Pueblos indígenas en las instancias internacionales:

"Todo está ligado con los derechos humanos"

08/11/2011
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A

El Secretario de la Alianza Mundial de los Pueblos Indígenas y Tribales de los Bosques Tropicales, Estebancio Castro Díaz, indígena panameño, conversó con ALAI sobre los avances que los pueblos indígenas han logrado en el marco de las Naciones Unidas, así como sobre algunos de los retos que enfrentan en las actuales negociaciones internacionales en torno a temas como el cambio climático y medio ambiente, incluido el programa REDD+.

ALAI: ¿Como avanza el proceso de participación de los pueblos indígenas en el marco de las instancias de Naciones Unidas?  ¿Qué logros ha significado?

ECD: La ONU está creada para tomas de decisión de los Estados, para crear políticas para sus pueblos.  Sin embargo, podemos decir que hay avances en los últimos 30 años.

Tenemos la declaración de la ONU sobre derechos de los pueblos indígenas que fue adoptada el 13 de setiembre del 2007.  Este es un documento muy importante puesto que se ha usado como referencia en los casos jurídicos en diferentes espacios regionales, por ejemplo en el caso de la Declaración Americana o de la Organización de Estados Americanos, y en la Corte Interamericana en el caso de los pueblos indígenas de Nicaragua.  Entonces, tomando en cuenta eso, se nota que ha habido un poco de avance.

En cuanto a la participación en otras agencias de la ONU, como el Convenio sobre Diversidad Biológica, nosotros no tenemos la toma de decisión pero tenemos mecanismos para poder hacer insumos, también para poder influenciar un poco a los Estados para que nuestras propuestas se reflejen en los documentos finales y para nosotros es de suma importancia que reflejen los documentos finales para que a nivel nacional sea implementado de acuerdo con los instrumentos internacionales relacionados con los pueblos indígenas.

- Entiendo que la declaración en sí no es vinculante para los Estados, salvo para  los que aceptan adoptarla como ley.  ¿Cuál sería el próximo paso para lograr un acuerdo más vinculante?

- La Declaración en sí no es vinculante, pero moralmente es vinculante.  Cada uno de los artículos no es inventado, son artículos tomados de la carta de la ONU y de los dos pactos internacionales.  Son tres documentos vinculantes y lo único que ha cambiado o agregado a estos artículos es "pueblos indígenas" y eso es todo.  Así que es difícil la falta de argumentación que tienen los Estados para decir que realmente no pueden adoptarlo, cuando ellos han hecho posible la adopción de los otros tres instrumentos internacionales.

Un segundo punto es que la adopción como un borrador ya fue usado en casos jurídicos como la Corte Interamericana y eso lo hace vinculante.  Pienso que cuando empiece a ser usada en otras instancias o foros, la Declaración poco a poco  va a ir tomando fuerza.  Como tercer punto, los pueblos indígenas a nivel nacional deben tratar de usarla lo más que puedan hacer, para poder educar a los Estados o los representantes que toman la decisión de cómo aplicar la declaración de la ONU sobre los pueblos indígenas.

Entonces nos queda a nosotros dar formación o educar a nuestros propios Estados, a los que hacen la política, a los que toman la decisión, de que este documento no es una amenaza para el Estado en sí.

- En la última década, no obstante los esfuerzos de personas como Miguel d'Escoto (ex presidente de la Asamblea de la ONU), hay una tendencia en la ONU a moverse más hacia posiciones de mercado que a posiciones de interés público.  ¿En qué medida eso ha sido un problema para ustedes y cómo están actuando frente a ello?

- Nos queda mucho trabajo para hacer entender, para educar a los Estados o representantes de los Estados.  Por ejemplo, ahora hablamos mucho sobre cambio climático y está enfocado en el comercio en sí.  Para nosotros ha sido difícil porque en las instancias de cambio climático, nos han dicho: ustedes no pueden venir a hablar de los derechos humanos o de los derechos de los pueblos indígenas porque acá tenemos que hablar de cómo comercializar el carbono.

Personalmente pienso que todo está ligado con los derechos humanos.  Toda la explotación que se ha llevado en el último siglo ha sido por la violación de los derechos de los pueblos indígenas: las hidroeléctricas construidas que dan energía a las ciudades de América Latina han sido a las costillas de los pueblos indígenas, de sus tierras, y a cambio, ellos no han recibido nada.  Nosotros estamos diciendo que eso hay que subsanar si realmente queremos un desarrollo para todo un país. Entonces, los insumos de los pueblos indígenas deben tomarse en cuenta, las necesidades de los pueblos indígenas deben tomarse en cuenta, el desarrollo debe incluir a los pueblos indígenas.  Para eso debe oírse a los pueblos indígenas, ¿qué desarrollo ellos quieren? No que nos sigan explotando y nos dejen en pobreza.

Por eso, uno de nuestros líderes dice “tu desarrollo es mi pobreza”, porque eso es lo que ha pasado a nivel mundial; cuando se usa la tierra de los pueblos indígenas, han quedado más pobres pero las ciudades tienen la luz eléctrica, el desarrollo necesario.  Entonces, para nosotros, no se puede desligar la necesidad de proteger los derechos de los pueblos indígenas y la explotación comercial, como quieren hacer los Estados.  Si en verdad quieren hacer apropiadamente el uso de mercado o el uso de comercio, deben primero reconocer que los pueblos indígenas tienen derecho a las tierras, a sus territorios, a sus recursos, y que ellos tienen también el derecho a recibir de forma justa y equitativa los beneficios que salgan de estos recursos.

- ¿Programas como REDD+ (Reducción de Emisiones de la Deforestación y la Degradación de bosques) pueden ser una alternativa de solución para los pueblos indígena o es engaño más?

- En los últimos años que se ha discutido REDD, hay una duda inmensa de que realmente sea una solución para los pueblos indígenas.  La REDD+ está enfocada en el comercio de carbono y al final del camino nosotros nos vamos a encontrar con el mercado de carbono; y si los pueblos indígenas estamos teniendo en los últimos tres años dificultades de entender cómo realmente se va a aplicar la REDD+, entonces ¿cómo podemos negociar sin tener la información adecuada?

En segundo lugar, pienso que si algún pueblo indígena con su libre determinación quiere hacer el REDD+ en su comunidad: 1) debe estar informado, 2) debe tener los derechos bien protegidos y 3) empezar a crear su propia definición de cómo reducir las emisiones de gas invernadero, porque como está, la REDD tiene una visión occidental.  Entonces los pueblos indígenas deben hacer su propia visión.  Por ejemplo, hay comunidades indígenas que han mantenido el bosque sin que les hayan pagado y creo que muchos van a hacer eso, seguir protegiendo bosques.  Pero si los pueblos indígenas son tomados en cuenta por el proyecto de REDD, quizá funcione, esa es una posibilidad, nosotros tampoco podemos decir que no vaya a funcionar.  Podría funcionar tomando en cuenta la plena y efectiva participación de los pueblos indígenas desde el principio, no en el medio del camino cuando ya casi todo está programado.

- ¿Cuáles son los principales riesgos en este tipo de programas?

- Nosotros tenemos una experiencia muy mala en nuestra historia como pueblos indígenas.  Las áreas protegidas desplazaron a muchos pueblos indígenas y no había plata, eran solo áreas protegidas.  Ahora, hablar de plata nos deja muchas dudas de que si realmente los pueblos indígenas vayan a quedarse en sus territorios y no sean desplazados.

En segundo lugar, el riesgo es que si vamos a alquilar el territorio, entonces ¿cuál va a ser nuestra relación con nuestro territorio y sus recursos?  Por ejemplo, sobre nuestro conocimiento tradicional ¿Tendremos acceso a nuestro bosques o no?  O será un alquiler que nos obligue a vivir de otra manera para que el proyecto surja.  Y el miedo más grande que tienen los pueblos indígenas es que los Estados ven mucho dinero en REDD, especialmente los estados latinoamericanos.  Por ejemplo, muchos países están diciendo que los bosques pertenecen a los Estados.  Pero están en la tierra de pueblos indígenas, no tenemos una legislación que diga éstos pertenecen a los pueblos indígenas y ellos van a tener el beneficio.

Hay un riesgo de que quizás en el futuro los Estados quieran quitarles las tierras directamente porque no hay una regulación que defienda.  Ya ahora empiezan a decir: los bosques son nuestros y la tierra es suya. Pero realmente no existe una definición que diga que es de los pueblos indígenas.  Es por eso que los pueblos indígenas se enfocan mucho en el derecho de la tierra, porque es lo que tienen.  Como siempre digo, si yo tengo un producto en mi mano y es mío puedo negociar, si no es mío no puedo negociar.  Eso finalmente se va a aplicar en las negociaciones de REDD, y si los pueblos indígenas no están reconocidos, ¿qué pueden negociar?  Todavía existen muchas dudas sobre cómo se está llevando las discusiones de REDD.  Nosotros sí tenemos participación, pero realmente no es una participación apropiada dentro del sistema de la ONU sobre cambio climático, porque son los Estados los que entran y nosotros estamos afuera.  Solo estamos tratando de dar discursos en plenarias, pero no realmente negociaciones internas en las que pienso podría ser de mucha ayuda para los miembros de los mismos Estados, al ver que los pueblos indígenas quieren estar presentes.

https://www.alainet.org/fr/node/153882?language=en
S'abonner à America Latina en Movimiento - RSS