La decisión del presidente guatemalteco Jimmy Morales, de solicitar militares estadounidenses para controlar la frontera con México y contener el éxodo de guatemaltecos, salvadoreños y hondureños que continuamente se desplazan en masivas caravanas hacia territorio norteamericano, ha desatado polémica y críticas que excitaron la ira del Gobernante, quien sostiene que esa información es falsa.

Sin embargo, los ministros de la Defensa Nacional, Luis Miguel Ralda y de Relaciones Exteriores, Sandra Jovel, justificaron la petición que hizo el embajador de Guatemala en Estados Unidos, Manuel Espina, indicando que sólo fue una “idea” que se planteó al inicio de la discusión. El ministro Ralda agregó que soldados estadounidenses están en territorio nacional hace tiempo, se trata de “tropas humanitarias” que operan en el departamento de Huehuetenango desarrollando el programa “Más allá del Horizonte”.

La semana anterior el diario estadounidense The Washington Post, publicó detalles de una carta que el representante demócrata de Texas, Vicente González le envió al presidente Trump, solicitando la presencia de militares en Guatemala e indicando que el embajador Espina, manifestó que Morales estaba dispuesto a recibir militares estadounidenses para asegurar la frontera Guatemala-México.

Cuando Morales encabezó la confrontación con la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y declaró non grato al Comisionado, el jurista colombiano Iván Velásquez, alegando lesiones a la soberanía nacional y calificando los actos de esta Comisión como “injerencia extranjera”, no se olvidan sus vehementes charlatanerías en aparente defensa de la soberanía, pero ahora que pide tropas norteamericanas, sugiere que no es injerencia y que tampoco viola la soberanía.

Durante su mandato, la soberanía nacional ha sido lesionada y el país está ocupado por tropas estadounidenses que operan en Guatemala hace años, pues es parte del Plan Alianza para la prosperidad del Triángulo Norte, -ver mi artículo, La Hora 26/5/2017. Esa vez mencioné que, en la Conferencia de Seguridad de Centroamérica, (CENTSEC 2017), realizada el 25 de abril 2017, se anunció la instalación de una Fuerza de Tarea del Comando Sur de Estados Unidos en el departamento guatemalteco de Petén, en colaboración con los ejércitos mexicano y guatemalteco para realizar operaciones conjuntas en la frontera Guatemala-México. El objetivo es realizar operaciones por aire, mar y tierra en la región transfronteriza citada, con el argumento de controlar los flujos migratorios y perseguir a cárteles del crimen organizado.

En la citada CENTSEC, el entonces Ministro de Defensa de Guatemala, General William Mancilla, anunció la instalación de, “…al menos una nueva base militar del Comando Sur de EUA en el Departamento de Petén, Guatemala”. El Ministro resaltó que, ‘‘…son encuentros estratégicos y claves para afinar los mecanismos, rutas de migrantes, contrabando de ganado, la utilización de personas para el paso de droga. La ausencia del Estado no es un secreto en Guatemala; con estas reuniones tratamos de estar mejor organizados para generar gobernabilidad y restarle fuerza al crimen organizado,” agregó.

Entonces, ¿de qué soberanía habla el Jimmy? ¿Por qué se crispa cuando se le cuestiona sobre ese tema?

Guatemala, 07/06/2019

Factor Méndez Doninelli

Maestro e investigador.

Consultor en Derechos Humanos y métodos alternativos de resolución de conflictos.