitalismo, sino probablemente en el comienzo de un capitalismo que recurrirá a pandemias o ciberguerras para favorecer en especial al complejo industrial militar, farmacéutico, comunicación, nuevas tecnologías y por supuesto a los especuladores financieros. Naomi Klein llamó a esto capitalismo de desastres y a la estrategia utilizada, doctrina del shock.

 

Pero no todo es ganancia para los hipotéticos obscuros actores detrás de esta “pandemia”. Esta crisis sanitaria ha conseguido que EEUU pierda softpower, influencia, prestigio. El endurecimiento de los bloqueos a países como Cuba, Irán y Venezuela, sin considerar lo humanitario, le ha provocado pérdida de liderazgo mundial y atributos éticos. Cuando una potencia pierde estatura moral y se muestra como el villano del tablero, está cerca del fin, al menos del fin como hegemón mundial, como potencia económica perdurará algún tiempo más. Por el contrario, la República Popular de China ha anunciado que cuando obtenga la vacuna, lo pondrá al servicio del público global, perturbando de esa manera al negocio farmacéutico y a Trump en su intención de monopolizar las patentes respectivas.

 

22 de mayo de 2020

 

Mario Ramos

Director del Centro Andino de Estudios Estratégicos

 

 

 

 

 

 

 


[1] VOLTAIRENET.ORG: La transformación de las sociedades en ‎la estela del Covid-19 anuncia la ‎militarización de Europa. https://www.voltairenet.org/article209809.html
 
[2] EOM: ¿Cómo se gestiona una alerta sanitaria internacional?

https://elordenmundial.com/como-se-gestiona-una-alerta-sanitaria-interna...

[3] XINHUA: Alcalde de EEUU dice que pudo haber contraído COVID-19 en noviembre pasado,

http://spanish.xinhuanet.com/2020-05/05/c_139032852.htm

GLOBALIZACIÓN: El coronavirus de China, una revelación impactante: ¿El virus se originó en Estados Unidos?

https://www.globalizacion.ca/el-coronavirus-de-china-una-revelacion-impa...

[4] HISPAN TV: China insiste en que COVID-19 fue llevada por EEUU a Wuhan

http://www.hispantv.com/noticias/china/463270/eeuu-coronavirus-wuhan

¿Delegación deportiva militar de EEUU propagó COVID-19 en Wuhan?

https://www.hispantv.com/noticias/ee-uu-/452404/delegacion-deportiva-mil...

[5] VETERANS TODAY: Exclusive: US Army Brought COVID-19 to China with Fake ‘Military Games’ Team

https://www.veteranstoday.com/2020/05/12/china-us-brought-covid19-to-chi...

[6] BBC: ¿Y qué ocurrió con la gripe porcina?
ttps://www.bbc.com/mundo/ciencia_tecnologia/2010/01/100106_porcina_balance_men
[7] REUTERS: WHO sees 4.9 billion pandemic flu shots in best-case

https://www.reuters.com/article/us-flu-who/who-sees-4-9-billion-pandemic...

[8] EL PAÍS: La OMS eleva a “muy alto” el riesgo de propagación del virus

https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/02/28/economia/1582905885_47...

[9] EOM: ¿Cómo se financia la Organización Mundial de la Salud?’
ttps://elordenmundial.com/financiacion-organizacion-mundial-salud-oms/

[10] GLOBALIZACIÓN: Del simulacro de Nueva York a la pandemia de Coronavirus, pasando por la predicción de Bill Gates.

https://www.globalizacion.ca/simulacro-nueva-york-pandemia-coronavirus-p...

[11] BUSINEMETRICS: Las farmacéuticas más grandes del mundo – Año 2019

https://businemetrics.wordpress.com/2019/03/01/las-farmaceuticas-mas-gra...

[12] RT: ¿Qué es el séptimo dominio de la guerra y por qué EE.UU. quiere ser pionero en aplicarlo?

https://actualidad.rt.com/actualidad/351056-septimo-dominio-guerra-eeuu-...

[13] EL PAÍS: Estados Unidos veta la renovación del tratado que controla las armas biológicas
https://elpais.com/diario/2001/07/26/internacional/996098401_850215.html

[14] LA OTRA OPINIÓN: La guerra genética:: El nuevo escenario de confrontación de Estados Unidos

http://laotraopinion.net/agroindustria/laboratorios/la-guerra-genetica-e...

[15] ABC: Jamenei acusa a Estados Unidos de «fabricar el virus para Irán»
https://www.abc.es/internacional/abci-jamenei-acusa-estados-unidos-fabri...
[16] HISPAN TV: ‘EEUU ha producido el coronavirus en sus laboratorios secretos’

https://www.hispantv.com/noticias/rusia/451473/coronavirus-arma-biologic...

[17] VETERANS TODAY: Pandemic exposes US as only Bioweapons Superpower

https://www.veteranstoday.com/2020/05/17/neo-pandemic-exposes-us-as-only...

[18] NIC: Global Trends 2025: A Transformed World https://www.files.ethz.ch/isn/94769/2008_11_Global_Trends_2025.pdf. pág. 95

[19]  WORLD HEALT ORGANIZATION: WHO Director-General's opening remarks at the media briefing on COVID-19 - 11 March 2020

https://www.who.int/dg/speeches/detail/who-director-general-s-opening-re...

[21] EL CONFIDENCIAL: "Véneto está controlando el coronavirus porque no ha seguido a la OMS"

https://www.elconfidencial.com/mundo/europa/2020-04-07/coronavirus-oms-i...

[22] ABC: Detenido un científico de Harvard acusado de trabajar en secreto para China

https://www.abc.es/ciencia/abci-detenido-cientifico-harvard-acusado-trab...

[23] INSTITUTE FOR POLICY STUDIES: Billionaire Bonanza 2020: Wealth Windfalls, Tumbling Taxes, and Pandemic Profiteers. https://ips-dc.org/billionaire-bonanza-2020/

 

https://www.alainet.org/de/node/206768?language=es
America Latina en Movimiento - RSS abonnieren