México

A 6,570 días del levantamiento armado del EZLN (XXIII)

Gaspar Morquecho

07/05/2012

Opinión

^-A ⁺A

La tormenta y los remolinos multicolores en la “mecánica nacional” – V

“De todo hay en la viña del Señor”… “Con estas mulas nos tocó arar”…Ta’ de la chingada

A Regina

Más de 60 mil víctimas mortales

63 periodistas asesinados

¿Cuántas/os más?

A finales de julio de 1994 y en la víspera de la CND el escenario político y militar era adverso a la posibilidad del cambio democrático en México. “Los perros de la guerra” amagaban con reanudar las hostilidades. Los asesinatos, provocaciones y atentados políticos eran una muestra de ello. No obstante el entusiasmo en el EZLN y sus bases de apoyo se mantenían en alto junto con el de otras fuerzas revolucionarias, democráticas, reformistas, progresistas religiosas y ciudadanas. (Algunas de sus dirigencias se ahogaban en un turbulento mar de contradicciones y luchas internas, por lo general, estúpidas.) Destino: el astillero y puerto del Aguascalientes en la Selva Lacandona.

Marcos despareció de La Garrucha, se había movido a Guadalupe Tepeyac una comunidad tojolabal. Para llegar ahí, seguramente se hundió en la cañada de Patihuitz para tomar, hacia el oriente, las veredas, montañas y caminos que la población y los guerrilleros habían construidos para comunicarse. Un año antes, en agosto de 1993, Carlos Salinas de Gortari había llegado Guadalupe Tepeyac a inaugurar una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Cientos de bases de apoyo zapatistas, civiles, pacíficas - inteligentemente encubiertas - acudieron a ese acto oficial. En aquella Semana de Solidaridad dedicada a Chiapas, Salinas también inauguró clínicas en Altamirano y en Benemérito de las Américas. Con esas medidas, más contrainsurgentes que solidarias, el usurpador pretendió contener la rebelión. Fue en Guadalupe Tepeyac donde el comandante Tacho, el mayor Moisés y cientos de bases de apoyo presentes entregaron al general Absalón Castellanos Domínguez después que, en un juicio militar, el EZLN le perdonó la vida. Ahí estaban Samuel Ruiz y Camacho Solís para recibir al ex gobernador que se destacó por su brutal estilo de gobernar con la complicidad del “fiscal de hierro”.

Guadalupe Tepeyac era un lugar lleno de simbolismos y concreciones. Marcos se encargó de enriquecerlos. ¿Saber en qué momento la dialéctica del Caballero Andante desató en el Subcomandante una crisis de locura y se le ocurrió construir un barco en la selva para, literalmente, embarcarnos rumbo al “cambio democrático”? Con sensata cordura, el astillero en la selvatraería al presente la historia y parte de las aspiraciones de las Fuerzas de Liberación Nacional que, 25 años atrás, habían sido fundadas en la norteña ciudad de Monterrey, Nuevo León, el 6 de agosto de 1969. Del EZLN, fundado en el sureño estado de Chiapas, 10 años antes, el 17 de noviembre de 1983, en la loma del Chuncerro, al sur de Miramar en la Lacandona. Nada más emblemático que una Casa de Seguridad encubierta por la selva, como centro y respaldo del enorme escenario que milicianos, insurgentes y bases de apoyo construyeron en 28 días tras largas jornadas de trabajo. Era como regresar a la matriz.

Ahí estaban resignificadas la casa de seguridad en la que se fundaron las FLN por aquellos primeros: César, Carlos, Mario, Graciano, Raúl, Mario, Fernando, Alfredo y Raúl P. La Casa Grande de Nepantla y la de El Chilar en la selva de Ocosingo. Estaba recreado el campamento de La Garrapata,cuna del EZLN,fundado por Germán, Rodrigo, Elisa, Javier, Jorge y Frank. Estaban presentes las y los combatientes caídos el 14 de febrero de 1974 y durante los días de guerra en 1994. Ahí estaba, también, el imperativo moral de Elisa y, sin duda, el Subcomandante I. Pedro. Un lugar histórico/simbólico/concreto de los rebeldes para tender un puente con la sociedad mexicana. La CND, en ese lugar, era un puerto construido por los zapatistas para zarpar en busca de la transición pacífica a la democracia.

Marcos, cuidadoso, detallaba:

“(…) el EZLN convoca con objetivos precisos. Convoca a aquellos que luchan o quieren luchar por el cambio democrático. Quienes no quieren el cambio democrático no están convocados. Convoca a quienes están de acuerdo en insistir en el cambio democrático pacífico. Quienes piensan que sólo por la lucha armada se consigue el cambio democrático no están convocados. Convoca a quienes están de acuerdo en probar que ese cambio democrático se dé, también, por la vía electoral. Quienes no están de acuerdo en probar la vía electoral no están convocados. Convoca a quienes están de acuerdo con la necesidad de un gobierno de transición. Quienes no están convencidos de la necesidad de un gobierno de transición no están convocados. Convoca a quienes están de acuerdo con la necesidad de una nueva constitución. Quienes no están convencidos de que es necesaria una nueva Carta Magna no están convocados. Convoca a quienes reconocen que el partido de Estado es el principal obstáculo para el tránsito democrático. Quienes no ven esto no están convocados. El EZLN convocó a los mexicanos honestos y a las organizaciones y partidos independientes del Estado con estos objetivos, a la Convención Nacional Democrática.” (1/VII/94)

La casa de seguridad era un palafito construido entre lomeríos y aguachinado lugar muy cerca de Guadalupe Tepeyac. Los postes que soportaban la construcción eran de un poco más de 2.5 metros de altura. Suficiente para construir un panorámico puente de mando en el que se sentarían 100 personas para presidir la sesión primera de la CND. Abajo estaba la tribuna cubierta por el logo de la CND. Le seguía la planada que los albañiles zapatistas habían cubierto con concreto. Ahí se colocaron cientos de sillas. Es siguiente espacio era una loma que milicianos e insurgente, prácticamente, pelaron. La madera de los árboles derribados fue utilizada para construir bancas. Ahí se sentó el grueso de los 6 mil convencionistas que llegaron a conspirar, de cara a la Nación, sus aspiraciones pacíficas y de cambio democrático junto con los rebeldes del EZLN. (No faltaron editorialistas que condenaron el “ecocidio”. Eran los que jamás se había ocupado de la realidad de los indios en México y, ni de broma, regado una planta). El espacio que albergaría a 6 mil almas variopintas fue cubierto por una enorme lona de lonas. Su entorno era un magnífico espacio civil con infraestructura básica: albergues, fogones, áreas para acampar, consultorios, letrinas, biblioteca, etc. Parecía una enorme posición de montaña pero, civil y pacífica. Por desgracia, el espacio bajo el puente de mando fue ocupado por las facciones para profundizar… sus diferencias.

(El estar prácticamente incapacitado por la puta migraña tuvo su recompensa: me dejó en calidad de un sensible y afortunado observador.)

Una de esas agrupaciones era encabezada por el faccioso licenciadito Benito Mirón - aun con la representación legal del EZLN -, otra por los del PRD y Pablo Gómez su flamante legislador, el PT de Beto Canaya y una más por los trotskistas del PRT que habían llegado como la cauda, nada más ni nada menos, de doña Rosario Ibarra de Piedra, para posicionarse en el proceso. Veamos una anécdota que nos ofrece el intelectual y chacuaco fumador de Octavio Rodríguez Araujo en su azaroso y fugaz “paso por el zapatismo”: “Caminando por ahí, después de dejar mi mochila en el hotel, me encontré a alguien conocido: Priscilia Pacheco, quien estaba acompañada de otras mujeres que yo no conocía, en la cafetería de un hotel. Creo que nos dio gusto vernos. Pero cuando pregunté a Priscilia cómo iba a estar la cosa, el programa de actividades, y todo eso que casi todos necesitábamos saber, se portó, - creo – deliberadamente misteriosa (jejeje), como diciendo “yo si sé pero tú tendrás que averiguarlo”. Me habló de disciplina, de reglas, etcétera, casi como diciéndome “mejor no vayas”. (Tiempo después Priscilia cambió su actitud conmigo, una vez que dejé de ser “zapatista de tercera”.)” (Mejor no le pregunten a Priscilia lo que ahora piensa del intelectual. Ojo, el “jejeje” es mío.)

Por su parte, las sociedades civiles, los intelectuales y los diversos batallones de grupos mujeres hacían lo propio. En la CND van a destacar los jóvenes. Como el Sub previno sobre un posible atentado, se le pidió a la juventud el resguardo de la seguridad. Si el autoritarismo de los adultos en lo individual y/o colectivo era evidente, nos sorprendió como asomó el gorilita en un buen de los jóvenes en los espacios de registro, en la caravana hacia la selva, en los cinturones de seguridad, en la revisión de las mochilas de los convencionistas buscando armas de fuego camuflajeadas de cámara fotográfica. En contraste con la actitud de servicio de la gente que llegó a participar y compartir en la CND, por ejemplo tenemos: a don José Álvarez Icaza que se le ocurrió trasportar, en tinacos, agua potable desde el DeFectuoso, el incansable trabajo de las compañeras de la Caravana Rosario Castellanos. No se diga la actitud y comportamiento de las y los anfitriones que en su vida habían recibido a tanto cabrón extranjero.

Mientras las diversas facciones de las izquierdas se disputaban lo que no tenían que disputar… ¿O si?... muy cerca de aquella histórica casa de seguridad, el gobierno federal actuaba con los operativos de contrainsurgencia. El 3 de agosto, Carlos Salinas realizaba parte de su contra convención en la residencia oficial de Los Pinos. El usurpador firmó acuerdos con la agrupación Solidaridad Campesina Magisterial (SOCAMA) del estado de Chiapas. (En la Zona Norte del estado, esa agrupación derivó en la organización Desarrollo Paz y Justicia con la que se encubrió a uno de los grupos paramilitares más sanguinarios en la entidad.)

Los profesores Manuel Hernández y Jacobo Nazar dirigentes del movimiento democrático magisterial de la sección 7 del SNTE (1981-1984), cercanos a Eduardo Robledo Rincón, candidato del PRI al gobierno de Chiapas en 1994, encabezaron la delegación de campesinos e indígenas chiapanecos de SOCAMA.

En su discurso Salinas destacó:

“Ustedes, los de SOCAMA, forman parte de una organización plural e independiente que durante muchos años ha venido dando las luchas a favor del respeto a la dignidad de las compañeras y los compañeros allá en las tierras de Chiapas, organización plural compuesta por maestros, campesinos, indígenas, que con esta lucha tenaz han venido exigiendo que se encuentre una solución a problemas de años, décadas, generaciones, en algunos casos de siglos y otros recientes, pero como bien lo señalaron tanto Jacobo (Nazar) como Manuel Hernández, ustedes han insistido en que esta lucha respete la pluralidad, la autonomía de su organización y se dé en el marco de las instituciones, de la propia ley, y con ella de su lado, con la ley de su lado, encontrar esas soluciones para los problemas de sus comunidades.”

En esa reunión de trabajo se reiteró la figura del fideicomiso para “para atender el problema de la demanda de la tierra”, proyectos de inversión para la producción en el que participarían los gobiernos federal y estatal, las secretarías de Agricultura, de la Reforma Agraria, el Banco Rural, la Procuraduría Agraria, SEDESOL y “ustedes los dirigentes de SOCAMA”. El gobierno federal se comprometió con un aporte de 20 millones de nuevos pesos para la compra de tierras y el Banrural a crear un fondo de hasta 50 millones de nuevos pesos con el mismo objetivo. Los 20 millones iniciales se ocuparon para la compra de 16 hectáreas que demandó SOCAMA y se les garantizaron recursos del PROCAMPO y la SEDESOL para proyectos productivos. Logros alcanzados por la “vía del diálogo y en el marco de la ley y de la Constitución”. El 2 de agosto el gobierno federal había anunciado 19 proyectos de inversión para crear 14 mil empleos en la zona centro y Altos de Chiapas.

¿Onde andaba? ¡Ah, si!

Marcos, como hábil interlocutor, utilizaba su capacidad intelectual, imagen, arrastre del lápiz, fuerza política y militar para movilizar a individuos, grupos, asociaciones, medios, fuerzas políticas. Un ejemplo simple y en apariencia irrelevante. Estando en San Cristóbal, un grupo de mujeres se sorprendió que a varías de ellas Marcos les había pedido “una lona”. Cada una de ellas pensaba que había sido en “exclusiva”. “Pero si fue a mi” se reclamaban, si bien no se desató un zafarrancho, la escaramuza si se dio. Establecía efímeras alianzas, por ejemplo con Argos, es decir, Payán y Epigmenio Ibarra que entonces filmaban Viaje al centro de la selva. (Lo puede ver en You Tube. Si lo hace verá que no aparecen las pugnas facciosas. Vamos, es un versión parcial de la realidad). Alianza pasajera y complicada porque, en 1995, Payán acusaba a los zapatistas de Polpotianos y a Ibarra no lo volvimos a ver en la Selva, bueno, ni en Sancrispín.

El Sub hizo invitaciones personales y personalizadas, por supuesto, a distinguidas personalidades en las ciencias, las artes, la política, derechos humanos, las iglesias, los medios. 30 y 2 de esas afamadas personalidades y dos representantes por entidad formaron parte del presídium de la CND que reunió a unos 6 mil convencionistas. Marcos sabía desde mayo/junio de 1994 que había muchos motivos que garantizaban la asistencia de miles a la Convención en contra de lo que calcularon los enviados del ESPAZ. En ese entonces comentó: “Mira, sólo por curiosidad la gente va a asistir”.

De esas ilustres personalidades, Poniatowska, Carlos Payán, García de León, Armando Bartra, Pablo Gómez, Díaz Polanco, Carlota Botey, entre otros, con el tiempo tomaron su distancia con el EZLN. Laco Zepeda, el escritor, poeta y novelista político, antropólogo, de las juventudes marxistas, militante del Partido Comunista Mexicano y fundador del PRD, de plano… cambió de trinchera, Además de ser invitado a la CDN, fue convidado a ser parte de la Comisión Nacional de Intermediación (CONAI). El julano terminó como Secretario General de Gobierno con el priísta Eduardo Robledo Rincón. En la ruptura con Marcos,García de León les pronosticó un futuro de guerrilla folk.

.- En día de la inauguración de la Convención el Subcomandante festejaba:

“Nadie, nadie de la Comisión Nacional Organizadora nos ha podido decir cuántos delegados, invitados, observadores, periodistas, gorrones, colados, orejas y extranjeros llegaron a esta Convención. Así que no sabemos cuántos somos. Como aquí tenemos prensa de varias partes de México y del mundo es necesario que les demos una cifra. La Comisión Nacional Organizadora se ha hecho pato, así que nosotros hemos resuelto el problema. Con nuestro moderno sistema de cómputo hemos hecho la cuenta y llegado a la conclusión de que somos... un chingo. Entonces, para la prensa es oficial: somos un chingo.”

Deliraba:

“Aguascalientes, Chiapas. El Arca de Noé, la Torre de Babel, el barco selvático de Fitzcarraldo, el delirio del neozapatismo, el navío pirata, la paradoja anacrónica, la tierna locura de los sin rostro, el despropósito de un movimiento civil en diálogo con un movimiento armado.”

.- Compartió esperanzas:

“Esperamos de esta Convención Nacional Democrática una oportunidad, la oportunidad que nos negaron los que malgobiernan este país, la oportunidad de regresar con dignidad, después del deber cumplido, a nuestro estar bajo tierra; la oportunidad de volver otra vez al silencio que callamos, a la noche de la que salimos, a la muerte que habitamos; la oportunidad de desaparecer de la misma forma en que aparecimos, de madrugada, sin rostro, sin futuro; la oportunidad de volver al fondo de la historia, del sueño, de la montaña.”

.- Hizo el recuento:

“Aguascalientes, Chiapas. Para el EZLN, 28 días de trabajo, 14 horas diarias, seiscientos hombres-mujeres por hora, doscientos treinta y cinco mil doscientos hombres-hora de trabajo en total, nueve mil ochocientos días de trabajo, 28 años de trabajo, sesenta millones de viejos pesos, una biblioteca, un presidium con pinta de puente de trasatlántico, bancas y sillas para ocho mil convencionistas, 20 casas para hospedaje, 14 fogones, estacionamiento para cien vehículos y área para atentados.”

.- Confiado en el proceso denunció:

“Y antes de Aguascalientes ellos dijeron que no había que oponerse a la celebración de la Convención Nacional Democrática, que abortaría por sí sola, que no valía la pena sabotearla abiertamente, que era preferible que reventara desde adentro, que se viera en México y en el mundo que la inconformidad era incapaz de ponerse de acuerdo entre sí, que por lo tanto sería incapaz de ofrecer al país un proyecto de nación mejor que el que la revolución institucionalizada y estabilizada nos regalaba -junto al orgullo de tener ya 24 próceres de la patria internacional del dinero- a todos los mexicanos. A eso apuestan, a eso, por eso dejaron correr la convocatoria, por eso no impidieron que ustedes llegaran hasta acá; el previsible fracaso de la Convención Nacional Democrática, dicen, no debe ser atribuido al poderoso; que sea evidente que el débil lo es porque es incapaz de dejar de serlo: es débil porque lo merece, es débil porque lo desea.”

.- Reclamó:

“Y antes de Aguascalientes ellos dijeron que ninguna persona sensata iba a responder al llamado de un grupo rebelde, proscrito de la ley, del que poco o mucho se sabe: la luz que iluminó enero, el lenguaje obsesivo tratando de recuperar viejas y gastadas palabras -democracia, libertad, justicia; los rostros amordazados, el paso nocturno, la montaña habilitada como esperanza, la sola mirada indígena que desde centurias nos persigue en nuestro atropellado intento de modernización, el necio rechazar limosnas para exigir el aparentemente absurdo -para todos todo, nada para nosotros.”

Reiteró:

Por eso miles de hombres y mujeres con el rostro amordazado, indígenas en su inmensa mayoría, levantamos esta torre, la torre de la esperanza.

Por eso dejamos a un lado, por un tiempo, nuestros fusiles, nuestro rencor, nuestro dolor por los muertos nuestros, nuestra convicción guerrera, nuestro paso armado.

Todo iba viento en popa hasta que una repentina tormenta reventó la telaraña que sostenía el velamen del navío pirata, como presagiando el naufragio…

Como ejemplo de los alcances y tamaños de estupidez política de entonces tenemos el comentario reduccionista del Negro,un militante de la “izquierda revolucionaria”: “la CND fue un espectáculo de luz y sonido”. El grandísimo cabrón no había entendido nada.

Por su parte, el 2 de noviembre de 1994, el EZLN dio a conocer:

“Desde el mes de junio de 1994, la llamada Comisión Jurídica de la Conac-LN no ha hecho contacto alguno con el EZLN a pesar de que las necesidades de asesoría legal continuaban. Después de la primera sesión de la CND, la dirigencia de la Conac-LN tomó distancia frente a la CND y estuvo promoviendo actividades al margen de la CND, reclamando para sí misma, junto a otras organizaciones, la representatividad del "auténtico espíritu de la CND" provocando, en lugar del debate interno y la crítica fraternal, la división y la ruptura al interior de las filas de la CND.

(…) Por tanto, el Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional ha decidido retirar a la Comisión Jurídica de la Conac-LN el papel de representante legal del EZLN en el ámbito nacional e internacional.” (No me gusta decirlo… pero se los dije.)

Habían empezado los ¡¡¡zapatazos!!!

El errático navegar del pirata navío se prolongó por 6 meses, de agosto del 94 al 5 de febrero del 95, cuando encalló irremediablemente en el puerto de Querétaro. Días antes que Zedillo lanzara la ofensiva político/judicial/militar contra las FLN-EZLN.

P.D. De preguntas:

¿Creerían que con la figura del fideicomiso para comprar las 240 mil hectáreas invadidas en Chiapas en 1994, de ellas, 60 mil por el EZLN, quedó sembrado como buen detonante en las disputas por tierras a lo largo de 18 años?

¿Creerán que los “proyectos de inversión se fueron afinando hasta llegar a ser programas para la desarticulación, desmovilización, creadores de mujeres y hombres programa/dependientes con una consecuente pérdida de dignidad? ¿Creerán que el programa Oportunidades es especialmente agresivo en territorio zapatista. Que se ha abierto un nuevo banco en Ocosingo. Que veintenas de mujeres duermen toda una noche en la calle haciendo fila para cobrar el apoyo al día siguiente?¿Creerán que las familias en Los Altos y en Ocosingo reciben entre 5 y 10 mil pesos del programa Oportunidades. Que para recibir esa paga tienen que asistir a recibir una serie de reuniones para no perder el derecho? Actividades que evitan su participación en los proyectos de organización social? ¿Qué hay familias indígenas que con oportunidades han dejado de trabajar? ¿Creerán que Oportunidades es contrainsurgente?

¿Qué dónde están Benito Mirón, Laco, García de León y doña Rosario Ibarra?

https://www.alainet.org/fr/node/157763