En el Cuzco se viene gestando una manifestación que podría ser la más grande de los últimos años. El Estado y las mineras, una vez más, han obviado la consulta previa, y están haciendo trabajos en zonas que afectan el apu Ausangate y la ruta de Peregrinación al Santuario del Señor de Qoyllur Riti.

La festividad de Qoyllur Riti, que se celebra todos los años en mayo en honor al Señor de Qoyllur Riti, es una de las mayores actividades religiosas que se desarrolla en la sierra sur del Perú, en las faldas del nevado Ausangate a 5362 msnm, en la localidad de Sinakara en la provincia de Quispicanchi en el departamento del Cuzco.

Esta festividad y el santuario del Qoyllur Riti fueron declarados patrimonio cultural de la nación el 10 de agosto de 2004. Posteriormente el 27 de noviembre de 2011 la Unesco inscribió a la «Peregrinación al santuario del Señor de Qoyllur Riti» como integrante de la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

 Dirigentes de las comunidades de Osefina y Chilca (distrito de Ocongate, provincia de Quispicanchi) denunciaron que la empresa Minquest Perú, de manera inconsulta, está haciendo exploración minera en varios sectores del apu Ausangate. El temor es que afecte el ecosistema de la zona, y se ponga en riesgo no sólo la supervivencia de las comunidades, sino también la religiosidad popular andina representada en la Peregrinación al Santuario del Señor de Qoyllur Riti.

El antropólogo David Ugarte advierte que no se está tomando en cuenta la fe de un pueblo sumamente religioso. Qoyllur Riti es patrimonio cultural de la humanidad y es una de las expresiones más altas de fe. Es una fiesta llena de fervor que moviliza al ande y se organiza durante todo el año.

 Las mineras no toman en cuenta estas fiestas y el pueblo organizado y los dirigentes de las ocho naciones (asociaciones de peregrinos) del Señor de Qoyllur Riti, han hecho una gran concentración pidiendo la anulación de esas concesiones mineras.

Sin consulta previa

Ugarte explicó que los trabajos mineros afectan la ruta tradicional de la peregrinación, cambian la geografía del santuario, afecta lo que se denomina el paisaje cultural. El pueblo se organiza todo el año para ir a esa peregrinación y es un proceso de aprendizaje que va de generación en generación. Hay un orden social y jerarquías en este tipo de organizaciones que moviliza a miles de personas. “Todo eso puede ser afectado, pero eso no entienden los mineros”, comentó.

Frente a ello el pueblo ha manifestado su rechazo y pide que se anulen las concesiones mineras. El Estado quiere intervenir pero tardíamente. Ahora quiere arreglar las pistas, mientras las mineras defienden su inversión, pero la población tiene una posición clara e inalterable en contra de los trabajos mineros.

 Posible conflicto

La escritora y antropóloga Karina Pacheco señaló que muchos piensan que Qoyllur Riti es Ausangate, pero están casi frente a frente y son parte de todo un conjunto que es de vital importancia. “Hay mineros informales que han obtenido permiso del gobierno regional del Cusco y están explotando la zona del camino de entrada de Ausangate y la zona aledaña a Qoyllur Riti. Si es que no se toma cartas en el asunto lo antes posible el conflicto va estallar”, advirtió.

Norberto Vega Cutipa, secretario del Consejo de Naciones del Señor de Qoyllur Riti, que agrupa a más de cien mil peregrinos de la tradicional festividad, fue claro en señalar que si en un plazo máximo de tres meses “no anulan las concesiones mineras otorgadas en el área intangible del santuario del Señor de Qoyllur Riti, vamos a realizar un paro indefinido”.

 La posición de los feligreses es clara: no permitirán los trabajos mineros en las zonas que pudieran afectar el santuario y las rutas de peregrinación. Si las autoridades no toman cartas en el asunto, podría desatarse un conflicto multitudinario poco antes de las elecciones. La advertencia ya está hecha.

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