Globalización y clases dominantes en Centroamérica y El Salvador

06/11/2018
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Muchas gracias, les agradezco por esta oportunidad de compartir y es un gusto hacerlo en Santa Ana, con ustedes y con Alfonso aquí presente1. Voy a tratar acerca de las que considero como las principales tendencias o rasgos principales de los sectores dominantes centroamericanos, para luego concentrarme en el caso salvadoreño. A la vez inició con algunos antecedentes.

 

  1. Antecedentes

 

Pretendo responder a tres preguntas en relación con cada país. Cuáles son las principales continuidades y rupturas? Quienes son los principales protagonistas? Cómo influye la globalización neoliberal?2 Y también esbozar algunos rasgos de actualidad.

 

Costa Rica: luego de la guerra civil de 19483 se establece un modelo de democracia representativa sui generis en la región: sin ejército y con una fuerte inversión social en salud y educación. Es otro modelo, hay continuidad pero no escapa a la crisis regional ni al modelo neoliberal. En 2006 se rompe el bipartidismo de socialdemócratas y social cristianos, estos últimos son desplazado por el Partido Acción Ciudadana, PAC4, que llega a la presidencia en el 2014 y logra ganar un segundo periodo este año con Carlos Alvarado5. En la actualidad el rasgo más característico es el enfrentamiento de la resistencia popular y sindical -por más de un mes y medio6- a un intento gubernamental de reforma fiscal, que golpearía a los sectores populares. Los sindicalistas ticos nos dan un ejemplo de lucha de resistencia popular. Están en la calle luchando.

 

Nicaragua: En 1979 triunfa una revolución popular7 que logra a través de la lucha armada, el derrocamiento de la dictadura de Anastasio Somoza, y que conducida por el FSLN8, realiza profundas transformaciones económicas y políticas, que es el proceso histórico principal del siglo XX en la región y que en 1990 la derecha local e internacional logra derrotar electoralmente. En 2006 el FSLN conducido por Daniel Ortega, mediante elecciones, regresa al gobierno y se mantiene, pero desde el 18 de abril y hasta el momento vive en medio de una profunda crisis, asediado por una oposición en la que sobresalen sectores juveniles y estudiantiles.

 

Honduras: los partidos Nacional (llamados Cachurecos) y Liberal9 se han enfrentado durante todo el siglo XX junto con diversos momentos de dictadura militar. Este bipartidismo fue roto en junio de 2009 al abrirse una crisis política cuando los militares respaldan un golpe de estado “civil” que desplaza de la presidencia a Juan Manuel Zelaya10 y se genera un levantamiento popular. Un segundo capítulo inicia con las elecciones presidenciales en noviembre de 2017; con el fraude realizado por el actual presidente Juan Orlando Hernández contra Salvador Nasralla11, candidato del partido LIBRE, y que provocó un levantamiento popular, con tranques en las carreteras, finalmente reprimido por las fuerzas armadas. Otro capítulo de esta crisis se abre este octubre con la salida desde Honduras de una caravana de miles de trabajadores con rumbo hacia Estados Unidos.

 

Guatemala: en 1954 el gobierno norteamericano logró con tropas serviles, el derrocamiento del coronel Juan Jacobo Arbenz12, poniendo final a un proceso democratizador iniciado en 1944. Desde entonces se establece una feroz dictadura militar, enfrentada desde principios de los años 60 a una insurgencia armada. En diciembre de 1996 luego de una prolongada guerra civil se firma un acuerdo de paz entre el gobierno y las fuerzas rebeldes, organizadas en la URNG13. La izquierda se legaliza y construye un instrumento electoral, pero su impacto es mínimo. En abril de 2015 el país entra a una profunda crisis vinculada a la corrupción gubernamental. Los sectores populares logran la destitución del presidente Otto Perez y su vicepresidente Roxana Baldetti. Ambos están enjuiciados y en prisión.se convoca a elecciones presidenciales que son ganadas por Jimmy Morales bajo la consigna de honestidad (ni corrupto ni ladrón). Pero rápidamente entra en conflicto como su antecesor con la CICIG. Y este conflicto sigue hasta la actualidad marcando su gestión.

 

El Salvador: durante 50 años, luego de una profunda derrota de los sectores populares e indígenas en enero de 193214, la clase dominante la cedió a las fuerzas armadas el control sobre el aparato de estado, estableciéndose una dictadura militar que duró sesenta años (1931-1992). En 1980 inicia un nuevo esfuerzo de toma del poder por los sectores populares organizados en el FMLN, que conduce a una guerra de doce años15. La guerra concluye mediante un pacto de paz. A partir de Los Acuerdos de Paz de 199216 inicia un proceso democrático que lleva ya más de 25 años sin rupturas, a diferencia de 1944, y 1960. Este último periodo incluye 20 años de gobierno de ARENA y 10 del FMLN. Y existe la posibilidad del quiebre de este modelo bipartidista en el 201917.

 

  1. Tendencias regionales

La crisis política o la lucha de clases que recorre las cinco naciones aunque se expresa en formas particulares es una constante, ya que no es una región tranquila, es una región convulsionada. Esta crisis es generalizada, se manifiesta en Costa Rica con un enfrentamiento entre sindicalistas y gobierno; en Nicaragua con un enfrentamiento entre una oposición y gobierno; en Honduras entre oposición y gobierno; en Guatemala entre oposición y gobierno y en El Salvador a las puertas de elecciones presidenciales que pueden romper el bipartidismo dominante por 25 años, desde los Acuerdos de Paz.

 

Los principales desplazamientos ideológicos y políticos de las clases dominantes centroamericanas: en lo ideológico es el matrimonio con el fracasado credo neoliberal18; la promoción de un modo de vida consumista y competitivo19; en lo político, el Consenso de Washington20, el pragmatismo globalizante y un modelo de democracia tutelada por las fuerzas armadas21; en lo económico, la emergencia de un nuevo modelo que pone fin al tradicional modelo agro-exportador22 y se basa ahora en la precariedad de la maquila23 y el envío de remesas familiares24 desde Estados Unidos, así como la aceptación de los viejos y nuevos grupos económicos de un rol subordinado con respecto a las corporaciones transnacionales25.

 

La región centroamericana -ahora mucho más integrada y a la vez más fragmentada-experimenta como tendencias fundamentales en estos últimos veinte años, las siguientes.

 

1. El predominio del discurso y la práctica neoliberal26 en la gestión gubernamental en oposición a anterior concepción interventora y benefactora del Estrado-nación27.

 

2. El crecimiento del poderío del capital transnacional28 desplazando al capital local29.

 

3. La supeditación gubernamental a las Instituciones Financieras Internacionales, IFI (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, OMC, etc.)

 

4. El nacimiento del club de los milmillonarios globalizados

 

5. Una nueva lógica cultural globalizada

 

6. El afianzamiento electoral de sectores democrático-revolucionarios (Nicaragua, El Salvador, Honduras) así como la ruptura de esquemas de bipartidismo (Honduras, Costa Rica, y posiblemente El Salvador)

 

7. La contraofensiva de sectores de derecha orientada a la recuperación de su rol hegemónico en el estado (Nicaragua, El Salvador).

 

8. La aparición de la República Popular China disputándole la hegemonía política y comercial tanto a los Estados Unidos (CAFTA) como a la Unión Europea con su Acuerdo de Asociación, AdA (Costa Rica, El Salvador).

 

2.1 El predominio del discurso neoliberal

 

El discurso neoliberal tiene tres ideas fuerza principales: el pensamiento único, la receta neoliberal y el sometimiento a Washington30. El pensamiento único de la derecha nos predica insistentemente que no existe alternativa; hay que ser realista y reconocer que el capitalista es el único y mejor mundo posible y lo más recomendable es permitir que el mercado mande, y que la sociedad obedezca sus mandatos. Esto un dogma cerrado, incuestionable, porque establece que la libertad de mercado prevalece sobre cualquier otro tipo de libertad.

 

Se manifiesta como la necesidad de aplicar la fórmula neoliberal mediante la reducción del Estado y la eliminación de todo tipo de programa social; a través de las privatizaciones31, la venta de los principales activos del estado a las corporaciones transnacionales, en particular, la energía, las telecomunicaciones, los fondos de pensiones, la salud, la educación, el agua, etc. Mediante los tratados de libre comercio y los asocios público privados en los cuales el estado se encarga de garantizarle a la empresa privada nacional e internacional, las mejores condiciones para la explotación de la mano de obra nacional. El sometimiento a Washington significa impulsar una política económica, cultural, social y diplomática en beneficio de los intereses geopolíticos de los Estados Unidos. Significa que el estado se convierte en gestor de la inversión extranjera así como en facilitador de los negocios privados32.

 

En el caso hondureño y salvadoreño incluye el mantenimiento de bases militares en Palmerola y Comalapa. En Palmerola opera desde 1983 una fuerza del Comando Sur del ejército de los Estados Unidos33 mientras que en Comalapa existe desde el 2000 este dispositivo militar supuestamente para combatir el narcotráfico34.

 

Este discurso dominante (modernidad, democracia, participación, transparencia, pragmatismo) se impone desde los medios de comunicación y las redes sociales. Y se encuentra en disputa con los conceptos de justicia, de solidaridad, de comunidad, de resistencia, enarbolados históricamente desde los sectores populares y las fuerzas de izquierda.

 

2.2 El crecimiento del poderío del capital transnacional desplazando al capital local.

 

Dentro de cada una de las economías centroamericanas el peso del capital transnacional35 y en particular del estadounidense es cada vez mayor. Y este capital transnacional se concentra principalmente en actividades estratégicas tales como la banca, energía, telecomunicaciones, minas, fondos de pensiones, agua, insumos agrícolas, y cemento. Una de las vigas maestras que permitieron este desenlace fue la firma del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-DR), proceso culminado en 200636 y que tuvo su mayor resistencia en Costa Rica37.

 

La banca.

 

En el caso de la banca, los tres principales bancos de El Salvador son de capital colombiano: Banco Agrícola (2006), Davivienda y BAC (2010). En el caso del colombiano Banco de América Central, en Guatemala por activos, es el quinto banco, en Honduras y Costa Rica el cuarto, y en Nicaragua el tercero. (El Economista, 2018). En el caso de os grandes bancos estadounidense (Citi) e inglés (HSBC) llegaron y se fueron pronto, identificaron rápidamente que el mercado era muy pequeño para ellos.

 

La energía.

 

En el caso de la energía, la estadounidense AES posee en El Salvador más del 80 por ciento y la colombiana Del Sur el 20 por ciento restante. En 1998 la Compañía Eléctrica de Guatemala vendió el 80 por ciento de sus acciones a la española Iberdrola Energía, en el 2010 estos vendieron a la colombiana EPM en $635 millones, y es hoy la distribuidora más grande a nivel centroamericano; en el caso de Honduras esta no ha sido privatizada; en Nicaragua fue privatizada en 1990 y cedida a la española Unión Fenosa; en Costa Rica se permite la participación privada hasta un 15 por ciento, y hay presencia de la española Unión Fenosa.

 

Las telecomunicaciones.

 

La mexicana Claro disputa con la española Movistar (Telefónica) el control en nuestros países de las telecomunicaciones. En el caso salvadoreño la hegemonía la mantiene Claro en competencia con la sueca Tigo, la española Movistar y la estadounidense Digicel. En Guatemala lidera Tigo en competencia con Claro, Movistar y RED (Intelfon), esta última de capital guatemalteco, salvadoreño y panameño38. En Nicaragua predomina desde 2005 la “marca líder” española Movistar.

 

Las minas

 

En El Salvador los sectores populares lograron el año pasado la prohibición de la industria minera metálica en el país.39 En Guatemala, Honduras, Costa Rica y Nicaragua se desarrollan actividades de compañías transnacionales mineras. En Nicaragua esta industria ha crecido a un promedio del 9% en los últimos diez años.40 Los principles inversionistas proceden de Canadá, Estados Unidos, Colombia, Reino Unido, Australia, y México.41

 

Fondos de pensiones.

 

En el caso salvadoreño los fondos de pensiones están en manos de capital hondureño (AFP Confía)42 y colombiano (AFP Crecer)43. En Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y Honduras no han sido privatizados, pero el capital transnacional y local está al acecho. En el caos hondureño los bancos Atlantica y Ficohsa ofrecen planes privados44.

 

El agua.

 

En El Salvador se despliega una intensa lucha por el control del agua entre empresa privada y sectores populares.45 La lucha contra la privatización del agua atraviesa cada uno de los países centroamericanos, en los cuales nos encontramos con una falta de inversión pública en el sector del agua y el saneamiento; falta de gobernabilidad en temas ambientales; contaminación y deterioro de los cuerpos de agua, debido a la inexistencia de leyes restrictivas y a la falta de infraestructuras para la depuración de aguas residuales. El problema en Centroamérica no es la escasez de agua sino la mala gestión.46

 

Insumos agrícolas

 

Las semillas y los productos químicos para la agricultura de la que dependen los campesinos centroamericanos para sus alimentos y producción, deben ser adquiridas de gigante surgido de la compra de la estadounidense Monsanto47 por parte de la farmacéutica alemana Bayer.48 En el 2008 la estadounidense Monsanto adquiere la compañía Cristiani Burkard, líder de la industria de semillas en Centroamérica, actualmente conocido como CB.49

 

Cemento

 

En El Salvador predomina la francesa-suiza Lafargue-Holcim. En los demás países centroamericanos hay una disputa entre productoras locales, como la guatemalteca Progreso, y las trasnacionales lafargue-Holcim, Argos de Colombia y la mexicana Cemex.

 

2.3. La supeditación a las Instituciones Financieras Internacionales, IFI

 

En el caso salvadoreño, luego de los Acuerdos de Paz de 1992, tanto el Banco Mundial, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Interamericano de Desarrollo insistieron en la necesidad de iniciar la privatización de los servicios públicos50, en particular la distribución de energía eléctrica51, las telecomunicaciones y los fondos de pensiones; para luego pasar a la salud, educación, seguridad pública y la| distribución del agua potable, entre otros. Coincidieron curiosamente estas instituciones con el interés mostrado por diversas compañías transnacionales por adquirirlas, lo cual realizaron en los tres primeros casos en 1997 y 199852.

 

Son estas grandes instituciones financieras, FMI, BM, el BID, la OMC, las que determinan y condicionan el rumbo estratégico de las economías centroamericanas e incluso mundiales mediante sus políticas de préstamos y sus “desinteresadas” asesorías.

 

Y como lo evidencia décadas ya de planes y exigencias de estos organismos internacionales, en la práctica las posibilidades reales de lograr niveles de desarrollo que pongan al centro las necesidades populares son bloqueados por recetas neoliberales que hunden más en la extrema pobreza a nuestras mayorías populares y vuelven aún más dependientes a nuestras economías mediante la “ansiada” inversión extranjera directa53. Y para esto se firman los tratos de libre comercio54 y se crean las hoy de moda zonas económicas especiales55 y los asocios público-privados56.

 

2.4. El nacimiento del club de los multimillonarios

 

No obstante la extrema pobreza que caracteriza a esta parte del mundo, algunas instituciones que se dedican a medir los niveles de riqueza como Forbes México o el Índice de Billonarios de Bloomberg, han logrado identificar a personajes que desde sus grupos familiares empresariales, o como Alfonso los llama Grupos Económicos de Poder57, logran acumular fortunas que sobrepasan los mil millones de dólares.

 

Entre esta elite financiera sobresale desde 2015 el “nuevo rico” guatemalteco Mario López Estrada, presidente de Tigo Guatemala y nieto del expresidente Manuel Estrada Cabrera, el del Señor Presidente de Asturias. López Estrada tuvo el monopolio de la telefonía celular desde 1989 y durante seis años hasta que se permitió el ingreso de la mexicana America Movil de Carlos Slim y la española Telefónica.

 

También está desde el 2015 el milmillonario hondureño Camilo Atala Faraj, presidente del Grupo Financiero FICOHSA, el cual adquirió tanto en Honduras como en Nicaragua las operaciones del banco estadounidense Citi, y la fortuna de este banquero se estima en US$1,400 millones. Atala Faraj fue una figura clave en el golpe de estado contra Manuel Zelaya.

 

En Nicaragua, no obstante ser el país más pobre de Centro América, se identifican a dos milmillonarios: Carlos Pellas y Ramiro Ortiz. Pellas es de una antigua familia oligárquica, es dinero viejo, old money, que se hereda de generación en generación, originarios de Génova, Italia, llegan al país en 1875. Su propiedad más simbólica es el ingenio azucarero donde se fabrica el Ron Flor de Caña y se le estima una fortuna de 1.5 millones. Ortiz es banquero. Hizo el negocio de su vida cuando vendió el Banco de América Central Credomatic a un banco estadounidense a principios de este siglo. Y en 1991 funda el banco Promérica, con presencia en toda Centroamerica. Su fortuna se estima en 1.3 millones. Es el primer banco en Nicaragua y el sexto en El Salvador.

 

En El Salvador Bloomberg no logra identificar a ningún multimillonario. No obstante esto, Ricardo Poma y Roberto Kriete aparecen en un listado de Forbes México del 2015. Ricardo Poma preside el Grupo Empresarial Poma, que incluye hoteles, centros comerciales, complejos de oficinas y proyectos residenciales en 9 países latinoamericanos. La fortuna como grupo empresarial se calcula en $1.4 millones. En el caso de Kriete, este posee inversiones en la industria de la aviación, bienes raíces y hotelería. Su principal activo es su participación en la línea aérea colombiana Avianca, por medio de la fusión en 2010 de la línea aérea TACA de su propiedad. También es dueño de Volaris. La fortuna como grupo empresarial se calcula en $6,588 millones. Ambos, Poma y Kriete son los principales financistas del partido ARENA. El grupo Poma, otro grupo financista de ARENA, aunque no aparece como milmillonario construye en el 2002-2003 un importante centro comercial en Costa Rica, así como en Panamá e incluso Colombia58.

 

En Costa Rica tampoco Bloomberg identifica a ningún multimillonario. Pero Forbes México señala a Francis Durman Esquivel, presidente del Grupo Montecristo y de la Corporación Yanber con un capital que asciende “apenas” a $400 millones.

 

2.5 Una nueva lógica cultural globalizada

 

Las clases dominantes centroamericanas han logrado construir una nueva plataforma cultural globalizada, que les permite un mayor nivel de control ideológico de los sectores populares, en el que se unen viejos componentes como el autoritarismo59, la visión patriarcal60 y paternalista61, con nuevos contenidos derivados de la globalización neoliberal.

 

Entre los principales componentes de este nuevo entramado sobresalen el control sobre los medios de comunicación62, la utilización de las tecnologías de información y comunicación y el uso de las redes sociales como nuevo mecanismo de referencia laboral, social y política.

 

Asimismo se encuentra el afianzamiento de las extensas redes de los movimientos religiosos neo pentecostales63 que a partir de una visión teológica “de la prosperidad” promueven ya sea la apoliticidad o el respaldo militante a opciones de ultraderecha, como es el caso del apoyo brindado a Jair Bolsonaro en Brasil64.

 

También merece mencionarse la amplia difusión de la cultura del espectáculo globalizado, que se desparrama por los deportes y que en el caso salvadoreño hace que “el clásico” futbolístico entre el Real Madrid y el Barca literalmente paralice al país. Es una nueva colonización cultural. Y a esto debemos de agregar las cadenas noticiosas, las novelas, las películas, las series policiacas o de medicina forense, los reality shows, las series de auto-ayuda, las películas de narcos, etc.

 

Y no podemos dejar de mencionar la visión elitista, individualista y competitiva que orienta los modelos educativos predominantes y que incluso han sido asimilados por los gobiernos de izquierda. En definitiva, nos enfrentamos a una avalancha cultural que muchas veces nos desborda.

 

2.6 El afianzamiento electoral de sectores democrático-revolucionarios

 

En el plano político el triunfo electoral en 2006 del FSLN y en el 2009 del FMLN inauguran una nueva época en la región centroamericana. Estos victorias electorales son el resultado de las luchas que los sectores populares desarrollaron contra los estragos causados por la aplicación del consenso de Washington y los ajustes neoliberales.

 

En Honduras fue mediante un vergonzoso fraude que JOH logra impedir el triunfo de Nasralla a finales del 2017 que era el triunfo de LIBRE; y con lo que se hubiera creado un inédito triángulo histórico de gobiernos de izquierda en la región. En el caso de Guatemala y Costa Rica las fuerzas revolucionarias son minoritarias y marginales, no constituyen alternativas de poder.

 

En general debe señalarse que estos avances electorales de la izquierda centroamericana, hoy en fuerte disputa, han sido posibles en la medida que existe el compromiso expreso de no modificar el sistema de democracia representativa, ni tampoco la matriz fundamental del modelo neoliberal y mucho menos el patrón de acumulación del capitalismo periférico65.

 

2.7 La contraofensiva de sectores de derecha orientada a la recuperación de su rol hegemónico en el estado (Nicaragua, El Salvador).

 

No obstante estos avances de los sectores populares, la derecha centroamericana enfrenta tres grandes escenarios donde desarrollar sus planes sea de restauración o de consolidación del orden establecido.

 

El primer escenario es el de asedio, el de la disputa de la derecha por recuperar el control del estado de fuerzas de izquierda, la cual sigue vigente e incluso ha avanzado como en el caso de la crisis política desencadenada en Nicaragua, luego de un largo periodo de estabilidad política y el castigo en las urnas sufrido por el FMLN en marzo de este año, que le reducen sus posibilidades de alcanzar un tercer periodo de gobierno 2019-2024.

 

El segundo escenario es el de equilibrio de fuerzas entre sectores populares y fuerzas de derecha en Honduras. En este país si bien es cierto que JOH logró mediante el fraude mantenerse en el gobierno por un nuevo periodo, también es válido considerar que las fuerzas populares aglutinadas en el partido Libre, conducido por Mel Zelaya, no han sufrido una derrota estratégica, y mantienen sus fuerzas listas para futuras batallas. Ojala que los éxodos de población nos disminuyan estas posibilidades y se conviertan en un mecanismo de apoyo al régimen, al liberarlo depresión social.

 

Y el tercer escenario son los de Guatemala y Costa Rica, donde eventualmente surgen movilizaciones populares como la actual huelga de los sindicatos ticos o demostraciones populares contra Jimmy Morales, pero no existen fuerzas políticas de izquierda que logren capitalizar estos esfuerzos y orientarlos hacia una perspectiva de acumulación de fuerzas o toma del poder.

 

2.8 La aparición de la República Popular China disputándole la hegemonía política y comercial tanto a los Estados Unidos como a la Unión Europea.

 

Guatemala, Honduras y Nicaragua mantienen relaciones con Taiwán mientras que Costa Rica desde el 2007 y El Salvador desde este año 2018 las han establecido con la República Popular China. ¿Qué es lo determinante? La chequera de Taiwán. Taiwán es un aliado muy generoso.

 

En nuestro caso Taiwán fue un pilar de apoyo a la dictadura militar durante la Guerra Popular Revolucionaria. Los cuadros políticos de la derecha de ARENA y de las Fuerzas Armadas iban a estudiar “guerra política” a las escuelas del Kuomintang. Asimismo los cuadros de dirección del FMLN realizaron estudios militares en Vietnam y Cuba.

 

Es significativo el apoyo de Guatemala, Honduras y Nicaragua. No, es meramente simbólico. Son 3 de 16 países que todavía mantienen relaciones. Lo determinante para Taiwán es su relación con los Estados Unidos y la Unión Europea. Pero para los Estados Unidos si es un gesto muy significativo. Es un gesto de independencia. Y es por esto que llamaron a consultas a sus embajadores en Panamá, República Dominicana y El Salvador. Y en el caso salvadoreño hay una preocupación de índole geopolítica: el golfo de Fonseca. Y la posibilidad que el puerto de Cutuco (La Unión) pase a ser administrado por compañías chinas66. Es un desafío es sus propias narices, inédito, inesperado.

 

Y se da en el marco de un agudizado enfrentamiento comercial global entre la RPCh y Estados Unidos. Los Estados Unidos observan alarmados como los chinos les arrebatan la supremacía comercial; y como los chinos se convierten en los principales socios económicos de diversos países sudamericanos, y de cómo avanza globalmente la nueva Ruta de la Seda. El istmo se encuentra nuevamente en disputa67. Vivimos un periodo histórico de transición sistémica global68.

 

Y seguramente Washington observa y evalúa el reciente viaje del presidente salvadoreño Sánchez Ceren a Beijing como un desafío a su hegemonía. Y tampoco a la derecha salvadoreña le ha gustado.69 Pero pueden hacer muy poco. No les queda más que amenazar porque saben que internacionalmente, diplomáticamente, es muy delgado el hilo que une las ilusiones con las realidades. Y la RPCh es una impresionante realidad.

 

  1. El caso salvadoreño70

 

Para esta parte tomare como base un artículo que escribí en el 2011 titulado El Salvador del siglo XXI: De las 14 familias a las 14 multinacionales. En este trabajo planteaba y considero que sigue vigente lo siguiente:

 

“El peso de las corporaciones multinacionales en El Salvador del siglo XXI es hoy determinante y han logrado en el último lustro, desplazar al capital nacional, con lo cual el rostro económico y por lo tanto político de nuestro país, ha sido profundamente modificado. El Salvador actual es mucho más dependiente que en el pasado.

 

Los nuevos dueños del país

 

“Los gobiernos de ARENA (1989-2009) actuando como aprendices de brujo en la implementación del modelo neoliberal, por medio de las privatizaciones de recursos estratégicos, forzaron este desconcertante y difícilmente reversible desenlace. El actual gobierno de Mauricio Funes y el FMLN (2009-2011) no han revertido esta tendencia.” Podría agregar aquí al segundo gobierno del FMLN presidido por Salvador Sánchez Ceren.

 

Es en los últimos años de este siglo XXI que comienza, cuando se han consolidado procesos de venta de los sectores estratégicos del aparato económico, en un proceso quizás ya irreversible de convertirnos en una neocolonia, sujeta a los dictados de las multinacionales, a menos que se produzca un cambio revolucionario.

 

Hoy son precisamente estas multinacionales las que se aprovechan, como anteriormente lo hicieron los antiguos dueños, la oligarquía financiera, de la existencia de situaciones de monopolio y oligopolio en las principales esferas económicas, para poder así ventajosamente acrecentar sus niveles de rentabilidad y repatriación de utilidades.

 

Y en definitiva, se ha fortalecido el carácter dependiente de nuestra nación. Esto vuelve urgente la construcción de una estrategia de lucha desde el movimiento popular que asuma la tarea programática de la liberación nacional como eje fundamental.

 

Es claro que existe una nueva clase dominante representada por los gerentes y representantes de estas multinacionales. Al comprar la banca compraron el país, aunque algunos de sus CEO (chair executive officer) no sepan ni la ubicación geográfica de El Salvador y nunca se han deleitado con las sabrosas pupusas.

 

Por lo tanto, conocer estos nuevos desarrollos es fundamental para el diseño de una estrategia revolucionaria desde la izquierda social, que rescate el carácter popular antiimperialista de nuestro proceso, como la máxima aspiración nacional para lograr recuperar nuestra independencia y soberanía.

 

“Estas corporaciones multinacionales disponen de los sectores económicos estratégicos de El Salvador, entre los que se encuentran la generación y distribución de energía, telefonía fija y celular, servicio de cable, los bancos, compañías de seguros y fondos de pensiones, comida rápida, cemento, líneas aéreas, comercio al por menor, bebidas y gaseosas, y hasta los cines. Sus matrices se encuentran principalmente en Estados Unidos, pero también hay capital inglés, canadiense, español, sueco, suizo, taiwanés, italiano, colombiano y mexicano.” Hoy agregaría capital hondureño y guatemalteco, y próximamente chino procedente de la RPCh.

 

A continuación describiremos brevemente los principales perfiles de los nuevos dueños del país, que por esas ironías del destino, recién celebra este 5 de noviembre, el Bicentenario de su primer grito de independencia. Conmemoración que más que nostálgica debería ser de protesta y denuncia ante los nuevos dueños.

 

Los nuevos dueños de la banca son el HSBC, Citi, Bancolombia y Scotiabank.

 

O sea capital transnacional inglés, estadounidense, colombiano y canadiense. Los antiguos dueños eran la familia Siman del Banco Salvadoreño, la familia Cristiani del Citi, la familia Kriete del Banco Agrícola y la familia Belismelis del Banco de Comercio, entre otras.

 

“El cambio fundamental que marca el tránsito en El Salvador hacia una nueva clase dominante fue la venta en el año 2006, por parte de la oligarquía financiera salvadoreña de los bancos. Ante la creciente amenaza de un cambio revolucionario, prefirieron renunciar a su papel hegemónico y convertirse en socios menores de las corporaciones multinacionales. Y venden los cuatro bancos que habían sido sus empresas insignias.” Ha habido cambios, hoy los tres bancos principales pertenecen a capital colombiano (Banco Agrícola, Davivienda y BAC) y el cuarto (Scotiabank) a capital canadiense.

 

La cementera Holcim (Suiza)

 

“Markus Akermann, suizo, es el actual CEO, anteriormente fue Bernard Fontana. (www.holcim.com) Holcim surge en 1912 en Suiza y en el año 2010 compra cemento CESSA, aunque permite que el director ejecutivo continúe siendo Ricardo Chávez Caparroso.” Ha habido cambios,la suiza Holcim se fusiono con la francesa Lafargue en 2015 y hoy s ellaman Lafargue-Holcim.

 

La línea aérea AviancaTaca (Colombia)

 

“Avianca surge en 1919 siendo la primera línea aérea de América. En el 2009 Avianca compra la mayoría de acciones de Taca y se forma AviancaTaca.” En la actualidad únicamente queda Avianca, aunque Kriete posee el 20% de las acciones.

 

AES (USA)

 

"AES71 es una de las más grandes empresas de energía a nivel mundial, con ganancias de $12.3 millardos para el año 2006. Con operaciones en 28 países en cinco continentes, las plantas de generación y distribución tienen la capacidad de servir a más de 100 millones de personas alrededor del mundo.”

 

En El Salvador luego de la privatización de este bien en 199872, la estadounidense AES controla cerca del 80% de la distribución de energía eléctrica y el otro 20% la colombiana Delsur de un mercado de más de un millón de usuarios73. Estos son recursos estratégicos que deberían ser parte del estado salvadoreño.

 

  1. Conclusiones

 

En lo que va de este siglo el grado de dependencia de El Salvador a los dictados de los organismos financieros internacionales se ha incrementado. Esta dependencia determina de manera fundamental el rumbo de los países centroamericanos. Mientras esto no se modifique por más medidas “de compensación social” que se tomen, la crisis seguirá profundizándose. Y seguirán volviéndose más frecuentes las caravanas hacia el Norte, que al final terminan contribuyendo a la estabilidad política, social y laboral de los regímenes existentes. Asimismo es crucial arrebatarle al imperio la bandera de la lucha contra la corrupción. El gobierno estadounidense no tiene la autoridad moral para autoproclamarse como adalid de la lucha contra la corrupción. Esta es una bandera que debemos de recuperar. Y en tercer lugar, fortalecer el movimiento popular y social. La garantía para el avance social e incluso para la seguridad social es la organización popular. Como decía el Che: el presente es de lucha, el futuro es nuestro.

 

Santa Ana, 5 de noviembre de 2018

 

1 Ponencia efectuada en Foro sobre Reacomodo político de las clases dominantes en Centroamérica y El Salvador, realizado en Facultad Multidisciplinaria de Occidente, de la Universidad de El salvador, UES, en Santa Ana el 5 de noviembre de 2018, junto con el economista Alfonso Goitia.

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