El Mercosur hizo cumbre en Mendoza
Venezuela a pleno
01/07/2012
- Opinión
La República Bolivariana puedo ser incorporada como miembro pleno al Mercosur tras la suspensión en el bloque de Paraguay, víctima de un golpe de Estado que lo deja huérfano de democracia. Mandatarios y mandatarias populares celebran, mientras las voces de las derechas venezolanas y regionales intentan ensuciar el avance en la integración.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, tuvo palabras precisas para uno de los hechos políticos más relevantes que dejó la XLIII Cumbre del Mercosur: “es un golpe a la derecha paraguaya”.
La incorporación de Venezuela al Mercado Común del Sur (Mercosur) como socio pleno del bloque regional, expresó Correa, "es un golpe importante para esa derecha paraguaya que ha dado el golpe de Estado” contra Fernando Lugo el pasado 22 de junio.
Los jefes y jefas de Estado del bloque decidieron que a partir del 31 de julio, Venezuela es socio pleno. A su vez –y en estrecha relación ambas decisiones- se suspendió a Paraguay en el Mercosur hasta que concrete las elecciones programadas para abril del 2013. Ese día se celebrará una reunión extraordinaria del organismo en Río de Janeiro para realizar el acto de admisión oficial, según detalló el canciller argentino, Héctor Timerman, al leer la resolución correspondiente.
La pertenencia plena de Venezuela se puso en marcha cierta en 2006, pero hasta el momento no se concretaba porque el Congreso paraguayo no dio su aprobación. Negativa que iba a contramano de la voluntad política del ejecutivo encabezado por Lugo.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, recordó en comunicación con la cadena interestatal Telesur que Venezuela pidió ingreso al Mercosur antes que él asumiese la primera magistratura, en 1999. Pero también aclaró que no fue sino hasta que llegaron “Lula a la Presidencia de Brasil y Néstor Kirchner a la de Argentina” cuando se empezó a encaminar “formalmente esta petición”.
El protocolo de adhesión de Venezuela se firmó en Caracas el 4 de julio de 2006, pero, según relató el propio Chávez, “nos conseguimos con una traba en el congreso paraguayo, ese mismo que dio el golpe de Estado a Lugo. Ese mismo congreso, furibundo contra Venezuela” que acusándome a mí y causándole un gran daño a Mercosur y al propio Paraguay” no dio nunca la aprobación, trámite que sí se concretó en los congresos nacionales de los otros países miembro.
También Correa destacó hacían siete años que Venezuela quería incorporarse como miembro pleno al Mercosur, pero eso "siempre fue obstruido por Paraguay".
El mandatario ecuatoriano señaló también que al destituido presidente Fernando Lugo, cuando aún estaba en funciones, "lo amenazaron de que si apoyaba (el ingreso de Venezuela) le harían un juicio político y lo destituirían”. La incorporación plena de Venezuela, decisión tomada por unanimidad de los presidentes y presidentas en Mendoza –provincia del oeste argentino y sede de la última Cumbre del bloque-, hace que, según Correa "la derecha paraguaya” deba estar “comiendo cemento".
El presidente de Ecuador, finalmente, valoró que “si (la derecha paraguaya) iba dos a cero con el golpe de Estado, ya van dos a uno con el ingreso de Venezuela al Mercosur".
Para Rodrigo Cabezas, economista y presidente del Parlatino Venezuela, “el ingreso de Venezuela como miembro pleno del Mercosur viene a profundizar el proceso de integración económica y política que domina este comenzar de siglo”, a la vez que refuerza la posibilidad “de dar un salto al desarrollo y derrotar la pobreza mediante los procesos integradores” ya que el modelo de integración no se “a un tema meramente comercial-aduanero sino que se sustenta” en la “complementación productiva, la solidaridad y la cooperación entre las naciones y pueblos que la integran”.
El ex Ministro de Finanzas venezolano analizó también que este paso supone “un desafío” en tanto deberá “reforzar su estrategia de industrialización para las exportaciones”. Señaló que se trata de “aprovechar el ensanchamiento del mercado a un área de 400 millones de habitantes y de 3,1 billones de dólares de tamaño de la economía para colocar nuestros productos nacionales".
Para Hugo Chávez, la incorporación de su país al bloque es una “derrota para el imperialismo” estadounidense y la “burguesía lacaya”. También aclaró que “la burguesía venezolana junto a la de Paraguay, hizo lo imposible para evitar la inclusión de Venezuela en el referido bloque regional”
Por su parte, el presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez Abad, indicó que la adhesión de Venezuela al bloque regional será beneficiosa para el desarrollo de las Pequeñas y Medianas Industrias. Explicó que permitirá el intercambio directo de productos de consumo y que abrirá las puertas de la consolidación de macro proyectos como la carretera Manaus-Ciudad Guayana y el gasoducto Caracas-Brasilia-Buenos Aires.
El presidente venezolano resaltó la importancia de la integración a través de organismos como el Mercosur, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América (ALBA) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) ya que son “escudos” que permiten a los pueblos del continente defenderse del imperialismo de Estados Unidos.
Según un informe de los especialistas Nahuel Oddone y Leonardo Granato, del Centro Argentino de Estudios Internacionales, el ingreso de Venezuela al bloque implica ocupar el 71 por ciento del territorio sudamericano, alrededor de 212 millones de personas como mercado que es el algo más del 55 por ciento de la población de América del Sur; y a la vez se concentrará el 70 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) de Sudamérica. Además, el informe también recuerda que Venezuela tiene las mayores reservas de energía del hemisferio occidental y que con el nuevo miembro aumentarían las exportaciones del Mercosur se favorecerá la reducción de las asimetrías regionales.
Las reacciones negativas en la región por el ingreso totalde Venezuela al Mercosur no se hicieron esperar. El candidato presidencial de ese país por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles Radonski, advirtió a través de la red social Twitter, que el objetivo del reciente ingreso debería ser la generación de “ingresos reales” para la población.
Esta definición la impartió como contracara de lo que él, y la derecha a la que representa, no dudan en tildar como simples esfuerzos por estimular el modelo de importaciones que a su juicio promueve el gobierno del presidente Hugo Chávez. “Creemos que podemos ser más que exportadores de petróleo, tenemos producción nacional que debe ser promovida en otros países”, dijo a través de su cuenta @hcapriles.
Según ABC, medio paraguayo opositor a la gestión Lugo, el canciller de ese país, José Estigarribia, consideró que “Argentina, Brasil y Uruguay” abogaron por la suspensión de su país solo con el objetivo de “incorporar a Venezuela”. Desestimó así, y el medio legitima esa posición, que el motivo único de la suspensión fue la situación anti democrática que se vive tras las destitución de Fernando Lugo.
Se destaca también en ABC la frase "Meten por la ventana a Venezuela en el Mercosur", que retrató esa nota con un dibujo de un gorila que alude al presidente Hugo Chávez, y que se lo ve entrando “por la ventana a una casa con la leyenda "Mercosur" empujado por caricaturas de los presidentes de los tres socios de Paraguay en el bloque, con el aplauso de su expresidente Fernando Lugo”, según relata AFP.
El mismo diario no dudó en tildar de manera catastrófica la acción de los países del bloque: “Infamia de la Triple Alianza (Argentina, Brasil y Uruguay) contra el pueblo paraguayo”, tituló.
El diario El Universal, de Venezuela, destaca que la incorporación de ese país al Mercosur “genera malestar”. En el artículo relata la declaración del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) –opositor a la administración de Dilma- en la que se expresa que “si el bloque considera que las reglas democráticas fueron quebradas en el proceso de ‘impeachment’ al presidente paraguayo Fernando Lugo, hay muchas más razones hoy para cuestionar la frágil democracia mantenida por Venezuela".
También resalta declaraciones de José Botafogo Gonçalves, presidente del Centro Brasileño de Relaciones Internacionales, quien indicó que "el problema de que Venezuela entre al Mercosur es Chávez, que no le gusta el libre comercio y quiere transformar el bloque en una plataforma política".
Además, El Universal subraya que el senador uruguayo, Jorge Larrañaga, referente del opositor Partido Nacional, señaló que tanto el ingreso de Venezuela como la suspensión a Paraguay tras la destitución del presidente Fernando Lugo son un "atropello" al Mercosur, "una vergüenza y un acto de entreguismo inédito en la historia de Uruguay".
Desde Uruguay, Sergio Abreu, senador y excanciller del opositor Partido Nacional, sentenció que la suspensión de Paraguay y el ingreso de Venezuela son un “golpe de Estado, una ruptura de la relación jurídica y una interpretación abusiva de los derechos que tienen los estados” dentro del bloque sudamericano, informó AFP.
La misma agencia destaca que para Ope Pasquet, del Partido Colorado, “se optó por sacrificar al país chico y pobre para darle entrada al país rico”.
Para el diario venezolano La Nación, lo destacable de la decisión unánime del Mercosur son las voces críticas que se levantaron. Relevó, en ese sentido, a Rubens Barbosa, presidente del Consejo de Comercio Exterior de la Federación de Empresarios de San Pablo (Fiesp), quien cree que “el Mercosur” ya “no vale nada para la apertura de comercio” y que simplemente “se transformó en un foro político”.
Claro, desde otra perspectiva, incluso declamada y trabajada por los gobiernos populares de la región, esto es efectivamente así: no se trata simplemente de fomentar el libre cambio. Las voluntades políticas progresista de la región se embarcaron en un modelo de integración latinoamericana amplio, democrático, con firme asiento en los pueblos y sus culturas, en la defensa conjunta de la soberanía y los recursos naturales de los países de la región, de la acción mancomunada frente a los embates extranjeros en territorios latinoamericanos; por solo mencionar algunas de las premisas.
La incorporación de Venezuela al Mercado Común del Sur (Mercosur) como socio pleno del bloque regional, expresó Correa, "es un golpe importante para esa derecha paraguaya que ha dado el golpe de Estado” contra Fernando Lugo el pasado 22 de junio.
Los jefes y jefas de Estado del bloque decidieron que a partir del 31 de julio, Venezuela es socio pleno. A su vez –y en estrecha relación ambas decisiones- se suspendió a Paraguay en el Mercosur hasta que concrete las elecciones programadas para abril del 2013. Ese día se celebrará una reunión extraordinaria del organismo en Río de Janeiro para realizar el acto de admisión oficial, según detalló el canciller argentino, Héctor Timerman, al leer la resolución correspondiente.
La pertenencia plena de Venezuela se puso en marcha cierta en 2006, pero hasta el momento no se concretaba porque el Congreso paraguayo no dio su aprobación. Negativa que iba a contramano de la voluntad política del ejecutivo encabezado por Lugo.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, recordó en comunicación con la cadena interestatal Telesur que Venezuela pidió ingreso al Mercosur antes que él asumiese la primera magistratura, en 1999. Pero también aclaró que no fue sino hasta que llegaron “Lula a la Presidencia de Brasil y Néstor Kirchner a la de Argentina” cuando se empezó a encaminar “formalmente esta petición”.
El protocolo de adhesión de Venezuela se firmó en Caracas el 4 de julio de 2006, pero, según relató el propio Chávez, “nos conseguimos con una traba en el congreso paraguayo, ese mismo que dio el golpe de Estado a Lugo. Ese mismo congreso, furibundo contra Venezuela” que acusándome a mí y causándole un gran daño a Mercosur y al propio Paraguay” no dio nunca la aprobación, trámite que sí se concretó en los congresos nacionales de los otros países miembro.
También Correa destacó hacían siete años que Venezuela quería incorporarse como miembro pleno al Mercosur, pero eso "siempre fue obstruido por Paraguay".
El mandatario ecuatoriano señaló también que al destituido presidente Fernando Lugo, cuando aún estaba en funciones, "lo amenazaron de que si apoyaba (el ingreso de Venezuela) le harían un juicio político y lo destituirían”. La incorporación plena de Venezuela, decisión tomada por unanimidad de los presidentes y presidentas en Mendoza –provincia del oeste argentino y sede de la última Cumbre del bloque-, hace que, según Correa "la derecha paraguaya” deba estar “comiendo cemento".
El presidente de Ecuador, finalmente, valoró que “si (la derecha paraguaya) iba dos a cero con el golpe de Estado, ya van dos a uno con el ingreso de Venezuela al Mercosur".
Para Rodrigo Cabezas, economista y presidente del Parlatino Venezuela, “el ingreso de Venezuela como miembro pleno del Mercosur viene a profundizar el proceso de integración económica y política que domina este comenzar de siglo”, a la vez que refuerza la posibilidad “de dar un salto al desarrollo y derrotar la pobreza mediante los procesos integradores” ya que el modelo de integración no se “a un tema meramente comercial-aduanero sino que se sustenta” en la “complementación productiva, la solidaridad y la cooperación entre las naciones y pueblos que la integran”.
El ex Ministro de Finanzas venezolano analizó también que este paso supone “un desafío” en tanto deberá “reforzar su estrategia de industrialización para las exportaciones”. Señaló que se trata de “aprovechar el ensanchamiento del mercado a un área de 400 millones de habitantes y de 3,1 billones de dólares de tamaño de la economía para colocar nuestros productos nacionales".
Para Hugo Chávez, la incorporación de su país al bloque es una “derrota para el imperialismo” estadounidense y la “burguesía lacaya”. También aclaró que “la burguesía venezolana junto a la de Paraguay, hizo lo imposible para evitar la inclusión de Venezuela en el referido bloque regional”
Por su parte, el presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez Abad, indicó que la adhesión de Venezuela al bloque regional será beneficiosa para el desarrollo de las Pequeñas y Medianas Industrias. Explicó que permitirá el intercambio directo de productos de consumo y que abrirá las puertas de la consolidación de macro proyectos como la carretera Manaus-Ciudad Guayana y el gasoducto Caracas-Brasilia-Buenos Aires.
El presidente venezolano resaltó la importancia de la integración a través de organismos como el Mercosur, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América (ALBA) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) ya que son “escudos” que permiten a los pueblos del continente defenderse del imperialismo de Estados Unidos.
Según un informe de los especialistas Nahuel Oddone y Leonardo Granato, del Centro Argentino de Estudios Internacionales, el ingreso de Venezuela al bloque implica ocupar el 71 por ciento del territorio sudamericano, alrededor de 212 millones de personas como mercado que es el algo más del 55 por ciento de la población de América del Sur; y a la vez se concentrará el 70 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) de Sudamérica. Además, el informe también recuerda que Venezuela tiene las mayores reservas de energía del hemisferio occidental y que con el nuevo miembro aumentarían las exportaciones del Mercosur se favorecerá la reducción de las asimetrías regionales.
Las reacciones negativas en la región por el ingreso totalde Venezuela al Mercosur no se hicieron esperar. El candidato presidencial de ese país por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles Radonski, advirtió a través de la red social Twitter, que el objetivo del reciente ingreso debería ser la generación de “ingresos reales” para la población.
Esta definición la impartió como contracara de lo que él, y la derecha a la que representa, no dudan en tildar como simples esfuerzos por estimular el modelo de importaciones que a su juicio promueve el gobierno del presidente Hugo Chávez. “Creemos que podemos ser más que exportadores de petróleo, tenemos producción nacional que debe ser promovida en otros países”, dijo a través de su cuenta @hcapriles.
Según ABC, medio paraguayo opositor a la gestión Lugo, el canciller de ese país, José Estigarribia, consideró que “Argentina, Brasil y Uruguay” abogaron por la suspensión de su país solo con el objetivo de “incorporar a Venezuela”. Desestimó así, y el medio legitima esa posición, que el motivo único de la suspensión fue la situación anti democrática que se vive tras las destitución de Fernando Lugo.
Se destaca también en ABC la frase "Meten por la ventana a Venezuela en el Mercosur", que retrató esa nota con un dibujo de un gorila que alude al presidente Hugo Chávez, y que se lo ve entrando “por la ventana a una casa con la leyenda "Mercosur" empujado por caricaturas de los presidentes de los tres socios de Paraguay en el bloque, con el aplauso de su expresidente Fernando Lugo”, según relata AFP.
El mismo diario no dudó en tildar de manera catastrófica la acción de los países del bloque: “Infamia de la Triple Alianza (Argentina, Brasil y Uruguay) contra el pueblo paraguayo”, tituló.
El diario El Universal, de Venezuela, destaca que la incorporación de ese país al Mercosur “genera malestar”. En el artículo relata la declaración del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) –opositor a la administración de Dilma- en la que se expresa que “si el bloque considera que las reglas democráticas fueron quebradas en el proceso de ‘impeachment’ al presidente paraguayo Fernando Lugo, hay muchas más razones hoy para cuestionar la frágil democracia mantenida por Venezuela".
También resalta declaraciones de José Botafogo Gonçalves, presidente del Centro Brasileño de Relaciones Internacionales, quien indicó que "el problema de que Venezuela entre al Mercosur es Chávez, que no le gusta el libre comercio y quiere transformar el bloque en una plataforma política".
Además, El Universal subraya que el senador uruguayo, Jorge Larrañaga, referente del opositor Partido Nacional, señaló que tanto el ingreso de Venezuela como la suspensión a Paraguay tras la destitución del presidente Fernando Lugo son un "atropello" al Mercosur, "una vergüenza y un acto de entreguismo inédito en la historia de Uruguay".
Desde Uruguay, Sergio Abreu, senador y excanciller del opositor Partido Nacional, sentenció que la suspensión de Paraguay y el ingreso de Venezuela son un “golpe de Estado, una ruptura de la relación jurídica y una interpretación abusiva de los derechos que tienen los estados” dentro del bloque sudamericano, informó AFP.
La misma agencia destaca que para Ope Pasquet, del Partido Colorado, “se optó por sacrificar al país chico y pobre para darle entrada al país rico”.
Para el diario venezolano La Nación, lo destacable de la decisión unánime del Mercosur son las voces críticas que se levantaron. Relevó, en ese sentido, a Rubens Barbosa, presidente del Consejo de Comercio Exterior de la Federación de Empresarios de San Pablo (Fiesp), quien cree que “el Mercosur” ya “no vale nada para la apertura de comercio” y que simplemente “se transformó en un foro político”.
Claro, desde otra perspectiva, incluso declamada y trabajada por los gobiernos populares de la región, esto es efectivamente así: no se trata simplemente de fomentar el libre cambio. Las voluntades políticas progresista de la región se embarcaron en un modelo de integración latinoamericana amplio, democrático, con firme asiento en los pueblos y sus culturas, en la defensa conjunta de la soberanía y los recursos naturales de los países de la región, de la acción mancomunada frente a los embates extranjeros en territorios latinoamericanos; por solo mencionar algunas de las premisas.
APAS | Agencia Periodística de América del Sur | www.prensamercosur.com.ar
Facultad de Periodismo y Comunicación Social. Universidad Nacional de La Plata.
Facultad de Periodismo y Comunicación Social. Universidad Nacional de La Plata.
https://www.alainet.org/de/node/159216
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