Paso importante a favor de la justicia

15/11/2006
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A
Hace tan solo una semana, el organismo judicial dio un importante paso a favor del fortalecimiento de la justicia y por lo mismo, del debilitamiento del muro de la impunidad, que todavía hoy parece infranqueable y hasta indestructible. Los militares que tienen orden de captura son los Generales Angel Anibal Guevara y Oscar Humberto Mejía Victores, el General de Policía Nacional Germán Chupina Barahona, así como el civil Pedro García Arredondo.

Los jueces Morelia Ríos, Isaías Figueroa y Bélgica Deras, de manera heroica tomaron la decisión de dictar orden de captura contra los acusados de los delitos de terrorismo, homicidio y secuestro, aunque lamentamos que no se haya incluido en las mismas al General Ríos Montt ampliamente conocido por haber violado los derechos humanos durante los 15 meses que gobernó, reconocemos que fue un paso positivo a favor de la justicia en Guatemala.

Producto de la inoperancia de las fuerzas de seguridad y del Ministerio Público, no fue posible capturar a ninguno de los señalados de haber cometido estos delitos. En el caso de Chupina y Guevara, que se encuentran guardando prisión, no fueron capturados, ellos mismos se presentaron voluntariamente a los tribunales, el primero simulando una enfermedad fue llevado a un centro asistencia privado, en tanto que el segundo se encuentra recluido en el centro preventivo de la zona 18 de la ciudad capital.

De los otros dos uno se encuentra fugado, se trata de Pedro García Arredondo, debido que no ha sido posible que se le localice, en tanto que el militar Mejía Victores, aprovechando que el Ministerio Publico había equivocado los datos en el momento de pedir el allanamiento de la residencia, evadió la captura.

El error del Ministerio Público provocó un retraso de cerca de 72 horas, para que las autoridades pudieran ingresar a la vivienda del militar. Ese tiempo bastó para que Mejía Víctores se ocultara en algún lugar del país. Creemos que el error, en realidad se trata de una medida de entorpecimiento de la justicia por parte del fiscal, que buscó favorecer al militar, permitiéndole que se fugara; el Grupo de Apoyo Mutuo, estará entablando una denuncia penal contra el fiscal, con el objeto de clarificar la situación confusa que permitió que el militar evadiera la justicia.

Al día de hoy este militar, ha logrado que se revoque la orden de captura que giraba en su contra, “milagrosamente” ha vuelto a aparecer en su vivienda. Debemos recordar que Oscar Humberto Mejía Victores gobernó el país entre el 8 de agosto de 1983 y el 14 de enero de 1986, periodo durante el cual se produjeron al menos 600 casos de desaparición forzada y 71 masacres en diversos puntos del interior del país.

La prepotencia con que gobernó Guatemala impedía cualquier tipo de libertad como al locomoción, expresión o la participación social de la población. Las pocas organizaciones sociales que funcionaron en ese momento, entre otras el GAM, fueron víctimas de constantes agresiones, en las que perdieron la vida centenas de personas y otras tantas fueron capturadas y desaparecidas.

Las ordenes de captura emanadas de este juzgado, son el resultado de muchos años de luchas judiciales a favor de que se haga justicia, por lo miles de crímenes que se cometieron durante los años más aciagos de terrorismo de Estado. No constituyen una dadiva de parte de las autoridades, son producto de luchas sociales de muchas décadas, pero también de mucho derramamiento de sangre, no debe olvidarse a todos y todas aquellas guatemaltecas que fueron muertas por clamar justicia a favor de sus seres queridos.

Por lo mismo, consideramos que debe reactivarse las ordenes de captura contra Oscar Humberto Mejía Victores, asimismo debe establecerse otras capturas contra militares involucrados en el holocausto que tuvo que sufrir el pueblo guatemalteco a lo largo de tantos años. La justicia tiene que llegar a Guatemala, los desaparecidos, los ejecutados extrajudicialmente, los masacrados, los torturados, todas las personas que fueron victimas del odio y la intolerancia de unos pocos no pueden quedar en el olvido, mucho menos se debe perdonar a los autores materiales e intelectuales de los mismos.


Fuente: Grupo de Apoyo Mutuo (GAM)
https://www.alainet.org/pt/node/118205?language=en
Subscrever America Latina en Movimiento - RSS