Una delegación de médicos venezolanos se encuentra recorriendo el Ecuador desde el 11 de febrero para seleccionar a pacientes con problemas de la vista, quienes irán a Venezuela a operarse de manera gratuita en el marco de la Misión Milagro.

Conforman la delegación los oftalmólogos Gustavo Sosa e Israel Bermúdez, el médico internista Aristide Colmenares y el delegado del Ministerio de Turismo, Carlos Romero. Ellos visitan Quito, Cotacachi, Santo Domingo de los Colorados, Pastaza, Jaramijó, Jipijapa, Galápagos, Salinas, Guayaquil, El Cañar y Zamora.  En cada uno de estos lugares efectúan un trabajo de selección de las personas que sufren de enfermedades de los ojos, principalmente de cataratas y terigio, a fin de que puedan viajar a Venezuela a operarse en hospitales públicos.

Un primer contingente de 420 ecuatorianos/as pertenecientes al cantón Santo Domingo de los Colorados, situado a 120 kilómetros al occidente de Quito, ya fue atendido en el marco de este programa que cuenta con la colaboración de las autoridades ecuatorianas en lo que respecta a la exoneración de tasas aeroportuarias y otorgamiento de un documento especial para ingresar a Venezuela sin necesidad de obtener un pasaporte que llega a costar los 100 dólares. Las mismas facilidades otorga el gobierno venezolano.

Un segundo grupo de beneficiarios, integrado por entre 1200 y 1500 ecuatorianos/as de escasos recursos económicos, viajará a Venezuela en los próximos meses.  “Ellos no pagan absolutamente nada, se les hace su evaluación general previa, su perfil de laboratorio, su evolución cardiovascular, se le hace su intervención quirúrgica, con todos los insumos de alta calidad, los pacientes pasan una semana en Venezuela para hacer un buen post-operatorio y grarantizarles un retorno en buenas condiciones”, dijo el embajador venezolano en Ecuador, Oscar Navas Tortoledo.  En el caso de Ecuador, la meta es operar a 20.000 personas.

La Misión Milagro, un convenio de salud bilateral entre Cuba y Venezuela que empezó en 2004, inicialmente permitió atender a miles de venezolanos/as que viajaron – sin pagar un solo centavo- a la Isla a recibir atención médica oftalmológica especializada. Posteriormente, durante el IV Encuentro Hemisférico de la Lucha contra el ALCA, realizado en La Habana en abril del 2005, los presidentes Fidel Castro y Hugo Chávez decidieron ampliar esta iniciativa a 24 países de América.  El compromiso de los dos gobiernos es operar en Cuba y Venezuela a 6 millones de personas pobres, a razón de 600.000 por año durante los próximos 10 años, costeando gastos de transporte, alimentación, alojamiento e intervenciones quirúrgicas.

Desde que empezó esta iniciativa se han atendido unos 210.000 casos en Cuba y Venezuela no solamente de cataratas sino de otras patologías como terigios, glaucomas, desprendimiento de retina, estrabismo, etc., señaló el doctor Gustavo Sosa.  

“El gobierno revolucionario del Presidente Chávez, que sigue el pensamiento bolivariano, quiere demostrar que hay diferentes maneras de integrarnos, no necesariamente tenemos que amarrar a los pueblos con un ALCA o un Tratado de Libre Comerció, y esta es una manera de integrarnos y forma parte del ALBA (Alianza Bolivariana para las Américas);  nosotros,  en este caso,  no le exigiremos al Ecuador que entregue su soberanía ni cosa parecida como es el caso de un TLC o un ALCA”, dijo el embajador Navas.

La Organización Mundial de la Salud calcula que entre 40 y 50 millones de personas padecen de ceguera, mientras 136 millones sufren deficiencias visuales, muchas veces prevenibles o curables. El 90 por ciento de los casos se encuentran en los llamados países subdesarrollados. Los recortes de los presupuestos de la salud pública y la privatización de los servicios de salud, en el marco de la aplicación de las políticas neoliberales, están excluyendo del derecho a la salud a millones de latinoamericanos/as y caribeños/as. Las tecnologías y las terapias para corregir las patologías oftalmológicas, que ha avanzado muchísimo en las últimas décadas, no están al alcance de los más pobres.

“Cada año se incrementa la cifra de nuevos enfermos y, sin embargo, los servicios especializados que se requieren, por los que se cobran altos precios, sólo están al alcance de uno por ciento mínimo de la población afectada. Ni la mayoría de los gobiernos ni los organismos internacionales han logrado estructurar un plan que dé respuesta efectiva a los necesitados”, señala un manifiesto en apoyo a la Misión Milagro suscrito por 40 organizaciones sociales de América Latina y el Caribe en el marco del VI Foro Social Mundial que se realizó a fines de enero en Caracas.

“Consideramos de enorme importancia impulsar en cada uno de nuestros países el espíritu de solidaridad que anima a la Misión Milagro y organizarnos para llevar adelante un plan de acción encaminado a ampliar su alcance en beneficio de nuestros pueblos y comunidades. La Misión Milagro representa una anticipación de ese otro mundo posible por el que venimos luchando”, señalaron los movimientos sociales.

Publicado en: http://alainet.org/active/10695&lang=es